Escribir, ver pensar. A. Allepuz Universidad de Alicante (SPAIN) angelallepuz@gmail.com EL OCASO DE LOS ÍDOLOS, Nietzsche advertía allí: “…voy a señalar enseguida las tres tareas en razón de las cuales se tiene necesidad de educadores. Se ha de aprender a ver, se ha de aprender a pensar, se ha de aprender a hablar y escribir: la meta en estas tres cosas es una cultura aristocrática. - Aprender a ver – habituar el ojo a la calma, a la paciencia, a dejar-que-las-cosas se- nos-acerquen; aprender a aplazar el juicio, a rodear y a abarcar el caso particular desde todos los lados”. (Nietzsche, 2001, p. 89) APRENDER A OLVIDAR: PRÁCTICA 0 Citando a Alejandro de la Sota: “Al entrar en la Escuela-de arquitectura-olvidad lo que visteis en la calle; al terminar los estudios, olvidad lo que aprendisteis en la Escuela”. En general los alumnos de primer curso presentan un perfil típico al mantenerse en la creencia de que conociendo la dinámica del programa informático de referencia es suficiente para dibujar. El criterio que les guía es ,confundiendo los medios con los fines, comparar el aspecto de su dibujo, la plataforma desde el que se produce, el instrumental que se maneja, incluso el uso de una jerga propia ,les coloca ,por mimesis, en el lugar de un arquitecto. El contenido les parece más secundario, pues en general se consideran dotados para ello. Lo primero que se les debe mostrar es el alcance de su entendimiento confrontadoles con las siguientes ideas: 1º.- El dibujo es una actividad intelectual-no manual-que involucra muchas facetas del conocimiento y que requiere un alto nivel de concentración en la tarea durante periodos de tiempo largos. 2º.- El proceso de dibujar es iterativo, en ciclos de ajuste y perfeccionamiento continuo. 3º.- Que el nivel cualitativo de su trabajo lo fija la auto-exigencia, pues es una labor prácticamente interminable; siempre susceptible de ser mejorado y por tanto abierto a nuevas críticas y mejoras. 4º.-La acción de dibujar es selectiva y discrimina la información. La organización y clasificación de esta información disciplinada es fundamental para conseguir un trabajo cualificado. 5º.- Que no se proponen ejercicios ni simulacros que sirvan de introducción a cursos posteriores; el dibujo tendrá finalmente una calidad equivalente a la exigida al dibujo profesional. 6º.-Que no son capaces de distinguir qué es arquitectura y que no lo es. Al confrontándolos con un edificio sencillo, normalmente una vivienda- artefacto del que todos tienen una referencia y experiencia previa-, les enfrentamos a arquitecturas que no son capaces de comprender, pues no saben “leer” los documentos que se les presentan, tomando conciencia de que la lectura de un dibujo no es en modo alguno algo evidente y directo. La confrontación así planteada con el objeto de colocarles en una actitud de perplejidad y asombro, se traza mostrando ejemplos de arquitecturas construidas-es importante que estén realizadas-que no se deben parecer a nada de lo que a ellos creían saber al respecto de lo que “es un dibujo” y “que es una casa”. El objetivo pretendido es colocarlos en una posición mental más receptiva hacia lo nuevo, al poner en crisis sus certezas y creencias. Para ello se muestran dibujos de diferentes arquitectos dentro del espectro más amplio posible. APRENDER A HABLAR Y ESCRIBIR. (PRÁCTICA 1) El dibujo de arquitectura utiliza para su configuración codificada una lengua muerta, muerta pero muy rica y universal. La situación es semejante al uso del latín en la comunidad de los hombres cultos hasta el siglo XVI. Podemos “leer” un dibujo de un arquitecto japonés, americano o sirio, y comunicarnos con ellos sin ningún problema, no es frecuente encontrar una situación equivalente en otras ramas del conocimiento, si excluimos las denominadas ciencias básicas. Cuenta con un potencial enorme, no necesita ser traducido. La arquitectura cuenta con su “Esperanto”. En esta fase el alumno recibe un dibujo y debe redibujarlo tras una lectura atenta de todos los signos que allí aparecen, interpretando su correspondencia con el objeto en el espacio, descifrando su sentido y el de su presencia, el código utilizado para representarlo y su razón. Sólo una correcta interpretación de los signos gráficos y su comprensión con ayuda de imágenes, fotografías y textos permiten elaborar un dibujo correcto. A esto se suma la obligación de utilizar un código uniforme a todos los alumnos. Se opta por un código de línea, sin masa, de modo que se realice un esfuerzo por agotar las posibilidades gráficas de esta técnica. El modelo óptimo sería el grabado del S.XVIII. Seguimos las recomendaciones de Arnheim en el sentido de iniciar procesos desde planteamientos con estructuras formales sencillas para ir introduciendo mayor grado de abstracción con el objeto de ir constituyendo un desarrollo de la capacidad de imaginación y configuración espacial. “Por medio de una elevada abstracción hemos llegado al principio fundamental de importancia práctica para el arquitecto…de ningún modo el espacio viene dado por sí mismo. (Arnheim, 2001, p.16) “De esta forma se puede intentar establecer una escala de creciente complejidad por medio de la cual la imaginación espacial avanza de las estructuras más simples a las más complejas…La imaginación espacial debe adquirirse paso a paso.” (Arnheim, 2001, p.18) Esta decodificación y posterior recodificación está guiada por un proceso analítico del objeto inducido por el profesor. Resultado es un dibujo descriptivo y en cierto modo canónico respecto del uso de las variables gráficas, correctamente reescrito. Fig.1. Dibujo del alumno José Antonio Sedes Manteiga donde se muestra lo que se ha llegado a conocer, es un dibujo descriptivo de exploración . APRENDER A VER. (PRÁCTICA 2) “Piaget resume sus investigaciones en estas palabras: Es obvio que la percepción del espacio conlleva una construcción gradual y, sin duda, no está totalmente configurada al comienzo del desarrollo mental.”(Norberg-Schutz, 1998, p 32.) El estudiante propone el desarrollo de un tema que le resulte relevante en el proceso de análisis realizado previamente y dirigido hacia un análisis de las relaciones entre los objetos. El dibujo se hace narrativo, no descriptivo, e introduce la acción, lo que sucede entre las formas de un modo general o de un modo particular, mostrando ciertos aspectos del edificio: su estructura y modo de equilibrio, el programa funcional, la relación interior–exterior, los grados de libertad de movimientos y vistas. El método operativo, trata de reducir todos los enunciados a las operaciones más sencillas posibles Se presenta la oportunidad de mostrar datos o experiencias del edifico que no se pueden experimentar con la visita al edifico, se perciben relaciones, semejanzas, diálogos entre las partes que no se pueden visualizar simultáneamente y que la visita al edificio-necesariamente secuencialnos oculta. El estudiante descubre que sólo dibujando se “conocen” ciertos aspectos, no evidentes, del edifico. Esto normalmente tiene que ver con la configuración estructurante y geométrica más profunda y abstracta. Se descubre que este “desvelarse “del edificio o desvestirse es gradual y progresivo, de modo que cuanto más indagamos, mas conocemos, y cuanto más conocemos, mas encontramos. Así se aprende a descubrir cuáles son los auténticos valores de calidad de una obra de arquitectura, y a diferenciarlas de aquellas en las que cuanto más indagamos, más corruptas, desestructuradas, caprichosas y caóticas son. De este modo los estudiantes se inician en la critica arquitectónica, intentando suplantar o sustituir al creador de modo que descubran cuales son las reglas del juego, cuales son las leyes que configuran la forma, o cuáles son los criterios que sigue a la hora de tomar decisiones. Se descubre el valor del plano, no como representación de lo dado, sino como esquema configurador previo, como herramienta de acción estructurante, como herramienta proyectual en definitiva. Fig. 2. Dibujo del alumno Germán Verdú Pérez sobre la vivienda en Burdeos donde se desvela la condición de estructuras en un delicado equilibrio estático inestable APRENDER A PENSAR. (PRACTICA 3) “Para poder llegar a pensar, tenemos, por nuestra parte, que aprender a pensar. ¿Qué es aprender? el hombre aprende en la medida en que su hacer y dejar de hacer los hace corresponder con aquello que, en cada momento, le es exhortado en lo esencial. A pensar aprendemos cuando atendemos a aquello que da que pensar”. (Heidegger, 1994, p.114) Y continua algo más adelante “El rasgo fundamental del pensar es el representar. En el representar (poner- delante) se despliega el percibir”.(Heidegger,1994.p.124) “En la medida en que percibimos el ente en su ser, en la medida que representamos los objetos en su objetividad, estamos ya pensando”. (Heidegger, 1994.p.125). Atender, Poner delante para percibir, representar objetivamente ya es pensar. Otl Aicher, lo aclara aun más “El pensar pictórico no es lineal, ve superficies, imágenes, mapas, diagramas. No saca conclusiones sino que ve conexiones, relaciones, referencias, analogías.” (Aicher, 2001, p.68) ”El hombre es un ser vidente, que ve con el pensamiento, que piensa viendo”.(Aicher,2001, P.71) Fig.3.Dibujo de la alumna Cecilia Sirvent, La compresion de la existencia de ideas generatrices en los edificios analizados y la puesta en común de los resultados en sesiones críticas de corrección publica y colectiva, adelanta a los alumnos la existencia de motivaciones recurrentes en los arquitectos cuya obra estudiamos. La mirada atenta a los fenómenos que se desencadenan en torno a los edificios permite describir fenómenos no representados ni vistos hasta entonces, pero previsibles y representables, es decir evidenciables,puestos delante-. Esta conclusión les orienta hacia la posibilidad de explorar alguna de ellas que pueda coincidir más con sus intereses. Se resuelven generalmente dentro del campo fenomenológico o conceptual, es decir trabajando sobre lo que sucede en el edificio o las ideas que lo generan o manifiesta. Como ejemplo citaremos que en los ejercicios planteados sobre las viviendas de Koolhaas que son los aquí mostrados, una vez vistas y analizadas, extraemos algunas ideas de alto grado de abstracción y que han sido inferidas o desveladas después de dibujar las fases previas la idea de contrataste binario disyuntivo, mediante el cual las viviendas son sistemáticamente divididas en dos partes excluyentes, no relacionadas, bipolares donde los usuarios tienen que optar por una u otra media-vivienda.las conexiones se regulan con mecanismos de acceso, que a modo de by-pass permite el paso a una o a otra parte de la vivienda, pero no simultáneamente a las dosu otros ilustrados en las siguientes imágenes: Fig. 4. Captura de imágenes generadas en el video presentado por la alumna Tono Sedes Mantegna como práctica 3.Donde trata sobre la génesis de la forma tridimensional de la arquitectura de la vivienda .La información es mostrada secuencialmente, desde un origen hasta un conclusión. Se relacionan los pasos desde el punto a la línea, desde esta al plano y la confluencia de los planos cierran la volumetría. Cada elemento se representa mediante sus proyecciones sobre el plano. Dibujar una planta es como escribir una partitura, Fig.5.: Captura de imágenes generadas en el video presentado por la alumna Sonia Torres como práctica 3. Versa sobre la idea de los ritmos y tempos de los elementos mecánicos en movimiento. Presenta simultáneamente en dos ventanas presentadas en paralelo el movimiento rítmico producido por mecanismos industriales, maquinaria, robots y acompasada con vistas de la plataforma elevadora, explicando la idea de desplazamiento, funcionamiento mecánico y protección de la que está dotada .El video manifiesta por contrates la adecuada adaptación de la mecánica al ambiente domestico. .-Aicher, O. (2001).Analógico y digital. Editorial Gustavo Gili, SA .-Arnheim,R.(2001).La forma visual de la arquitectura. Editorial Gustavo Gili, SA, pp.16 y18 .-Heidegger, M. (1994).Conferencia y artículos. Ediciones del Serbal, pp.114, 124 y 125. .-Nietzsche, F. (2001) Crepúsculo de los ídolos o Cómo se filosofa con el martillo, Alianza Editorial, p. 89 .-Norberg-Schutz, C. (1998).Intenciones en arquitectura. Editorial Gustavo Gili, SA, p 32.