El gran salto Martes, 06 de Octubre de 2009 10:02 Hoy las mujeres somos un sujeto político que tiene intereses propios; desde ahí hay un creciente acercamiento a la política. Por Lorena Fries. Presidenta Corporación Humanas Mucho se debate hoy con relación al legado de la Presidenta Bachelet, en particular en materia de igualdad entre hombres y mujeres, y reconocimiento de derechos de las mujeres. Desde Piñera hasta Arrate, todos la aplauden, más allá de las necesidades electorales que indican que, quien sea su heredero político, cultural o ideológico, se beneficiará con los votos particularmente de la población femenina. El debate presidencial en Comunidad Mujer deja en evidencia el impacto de 1/3 El gran salto Martes, 06 de Octubre de 2009 10:02 Bachelet y sus políticas hacia las mujeres, y genera un piso societal hasta hace cuatro años inimaginado. De eso, se hacen cargo los cuatro candidatos. Por cierto, unos con más credibilidad que otros, unos con más honestidad que otros. Frei, Arrate y MEO se comprometen a seguir la política de paridad y más aún, a aumentar dicho esfuerzo, transversalizando la participación femenina en todos los niveles y poderes del Estado. Arrate incorporó la paridad como criterio para la conformación de una Asamblea Constituyente; Frei se comprometió a que dicha participación se vea reflejada también en las empresas que tienen inversión pública; MEO exhortó a no dejar a las jóvenes fuera de esta redistribución del poder. Piñera dio cuenta del compromiso de su alianza con este tema al señalar que el porcentaje de candidatas a Diputadas y Senadoras que presenta la Alianza es mucho mayor que el de la Concertación, bloque que acompaña a su más seguido contendor. La corresponsabilidad entre hombres y mujeres en el ámbito público y privado, quizás el tema que más da cuenta de la profundidad de los cambios que se requieren en la sociedad chilena para que esta sea democrática e igualitaria, también fue motivo de propuestas. Ampliación de la cobertura de salas cunas y jardines, flexibilización del postnatal; en ello Arrate y MEO incluyeron a los varones; fortalecimiento de la sindicalización femenina; Frei comprometiéndose a una política más agresiva para erradicar la violencia contra las mujeres, éstas fueron las tónica de los compromisos programáticos de estos candidatos. Quizás lo más sui generis fue Piñera. No porque haya dicho mucho más que lugares comunes de la modernidad en las relaciones de género, o porque se haya comprometido con un subsidio para la contratación de mujeres, sino porque ha tenido que travestir su discurso, de uno conservador por los socios que lo acompañan, a uno de género que evidencia el peso cultural y político de lo avanzado por Bachelet y sus políticas de género. Y es que este debate, que se instituye en un foro en torno a la oferta programática y electoral de los candidatos con relación a las mujeres es un síntoma de los nuevos tiempos. Hoy las mujeres somos un sujeto político que tiene intereses propios; desde ahí hay un creciente acercamiento a la política. Es transversal la percepción de que en Chile se discrimina sobre la base del género, es evidente el malestar que tienen (tenemos) las mujeres frente a la brecha salarial y el acceso al trabajo; es preocupante la sobrecarga pública y privada que tenemos al hacernos cargo del cuidado y crianza y, a la vez, de trabajar 2/3 El gran salto Martes, 06 de Octubre de 2009 10:02 remuneradamente. Quien no tenga una oferta clara para superar estas inequidades, para reconocer que las mujeres hoy somos más que un componente de Lo familiar, dificilmente gozará del apoyo femenino en las próximas elecciones, contingente clave por lo demás, para ganarlas. 3/3