Ayuntamiento de Madrid Grupo Municipal Socialista El PSOE exige la retirada inmediata del proyecto de construcción de la carretera M-61 DAVID LUCAS: “ES ANTIECOLÓGICO Y PELIGROSO PARA EL MONTE DEL PARDO” Si el gobierno regional no lo evita, cientos de aves y encinas centenarias acabarán desapareciendo por las obras. El proyecto infringe la Ley de Patrimonio Natural y Biodiversidad y el estudio ambiental no prevé actuaciones para evitar destrozos en la vegetación. El trazado previsto de la M-61 dividiría la futura Casa de Campo del Norte. Madrid, 3 de Julio de 2008.- El grupo municipal socialista ha presentado hoy en la Consejería de Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid diez alegaciones al proyecto de construcción de la nueva carretera M-61 para enlazar con la A-6, M-607 y la A-1 (denominación del cierre norte de la M-50), que incluye la construcción de tres túneles, uno de los cuales transcurre bajo el Monte de El Pardo, en el término municipal de Madrid, con una longitud de 10 kilómetros. David Lucas, el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, considera este proyecto “antiecológico y peligroso para el monte del Pardo” y advierte de que, si el gobierno de la Comunidad de Madrid no lo evita, “cientos de aves protegidas y de encinas centenarias acabarán desapareciendo por las obras”. Lucas ha anunciado que su grupo ha pedido la retirada inmediata del proyecto de construcción de la carretera M-61, porque “tal y como nos lo han presentado provocará impactos medioambientales irreversibles en el monte del Pardo” y porque “infringe de forma flagrante la Ley de Patrimonio Natural y Biodiversidad que prohíbe destruir el hábitat y alterar las condiciones de este espacio natural”. Para poder hacer el túnel se tendrán que desbrozar y talar 251 encinas centenarias situadas junto a la valla del Monte y el estudio de impacto medio ambiental del proyecto no ha previsto las actuaciones necesarias para evitar o reducir significativamente estos destrozos en la vegetación. El trazado previsto de la M-61 atraviesa el polígono Valverde, más de mil hectáreas en las que el Ayuntamiento tiene previsto hacer la Casa de Campo del Norte, dividiendo esta futura zona verde. “Exigimos que se altere ese trazado para que en ningún caso se parta ni divida la futura Casa de Campo del Norte, ni se la separe del resto del entorno y, en especial, del Monte del Pardo”, indica Lucas quien entiende que “el Gobierno de Gallardón debería oponerse frontalmente a este cierre norte de la M-50 que propone la Comunidad de Madrid, ya que pone en peligro uno de los proyectos de zona verde más importantes para la ciudad”. En la Zona de Especial Protección para Aves (ZEPA) “Monte del Pardo” habitan un total de 48 especies, de las que 37 son aves, de entre las que destacan especies protegidas de la importancia del búho real, el águila imperial o el buitre negro, que pueden verse dañadas al ser desplazadas por las obras, lo que alteraría sus ciclos biológicos, especialmente en la época de reproducción y cría, como consecuencia de la intrusión de maquinaria, vehículos, etc. El portavoz del Grupo Municipal Socialista considera que estas obras pueden causar un daño grave en el hábitat de estos animales y ha solicitado, igualmente, que la Comunidad de Madrid tome medidas que eviten o reduzcan significativamente el riesgo de atropellos o colisión de vehículos con especies de fauna en la fase de construcción o explotación de la carretera. El proyecto de túnel bajo la zona de protección del Monte de El Pardo no contempla la apertura de pozos o chimeneas a lo largo de su recorrido, pero si anuncia la posibilidad de la apertura de pozos de impulsión de aire en una zona urbana no protegida. El Grupo Municipal Socialista del Ayuntamiento de Madrid ha pedido en sus alegaciones que ninguna de estas chimeneas de ventilación del túnel se construya en el pueblo de El Pardo, ni a menos de 500 metros de las zonas habitadas. El PSOE también ha mostrado en sus alegaciones su preocupación por la más que probable afección al acuífero del Monte de El Pardo por las excavaciones y los sondeos geológicos. Según David Lucas “si las obras afectan o contaminan este acuífero por accidente, la calidad del agua que se suministra a Madrid en periodos de bajo nivel de agua en los pantanos puede reducirse de forma peligrosa, sobre todo si tenemos en cuenta que en el subsuelo del trazado existen 27 pozos de abastecimiento del Canal de Isabel II. Por tanto, exigimos las máximas garantías para la protección del acuífero, garantías que no se dan en el proyecto”. El Grupo Municipal Socialista considera que en el proyecto no se han tomado las medidas necesarias para minimizar los problemas de contaminación atmosférica, ruido y polvo que va a generar la maquinaria y los vehículos pesados en las obras y que, según David Lucas, “pueden cubrir de cemento vastas extensiones de bosque y zonas residenciales”. Por otra parte, los socialistas han pedido un Plan de evacuación de las miles de toneladas de escombros que generará la obra, así como de los residuos tóxicos y peligrosos, que, según el propio estudio de impacto ambiental, se van a producir como consecuencia de la actividad de la maquinaria. Por último, el PSOE ha exigido en sus alegaciones garantías para que las subestaciones eléctricas necesarias para dar suministro a los túneles no se instalen en ningún caso en el ámbito comprendido por el Monte de El Pardo y que se contemple la posibilidad de enterrar todos los tendidos eléctricos en superficie existente en la zona del Monte del Pardo surcada por la carretera M-61, para evitar la afección a las poblaciones de avifauna que sobrevuelan la zona.