EL ÁRBOL Y LAS ARDILLAS En un precioso bosque junto a un pequeño lago, había un árbol muy, pero que muy gruñón. El árbol era tan alto como una torre y sus hojas eran onduladas. Un día llegaron al bosque dos ardillas muy graciosas que no tenían donde quedarse. Ellas decidieron buscar un refugio para vivir, por lo que dieron un gran paseo por aquel maravilloso bosque. Cansadas de buscar, de pronto vieron al árbol del lago. -Aquí nos quedaremos- dijo la más pequeña. - Es perfecto, me encanta- comentó la otra. Las ardillas vivían muy felices, porque se llevaban todo el día corriendo y saltando por las largas ramas del árbol. Pero una mañana de primavera, el árbol harto de tanto alboroto, echó a las ardillas, ya que no podía estar tranquilo y éstas no tuvieron más remedio que marcharse. Semanas más tarde, el árbol empezó a perder sus hojas, su tronco se hizo débil y se sentía muy solo. Arrepentido de lo ocurrido, envió mensajes por el bosque, pidiendo a las ardillas que volvieran. Ellas, sin pensárselo dos veces, volvieron de nuevo a su querido árbol. Desde aquel día, se convirtió en el árbol más bonito del bosque y en el refugio de muchos animales. Colorín, colorado este cuento se ha “terminao”. Texto: Lucía González Gandullo Corregido y adaptado en gran grupo alumnos/as de 5º de Educación Primaria