ESTATUTO DE DEFENSA DEL CONSUMIDOR 1.5. El estatuto de Defensa del Consumidor: la sanción de la ley 24.240; veto presidencial; Decreto reglamentario 1798/94. Reformas a la ley 24.240: leyes 24.568, 24.787 y 24.999. Integración de la ley 24.240 con las leyes de Lealtad Comercial, Defensa de la Competencia, Tarjetas de Crédito y Leasing. La reforma constitucional de 1994. La incidencia del orden público económico de protección. Normativa provincial. Marco Jurídico e Institucional: Regulación de las relaciones sociales. Derechos y obligaciones de consumidores y proveedores. Carácter histórico de las normas de protección de los consumidores. Las leyes de protección al consumidor. Instituciones del Estado. Papel de los ciudadanos y de las organizaciones sociales. Otras leyes y normas. La ley 24.240 de Defensa del Consumidor y Usuario: La ley de Defensa del Consumidor y Usuario establece el ámbito de aplicación de la norma, en especial brinda los organiza los mecanismos y herramientas para la defensa de los derechos reconocidos a nivel constitucional, y regula específicamente entre otros sobre: la obligación de brindar información al consumidor, el deber de responder por eventuales daños que pudiera sufrir el consumidor, el deber de garantía en productos y servicios, el derecho de retractación en ventas a distancia, la obligación de cumplir con las publicidades y ofertas, la obligación de proteger la salud y seguridad del consumidor en productos potencialmente riesgosos, la protección al consumidor ante el establecimiento de cláusulas abusivas en los contratos, algunas previsiones en materia de servicios públicos domiciliarios, etc. La ley 24.240 a recibido numerosas reformas entre las cuales se les han ido incorporando figuras, desde aquellas que había sido vetadas por el Presidente de la Nación en oportunidad de su sanción, como otras que han ido adquiriendo importancia con el paso del tiempo, especialmente sobre temas relacionados con clausulas abusivas, medicina prepaga, telefonía móvil, servicios bancarios y financieros etc. El decreto reglamentario 1798/94: Como todo decreto reglamenta la norma respectiva (Ley 24.240) estableciendo en su anexo la interpretación de cada una de las normas y su correspondiente aplicación. Ley 22.802 de Lealtad Comercial La ley de Lealtad Comercial representa uno de los primeros pasos en la protección de los consumidores en la República Argentina. Esta ley brinda reglas claras para la identificación de los productos y servicios que se ofrecen en el mercado. Regula los aspectos referidos a la exhibición de precios (tanto en comercios como en publicidad), la identificación de las mercaderías (etiquetado y rotulado de productos), el contenido neto de productos, la publicidad engañosa, las promociones y concursos con entrega de premios. (, etc.) A la vez establece la obligatoriedad de certificar la seguridad para determinados productos: productos peligrosos como los productos eléctricos, juguetes, acero estructural para la construcción, encendedores, elementos de protección personal (cascos, calzado de seguridad industrial, guantes, etc.), como así también obliga a los proveedores a brindar información obligatoria (en materia de eficiencia energética para aparatos eléctricos como lámparas incandescentes y fluorescentes, heladeras, equipos de aire acondicionado, etc. Ley 19.511 de Metrología Legal La Ley 19.511 legisla sobre todo lo referido a unidades de pesos y medidas contemplados en el Sistema Métrico Legal Argentino (SIMELA) y en concordancia con el Sistema Internacional, ofreciendo uniformidad en los usos metrológicos. En diversas resoluciones reglamentarias se determinan las condiciones técnicas que deben cumplir los instrumentos de medición en el país (estableciendo un uso obligatorio y exclusivo en todos los actos públicos o privados destinados por ejemplo a las transacciones comerciales: balanzas, surtidores de combustible, relojes taxímetros, radares, etc. Ley 25.065 de Tarjetas de Crédito La Ley de Tarjetas de Crédito regula las relaciones que surgen por la operatoria de Tarjetas de Crédito. Esto incluye tanto las tarjetas de crédito bancarias, o sea las emitidas por una entidad financiera, como las no bancarias, que son emitidas por un emisor privado no financiero, por ejemplo una casa de deportes, etc. también llamadas tarjetas de compra y también las tarjetas de débito bancario. Dicha ley regula la información que debe contener el contrato de tarjeta de crédito, el contenido del resumen mensual de las operaciones realizadas por el titular de la tarjeta, la forma y plazos para impugnar dicho resumen, y la información obligatoria que debe brindar el emisor de la tarjeta al consumidor, entre otros temas. 1.6. La defensa del consumidor y la revalorización de los principios generales, con especial referencia a la buena fe y a la protección de la confianza. El principio “in dubio pro consumidor”. La equidad en el ámbito del Derecho del Consumidor. 1.7. La noción de consumidor y usuario, el reconocimiento de sus derechos fundamentales. Art. 1, 2 y 3 LDC ¿Quiénes son “los consumidores” para la Ley? • Las personas físicas (individuos) o jurídicas (empresas, asociaciones civiles, sociedades de fomento, clubes, consorcios, etc.) • que adquieran o utilizan bienes o servicios como destinatarios finales • en forma gratuita o paga (onerosa) • para su consumo personal, familiar o de su grupo social. También lo son: • quien a consecuencia de una relación de consumo adquieren o utilizan bienes o servicios como destinatario final, haciéndose extensivo a su grupo familiar o social. • quien de cualquier modo esté expuesto a una relación de consumo. ¿Quiénes son “los proveedores” obligados a cumplir la ley? • Quienes realicen actividades de producción, montaje, construcción, importación, concesión de marca, distribución y comercialización de bienes o servicios, • exceptuando a los profesionales universitarios que requieren matrícula para el ejercicio de su profesión (abogados, médicos, arquitectos, etc.). La interacción entre ambos sujetos define la “relación de consumo”, sobre la que el Estado estableció una serie de regulaciones. Queda claro entonces que el consumidor se encuentra protegido en todas las etapas de la relación de consumo, a saber: -etapa precontractual: desde que el consumidor tiene conocimiento del producto, porque lo ve en una vidriera, o recibe la publicidad. -etapa contractual: cuando el consumidor se comunica con el proveedor o concurre al comercio a fin de comprar el producto o contratar el servicio y realiza la compra o contratación. -etapa post contractual: luego que el consumidor ha adquirido el producto o contratado el servicio y precisa información o sufre algún inconveniente por el mismo. Por otro lado están obligados al cumplimiento de las normas de protección: -la otra parte de la relación de consumo, el proveedor, que por tener especialización técnica sobre los productos que vende o mayor poder para negociarlos, la ley le impone una serie de obligaciones a cumplir cuando contrata con un consumidor. Ante el consumidor, son responsables todos quienes intervienen en la cadena de fabricación y comercialización de un producto o servicio. Es decir, quienes realizan actividades de producción, montaje, creación, construcción, transformación, importación, concesión de marca, distribución y comercialización de bienes y servicios. Sin embargo no todos los servicios están incluidos dentro de estas normas, como el caso de los profesionales liberales que prestan servicios y requieren para su ejercicio de título universitario y matricula otorgada por colegios profesionales (abogados, médicos, arquitectos). Pese a ello, la publicidad que éstos realicen para ofrecer sus servicios sí se encuentra comprendida en las disposiciones de la ley de defensa del consumidor. Ser consumidor significa: -Comprender que es el consumo y porque se consume -Poder diferenciar entre los diferentes tipos de necesidades -Tener presente que las necesidades están condicionadas por factores socioeconómicos, grado de desarrollo de la sociedad, la edad, el nivel económico y el nivel educativo, entre otros -Comprender que la satisfacción de necesidades no está en relación directa con la compra de determinados productos