4 4. El conocimiento humano COMENTARIO RESUELTO Es, por tanto, al menos, una de las primeras y más necesarias cuestiones, y que no puede resolverse a simple vista, la de saber si hay algún conocimiento independiente de la experiencia y también de toda impresión sensible. Llámase a este conocimiento a priori, y distínguese del empírico en que las fuentes del último son a posteriori, es decir, que las tiene en la experiencia. Sin embargo, la expresión a priori no determina todo el sentido de la precedente cuestión; pues se suele decir que podemos tener a priori, o en parte al menos, muchos de nuestros conocimientos derivados de la experiencia, porque no los hemos tomado inmediatamente de ella, sino que proceden de reglas generales; sin advertir que esas reglas se derivan también de la misma experiencia. Así, se dice de aquel que mina los cimientos de su casa que debía saber a priori que ésta se derrumbaría, en otros términos, que no debía esperar a que la experiencia se lo demostrase; pero eso no puede saberse sino a posteriori, pues, ¿quién sino la experiencia, nos enseña que los cuerpos son pesados y que, aislados de todo apoyo, caen? Entenderemos, pues, en lo sucesivo por conocimientos a priori, no aquellos que tienen lugar independientemente de esta o aquella experiencia, sino los que son absolutamente independientes de toda experiencia; a estos conocimientos son opuestos los llamados empíricos, o que sólo son posibles a posteriori, es decir, por la experiencia. Entre los conocimientos a priori, llámase puro aquel en el que no se mezcla nada de empírico. Así, por ejemplo “todo cambio tiene una causa”, es un principio a priori; pero no puro, porque el concepto de cambio sólo puede formarse con la experiencia. Esta es la ocasión de dar con una señal por la que podamos distinguir el conocimiento puro del empírico. La experiencia nos muestra que una cosa es de tal o cual manera; pero no nos dice que no pueda ser de otro modo. Digamos, por tanto, primero: si una proposición tiene que ser pensada con carácter de necesidad, esa proposición es un juicio a priori. Si además no es derivada de otra y sólo se concibe como valiendo por sí misma, como necesaria, es entonces absolutamente a priori. Segunda, la experiencia no da nunca juicios con una universalidad verdadera y estricta, sino con una generalidad supuesta y comparativa (por la inducción), lo que propiamente quiere decir que no se ha observado hasta ahora una excepción a determinadas leyes. Un juicio, por tanto, pensado con estricta universalidad, es decir, que no admite excepción alguna, no se deriva de la experiencia y tiene valor absoluto a priori. (...) La necesidad y universalidad estrictas son las señales evidentes de un conocimiento a priori, y están indisolublemente unidos. KANT, I., Crítica de la razón pura. B1-B4 Vocabulario Recuerda el significado de los siguientes conceptos que aparecen en la Unidad 4 y también en este texto: juicio, proposición, inducción, empírico Universalidad. Una proposición o una ley de la naturaleza son universales cuando son válidos siempre y sin excepción Necesidad. Un juicio o una proposición son necesarios cuando lo que se enuncia no puede ocurrir de otra manera. Cuestiones de análisis 1. Subraya en el texto las palabras que indican el sujeto de la enunciación e indica qué sujetos de la enunciación aparecen en él. Si hubiera más de uno indica brevemente cuál es la posición del autor en relación a ellos. En el texto aparecen dos sujetos de la enunciación: a) El autor, o sea, Kant, que toma la palabra en todas aquellas partes del texto donde no aparecen signos del sujeto de la enunciación, por ejemplo, en el primer párrafo del texto, inmediatamente después del primer “pero”, etc… El punto de vista del autor se expresa también en primera persona del plural (“entenderemos”, “digamos”), buscando con este uso una mayor proximidad y afinidad con el lector; y también usando la forma impersonal (“llámase”, Filosofía 1º 1-5 4 4. El conocimiento humano COMENTARIO RESUELTO “distínguese”) para distanciarse de su propia subjetividad y presentar su punto de vista como un punto de vista amplia y generalmente aceptado. b) La gente o la mayoría de la gente: Este sujeto de la enunciación se indica en el segundo párrafo mediante el uso del impersonal “se” (“Se suele decir”, “se dice”) y también mediante la primera persona del plural (“podemos”, “hemos tomado”). Representa una opinión común. A este sujeto de la enunciación hay que atribuir el uso común de la expresión “a priori”. El autor también forma parte de ese colectivo (la gente), de ahí que use la primera persona del plural, pero en este caso –como en otros muchos-, el uso de la primera persona se lleva a cabo para marcar inmediatamente una cierta distancia entre el punto de vista original del autor y el punto de vista común – que el autor comparte parcialmente. Esta distancia queda reforzada con el conector argumentativo “pero” 2. Subrayar y agrupar palabras 2.1. Lee el texto con detenimiento. En el texto la expresión “a priori” se define por oposición a otra expresión contraria. ¿Sabrías decir cuál? Efectivamente, en el texto el autor define expresión “a priori” en contraste con las expresiones “empírico” o “a posteriori”, como se indica en el primer párrafo. 2.2. Indica cuáles de las siguientes expresiones del texto convienen a la expresión “a priori” y cuáles convienen a la expresión contraria. Para responder utiliza una tabla de oposiciones que tenga dos columnas: Una de ellas encabezada por “Conviene a conocimiento a priori”; y la otra por “Conviene a su contrario”: a) independiente de la experiencia y de toda impresión sensible b) conocimiento empírico c) a posteriori d) su fuente en la experiencia e) saber a priori f) saber a posteriori e) Ejemplo: “los cuerpos son pesados y, aislados de apoyo, caen” f)) sólo puede formarse con la experiencia g) conocimientos puros y no puros h) Ejemplo: “todo cambio tiene una causa” i) puede ser de otro modo (no necesidad) j) necesidad (no puede ser de otro modo) k) generalidad supuesta (admite excepción) l) por inducción ll) estricta universalidad, no admite excepción m) (juicio a posteriori) n) señales evidentes (del conocimiento a priori) Respuesta CONVIENE A “CONOCIMIENTO A PRIORI” CONVIENE A SU CONTRARIO: “CONOCIMIENTO A POSTERIORI O EMPÍRICO” Filosofía 1º 2-5 4 4. El conocimiento humano COMENTARIO RESUELTO independiente de la experiencia y de toda impresión sensible saber a priori su fuente en la experiencia saber a posteriori no se deriva de la experiencia sólo puede formarse en la experiencia conocimientos puros y no puros … ejemplo: “todo cambio tiene una causa” ejemplo: “los cuerpos son pesados y, aislados de apoyo, caen” juicio a priori (juicio a posteriori) señales evidentes: necesidad (no puede ser de otro modo) y estricta universalidad, no admite excepción puede ser de otro modo (no necesidad) y y generalidad supuesta (admite excepción) ... por inducción 2.3. De la lista de expresiones anteriores, subraya en rojo aquellas que convienen a la expresión “a priori” (salvo las que figuran entre paréntesis); y con verde subraya las que convienen a su contrario. Ver subrayado en el texto. 2. 4. Fíjate en los dos sujetos de la enunciación que aparecen en el texto: ambos mantienen puntos de vista distintos respecto al uso y al significado de la expresión “a priori”. Fíjate bien y verás que el autor intenta desmarcarse en el texto del uso común de este término. Recoge en una tabla con dos columnas ambos puntos de vista. “A PRIORI” PARA LA GENTE, PARA EL AUTOR (PUNTO DE VISTA COMÚN) (PUNTO DE VISTA DEL AUTOR) -Conocimientos que no derivan directamente de la experiencia (pero sí indirectamente, de una regla general - Lo que no se deriva directamente de la experiencia, pero sí indirectamente, sigue siendo a posteriori, no a priori. - Saber algo antes de que ocurra en la experiencia efectivamente (aun cuando lo sabemos por otras experiencias pasadas) - Conocimiento independiente de toda experiencia, de cualquier experiencia (no deriva ni directa ni indirectamente de la experiencia) 3. Analiza en el texto la expresión “conocimiento a priori”. Apóyate en la información que has ido elaborando en la pregunta anterior. Fíjate que las tablas que has elaborado en la pregunta anterior te proporcionan información acerca de: qué significa a priori, qué clases de conocimiento a priori, cuál es su contrario, cuál es el uso común del término (a diferencia del que defiende el autor), por qué señales reconocemos un juicio a priori, y un ejemplo de juicio a priori. Filosofía 1º 3-5 4 4. El conocimiento humano COMENTARIO RESUELTO Posible respuesta En este texto Kant empieza señalando que es de gran importancia averiguar si existe un conocimiento independiente de la experiencia al que llama “a priori”. Aun cuando no resuelve esta cuestión, afirma a continuación que el conocimiento puede ser de dos clases de conocimiento: el conocimiento que denomina “a priori” y el “conocimiento empírico”, también denominado “a posteriori”. El autor del texto define lo que significa “a priori” en constante contraposición a “empírico” o “a posteriori”, por lo que a la hora de explicar el significado “a priori” debemos de hacerlo necesariamente en relación a su opuesto. Así, mientras que un conocimiento empírico es siempre a posteriori porque “tiene su fuente en la experiencia” y “sólo puede formarse en la experiencia”, un conocimiento a priori, en cambio, es aquel que “no se deriva de la experiencia” y resulta “independiente de la experiencia y de toda impresión sensible”, como el propio texto afirma. Como ejemplo de conocimiento a priori (aunque no puro) el autor pone el siguiente: “Todo cambio tiene una causa”, juicio que, en opinión de Kant, no deriva de la experiencia y puede establecerse por tanto con independencia de la misma; en cambio, el juicio “los cuerpos son pesados y, aislados de apoyo, caen” se presenta en el texto como ejemplo de juicio empírico, pues no puede establecerse más que a partir de la experiencia y de la observación empírica. Al principio del segundo párrafo del texto, y para prevenir cualquier confusión por lo que respecta al significado del término “a priori”, el autor nos advierte que él no va a usar este término en el sentido ordinario. Ciertamente, en su uso común, “saber algo a priori” significa saber algo antes de que efectivamente ocurra en la experiencia, pero, como Kant hace ver, eso es posible en base a una regla general o de una costumbre que en realidad proceden de la experiencia. Para el autor del texto –que rechaza este uso de “a priori”- eso sigue siendo un conocimiento a posteriori. Para Kant, el conocimiento a priori no será, por tanto, el simple conocimiento que es anterior a una experiencia que va a suceder, sino “un conocimiento absolutamente independiente de toda experiencia” y que no se deriva de ella, ni de manera directa ni de manera indirecta (de una regla empírica). Por otra parte, el autor del texto distingue en el tercer párrafo dos clases de conocimientos a priori: el conocimiento a priori puro y el conocimiento a priori no puro. La diferencia entre ambos parece radicar en que, siendo ambos a priori y por tanto independientes de la experiencia, el conocimiento no puro contiene algún concepto o elemento empírico, mientras que el conocimiento puro no contiene ni un solo elemento empírico. Para terminar el texto nos informa de que los juicios a priori cuentan con dos “señales evidentes” o características por las que se las reconoce, y que Kant menciona en el último párrafo: “la necesidad y la universalidad estrictas”. En efecto, a diferencia de los juicios que se basan en la experiencia (o sea, los juicios a posteriori), que jamás pueden ser necesarios y que, como mucho, expresan una “generalidad supuesta” establecida “por inducción”, -y, por tanto, mediante la experiencia-, los juicios a priori son siempre necesarios y universales (se cumplen en todos los casos y, en palabras del texto, “no admiten excepción”) 4. Identifica el tema, la tesis y el problema del texto a) Tema (asunto sobre el que versa el texto): Clases de conocimiento b) Tesis (la idea principal que el autor defiende sobre el tema): El conocimiento podría ser de dos clases: a priori, o independiente de toda experiencia, universal y necesario, y a posteriori o derivado de la experiencia c) Problema del texto (problemas filosóficos a los que el texto intenta responder): ¿Cuál es la fuente de la que derivan nuestros conocimientos sobre las cosas?¿Derivan todos ellos de la experiencia? ¿Hay conocimientos que no derivan de la experiencia? Si es así, ¿por qué “señales” los podemos reconocer? 5. Explica el argumento en que el autor del texto se basa para concluir que “la necesidad y universalidad estrictas son las señales evidentes de un conocimiento a priori” Filosofía 1º 4-5 4 4. El conocimiento humano COMENTARIO RESUELTO En el último párrafo del texto, Kant establece, efectivamente, que “la necesidad y la universalidad estrictas son las señales evidentes de un conocimiento a priori”. La argumentación en la que basa esta afirmación arranca de principios del último párrafo, y es la siguiente: a) A principios del primer párrafo Kant da por sentado, aunque no demuestra, que la experiencia nos muestra cómo es una cosa, pero jamás nos mostrará que tenga que ser así de modo necesario. Esta es una de las premisas de las que arranca la argumentación b) Implícitamente, de ahí se sigue, aunque el texto no lo afirma, que ninguna proposición a posteriori, es decir, derivada de la experiencia directa o indirectamente, tiene carácter de necesidad. c) De ahí extrae Kant la consecuencia (“por tanto”) de que cualquier enunciado o proposición que tenga “carácter de necesidad” será forzosamente a priori d) Por otra parte, Kant considera también evidente que los juicios que se derivan de la experiencia no son nunca estrictamente universales. La razón de eso es que, aunque hasta ahora no se haya observado una excepción a las leyes y reglas que derivan de la experiencia, no quiere decir que esa excepción no pueda darse en el futuro; estos juicios son, a lo sumo, “supuestas generalidades” establecidas “por inducción” (y, como sabemos, Hume había ya demostrado que los juicios establecidos por inducción, por muy generales y probables que sean, admiten excepción). Esta es otra de las premisas de la argumentación. e) De lo anterior saca Kant la consecuencia (“por tanto”), de que un juicio que expresa una universalidad estricta y sin excepción posible, al no poder ser a posteriori, ha de ser necesariamente a priori (pues sólo hay dos clases de juicios: a priori y a posteriori) f) Finalmente, de todo lo anterior, concluye que “la necesidad y universalidad estrictas son las señales evidentes de un conocimiento a priori” Observaciones sobre la respuesta a) Antes de contestar es importante localizar en el texto dónde empieza y dónde acaba la argumentación por la que se nos pregunta b) Igualmente, es importante subrayar los conectores argumentativos que aparecen en ese párrafo, puesto que pueden darnos pistas sobre el tipo de operación argumentativa que el autor realiza con cada una de sus afirmaciones. c) Resulta muy útil enumerar los pasos y asignar un paso para cada una de las operaciones argumentativas que realiza el autor: “ahora supone o da por sentado que…”, “de ahí extrae la conclusión de que…”, “la razón de lo anterior es que…”, “a continuación compara… (o define, o ilustra, etc…)”, etcétera. d) En la respuesta que te ofrecemos hemos destacado en azul las palabras con las que indicamos las operaciones argumentativas que realiza el autor. Filosofía 1º 5-5