IGNACIO DOMEYKO Buenos días… permítanme presentarme… Me llamo… IGNACIO Domeyko…soy tataranieto del sabio y llevo su nombre con mucho orgullo y responsabilidad. Por un momento…, me transformaré… y representaré antepasado… como si fuera él… me dirigiré a cada uno de Uds. a mi Queridos Amigos: Quiero agradecer a Chile, mi querida segunda patria y a todos Uds. por los homenajes que me han hecho con motivo del bicentenario de mi nacimiento. Estoy seguro de no merecerlos y sólo son fruto de la generosidad de todos ustedes. Durante mi vida, no hice más que cumplir con la voluntad de Dios, mi gran guía y mentor. Entregué a Polonia y a Chile lo que Dios me dio a mí. Siempre consideré una obligación cultivar los talentos que había recibido y qué mejor regalo para mi patria adoptiva que me acogió con tanto cariño, que recibir de mí el fruto de mis estudios e investigaciones! Cada uno de ustedes, debería hacer lo mismo. Desarrollar al máximo sus talentos y quizás en 200 años más, haya personas generosas que, como ustedes hoy día lo hacen conmigo, les rindan a ustedes un homenaje agradecido. Finalmente, ahora hablando por mi mismo…quiero comprometerme ante ustedes y ante mi tatarabuelo… que al igual que él… me esforzaré por descubrir y cultivar mis talentos para ponerlos a disposición de Chile y su gente. Nuevamente, muchas gracias.