Encuentro Catequistas Regi n Litoral 2007

Encuentro Regional de Catequistas
Madre Iglesia, inicia en la fe
con amor entrañable
Victoria – Entre Ríos
2007
Marco
La V Conferencia General es una ocasión
propicia para hacer un profundo
discernimiento acerca de la calidad de nuestra
vida, de las celebraciones litúrgicas, del trabajo
catequético, de la acción social y solidaria,
preguntándonos si ellas conducen al
encuentro vivo con Jesús, si lo celebran, si lo
prolongan y lo anuncian a quienes está lejos de
Él o no lo conocen
La Iniciación cristiana
un desafío para la catequesis…
La Iniciación Cristiana:
Desde los tiempos apostólicos, para llegar a ser
cristiano se sigue un camino y una iniciación
que consta de varias etapas. Este camino puede
ser recorrido rápida o lentamente. Y comprende
siempre algunos elementos esenciales: el
anuncio de la Palabra, la acogida del Evangelio
que lleva a la conversión, la profesión de fe, el
Bautismo, la efusión del Espíritu Santo, el
acceso a la comunión eucarística (CIC 1229).
• Proceso de transformación,
• Nos identifica progresivamente
con Cristo
• Itinerario gradual.
• A lo largo de la historia este proceso sufrió
modificaciones por adaptarse a distintas
circunstancias, conformando así cierto tipo de
–“Modelos de iniciación cristiana”
• Catecumenal
• Habitual
• Escolar
• Kainocatecumenal
• La IC una interacción dinámica en
la que todos somos responsables y
que se desarrolla en la comunidad
cristiana como ámbito propio.
• La IC supone un proyecto de
catequesis articulado y coherente
La Iniciación Cristiana:
Desde los tiempos apostólicos, para llegar a ser
cristiano se sigue un camino y una iniciación
que consta de varias etapas. Este camino puede
ser recorrido rápida o lentamente. Y comprende
siempre algunos elementos esenciales: el
anuncio de la Palabra, la acogida del Evangelio
que lleva a la conversión, la profesión de fe, el
Bautismo, la efusión del Espíritu Santo, el
acceso a la comunión eucarística (CIC 1229).
Modelo catecumenal
• sociedad y culturas paganas.
• predicación, por la fe-conversión y por la
experiencia sacramental.
• «cristiano no se nace, sino que se hace».
• la mirada está puesta prioritariamente
en los adultos.
Modelo catecumenal
• Se pueden distinguir en este modelo
cuatro etapas que se realizan conforme
al discernimiento de los responsables:
– precatecumenado,
– catecumenado,
– ritual, que supone dos momentos
• una preparación inmediata,
• la celebración unitaria de los tres sacramentos;
– Mistagogia.
Modelo habitual
• El mundo conocido ha sido
“evangelizado” se conforma la cultura y
societas christiana.
• No hace falta el primer anuncio que
provoque la fe. Prima la celebración de
sacramentos. Vida “cristiana” familiar.
• «no se puede nacer y no ser cristiano».
• los interlocutores adultos dejan paso a
los destinatarios infantes.
Modelo habitual
• Se reorganiza la dinámica de iniciación:
• El precatecumenado no hace falta, viene dado
por la familia.
• El catecumenado de reflexión pasa a ritual.
• Los sacramentos se administran en cualquier
momento y fuera de la sede episcopal. En
Occidente progresiva ruptura.
• De la mistagogia no se habla pero se vive
familiarmente.
Modelo escolar
• La societas christiana se ve conmocionada:
cuestionamientos protestantes y corriente de
renovación interior.
• No hace falta el primer anuncio que provoque la
fe. Celebración sacramentos. Vida “cristiana”
familiar.
• «para ser cristiano en serio hay que conocer la
fe».
• Se llamará la atención sobre los adultos pero
siguen siendo los niños los destinatarios.
• Aparece el tema de la edad.
Modelo escolar
•Se cuestiona la dinámica de iniciación:
“Nuevos mundos”
• Precatecumenado: se adapta.
“Viejo Mundo”
• no hace falta.
• Catecumenado de reflexión.
• Sigue catecumenado ritual.
• Los sacramentos se
administran en cualquier
momento. Se prioriza el
bautismo; se reclama el
resto. Para la comunión hay
que “saber”: reserva con la
Eucaristía.
• Los sacramentos se
administran en cualquier
momento. Se prioriza el
bautismo; se reclama el
resto. Para la comunión hay
que “saber”: acento en la
instrucción.
• Mistagogia: se da un
“intercatecumenado”
mistagógico.
• Si bien no se habla, se
mantiene el celo por
“instruir”.
Modelo kaino-catecumenal
• No Neo, ni Ana…
• Sociedad y culturas afectadas por el
«secularismo» (EN 20).
• Fuerte acento evangelizador, más allá de un
primer momento.
• «Duc in altum».
• Sin dejar de velar por los infantes habrá un
fuerte reclamo por la evangelización de los
responsables de su educación.
• Reclamo e importancia del obispo, ministro
originario y “responsable de la IC” en su diócesis.
Modelo kaino-catecumenal
• Urge una nueva dinámica de iniciación:
– Se necesita un precatecumenado o momento
kerigmático.
– Se reclama un nuevo catecumenado para adultos y
para niños en edad escolar. Catequesis Kerigmática.
– Especial atención a los responsables de la
educación.
– Se insiste en salvaguardar la unidad de la iniciación
cristiana (vínculo y referencia entre los
sacramentos).
– La mistagogia se desarrolla en la propuesta del ICP.
A modo de primer Corolario
• La iniciación cristiana ha sido y debería ser
entendida y practicada como una totalidad.
• La iniciación cristiana ha de ser un «proceso
transformador», un «itinerario gradual».
Un “gran sacramento”
• Por ser un proceso supone etapas.
• Proceso caracterizado por
– el anuncio y por la escucha de la Palabra
– por la celebración de los Sacramentos y
– por el testimonio de fe, esperanza y
caridad.
• Proceso de transformación supone
cambios, de tal manera que quien
participe asuma una nueva identidad, y
que ésta se manifieste en su
comportamiento personal y comunitario.
• Un proceso de transformación
progresiva supone normalmente grados
de desarrollo sucesivo
Interrogantes
 ¿Qué repercusiones pastorales
vislumbramos al hablar de la IC como un
«proceso de transformación
progresiva»?
 Catecumenado ¿es lo mismo que
Catequesis presacramental?
fabian.esparafita@gmail.com
Receso
La Iniciación cristiana
Una interacción dinámica…
• Celebración
• Preparación –catecumenado–
• Asimilación –mistagogia–.
• La IC expresa «la unidad del misterio
pascual, la relación entre la misión del
Hijo y la efusión del Espíritu Santo»
(RICA 34).
• La «íntima unidad» de los sacramentos
«debe ser salvaguardada».
• Superar el aislacionismo doctrinal y
pastoral
• Procurar una experiencia articulada por
la interrelación mutua de cada etapa de
este proceso.
Perspectiva sistemática:
Modelo Kainocatecumenal de
iniciación cristiana
• No Neo, ni Ana, KAINO…
– .Cultura afectada por “la increencia y la secularización”
(Doc.Part. 91; 124).
– .Catequesis kerigmática (DGC 62); evangelizadora (DGC 194).
– .Un gran sacramento.
– .Catecumenado bautismal: ha de inspirar todas las formas de
catequesis (DGC 59; 68).
– .El Obispo responsable de la IC en su diócesis (PGs 38; DGC
223 ).
• Momento del proceso evangelizador (CT 18-24; DGC 63-64).
• Itinerario con etapas esenciales (CIC 1229; Doc.Part. 59).
Perspectiva sistemática:
Modelo Kainocatecumenal de
iniciación cristiana
• Urge una nueva dinámica de iniciación:
– .Momento kerigmático o precatecumenado (CT 19;DGC 62;277).
– .Catecumenado para adultos y para niños en edad catequística
(CT 43).
– .Salvaguarda de la unidad de la iniciación cristiana [vínculo y
referencia entre sacramentos] (CDC 842; CIC 1212; 1244;1285).
– .Valor de la mistagogia y desarrollo del ICP (RICA 37-39; DGC
91; 129; JEP 51).
– .Paso fundante en la formación del discípulo de Jesucristo (DCG
67; Doc. Part. 55-59).
Perspectiva sistemática:
Modelo Kainocatecumenal de
iniciación cristiana
• Acción sinérgica:
– .Interacción múltiple (DGC 276; 76).
– .Lugar insustituible de la familia (CT 68; JEP 79-81)
– .Importancia de la Comunidad: origen, lugar y meta (DGC 220221; 254).
– .Exige formación de todos los que intervienen [familia,
catequistas, sacerdotes … (DGC 234)].
– .Proyecto: progresivo, unitario y coherente, para niños, adolescentes
y jóvenes (DGC 274)
Ocasión para un profundo
discernimiento
Asumir la crisis de la civilización.
– No dar por descontada la presencia de la fe cristiana: el
secularismo afecta a todos (Cf. Doc Part.156).
– Los contextos de vida en los cuales viven quienes
acuden a la Iglesia para iniciarse en la fe son
multiformes, fluidos y mutantes.
– La tradicional praxis vigente no tiene en cuenta los
signos de la descristianización.
– Ante tal situación, la pastoral catequística deberá dar la
primacía al anuncio del kerigma en vista a
engendrar o regenerar la fe.
Ocasión para un profundo
discernimiento
Discernir las disposiciones religiosas.
– Será importante comprender que la IC ha de estar en
función de las personas y no viceversa.
– La consideración de la «edad» en la IC
– Atención: hoy un único camino basado en el ritmo y
esquema del ámbito escolar.
Ocasión para un profundo
discernimiento
La IC es pues, toda ella como un
gran sacramento:
– signo eficaz de la gracia;
– acción simbólica eclesial y dialogal
por la que los hombres participamos de
la redención obrada por Jesús.
Ocasión para un profundo
discernimiento
Brindar una comunidad unida.
– Condición necesaria para la formación del discípulo.
– Que enseñe y acoja.
– Que acompañe orgánicamente a los catecúmenos /
catequizandos.
Recuperar y fortalecer el lugar de
la familia.
Ofrecer un proyecto de iniciación
cristiana.
– Proceso unitario, articulado y coherente.
La IC una «interacción dinámica»
Si bien es una interacción dinámica de dos
sujetos, intervienen una multiplicidad de
mediaciones que no podemos dejar de
considerar
– las disposiciones del sujeto, quien recibe la gracia
como don; las disposiciones del ministro que
administra la gracia sacramental;
– Las condiciones en que se desarrolla la celebración;
– Los recursos catequísticos y los mismos agentes
pastorales que intervienen.
La Iglesia al preparar y celebrar los
sacramentos no entrega cosas de las
cuales se desentiende una vez
repartidas, –no arroja perlas a los
chanchos–, sino que a través del
acontecimiento sacramental expresa su
realidad más profunda:…
celebra un misterio por el que quienes
intervienen
– son engendrados o renuevan en sí mismos,
por la gratuita iniciativa de Dios, una Vida
nueva, trascendente, eterna y
– se establece entre ellos un vínculo del que
la Iglesia misma es responsable y ha de
procurar que ése alcance su mayor eficacia,
por el acompañamiento, por la
reconciliación, por el crecimiento.
La IC una «interacción dinámica»
Todos somos responsables de la IC:
– El obispo (procurando que haya un proyecto
catequístico)
– Los presbíteros (particularmente los
párrocos) procurando la participación activa
de los catequistas
– Los diáconos
– Los padres de familia, primeros educadores
de la fe de sus hijos
– Las personas consagradas aportando su
carisma
– Los catequistas, llamados por Dios o
invitados por la misma comunidad.
La IC una «interacción dinámica»
La comunidad cristiana ámbito de la IC:
– La comunidad cristiana es el origen, lugar y
meta;
– La familia cristiana Iglesia doméstica es el
“lugar de iniciación”;
– La parroquia es “lugar privilegiado” para la
IC (EA41)
– La escuela católica, comunidad educativa;
– Las asociaciones han de estar involucradas
en la IC y en el ICP.
Interrogantes
– ¿Existe en la actualidad el
catecumenado de adultos o de «niños
en edad catequística»?
– Donde se ha constituido, ¿cómo se
desarrolla? son ciclos que se “pasan”;
procesos que se “viven”; exigencias
que se “cumplen”; requisitos que se
“verifican”…?
Interrogantes
– Predicación, Conversión, Catequesis,
Sacramentos, Mistagogia: ¿Palabras
que estructuran una teoría o
acontecimientos que tejen una
historia?
– ¿Subyace aún la disyuntiva
evangelización–sacramentalización?
¿Cómo superarla?
Interrogantes
– ¿Cómo vincular eficazmente: la gracia que
se administra (consideración de la iniciación
cristiana como “gran sacramento”); las
disposiciones del sujeto que la recibe
(edades, “casos”; historias); las
circunstancias que influyen (ministro que
celebra, catequista que acompaña,
comunidad que rodea –familia, escuela,
grupos “parroquiales”–)…?
Interrogantes
– ¿De qué modo afecta a nuestra pastoral
catequística aquella tensión entre lo
objetivo del don y la subjetividad de su
recepción…?
– Expectativas (nuestras y de los iniciados) y
posibilidades reales de perseverancia (las
que tenemos, las que querríamos tener, las
que podemos ofrecer)…
Receso