SISTEMA FINANCIERO LOS BANCOS CON UN ALTO NIVEL DE LIQUIDEZ La base está La crisis económica de 2009 y las tormentas políticas de 2010 no hicieron mella en la solidez del sistema financiero argentino. La principal fortaleza de los bancos es su alto nivel de liquidez. Algunos puntos a monitorear son la fuerte tenencia de títulos del BCRA y la falta de una política de crédito que permita favorecer a la economía en su conjunto. L os bancos argentinos parecen haber aprendido la lección y desde hace un par de años operan –de alguna manera– en estado de alerta. Se sucedieron crisis internas y externas y en cada una de ellas apretaron el cinturón. Resultado de esta actitud de mucha cautela, es que el sistema en general se encuentra fuerte y con altos niveles de liquidez a pesar de los embates. “El sistema financiero se ha mantenido sobre bases sólidas durante todo 2009, a pesar de que en su momento la incertidumbre de la crisis mundial y local no dejaba ver con claridad que esto iba a ocurrir”, evalúa Claudio Fiorillo, socio de consultoría de Deloitte Argentina. “Los bancos estuvieron afectados desde mediados de 2007 tanto por factores externos como internos, los cuales han generado que, ante el temor de pérdida de sus depósitos, las entidades tomaran una actitud de cautela. Es por eso que actualmente el sistema se encuentra altamente líquido”, diagnostica por su parte Andrea Manavella, a cargo de la eva116 ESTRATEGAS luación de las entidades financieras en Moody’s Latin America. Claro que, aunque bien parada, la industria no quedó al margen de los sinsabores políticos de los últimos meses de 2009. Los depósitos totales ascendían a fines de diciembre a $ 277.000 millones, y de ese total unos $ 200.000 millones correspondían al sector privado. En cuanto a los préstamos, el stock totaliza $ 165.000 millones, y $ 142.500 millones corresponden al sector privado. Hubo crecimiento, sí, pero a tasas mucho más modestas que las que el sector venía anotando. Según un estudio realizado recientemente por la consultora Economía & Regiones (E&R), los depósitos totales crecieron a fines del tercer trimestre de 2009 un 8%, en tanto que en el mismo periodo de los años 2006 a 2008 lo habían hecho a tasas que rondaban el 23%. Algo similar sucedió con los préstamos. El dinero destinado a financiar al sector privado presentó un crecimiento interanual de 10%, en contraposición con el 28% que se registraba en los años previos. Menos consumo, menos inversiones y renovados temores en los ahorristas que independientemente de su tamaño mostraron una clara tendencia a dolarizar sus activos, fueron el mix que debió digerir el sector bancario. Sí crecieron, llamativamente, los adelantos al sector público. El aumento, según datos de E&R, fue de 48,5%, lo cual da un vuelco en la tendencia de reducir la exposición al sector público que traían los bancos. Otro dato: para sortear un año con reducido nivel de intermediación y costos en ascenso (especialmente laborales), los bancos recurrieron a ajustar hacia arriba las comisiones que cobran a sus clientes. LOS CLIENTES NO HUYEN. Sin duda, un buen colchón de liquidez y clientes que no huyen despavoridos, a pesar de las tormentas políticas, ayudan a pensar en un horizonte medianamente tranquilo para el sistema financiero. La “base está”, como se le escuchaba repetir en el ámbito futbolístico al Bambino Veira. Ahora hay que salir a ganar el partido, es decir a buscar más negocios, más opciones para ofrecerles a los clientes que ya tienen o a los nuevos. Porque sin volumen es muy difícil mantener niveles de rentabilidad atractivos. “Por la gran inestabilidad económica –advierte Manavella, de Moody’s–, el nivel de intermediación de la Argentina es muy bajo comparado con los principales países de la región, lo que hace que los bancos sean fundamentalmente transaccionales, y que sus ingresos provengan mayoritariamente del manejo de activos y pasivos, comisiones y préstamos al consumo, los cuales en una parte importante corresponden a cuentas sueldos.” Para Guillermo Rezával, socio de BDO Argentina en el área de Servicios a la Industria Financiera y de Seguros, el futuro próximo de los bancos mucho dependerá de las nuevas medidas que adopte el Directorio del BCRA. “Lo que está claro es que la política crediticia no se asentará como lo ha hecho los últimos años básicamente sobre el consumo, sino que se apuntará al crédito también para la mediana y gran empresa.” Mirando a mediano plazo, además, no vislumbra cambios importantes en cuanto a jugadores y dimensiones. “No creo que haya grandes crecimientos en el sistema financiero, los que se han consolidado en los últimos tiempos han sido los grandes bancos nacionales de capital privado y es posible que lo sigan haciendo en el contexto de la nueva política que se implemente”, remarcó el especialista de la firma de auditoría y consultoría. BANCA MINORISTA. La banca retail o minorista está compuesta por aproximadamente unos 16 millones de clientes, a los cuales los bancos apuestan por “venderles” primero una caja de ahorro o una La “base está”, pero ahora los bancos deben salir a ganar el partido. Buscar más negocios, más opciones para ofrecerles a los clientes. cuenta corriente, como puerta de entrada, y luego, a través de estrategias de cross-selling o venta cruzada, intentan colocar otros productos como tarjetas de crédito, préstamos personales, hipotecarios o servicios de inversión. En nuestro país, el segmento minorista sigue siendo un mundo de oportunidades por la cada vez mayor tendencia de los argentinos al uso de los productos bancarios como medio de pago y financiación. “El minorista es el segmento donde los bancos cobran mejores tasas y por ende logran mejores ingresos”, dice Fiorillo y agrega que “adicionalmente, en el mundo la denominada ‘banca retail’ o banca minorista es la tendencia y la Argentina no debería ser la excepción en lo que hace a oportunidades.” Bajo el análisis de Fiorillo, la banca sigue con algunas cuentas pendientes que no obedecen exclusivamente a la crisis, sino a razones de tipo más bien estructurales. En primer término, comienza a enumerar el consultor, debe mencionarse la falta de una política de crédito consistente que sirva para la economía en su conjunto, es decir producción y consumo. Junto con esto, la falta de una política de tasas sustentables que permita manejar un spread razonable entre lo que se paga y se cobra por la captación y aplicación de los fondos respectivamente. “En tercer lugar –agrega–, hay que seguir avanzando en la mejora en los sistemas de gestión de riesgos, un tema en el que se ha comenzado a trabajar a partir de las disposiciones regulatorias vigentes y, por último, advertimos la falta de inversiones en, por ejemplo, sistemas de información de las entidades que, en muchos casos, muestran grados crecientes de obsolescencia.” Dos aciertos destacables de los banqueros, en palabras del especialista de Deloitte: el tratamiento temprano de la morosidad de los créditos con el objetivo de mantener den- Fiorillo: “El sistema bancario se mantuvo sobre bases sólidas”. ESTRATEGAS 117 SISTEMA FINANCIERO tro de márgenes razonables los niveles de incobrabilidad y la permanente búsqueda de nuevas alternativas de ingresos, como fue el caso de las diferentes promociones que los bancos han llevado hasta los clientes, principalmente a través de las tarjetas de crédito y débito. SEÑALES DE ALERTA. En la agenda para los próximos meses, varios temas que deberán ir tratándose a nivel político y parlamentario también jugarán sobre la suerte general del sistema. “Actualmente los bancos se encuentran muy líquidos, lo que consideramos que es Los 10 primeros del sistema Cifras a noviembre de 2009 ORDEN DENOMINACION 1 NACION ARGENTINA 2 PROVINCIA BUENOS AIRES 3 SANTANDER RIO 4 BANCO FRANCES 5 MACRO 6 GALICIA Y BS AS 7 BANCO CIUDAD DE BS AS 8 HSBC BANK 9 CREDICOOP COOP 10 CITIBANK Fuente: Estrategas en base a datos del BCRA. DEPOSITOS (Miles de $) 66.118.767 24.836.697 18.378.143 17.500.961 16.576.489 16.357.645 11.205.022 11.195.450 10.672.119 7.945.701 PRESTAMOS (Miles de $) 35.366.615 9.386.028 13.362.173 10.057.915 9.791.707 10.052.672 7.663.710 6.991.123 5.009.370 5.452.257 Operan 66 bancos En la Argentina operan actualmente 66 bancos, de los cuales 12 son públicos y 54 privados. El Banco de la Nación es el que lidera tanto en préstamos otorgados como en depósitos. Entre los privados el primer puesto por préstamos se lo lleva el Santander seguido por el Francés, el Galicia y el Macro. Por depósitos, y siempre de acuerdo a las cifras oficiales difundidas por el Banco Central, el primer puesto es también para Santander, escoltado con muy poca diferencia por Francés, Macro y Galicia, en ese orden. Capital Federal es el área que más sucursales y cajeros automáticos detenta: 1.300 filiales y casi 4.000 cajeros automáticos. En Buenos Aires hay 800 y 2.600, respectivamente. El déficit estructural Según Claudio Fiorillo, socio de Deloitte, la banca argentina tiene cuatro problemas estructurales que debe abordar: Falta de una política de crédito consistente que sirva para la economía en su conjunto (producción y consumo). Falta de una política de tasas sustentables que permita manejar un spread razonable entre lo que se paga y se cobra. Déficit del sistema de gestión de riesgos. Falta de inversiones en sistemas de información de las entidades, que en muchos casos muestran grados crecientes de obsolescencia. 118 ESTRATEGAS bueno para momentos como los que ha sufrido la Argentina de caída de depósitos. Sin embargo, nuestra preocupación es el grado de concentración de la inversión de dicha liquidez, la cual se encuentra en Letras de Banco Central”, advierte Manavella. En la medida que el BCRA pierda autonomía, el riesgo Gobierno y Banco Central se alinean, cuando hasta ahora las letras emitidas por la autoridad monetaria han sido consideradas más líquidas y de menor riesgo que las de gobierno, las cuales se encuentran calificadas internacionalmente como B3, explica la especialista de Moody’s. Hasta el momento, los efectos de las disputas por el uso de reservas se han mantenido a raya. “Afortunadamente no se ha visto un efecto significativo entre otras cosas, porque la población bancaria ha madurado y aprendido mucho de crisis anteriores y hoy está más educada para enfrentar coyunturas como la actual”, evalúa Fiorillo y avanza: “Hoy pareciera que el mayor efecto está en lo que se pueda producir con respecto a la salida de capitales del país, aunque allí gran parte de la respuesta la tendrá cuán bien sepa manejar la situación el ‘nuevo BCRA’”. “Si se logra mantener en regla al tipo de cambio, se logra cerrar un buen acuerdo con los acreedores y se hace un adecuado uso de las reservas, no deberíamos observar efectos negativos sobre el sistema bancario”, vaticina. Otro tema que ronda por la City y está presente en las conversaciones de banqueros, políticos y empresarios desde hace algunos meses, más precisamente desde octubre del año pasado, es el de la posible reforma a la Ley de Entidades Financieras que data de la época de la Dictadura. De hecho, existe un proyecto del presidente del Banco Credicoop y ahora diputado oficialista Carlos Heller en ese sentido. Desde el Ministerio de Economía dijeron, sin embargo, en varias oportunidades que no se analiza una modificación. Quienes defienden un cambio argumentan que la actual Ley que regula al sistema financiero permitió que los bancos se concentren en atender sólo a los segmentos más rentables, lo cual dejó sin acceso al crédito a muchos sujetos y empresas. El proyecto de la nueva Ley, según explicó en varias oportunidades Heller, intenta crear el concepto que los bancos deben ser un servicio público, haciendo especial hincapié en el acceso al crédito para las Pymes y para los sectores y puntos geográficos menos favorecidos. Hacia la mejora en la oferta del crédito está apuntando también la nueva conducción del Banco Central. A fines de febrero, el puntapié en ese sentido lo dio la nueva presi- El minorista es el segmento donde los bancos cobran mejores tasas y por ende logran mejores ingresos. denta de la entidad, Mercedes Marcó del Pont, que puso en marcha un relevamiento entre los representantes de los sectores empresarios para obtener información de “primera mano” sobre la realidad de los distintos sectores productivos que le permita arbitrar luego las medidas necesarias para favorecer el financia- miento para inversiones productivas. “Nuestra expectativa es que, en la medida que las tasas activas vayan acomodándose y mientras la realidad macroeconómica local lo permita, el segmento de préstamos minoristas crezca, ya que desde hace un año ha tenido un retroceso. Los préstamos corporativos también podrían comenzar a crecer, esto siempre y cuando se den las condiciones mínimas para poder invertir. Es importante mencionar que desde la crisis financiera de 2001-2002, tanto los clientes minoristas como las empresas maximizaron el uso de su propia liquidez, evitando recurrir a préstamos bancarios”, concluye Andrea Manavella. Mónica Fernández ESTRATEGAS 119