EL SENADO Y CAMARA DE DIPUTADOS DE LA NACION ARGENTINA, REUNIDOS EN CONGRESO,.... SANCIONAN CON FUERZA DE LEY: ARTICULO 1º.- Incorpórase como tercer párrafo del artículo 2º de la Ley Nº 25.250, el siguiente texto: “Asimismo, el empleador gozará de una reducción del CINCUENTA POR CIENTO (50 %) de las contribuciones vigentes cuando contrate por tiempo indeterminado mujeres desempleadas dentro de los VEINTICUATRO (24) meses posteriores a la fecha del alumbramiento, conforme lo previsto en el primer párrafo del presente artículo”. ARTICULO 2º.- Incorpórase como cuarto párrafo del artículo 2º de la Ley Nº 25.250, el siguiente texto: “Cuando una jefa de hogar hubiera dado a luz en el término de VEINTICUATRO (24) meses anteriores a la fecha de su contratación la excención de las contribuciones vigentes se elevará a DOS TERCIOS (2/3), conforme lo previsto en el primer párrafo del presente artículo”. ARTICULO 3º.- De forma. FUNDAMENTOS El presente proyecto de ley respecto de la "promoción del empleo estable para madres desocupadas de reciente alumbramiento" tiene por objetivo central promover el empleo estable y la protección legal de aquellas mujeres que, como consecuencia de estar embarazadas ó haber dado a luz, ven perjudicado su ingreso al mercado laboral por los prejuicios existentes en relación a los costos que implica otorgar las licencias por maternidad, y por suponer las reducciones en sus jornadas de trabajo por el período de lactancia o bien que, cuando un hijo se encuentra enfermo, sea la madre la que deba cuidarlo. Por medio del presente se intenta otorgar no sólo tutela a aquellos bienes jurídicos (como el ser mujer y ser madre) consagrados por los artículos 14 y 16 de la Constitución Nacional, estableciendo expresamente este último la igualdad de los habitantes de posibilidad de acceso al empleo sin otra condición que la idoneidad, sino también a valores consagrados por los nuevos tratados de Derechos Humanos incorporados a partir de la Reforma Constitucional de 1994, como al cuidado de las hijas e hijos como responsabilidad social y la igualdad de mujeres y varones. Este proyecto se entronca en la protección que la Ley Nº 25.250 de "Reforma laboral" en su artículo 1º establece, al otorgar una posibilidad de ingreso y estabilidad laboral a quienes se encuentran en situación de mayor desventaja, tales como el caso de las mujeres jefas de hogar. En este caso, el mercado laboral margina a las mujeres que acaban de ser madres y éste es el objeto de principal protección, considerándose además la doble marginación que sufren las que son madres recientes y, a su vez, jefas de hogar. Para lograr lo dicho, a diferencia de la ley, se establecen mayores beneficios para el/la empleador/a, a la hora de contratar por tiempo indeterminado, en relación a la reducción de las contribuciones vigentes en un cincuenta por ciento (50 %) la cual se eleva a dos tercios (2/3) si la contratada fuera jefa de hogar. En este sentido el Estado está receptando los compromisos internacionales asumidos en los Tratados con jerarquía superior a las leyes reconocidos en el artículo 75º, inc. 22 de nuestra Carta Magna reformada en 1994. La Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre establece con relación al tema en su artículo VI el derecho de toda persona a constituir familia y el consecuente derecho de protección de la mujer en estado de gravidez o en época de lactancia (artículo VII). A la vez reconoce el derecho de todas las personas al trabajo (artículo XIV). Por su parte el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales refiere que los Estados partes reconocen la necesidad de conceder a las familias la más amplia protección y asistencia posible, especialmente para su constitución (artículo 10º). Además la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer establece en su artículo 11º que los Estados partes tomarán las medidas adecuadas para eliminar la discriminación contra la mujer en la esfera del empleo, para asegurar bajo pena de sanciones, el despido por motivo de embarazo o licencia por maternidad. Por último es consecuente con la Convención sobre los Derechos del Niño la cual contempla en su artículo 18º que, los Estados partes deben poner el máximo empeño en garantizar el reconocimiento del principio de que ambos padres tienen obligaciones comunes en referencia a la crianza y el desarrollo del niño/a, para lo cual se les prestará la asistencia apropiada con el fin de lograr el desempeño de sus funciones. En igual sentido la IV Conferencia Mundial Sobre la Mujer establece que los gobiernos deberán adoptar las medidas apropiadas para tener en cuenta el papel y las funciones reproductivas de la mujer y eliminar las prácticas discriminatorias de los empleadores, tales como no contratar o despedir a mujeres debido al embarazo o la lactancia materna, como también adoptar medidas para que las mujeres embarazadas, con licencia por maternidad o que se reintegran al mercado laboral después de tener hijos no sufran discriminación alguna. Asimismo la Argentina ha aprobado el Convenio Nº 156 sobre la "Igualdad de oportunidades de trato entre trabajadores y trabajadoras con responsabilidades familiares" (OIT) que en su artículo 3º establece que "las personas con responsabilidades familiares que desempeñen o deseen desempeñar un empleo ejerzan su derecho a hacerlo sin ser objeto de discriminación y, en la medida de lo posible, sin conflicto entre sus responsabilidades familiares y profesionales". Esto se ve ratificado por lo dispuesto en el artículo 7º cuando refiere que deberán tomarse todas las medidas compatibles con las condiciones y posibilidades nacionales, para que los trabajadores con responsabilidades familiares puedan integrarse y permanecer en la fuerza de trabajo, así como reintegrarse a ella tras una ausencia debida a dichas responsabilidades, por último agrega que las responsabilidades familiares no deben constituir de por sí una causa justificada para poner fin a una relación de trabajo (artículo 8º). No deben dejarse de lado los argumentos que sustentan este proyecto: En primer lugar, debemos señalar que la maternidad no forma parte del destino insoslayable de las mujeres. El transformarse en madres no constituye necesariamente la esencia ni el "único espacio de realización y satisfacción plena" de la vida de la mujer. Por el contrario, la maternidad es una elección dentro de un abanico diverso de opciones que posee una mujer. Por ende, medidas como las contempladas en este proyecto de ley refuerzan la posibilidad de una decisión libre que garantice la estabilidad en el empleo para mujeres que hayan optado por tener hijos, colocándolas en igualdad de condiciones con aquellas que hayan decidido no tenerlos y, fundamentalmente, con los varones. En segundo lugar, refuerza ó reinstala y recuerda a la sociedad que la reproducción humana no es ni una tarea ni una responsabilidad exclusivamente femenina. En primer término, es un acto que compromete por igual a las madres y a los padres. Pero, en segundo término, tampoco es una cuestión de un individuo, o de cada pareja o familia en particular. Son todos los adultos y las adultas de la sociedad las que deben responsabilizarse por el cuidado de las siguientes generaciones, especialmente en tanto sean niños y/ó niñas y adolescentes. En tercer lugar, este proyecto cuestiona severamente los prejuicios existentes respecto del retiro de las mujeres con hijas/os del mercado laboral y del aumento del ausentismo de las mujeres embarazadas ó con hijas/os, falsedad que, asimismo, ha sido demostrada por la CEPAL en diversos estudios sobre la situación de la mujer en América Latina en particular.