Introducción al Derecho Andrade, Minfred - C.I. 17.462.983 Campos, Andreina - C.I. 20.069.096 Campos, Eudo - C.I. 6.831.903 Fuenmayor, Rosángel - C.I. 7.608.487 Morillo, Berenice - C.I. 13.574.997 Silva, Manuel – C.I. 7.225.736 Visier, Ana - C.I. 7.786.642 Maracaibo, Zulia Noviembre 19, 2008 3 La Integración del Derecho Esquema 1. La Integración del Derecho Concepto Diferencias entre Interpretación e Integración Problemas de la Integración 2. Lagunas Jurídicas Definición Clasificación Lagunas de las Leyes o Lagunas del Ordenamiento Jurídico Posiciones Doctrinarias sobre el Problema de las Lagunas Jurídicas Soluciones Legislativas 3. Analogías como Método de Integración Concepto Tipos de Analogías Limitaciones al uso de la Analogía 4. Principios Generales del Derecho Distintas concepciones doctrinales sobre los principios generales del Derecho Definición de los Principios Carácter Normativo Los Principios Generales del Derecho y su consagración constitucional 5. La aplicación del Derecho en el Tiempo y en el Espacio Comienzo y fin de la Vigencia de las Normas Jurídicas Causas Intrínsecas de la Finalización de la Vigencia Causas Extrínsecas de la Finalización de la Vigencia El Inicio y Cesación de la Vigencia de las Normas Consuetudinarias La Sucesión de las Leyes en el tiempo La Protección de La Confianza En Los Conflictos De Leyes En El Tiempo Ámbito De Vigencia Espacial Aplicación De La Ley En El Espacio. Conflicto De Leyes En El Espacio. 4 1. La Integración del derecho. En la unidad o tema anterior tuvimos la oportunidad de revisar y familiarizarnos con las nociones fundamentales de la interpretación del Derecho. Como quiera que interpretar es comprender, y la labor de comprensión requiere de un objeto, en este caso la Norma Jurídica. Pero no siempre se le presentan a los Operadores del Derecho o Jueces todos los elementos o datos necesarios para llevar a cabo la interpretación o comprensión en un caso determinado; es entonces cuando se hace uso de la Integración del Derecho para dar respuesta a un caso en específico. Concepto. Existen dos enfoques a través de los cuales se puede definir de dos maneras diferentes La Integración del Derecho: La integración consiste en buscar, investigar, mediante los procedimientos que establecen las leyes, cual es la norma contenida en el ordenamiento jurídico aplicable al caso concreto para el cual no existe una disposición precisa de la ley. Según Mouchet y Zorraquin, ellos consideran la integración como una “labor de creación” pues su resultado consiste en imaginar o imponer una nueva norma que entonces se incorpora al orden jurídico para completar su vacio. Diferencias entre Interpretación e Integración. Mouchet y Zorraquin destacan las siguientes diferencias: a) La interpretación supone la existencia de una norma; la integración trata de elaborarla. b) La función creadora es más amplia y más libre en la integración; en cambio en la interpretación debe sujetarse a las palabras de la norma. c) La interpretación conduce a conclusiones más certeras y de mayor autoridad, puesto que derivan de un texto indiscutible; mientras que con la integración, a las soluciones a que se llega en casos de ausencia de una norma, están sujetas en mayor grado al error. De acuerdo con otros autores (L. M. Olaso), las destacadas anteriormente corresponden una concepción tradicional de la interpretación, donde a través de esta podemos llegar a una respuesta correcta única. Desde el punto de vista de este autor, no hay una separación tan radical entre ambas tareas, en virtud de que tanto la interpretación como la integración implican ciertos niveles de incertidumbre; ya que es el juez quien valora las distintas alternativas posibles, seleccionando la que considere la mejor opción para resolver el caso. La integración no obstante, puede tener un grado mayor de complejidad, al no contar el 5 juez con un texto expreso del cual deriva la consecuencia jurídica aplicable. Problemas de la Integración del Derecho. Ahora bien es válido decir que no siempre se presentan al intérprete todos los datos necesarios para la comprensión del fenómeno jurídico, el caso normal es aquel en el cual se encuentra frente a una conducta real del hombre o una norma cuyas características coinciden con las de dicha conducta. Así pues, el intérprete tratara de comprender la conducta humana, entender la norma y determinar la consecuencia jurídica aplicable al caso concreto. Sin embargo, hay otras oportunidades en las cuales falta uno de los elementos a interpretar, vale decir la Norma Jurídica, es allí donde se plantea el problema de la integración, ante la simple falta de una Norma Jurídica. En el tema de la integración nos hallamos ante el problema de que ciertos casos o situaciones que se presentan en la vida practica, aparente o realmente, no encuentran regulación, es decir, no hay una consecuencia jurídica ante un determinado supuesto de hecho, no obstante, el juez debe decidir conforme a derecho, teniendo que buscar la solución normativa con ayuda de elementos del mismo orden jurídico o recurriendo a ordenamientos jurídicos diversos o a fuentes distintas a las dominantes en un sistema jurídico. La necesidad de la integración deriva del denominado principio de plenitud hermética del Derecho, el cual afirma la capacidad del sistema jurídico de dar solución a todo conflicto planteado. Entre nosotros, el principio esta enunciado en Articulo 4 del Código Civil y el Articulo 19 del Código de Procedimiento Civil, donde se dispone, que en caso de laguna o vacío legislativo, se debe acudir a la analogía y a los principios generales del Derecho. En todo caso para la Ciencia del Derecho, el principio de Plenitud funciona como un presupuesto fundamental, que aunque es “prácticamente inalcanzable”, como sostiene Pérez Luño, por la sencilla razón de que “la sociedad suele cambiar con mayor rapidez que el derecho de tal forma que siempre existen parcelas en la vida colectiva respecto a las cuales, durante un espacio de tiempo, el ordenamiento jurídico no ha adaptado sus formas. En tal virtud, se presentan las “lagunas” como defectos lógicos de los sistemas jurídicos que generan problemas de interpretación y estos a su vez llevan a los jueces a enfrentar la integración de la norma. Es definitivo que los Órganos aplicadores del Derecho, ante la presencia de una laguna, no pueden abstenerse a decidir, por el contrario deben proceder a la integración. Y para terminar la integración es una tarea de suma importancia, pues el Derecho esencialmente es una relación de seguridad social, impuesta autárquica e inexorablemente y por eso cuando surge un conflicto interhumano, el Derecho ha de pronunciar forzosamente una decisión, bien de regulación positiva, bien una 6 garantía normativa. Pero en uno y otro caso se trata de una decisión que es impuesta inexorablemente, desvaneciendo la incertidumbre y suprimiendo la inseguridad, implicada por el conflicto planteado. 2. Lagunas Jurídicas Definición Se denomina Laguna Jurídica a la ausencia de regulación en una materia concreta, nos referimos a regulación legal o reglamentaria También podemos decir que, se entiende por Lagunas jurídicas la carencia o inexistencia dentro de un Ordenamiento Jurídico determinado de una Norma Jurídica concreta que en cuya regulación quede incluido en determinar un caso planteado o planteable. Estamos ante una laguna jurídica, cuando ante un determinado supuesto de hecho que exige una resolución jurídica, no es posible encontrar en el ordenamiento ninguna norma que contemple directamente ese supuesto, se produce así un vacío normativo que lo propios juristas tendrán que rellenar, recurriendo a los mecanismos de complementación previstos en el Ordenamiento. Clasificación Las Lagunas Jurídicas pueden ser clasificadas en: Lagunas propias: Son aquellas que consisten en vacíos normativos del Ordenamiento Jurídico considerado en sí mismo. Lagunas Impropias: Aquellas carencias normativas que tienen el Ordenamiento Jurídico cuando se las compara con otro Ordenamiento Jurídico. Estas lagunas tienen en común el designar la existencia de relaciones que no son objeto de regulación específica entre las normas de un Ordenamiento Jurídico, pero se diferencias porque mientras las propias encuentran su solución en el conjunto de normas que integran ese Ordenamiento a través de la interpretación. Las Impropias sólo pueden ser resueltas por el legislador mediante la creación de nuevas normas. Subjetivas: Aquellos vacíos que tienen su origen en la actuación del legislador: que bien por inadvertencia o por error o bien por una decisión concreta ha dejado sin regular distintas conductas o materias. Objetivas: Aquellas lagunas jurídicas que se producen por el envejecimiento de los Ordenamientos Jurídicos, esto es por el desfase, que el dinamismo de las Relaciones Sociales introduce, entre las necesidades reales y la regulación jurídica vigente. Lagunas Praeter legem o Fuera de la Ley: cuando las normas Jurídicas son tan particulares que no permiten que sean incluidas en su regulación específica, distintos supuestos de las que ellos prevén. 7 Intro Legem o dentro de la Ley: Cuando las Normas Jurídicas son tan genéricas y abstractas que hacen imposible dar una solución adecuada a casos particulares. Lagunas de las Leyes o Lagunas del Ordenamiento Jurídico Si a un juez se le solicita una resolución, no puede negarse, y debe suplir la laguna jurídica a través de distintas herramientas. Las herramientas más habituales son: Derecho supletorio: El juez acude a la regulación de una rama del derecho supletoria. En este caso no existe una laguna jurídica propiamente dicha, porque existe una regulación que por defecto es aplicable. Interpretación extensiva: El juez hace una interpretación lo más extensiva posible de una norma cercana, de forma que abarque a más situaciones que las que en principio abarcaría, y con la intención de que supla la ausencia de regulación existente. Analogía: El juez aplica normas que están dictadas para situaciones esencialmente parecidas. En este caso, el juez crea una norma. Acudir a otras fuentes del Derecho como la costumbre o los principios generales del Derecho. El hecho que los estudiosos del derecho hayan desarrollado la teoría de las lagunas, es una prueba definitiva de que el derecho no es pleno ni completo en el sentido de disponer de una regla más específica para todas las cosas que se pueden plantear, por otra parte la convicción generalizada de que existen definitivamente lagunas resueltas lógicamente, ya que es impensable que las Normas Jurídicas que existen, hayan podido prever o regular expresamente la totalidad de los casos que se pueden presentar en la práctica, es inevitable aceptar la existencia de lagos en cualquier regulación jurídica. Posiciones Doctrinarias sobre el Problema de las Lagunas Jurídicas Hans Kelsen Para Kelsen, existen “Lagunas Jurídicas cuando el legislados ha omitido reglamentar algo que era indispensable para hacer posible la aplicación de un precepto; es decir una diferencia entre el Derecho Positivo y el Derecho, o bien consecuencias del carácter más o menos indeterminado y general de la ley” Carlos Cossio Cossio presento su teoría geológica del derecho, donde expone el mismo pensamiento que Kelsen, pero agrega que la elección entre dos soluciones debe ser la más justa, no quiere decir esto que es a la que el juez le parezca más justa, sino la objetivamente más justa. De esto deriva él, la importancia de cualquier actividad que sirva para objetivar 8 los valores. La crítica a esta concepción salta a la vista, la objetivación de cualquier cosa ni siquiera es difícil sino que reviste un carácter de imposible. Gnaeus Flavius Flavius perteneciente a la escuela del derecho libre, sostiene que, el principio fundamental es el de dar a los tribunales una completa libertad de apreciación. Entonces el magistrado no debe guiarse por normas positivas, preocupándose más de la justicia que de la legalidad de su decisión, de esta forma no habría que preocuparse de las lagunas normativas, la vaguedad o la ambigüedad. Pero esto encierra un peligro más grave, que la aparente ventaja que trata de alegar. El peligro es que desaparecería la seguridad jurídica, "siendo reemplazada, a no dudarlo, por la arbitrariedad." Soluciones Legislativas Los juristas prácticos dicen que hay una laguna jurídica cuando, puestos ante un determinado supuesto fáctico que exige una resolución jurídica, no es posible encontrar en el ordenamiento ninguna norma que contemple directamente ese supuesto. La presencia de lagunas jurídicas en los Derechos estatales es tan obvia que, tanto la doctrina como los propios ordenamientos positivos, se han preocupado de establecer reglas que permitan a la actividad jurisdiccional de los tribunales superar eficazmente tales carencias normativas. Así, han llegado a consolidarse unas estrategias o métodos que pueden sistematizarse en torno a estos dos principios básicos: la heterointegración. la autointegración. Métodos de heterointegración Es posible hablar de dos tipos de heterointegración: Heterointegración propia Se está ante un supuesto de heterointegración propia cuando la superación de las lagunas jurídicas existentes en un determinado ordenamiento se consigue mediante la aplicación de alguna norma que pertenece a otro ordenamiento totalmente distinto de aquel en que tales lagunas se han producido. Heterointegración impropia Puede hablarse de heterointegración impropia cuando la superación de las lagunas jurídicas se consigue recurriendo a normas que, aunque pertenecen al propio ordenamiento, están integradas en un sector o campo del mismo que es distinto de aquel en que se produce la laguna. Este tipo de heterointegración puede producirse a través de dos diferentes cauces: 9 1. Recurriendo a normas pertenecientes a otro ámbito normativo del ordenamiento: En este supuesto, por ejemplo, se supera el vacío existente en el ámbito del Derecho legislativo con la ayuda de alguna norma o regla extraída del Derecho consuetudinario o de las decisiones jurisprudenciales, o de la doctrina jurídica. 2. Aplicando normas de otro sector del mismo ámbito normativo: En este supuesto, la laguna legal dentro de un determinado sector del Derecho legislativo es superada mediante la aplicación de una norma de otro sector de ese mismo campo. Por ejemplo, cuando una laguna del Derecho Mercantil se supera mediante el recurso a alguna norma de Derecho Civil. Métodos de autointegración El método de autointegración se caracteriza por tratar de superar las lagunas mediante la aplicación de normas o principios pertenecientes al propio orden jurídico en que se han producido dichas lagunas, ya se trate del ordenamiento general, ya de alguno de los sectores o subsectores integrados en el mismo. Las vías o manifestaciones más habituales de la autointegración, reconocidas generalmente de forma explícita por la mayoría de los ordenamientos, son: 1. la analogía. 2. los principios generales del Derecho. 3. Analogías como método de integración Concepto de Analogía. Los métodos de que dispone la integración, al menos en el ordenamiento jurídico venezolano, son: La analogía. El recurso a los principios generales del derecho. Ahora les daremos prioridad y limitaremos a delinear los conceptos fundamentales acerca de la analogía. La "Analogía" es un razonamiento fundamentado en la "similitud" o "semejanza"; ésta consiste desde el punto de vista lógico en: "concluir un caso por lo que de otro semejante hemos concluido". El procedimiento analógico en el campo del derecho se encamina a la solución de un problema que suele afectar a éste en todas sus ramas, es decir las llamadas "Lagunas". Tal y como lo expresa el artículo 4 del Código Civil que dispone “Cuando no hubiere disposición precisa de la ley, se tendrán en consideración las disposiciones que regulan casos semejantes o materias análogas; Esta contenido aquí la necesidad del recurso a la analogía como procedimiento de integración del derecho, y establecidas las disposiciones o bases fundamentales sobre las 10 cuales puede ser utilizadas esta vía, que tal como hemos visto más que de integración es de investigación del derecho. Por eso la analogía, es una de las herramientas interpretativas que la ley otorga a un juez para superar las posibles lagunas jurídicas. Mediante la analogía, un juez aplica una norma a un supuesto de hecho distinto del que contempla, basándose en la semejanza entre un supuesto y otro. Un juez tiene la obligación de dictar sentencia ante cualquier caso que se le plantee, y siempre basándose en el Derecho aplicable. Por ello, surge el problema de cuando la ley deja un ámbito sin regular, produciéndose una laguna jurídica. En ese caso, la propia ley legitima al juez para aplicar la analogía, y con ello poder basarse en un hecho parecido y proceder de la misma forma que el Derecho indica para ese hecho análogo. En este caso, el juez crea una norma nueva, por analogía con la otra. Tipos de Analogías. La analogía legis La analogía legis supone que la norma cuyos existencia se investiga a través del recurso de la analogía se encuentra teniendo en consideración las disposiciones que regulan los casos semejantes, es decir, aplicando normas precisas. Ejemplo: por el profesos Fernando Gómez Si el caso “A” esta previsto en el supuesto de hecho (SH) de una norma jurídica (NJ) y por tanto, le corresponde determinada consecuencia jurídica (CJ), y surge un nuevo caso “B” para el que no hay disposiciones precisa de la ley, pero que presenta igualdad jurídica esencial (=) con el caso regulado “A” entonces es legitimo atribuir a “B” el caso no regulado, la misma consecuencia jurídica de este, es decir de “A”... Aplicando normas precisas, leyes singulares dictadas por el legislador para regular hipótesis de hecho, cuyas características los hagan aplicables a los casos controvertido y no legislado. La analogía iuris En la analogía iuris no se aplican normas concretas, sino “instituciones jurídicas” conjunto de normas que regulan materias análogas, cuyos fundamentos, principios y fines las hacen aplicables al caso concreto no regulado expresamente. El profesor Lorenzo Fernández destaca que en este caso, la integración se hace dos fases: En la primera se extrae por vía de inducción de varias disposiciones legales cuyos supuestos de hecho coinciden en aspectos sustantivos 11 que implican una consecuencia jurídica vinculante, los principios que informan tales preceptos, y que por su fundamento y fines se pueden considerar referibles a casos que no caen bajo el supuesto normativo de ninguno de dichos preceptos,. La segunda fase o etapa consiste en derivar, por la vía deductiva, de esos principios la consecuencia jurídica aplicable a casos no regulados que mantengan igualdad jurídica esencial con los regulados por las disposiciones legales de las que fueron extraídos tales principios. Limitaciones al Uso de Analogías. En virtud del principio de legalidad y tipicidad penal, no se pueden imponer penas que no se hallen contempladas en la ley, “En materia penal se excluye la función suplementaria de la analogía como instrumento de integración. Las disposiciones de orden penal corresponden a hechos señalados en la ley. En este mismo sentido se manifiesta el penalista Arteaga Sánchez, pues en su criterio toda la materia penal está reservada a la ley, y los hechos y las penas deben estar expresamente previstos en ella. No obstante, la doctrina ha establecido la distinción entre analogía in malam partem (en perjuicio del reo) y analogía in bonan partem (a favor del reo), admitiendo esta ultima en materia de eximentes y atenuantes. En esta seria según algunos autores la intención de nuestro legislador en el ordinal 4 del artículo 74 del código penal. En el que se permite alegar cualquier otra circunstancia de igual entidad que a juicio del tribunal aminore la gravedad del hecho. Sin embargo pareciera que este supuesto más bien corresponde a una interpretación extensiva y no a la aplicación de otra norma que regula un caso semejante o análogo. 4. Los Principios Generales del Derecho Características Son enunciados normativos que expresan un juicio deontológico acerca de la conducta a seguir en cierta situación o sobre otras normas del ordenamiento jurídico. Cada uno de estos principios generales del Derecho, es un criterio que expresa un deber de conducta para los individuos, podemos decir que es un principio o un estándar para el resto de las normas. Funciones del derecho Los principios Generales del Derecho tienen tres funciones que tienen incidencia importante en las normas del ordenamiento, estas son: la función creativa, la función interpretativa, y la función integrativa. 12 1. La función creativa es la relación con que antes de promulgar la norma jurídica, el legislador debe conocer los principios para inspirarse en ellos y poder positivizarlos. 2. La función interpretativa implica que al interpretar la norma, el operador debe inspirarse en los principios, para garantizar una cabal interpretación. 3. La función integrativa significa que quien va a colmar un vacío legal, debe inspirarse en los principios para que el derecho se convierta en un sistema hermético. Distintas Concepciones Doctrinarias sobre los principios generales del Derecho: Según la concepción historicista si los principios generales del derecho fueran principios de Derecho natural la vaguedad de estos principios propiciaría el arbitrio judicial y, por lo tanto, se produciría una falta de seguridad y certeza jurídicas (uno de los fines de la Codificación). Es por ello que para los positivistas los principios generales del Derecho son principios deducidos del ordenamiento jurídico por analogía (analogía iuris). Las lagunas se evitan y se cierra completamente en el sistema si, en defecto de ley y costumbre aplicables al caso, se acude a la analogía. Sin embargo, la concepción iusnaturalista remarca la insuficiencia del ordenamiento jurídico positivo y la necesidad de acudir a los principios del Derecho natural, pero para reducir la arbitrariedad judicial al mínimo los principios generales del Derecho sólo han de ser aplicados en defecto de Ley y analogía y con respeto a los expresados en el ordenamiento jurídico. Del Derecho. La idea de principio ya implica, por sí misma, una notable dosis de abstracción, pero al adjetivarlo con el calificativo de general no estamos reiterando una misma idea, sino que vigorizamos su ya inicial significado de universalidad. La yuxtaposición, en la expresión "principio general", no será, por tanto, una redundancia, ni menos una tautología (repetición inútil y viciosa, expresando lo mismo de distintas maneras), más bien se trata de un pleonasmo (en el sentido gramatical de vocablo innecesario que da vigor a la expresión). Y cuando esta expresión la conectamos al término Derecho, estamos delimitando el ámbito objetivo de referencia: se trata de expresar aquellas proposiciones más abstractas que dan razón. El fundamento al Derecho es una base para mejorar el origen de los principios generales del Derecho (y prescindiendo de las concepciones que niegan su existencia) pronto se tomaron dos posturas enfrentadas, cosa que se repite en tantos y tantos aspectos de la Filosofía jurídica, la historicista — positivista— y la filosófica — o iusnaturalista— (sobre estas denominaciones Rodríguez Paniagua, 1987, p. 58). y Legaz y Lacambra hace referencia a la «dualidad doctrinal que escinde a los científicos del Derecho en dos 13 campos, en relación con esta materia: el de los que consideran que los principios generales del Derecho son sencillamente aquellos que informan un ordenamiento jurídico dado, y el de los que, por el contrario, piensan que se trata de principios filosóficos. Los principios son «razón pura», los iusnaturalistas estrictos que piensan que son principios de un Derecho natural inmutable (iusnaturalismo clásico) o cambiante, de «contenido variable» (Stammler) o «contenido progresivo» (Renard) y, por último, los que apoyan los principios generales del Derecho en la equidad, en ciertos valores como la justicia, la libertad, la igualdad y la dignidad humana, son principios enunciados en la Constitución española. También han surgido posturas más extensas y eclécticas, que recogen elementos de las anteriores doctrinas desde la Filosofía jurídica y, desde el Derecho civil. Aparte de estas concepciones generales podemos citar algunas definiciones de la doctrina: Para el profesor De Castro son «las ideas fundamentales e informadoras de la organización jurídica de la Nación» (2ª. ed., p. 420). El profesor Arce y Flórez-Valdés, siguiendo a De Castro, los define como «las ideas fundamentales sobre la organización jurídica de una comunidad, emanadas de la conciencia social, que cumplen funciones fundamentadora, interpretativa y supletoria respecto de su total ordenamiento jurídico» (1990, p.79). Según Larenz «los principios jurídicos son los pensamientos directos de una regulación jurídica existente o posible» (1993 1ª ed. 1985, p. 32) y los principios ético-jurídicos son «pautas orientadora de normación jurídica que, en virtud de su propia fuerza de convicción, pueden "justificar" decisiones jurídicas» (3ª ed., 1ª ed. En Ariel, 1994, p. 418). Definición de los Principios Generales del Derecho Los Principios Generales del Derecho pueden ser definidos como las normas jurídicas generales que sirven de cimiento al ordenamiento jurídico en su conjunto o a sectores del mismo. Son normas jurídicas, pues su condición de principios no les resta fuerza jurídica, tiene carácter general, porque no se agotan en la regulación de un determinado supuesto de hecho, sino comprenden valores o exigencias jurídicas básicas que se ponen de manifiesto en múltiples preceptos o decisiones judiciales. Son, pues, fundamentos del ordenamiento jurídico o de algunas de sus ramas especificas. 14 Los Principios Generales del Derecho es el conjunto de normas jurídicas que integran el derecho de un País que tiene como objeto resolver los conflictos de intereses que se producen en las interferencias de las conductas de los integrantes de la colectividad. Es aspiración, pues, que todos y cada uno de esos conflictos encuentren una regulación por parte del ordenamiento jurídico, puesto que si hubiese alguna falla que dejara sin solución algún problema, las partes en conflicto no tendrían otro remedio que acudir a la fuerza, a la aplicación del célebre principio de la Ley del Tailon (Ojo por ojo y Diente por Diente). El legislador tiene que excluir absolutamente la posibilidad de que escape algún problema de la regulación por parte del derecho, y el jurista no puede llegar a concebir, sin mengua absoluta de la seguridad jurídica, la presencia de tales fallas, que se denominan en la doctrina Lagunas técnicas. El Derecho no puede permitir las existencias de esas Lagunas, y por eso se dice que debe responder al principio de la Plenitud Hermética del Orden Jurídico. Se entiende por esta que el Derecho es un orden de normas completo y cerrado, de tal manera que no deja escapar caso alguno a la regulación de las normas. A la plenitud hermética se llega en las diversas legislaciones a través de la autorización que da el Derecho al juez para ¨integrar¨ el orden jurídico con normas distintas de las establecidas de manera precisa por el legislador para la solución de los casos concretos, mediante procedimientos especiales que normalmente son la analogía y la posibilidad de acudir a los principios Generales del Derecho. Mediante el recurso a la analogía, el juez que no encuentre una norma precisa que regule un caso concreto, tiene la facultad de buscar normas que regulen casos concretos semejantes o materias análogas para entonces aplicar estas normas a la solución del conflicto que carece de la ley expresa. Son variadas las funciones que los Principios Generales del Derecho están llamados a cumplir. Deben ser tomados en cuenta en la elaboración de instrumentos normativos, y pueden ser objetos de aplicación directa para declarar la nulidad de actos que la contraríen (reglamentos, Contratos, etc.,), son empleados a menudo para reconocer y colmar lagunas legales, y están inevitablemente presente en la interpretación de los textos jurídicos. Superan en mucho, por tanto, el papel supletorio o residual que le asigna el artículo 4 del Código Civil, el cual representa en este particular un resabio de doctrinas decimonónicas sobre el Derecho. Los espacios ganados por tales principios en el campo jurídico se ponen de manifiesto en cambio, en el Articulo 141 de la Constitución, que somete a la administración pública a la Ley y al Derecho, concepto este dentro del cual dichos principios ocupan un lugar capital, como lo enseña la jurisprudencia contenciosoadministrativa nacional y comparada. Sin embargo puede suceder que aun a través de la analogía no logre el juez la norma que debe regular el problema que tiene presente. Entonces, de acuerdo con lo que generalmente dispone los ordenamientos jurídicos, puede acudir a los Principios Generales del 15 Derecho y de ellos deducir la regulación del caso. A si se cierra la posibilidad de que quede algún caso sin regular, porque si no hay norma expresa o a través de la analogía no se llega a la regulación del caso concreto , entonces queda el recurso de acudir a los Principios Generales del Derecho, de donde se obtiene la norma necesaria. Los Principios Generales del Derecho están constituidos por los principios fundamentales de conducta que existen en la cultura del tiempo en que se vive y, en consecuencia, informan y orientan los ordenamientos jurídicos que van a regir la actividad de los integrantes de la colectividad. La norma jurídica que deciden los casos particulares son proyecciones de esos principios que constituyen la base de todas las legislaciones. El Derecho venezolano, a través del Artículo 4 del Código Civil sanciona la plenitud hermética del ordenamiento jurídico venezolano, al establecer que a falta de ley expresa hay que acudir a la analogía, y si esta no nos ofrece el criterio suficiente para solucionar el caso, a los principios Generales del Derecho. Esta referencia a los Principios Generales del Derecho no permite la posibilidad lógica de que exista un conflicto que no esté regulado por el Derecho, eliminando las eventuales lagunas técnicas. Sin embargo, al hablar de estos Principios Generales del Derecho el legislador no deja su establecimiento al criterio del juez si no que lo sujeta a algo realmente existente. Acerca de la naturaleza de esa realidad, que son los Principios Generales del derecho, y que deben buscar el magistrado, han existidos varias teorías: A. Concepción Romanística En épocas en que l Derecho Romano tenía el carácter de fuente subsidiaria para algunas legislaciones, por reconocerse en este la categoría casi del Derecho Natural, se confundieron los Principios Generales del Derecho con el propio Derecho Romano. B. Concepción Filosófica O Iusnaturalista, entiende por Principios Generales del Derecho al Derecho Natural, es decir, a esos principios internos e inmutables que se consideran validos por sobre todos los ordenamientos jurídicos positivos existentes y que están constituidos bien por la razón divina en función normativa, o bien por aquellos principios que la propia razón humana descubre superiores al ordenamiento jurídico positivo, y que expresan como deberían ser las normas elaboradas por el hombre. Es decir el Derecho justo. C. Concepción Positivista De acuerdo con la llamada concepción positivista los Principios Generales del Derecho serian aquellos principios contenidos por un determinado ordenamiento jurídico. 16 D. Concepción Intermedia Supone que los principios generales del Derecho sean, ante todo, los principios filosóficos que informan al Derecho, en sus ingredientes universales, como fenómeno de la cultura, pero que estén reconocidos en el ordenamiento jurídico concreto de que se trate. Hay que advertir que aquí, en realidad, se llega a una concepción positiva, pues en definitiva reconoce que los principios generales del derecho no pueden ser sino aquellos que informan un determinado ordenamiento jurídico. Los principios generales del Derecho tienen mucha importancia, además, como fuente del Derecho Internacional. El estatuto del Tribunal Permanente de Justicia Internacional del Haya dispone que a falta de convenios internacionales y de costumbre internacional, subsidiariamente entran a regir los principios generales del Derecho reconocido por las naciones civilizadas. Una opinión generalizada sostiene que constituyen la parte invariable e incontinente del Derecho Natural para la cátedra un ejemplo claro de estos principios son los basamentos del Derecho Romano llamados: “Tria iuris precepta” (los tres preceptos del Derecho de Ulpiano). Ellos son: 1) Honeste vivere (vivir honestamente). 2) Alterum no laedere (no dañar a otros). 3) Suum cuique tribuendi (dar a cada uno lo suyo). Es decir, los principios jurídicos son las bases sobre las cuales se apoya todo Derecho. Las formulaciones lógicas que desarrollaran posteriormente los ordenamientos jurídicos, formulas que son abstractas cuando se despoja al Derecho de su caracterización como forma de la supra estructura social, por cierto estos principios en abstracto muestran una raíz moral profunda por lo que algún autor ha dicho que los principios generales constituyen el primigenio enraizamiento entre la moral y el Derecho. Alguno estudiosos se niegan a aceptar la existencia de principios generales, incluso hay quien opina que hacer tal cosa es actuar contra la positividad del Derecho, pero nosotros entendemos que por más que se quieran negar, forman ellos la última realidad y hasta la justificación de los ordenamientos. Por ejemplo, si no existiera la lealtad como principio general del Derecho Procesal, en caso de lagunas de la ley y dudas, no sería posible que el juez actuase equitativamente administrando justicia. A titulo ilustrativo, son principios generales del Derecho el de la buena fe, el de favor libertatis ,el de la obligación de reparar los daños 17 causados ;el de autonomía de la voluntad, en el Derecho privado, y el de proporcionalidad, en el Derecho público, el in dubio pro reo, en Derecho penal, y el principio dispositivo en Derecho procesal civil . Carácter Normativo : Por una parte, hay quienes sostienen que tales principios son igualmente normas. Este es el criterio sustentado por Norberto BOBBIO, pues los considera como “las normas fundamentales o Generalísimas del sistema jurídico”. El carácter normativo de los principios lo fundamenta en dos hechos: a. Lo que se obtiene de la deducción de los principios generales del Derecho, son normas. b. Su función es la misma que las normas, regular la conducta humana. Según la dirección iusnaturalista, los principios generales del Derecho también tendrían carácter normativo. Son principios que “no tienen formulación positiva ni sanción estatal, pero que poseen innegable vigencia y obligatoriedad por formar parte de un sistema superior e ideal”, que es el Derecho Natural. Los Principios Generales Del Derecho Y Su Consagración Constitucional: Partiendo de la idea de que los principios generales del Derecho “constituyen normas básicas reveladoras de las creencias y convicciones de la comunidad respecto de los problemas fundamentales de su organización y convivencia”, es frecuente que en las legislaciones se tienda a la consagración expresiva de algunos de ellos. Nuestra Constitución no escapa a dicha tendencia, incluyendo algunos de esos principios en los artículos 1(libertad, igualdad, justicia y paz internacional), 2 (Estado democrático y social de Derecho y de Justicia, vida, libertad ,justicia , igualdad ,solidaridad, democracia, responsabilidad social, preeminencia de los Derechos Humanos la ética y el pluralismo político), 4(Estado Federal Descentralizado de acuerdo a los principios de integridad territorial, cooperación, solidaridad, concurrencia y corresponsabilidad) 5(soberanía popular),7(supremacía constitucional),136(separación de poderes), 137(legalidad), entre otros. No obstante, el hecho de que los principios generales del Derecho no estén recogidos expresamente en disposiciones normativas, no es un obstáculo para apelar a su aplicación a una situación concreta. Así lo ha reconocido la jurisprudencia del máximo Tribunal de la República, indicando que el ordenamiento constitucional venezolano está compuesto no sólo por normas propiamente dicha, sino también por principios valores. En nuestro derecho el artículo 335 de la Constitución 18 indica expresamente que el “Tribunal Supremo de justicia garantizara la supremacía y efectividad de las normas constitucionales. 5. Aplicación del derecho en el Tiempo y en el Espacio La aplicación propiamente dicha implica establecer respecto de una situación de hecho concreta, la consecuencia jurídica prevista en una norma general. Es mediante la aplicación que llegamos a la concreción de la norma. Para que una regla de derecho pueda servir de fundamento a una decisión, debe ser válida y vigente. A veces son tratados erróneamente como sinónimos los términos validez y vigencia. Se puede decir que la validez de una norma está supeditada a que esta haya sido dictada respetando todas las normas sobre producción normativa; incluso aquellas relativas al contenido de las normas de superior jerarquía. Por su parte, la vigencia, supone el cumplimiento de los requisitos mínimos que aseguran la pertenencia de una norma a un sistema, de los cuales depende su obligatoriedad. La vigencia tiene una limitación temporal y espacial. Así, en principio, no puede aplicarse a un caso una norma que ha sido derogada, ni una que aun no ha entrado en vigencia. Comienzo y fin de la vigencia de las normas jurídicas : La vigencia temporal de una norma tiene un inicio y un final. Para saber si una norma se aplica al caso concreto es necesario establecer si está vigente, es decir, si se ha iniciado y no ha concluido aun el periodo de su obligatoriedad. El ámbito de vigencia temporal de una norma es la porción o espacio de tiempo en que rige, en que es considerada de obligatorio cumplimiento. Decir que una norma está vigente es señalar que se aplica a todos los casos concretos a los cuales va dirigida, por lo menos en cuanto a su exigencia, porque no necesariamente toda norma jurídica vigente es eficaz, en el sentido de que puede pertenecer al sistema por haber cumplido ciertos requisitos mínimos de competencia y procedimiento, sin embargo no se ciertamente aplicada. El principio general del inicio de la vigencia, respecto a las normas del derecho escrito contenidas en leyes en sentido amplio, esta enunciado en el artículo 1º del Código Civil, “ La ley es obligatoria desde su publicación en la Gaceta Oficial o desde la fecha posterior que ella misma indique”. La entrada en vigencia opera de dos formas: inmediata, a partir de la publicación en Gaceta Oficial; y, diferida, cuando el mismo legislador fija un momento distinto a la fecha de publicación en el órgano oficial, para la puesta en vigor. Además debe tomarse en cuenta lo establecido en el 19 artículo 317 de la constitución, “las leyes tributarias deben fijar un lapso para su entrada en vigencia” El legislador, puede prever la denominada “vigencia anticipada” de ciertas normas, con lo cual estipula la entrada en vigencia de una ley en una cierta fecha, puede disponer que algunos contenidos de la misma sean considerados obligatorios en un momento anterior. También puede establecerse disposiciones de una ley. la vigencia diferida de algunas El legislador puede disponer la entrada en vigencia territorial sucesiva, es decir, la ley no se hace obligatoria en todo el territorio nacional de manera simultánea, sino paulatinamente, primero en ciertos estados y luego en otros; pero esta manera de entrada en vigencia solía utilizarse a principios del siglo pasado. La finalización de la vigencia. La doctrina distingue entre los factores que determinan la extinción de la obligatoriedad de las normas de derecho escrito y las clasifican en “causas intrínsecas” y “causas extrínsecas” Fin de la vigencia. Causas Intrínsecas. Termino Expreso y Táctico Las causas intrínsecas se refieren a los factores o circunstancias que están vinculados a la misma naturaleza de la ley. Así, si se trata de una ley temporal o de vigencia determinada, porque tenga un término estipulado para concluir su obligatoriedad, o porque regule hechos o situaciones coyunturales cuya duración es transitoria, una vez llegado el término o cesado el evento que motivo la promulgación de la ley, evidentemente finaliza la vigencia de la ley. Ejemplo del primer caso sería la ley de presupuesto Anual, cuya vigencia se inicia el 1 de enero y culmina el 31 de diciembre del año respectivo. Al segundo supuesto se le denomina “termino táctico”, ya que si bien no hay una fecha estipulada que finalice la vigencia, dicha ley regula supuestos de hechos transitorios. También existe un tercer caso de temporalidad que sería la situación de una ley con pretensión de obligar in aeternum (de por vida) y aplicarse a situaciones de hecho de existencia indefinida, que cesa de aplicarse porque tales situaciones de hecho, por el motivo que fuere, cesan total y radicalmente de existir. Ejemplo: Las leyes sobre la brujería en una época en que la coincidencia colectiva era crédula en esta clase de supersticiones. Causas extrínsecas: Se trata de circunstancias externas que producen la extinción de la vigencia de normas que fueron dictadas con la pretensión de estar 20 vigentes de manera indeterminada. Como la derogación, la declaratoria de nulidad absoluta y referendo abrogatorio. a) La derogación: es un acto dictado en ejercicio de una de las manifestaciones de la potestad legislativa, que conlleva como afecta la cesación de la vigencia de una o varias normas. El principio general de derogación se encuentra en el artículo 7 del código Civil, dispone: “Las leyes no pueden derogarse sino con otras leyes; y no vale alegar contra su observancia el desuso, ni la costumbre o practica en contrario, por antiguos y universales que sean” Tipos de Derogación. 1. Desde el punto de vista de su forma de expresión: De acuerdo con la forma de expresión de la derogación, esta puede ser Expresa o Tácita. Es expresa, cuando el legislador incluye una disposición en la cual declara la derogación de uno o más artículos de otra ley o leyes, mientras que es táctica cuando no hay declaratoria al respecto. Para que la derogación expresa pueda desplegar sus efectos, debe ajustarse a dos presupuestos básicos del ordenamiento jurídico: el principio de jerarquía y el principio de competencia. El primero, la derogación puede ser realizada por normas de mayor rango respecto de disposiciones de inferior jerarquía. Igualmente, procede la derogación expresa de preceptos del mismo rango cuando la materia está regulada por tipos normativos iguales. Una ley orgánica, dictada según lo previsto en el artículo 203 de la Constitución, solo puede ser derogada por otra ley de igual entidad o por una de rango superior. Una ley ordinaria puede ser derogada por otra ley ordinaria o por una ley orgánica, que sirva de marco normativo en una materia, mas una ley ordinaria no puede ser derogada por un reglamento, ni por una ordenanza. El principio de competencia consiste en “la acotación de ciertas materias que solo pueden ser reguladas por un determinado tipo normativo, el cual, además, únicamente puede ser utilizado por la normación de dichas materias. No se puede realizar la derogación entre tipos normativos diferenciados competencialmente. La otra especie de derogación es la denominada derogación Tácita. Se refiere a la nueva ley no identifica la ley o disposición legal derogada. El legislador no es el que determina el objeto de la derogación, sino los operadores jurídicos a partir de un esclarecimiento de la voluntas legis. Este tipo de derogación está limitada por los principios de jerarquía y competencia, es decir, que solo se produce entre disposiciones normativas homogéneas o entre una disposición normativa y otra 21 jerárquicamente subordinada. No procede la derogación tacita entre tipos normativos diferentes articulados entre sí por el principio de competencia. La derogación tacita es una categoría problemática, y puede ser causada por dos factores distintos: por la regulación integral de la materia, y por una norma posterior que resulta incompatible con la anterior que también es llamada derogación por incompatibilidad. En el Primer caso, el legislador no indica de manera expresa la norma derogada, esta se determina en función de la materia que ha recibido una regulación integral. En cuanto a la derogación por incompatibilidad supone la existencia de una contradicción entre normas, que impide lógicamente aplicar una sin violar la otra. Este tipo de derogación se caracteriza por la ausencia de un acto legislativo cuya finalidad directa e inmediata sea producir la cesación de la vigencia de una ley o de una disposición legal anterior. La mayor dificultad que acompaña la derogación por incompatibilidad, es la admisión del efecto derogatorio típico: la cesación de la vigencia. 2. Desde el punto de vista de su extensión: Otro criterio de distinción de la derogación se orienta a la extensión de la derogación, la cual puede ser derogación total (suspensión absoluta de la ley anterior, por la posterior) la derogación parcial (solo se afecta una parte de la ley anterior, pero mantiene su vigencia en el resto del articulado). Hoy en día en Venezuela se habla de abrogación cuando se suprime la vigencia de la ley por la voluntad popular, referendo abrogatorio de leyes previste en el artículo 74 de la constitución. El texto constitucional no hace la distinción entre derogación total o parcial, pero si hace referencia a la reforma de las leyes, estableciendo como requisito que la “ley que sea objeto de reforma parcial se publicará en un solo texto que incorpore las modificaciones aprobadas”. En caso de la reforma total de una ley, se produce la derogación total de la ley anterior, en virtud del principio de lex posterior derogat priori. Respecto a la reforma parcial, se discute sobre la fecha de vigencia de los preceptos que no fueron objeto de modificación. b) La anulación: Otra causa extrínseca que tiene efectos respecto a la vigencia de las normas, es la declaratoria de su nulidad por inconstitucionalidad. Como consecuencia del principio de supremacía constitucional (artículo 7 de la constitución), existe la posibilidad de controlar la conformidad de las leyes con las normas, principios y valores constitucionales, atribuyéndose a la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, la competencia de declara la nulidad total o parcial de las diferentes normativas a nivel nacional, regional, y municipal. 22 Según Sánchez-Covisa la anulación: No es propiamente una pérdida de vigencia, es decir, no es como la derogación, un acto en virtud del cual una ley que estaba vigente cesa de estarlo, sino por el contrario, un acto en virtud del cual se proclama que una ley – aparentemente vigente – debía carecer de toda vigencia y no poseía en realidad, ninguna fuerza obligatoria. c) Referendo abrogatorio: Es otra causa de extinción de la vigencia de las leyes, es su abrogación total o parcial mediante referendo abrogatorio, de conformidad con lo previsto en el artículo 74 de la constitución. Este tipo de referendo puede ser solicitado por iniciativa popular o por el presidente de la república, también pueden ser objeto de este referendo los decretos con fuerza de ley dictados por el Presidente de la República. No pueden ser sometidas a referendo abrogatorio las leyes de presupuesto, las que establezcan o modifiquen impuestos, las de crédito público, y las de amnistía, así como aquellas que protejan, garanticen o desarrollen los derechos humanos y las leyes aprobatorias de tratados: No podrá hacerse más de un referendo abrogatorio en un periodo constitucional para la misma materia. d) El desuso y la costumbre contra legem: Como se desprende del precepto contenido en el artículo 7 del código civil, en nuestro sistema jurídico el desuso y la costumbre contra legem no tienen incidencia en la perdida de vigencia de una ley, mas si en la perdida de su eficacia. El inicio y Cesación de la vigencia de las normas Consuetudinarias El inicio de la vigencia de las normas mencionado con anterioridad se refiere únicamente a las de derecho escrito, mas no se aplica a las normas consuetudinarias, pues no es posible establecer de una manera específica la fecha en que surgieron, por su misma naturaleza. Con respecto a la Extinción o Cesación de las normas Consuetudinarias, estas dejan de ser obligatorias en nuestro sistema Jurídico si: son derogadas expresa o tácitamente por una norma de derecho escrito y por el desuso que sería la más común de las formas de extinción de este tipo de normas. Las Sucesiones de las Leyes en el Tiempo. En el Sistema Jurídico es preciso determinar el inicio y terminación de ley, sin embargo de esta determinación se derivan otros problemas de aplicación del derecho particularmente los que se refieren al conflicto de leyes sucesivas en el tiempo, lo cual presume el concurso de leyes con 23 distinta vigencia temporal pero sucesivas una de la otra. Para que exista conflicto de leyes en el tiempo deben darse los siguientes elementos: - La existencia de una Ley que trate sobre formas de conductas que han sido previamente reguladas por otra ley que ha quedado derogada, es decir la existencia de dos leyes que regulan la situación pero con diferentes consecuencias jurídicas que se suceden en el tiempo. Es por esta razón que se considera que las mas reciente ha derogado la anterior. - La existencia de un hecho Jurídico en sentido amplio que puede ser un acto o negocio Jurídico cuyo desarrollo o efectos se dan en periodo prolongado de tiempo, quedando abarcado por ambas normas. Es importante resaltar los hechos que su nacimiento y consecuencia están comprendidos en una sola norma no generan conflictos de leyes en el tiempo, sin embargo puede suceder que ciertos hechos ocurran en el momento de la entrada en vigor de una norma, pero sus efectos no sean instantáneos sino que se reflejen bajo la vigencia de otra norma, por ejemplo en un proceso penal o civil debe determinarse cual ley es aplicable, si la ley vigente al momento de surgir el hecho o la que se encuentra vigente en el momento que se producen las consecuencias. Para resolver estos conflictos sobre las normas jurídicas se utilizan el “Derecho Intertemporal” o “Derecho de colisión en el tiempo” que son aquellos que determinan que norma jurídica debe aplicarse en relación a una situación de la vida real. En el caso del derecho Venezolano el principio general aplicable en este tipo de conflictitos el siguiente: - Principio de la Irretroactividad: Que se encuentra en los artículos 24 de la Constitución Nacional y en el 3° del Código Civil y significa que la ley no puede aplicarse a los hechos ocurridos con anterioridad a su entrada en vigencia, solo se aplica a los hechos que den lugar durante su vigencia. Este principio destaca la necesidad de respetar las normas jurídicas creadas, y la idea de que las mismas solo rigen para el presente y para el futuro. No se puede exigir el cumplimiento de lo dispuesto con anterioridad a su incorporación en el sistema jurídico. Ninguna ley puede ser incumplida antes de estar vigente. Esta Irretroactividad sirve de apoyo a la seguridad jurídica gracias a que permite tener la convicción de saber a qué atenerse que es uno de los fines esenciales del Derecho. Este principio es aplicable a la norma constitucional en sentido amplio es decir que se extiende a las normas contenidas en decretos leyes, simples decretos, reglamentos, resoluciones, y cualquier prescripción emanada de un órgano del Poder Público con potestad normativa. De 24 igual modo este principio no debe restringirse ni siquiera bajo el supuesto de un estado de excepción como lo disponen por ejemplo el artículo 4.2 del pacto internacional de Derechos Civiles y Políticos y el artículo 27.2 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. Es importante señalar que la única excepción de este principio se encuentra en lo concerniente al derecho penal, en cuanto se trate de favorecer o establecer una pena inferior. Las leyes penales tienen efecto retroactivo en cuanto favorezcan al reo, aunque al publicarse ya el mismo este cumpliendo la condena. Esto se justifica al explicar que si una nueva norma le quita el carácter delictivo a un hecho, se entiende que la intención del legislador es no considerarlo de tanta gravedad por lo que se aplica retroactividad a todos los casos que tengan relación con dicha norma. Para precisar las implicaciones que tiene el principio de la irretroactividad se han propuesto un grupo de teorías que buscan establecer cuando debe descartarse la aplicación de una norma jurídica a causa de su retroactividad. 1.- Teorías de Los Derechos Adquiridos: que plantea que será un derecho adquirido aquel que no pueda ser vulnerado por la ley sin incurrir en retroactividad y que en caso contrario una ley será retroactiva cuando vulnere derechos adquiridos. Los derechos adquiridos son aquellos que ya han pasado a formar parte del patrimonio de los sujetos y nadie puede privarlo de ellos, mientras que las expectativas de derecho son las posibilidades de adquirir un derecho cuando se den los hechos que le darán efectividad al mismo. En función a lo anteriormente planteado la ley será retroactiva cuando afecta a un derecho que ya ha ingresado al patrimonio del sujeto, pero no si se trata de una expectativa de derecho. Un ejemplo de esto es la herencia, si una persona es instituida heredera, antes de la muerta del causante lo que tiene esa persona es una expectativa de derecho, pues el causante puede modificar su voluntad testamentaria; de tal manera una nueva ley puede afectar el orden de suceder, los requisitos para el testamento, quienes tienen derecho a la herencia etc., y en esa caso no aplica la retroactividad, en cambio si ya se ha producido la muerte del causante y el heredero ya ha adquirido su patrimonio la creación de una nueva ley no podrá afectarlo. Sin embargo esta teoría tiene varias objeciones, la primera de ellas es la ambigüedad del concepto de derechos adquiridos, ya que para algunos autores no son solamente los que no pueden ser vulnerados por la ley si no también los protegidos pos alguna acción o los que proviene del ejercicio de ciertas facultades. Otra objeción que puede encontrase en torno a esta teoría es que no existe equivalencia entre irretroactividad y derechos adquiridos, pues es posible considerar una ley retroactiva aunque no afecte derechos adquiridos o bien puede que se lesione un derecho adquirido sin que haya retroactividad. 25 2.- Teoría de los hechos cumplidos: Esta teoría también denominada de los “facta preterita” o “hechos del pasado” plantea que para determinar si una ley es retroactiva o no debe determinarse si un hecho se ha cumplido o no, si un hecho se ha realizado bajo la vigencia de una ley anterior o si ese hecho estaba previsto en normas de legislación anterior. En cualquiera de estos casos la nueva legislación no puede afectarlo porque incurriría en retroactividad. Esta teoría se fundamenta en que un acto cumplido de acuerdo a lo establecido en el orden vigente adquiere validez y debe ser amparado por el derecho y tienen aceptación ya que permite establecer de manera más objetiva se estamos ante una ley retroactiva debido a que es más fácil saber cuando un derecho ha sucedido o no a decir si se ha adquirido o no un derecho. Sin embargo tiene sus limitaciones ya que es de aplicación inmediata, es decir aquellos hechos que se dan y que inmediatamente generan los efectos, dejando sin resolver las situaciones jurídicas que no se crean en un solo momento si no que requieren tiempo para constituirse. Los Principales exponentes de esta teoría son: Mouchet, Zorraquin y Uzcategui. 2.- Teoría de la Situación Jurídica: Su principal exponente es ROUBIER, quien trata de superar las críticas realizadas a las leyes de los derechos adquiridos así como la de los derechos cumplidos, para el autor se distinguen 3 situaciones en relación a la vigencia de las leyes en el tiempo. a. El principio de aplicación inmediata de la ley. Que sería una regla general b. El principio de la no retroactividad de la ley. Excepción al principio anterior c. El principio de la supervivencia de la Ley Para el autor, lo que determina si una ley es retroactiva o no es la situación jurídica que se deriva del hecho cumplido por sí mismo. En las situaciones jurídicas se distinguen dos momentos, el momento dinámico en el cual la misma se constituye o se extingue, por ejemplo el momento en que concluye un contrato de arrendamiento o el momento en que se hace una venta y el llamado momento estático que sería aquel en que la situación jurídica está produciendo sus efectos, ejemplo de esto seria y el caso de los deberes y derechos de los cónyuges una vez celebrado el acto del matrimonio. Para Roubier, la ley puede afectar el momento estático de la situación jurídica, es decir el momento de los efectos de la aplicación de la norma, sin incurrir en la retroactividad, pero sí afecta el momento dinámico de la situación, estaríamos ante un supuesto de retroactividad. 26 3.- Criterio de Planiol y otros tratadistas: Para estos autores la ley es retroactiva cuando vuelve al pasado para apreciar las condiciones de legalidad de un acto, para modificar o suprimir los efectos de un derecho ya realizado y fuera de eso no existe retroactividad ya que si modifica los efectos futuros de un hecho no se considera retroactiva. 4.- Criterio de Sánchez –Covisa: Para el autor el principio de irretroactividad necesita que en la aplicación de la regla, la ley vigente en un periodo demarcado determine la existencia de supuestos de hecho verificados bajo su vigencia y las consecuencias jurídicas derivadas de tales supuestos. En este criterio lo fundamental es conocer cuando ha sucedido el supuesto de hecho así como cuando se producen los efectos de un hecho para de esta manera distinguir entre efectos pasados y efectos futuros. Para este autor el problema de la retroactividad tiene 3 aspectos fundamentales que son claramente diferenciables y que a la vez son esenciales de toda aplicación de la ley que no incurra en la retroactividad. a. La ley no debe afectar a la existencia de cualquier supuesto de hecho (hechos, actos o supuestos jurídicos) anteriores a su vigencia. b. La ley no debe afectar a los efectos anteriores a su vigencia de cualquier supuesto de hecho, es decir la ley no regulara consecuencias pasadas. c. La ley no debe afectar a los efectos posteriores a su vigencia, es decir que la ley no debe regular las consecuencias futuras. Sin embargo es necesario recalcar que en el último supuesto debe distinguirse si el hecho pasado es resultado de un acto de voluntad o no, y si está regido por normas taxativas, de orden público o dispositivas. La Protección de La Confianza En Los Conflictos De Leyes En El Tiempo Actualmente los conflictos entre leyes sucesivas en el tiempo no solo se resuelven haciendo referencia al principio de la irretroactividad, también se consideran otras implicaciones para la seguridad jurídica. En función a esto ha cobrado gran importancia la exigencia de protección de la confianza lo que en el ámbito de la legislación puede traducirse en un límite en la facultad del legislador de cambiar el marco normativo que rige determinadas situaciones o situaciones jurídicas aunque no exista retroactividad. En este caso las modificaciones del régimen legal de un sector sea social o económico menoscabe expectativas de particulares, ocasionándoles perdidas o de otra índole, frente a lo cual el derecho no permanece indiferente. En función a esto el legislador aun cuando no está impedido de regular la ley en una materia cuando existan intereses 27 subjetivos involucrados si puede obligar a la previsión de disposiciones transitorias que le permitan a los afectados una compensación de los perjuicios causados. Ámbito De Vigencia Espacial Aplicación De La Ley En El Espacio. Este ámbito se refiere a la extensión territorial donde rigen las normas, es decir el espacio donde las mismas son aplicables, al momento de hacer el análisis de una norma no solo se considera su vigencia en el tiempo sino también en el espacio. Todo ordenamiento jurídico rige en el territorio en el cual fue dictado, lo que se denomina como principio de territorialidad de las leyes, por lo que según este principio una ley es aplicable en la extensión territorial del Estado que se trate. En función a esto las normas jurídicas pueden clasificarse en generales, que son las aplicables en todo el territorio y locales que solo rigen en una porción del territorio de un Estado. Un ejemplo de ello son las leyes Estadales y las ordenanzas municipales. También existen las normas de común aplicación a dos o más países como puede ocurrir con las normas internacionales que están contenidas en tratados. Pero aunque las normas de un orden jurídico rigen en una porción de territorio delimitado, no excluye que sean aplicables en el territorio normas que pertenecen a otros ordenes jurídicos. Esto sucede generalmente cuando los individuos realizan varios actos en dos o más estado, por ejemplo siendo nacionales de un país se casan en otro o celebran una compra venta en otro Estado. De este modo, se plantea el conflicto de que legislación debe ser aplicada, si la ley que corresponde a la nacionalidad o domicilio de la persona o la ley extranjera. Estos conflictos ocurren cuando algunos hechos quedan comprendidos por más de una legislación bien sea porque se verifiquen en más de un territorio, porque sus consecuencias se extiendan fuera del ámbito de un solo país o porque en su realización concurren nacionales de dos o más soberanías. Conflicto De Leyes En El Espacio. Hablamos de conflicto de sistemas nacionales cuando hacemos referencia a una guerra o a la ocupación forzosa de un país, estos conflictos son regulados por el Derecho Internacional Público. Sin embargo en un conflicto de leyes dictadas por dos o más Estados se utiliza como apoyo el Derecho Internacional Privado que determina cual de las diferentes leyes es aplicable. Las normas del Derecho Internacional Privado integran el ordenamiento jurídico del país que se trate, sea en las leyes nacionales o tratados ratificados, incluso cuando el mismo remite dado un supuesto de hecho a una norma extranjera esta es considerada parte del orden Jurídico Nacional. 28 Sin embargo algunos autores difieren de este criterio ya que plantean que debe establecerse una diferencia entre lo que es la pertenencia y la aplicabilidad de una norma jurídica. En referencia las normas de Derecho internacional Privado emanadas de las autoridades competentes de un Estado forman parte de su ordenamiento jurídico; pero las normas de otros Estados no pertenecen a dicho orden jurídico y su relación es solo de aplicabilidad. Los Estados resuelven sus conflictos de leyes en el espacio suscribiendo tratados bilaterales o multilaterales que conduce al establecimiento de reglas comunes. En el caso Venezolano no existía una clasificación de las normas jurídicas en este ámbito hasta la promulgación de la Ley de Derecho Internacional Privado cuyos objetivos son: - Resolver los problemas del sistema Venezolano de Derecho Internacional Privado, el cual se encontraba enmarcado en contradicciones. - Ajustar la legislación Venezolana al Derecho Internacional Privado a la realidad del País. - Buscar soluciones a los avances consagrados en las convenciones Interamericanas sobre Derecho Internacional Privado. Evolución De Los Principios Fundamentales Aplicables En este punto es importante distinguir dos grandes sistemas que provienen del Derecho Romano: la personalidad o nacionalidad y el de la territorialidad. De acuerdo con el principio de la personalidad la ley que es aplicable es la que pertenece al orden jurídico que corresponde a la nacionalidad del sujeto, es decir que el derecho del lugar al cual está vinculado la persona va a estar allí donde quiera que vaya, por lo que según este principio se permite la aplicación de normas de otro País cuando las personas que participan no son nacionales del mismo. En referencia al principio de la territorialidad, la ley a aplicar seria la del Estado, ya que la misma requiere la aplicación de un solo sistema jurídico en todo el Estado, y los pertenecientes a él quedan sometidos al derecho internacional cuando salen de los límites de su País. Ambos principios remontan sus antecedentes en el Derecho Romano, el ius civile y el ius gentium, el primero regia solo a quienes tenían la Nacionalidad Romana mientras que el segundo (derecho de gentes) era aplicado a quienes no tenían esta condición. Sin embargo paulatinamente fueron acercándose ambos sistemas hasta llegar a la aplicación de ius civile en todo el territorio. Durante el siglo XIX se plantearon soluciones este conflicto del espacio por lo que se mencionan: 29 a. El sistema de la Comunidad del Derecho: ideado por el jurista SAVIGNY. Para este autor la aplicación extraterritorial de las normas se deriva no de razones de justicia sino de la existencia de una comunidad pues los diferentes órdenes jurídicos tienen elementos comunes y en función a esto las relaciones pueden regirse por cualquiera de las leyes de los diferentes sistemas. Según este sistema debe determinarse para cada relación jurídica el derecho más pertinente conforme con la naturaleza de la relación. b. Sistema de Nacionalidad del Derecho: expuesto por MANCINI hace referencia a la aplicación de la ley Nacional. Parte del supuesto que la ley de la Nacionalidad de la persona sigue a esta dondequiera que se encuentre, es decir se le da preferencia a la ley correspondiente a la nacionalidad de la persona. 30 Bibliografía: Luis María Olaso S.J. Curso de Introducción al Derecho. Tomo II Manuel Simón Egaña. Notas de Introducción al Derecho Eduardo García Maynez. Introducción al Estudio del Derecho www.Wikipedia.com www.monografias.com www.elrincondelvago.com Apuntes Introducción al Derecho. Profra. Jasmin Marcano 31