Cine Club Universitario La Linterna Mágica Centro de Estudios Regionales Sociedad Sirio Libanesa - Maipú 575 Planta Baja - Salón de Actos Martes 29 de Septiembre 2015 21.15 hs. Ciclo de Cine El Cine y la Ética de la vida Ficha Técnica Título Original: "12 Angry Men" Director : Sidney Lumet País: USA Año: 1957 Género: Drama Duración: 95 min. Idioma: Inglés Sinopsis Los doce miembros de un jurado deben juzgar a un adolescente acusado de haber matado a su padre. Todos menos uno están convencidos de la culpabilidad del acusado. El que disiente intenta con sus razonamientos introducir en el debate una duda razonable que haga recapacitar a sus compañeros para que cambien el sentido de su voto. Critica: La película doce hombres en pugna trata la temática de los juicios por jurados aplicado en los Estados Unidos, donde hombres comunes (de distintas profesiones), deben tomar la decisión sobre la condena o no de un joven de 18 años acusado de matar a su padre. En este caso, si es condenado recibirá la pena capital, es decir, morir en la silla eléctrica. El film transcurre en una habitación donde estos ciudadanos deberán tomar la decisión final y aunque las pruebas parecen concluyentes y el chico debia ser ejecutado. Uno de los 12, el número 8, posee “una duda razonable” por lo que en la primera votación vota por qué ese joven sea declarado inocente. El no tiene certeza de su inocencia pero no la tiene tampoco de su culpabilidad y eso motiva la discusión entre los protagonistas. A partir de este voto de inocencia se teje la trama de la película, este hombre nº 8 y arquitecto (Henry Fonda) intentará exponer las razones de su parecer y todos los demás sus razones por las que lo consideran culpable, tratando de influir en él y así cambiar su voto. La consigna es convencer a este hombre de que su duda razonable no es tan razonable y así poder dar por cerrado el caso. La primera observación que se puede hacer es que los personajes han sido elegidos a la perfección, cada uno posee características propias que los identifican y aunque algunos parezcan tener más relevancia que otros todos hacen que la tensión vaya en aumento y el espectador no sepa que ocurrirá. La despreocupación de la mayoría de los jueces ante tamaña decisión (la condena de un hombre a la muerte) es alarmante, se trata de la vida de un hombre, pero como expresa el vendedor, su juego de beisbol esta por empezar y esto es un tema menor en comparación, quiere largarse cuanto antes. Otro, expresa que le da lo mismo permanecer allí ya que de lo contrario volvería a su trabajo. Es el nº 8 el que hace reflexionar al resto, primero el más anciano de los personajes lo apoyará y a medida que se vuelve a hablar de cada prueba contra el joven se llega a la conclusión de que ninguna es tan concluyente como los jueces creían. Esto nos lleva pensar que en determinados momentos, los personajes eligen creer en esas pruebas, ya sea por prisa a terminar o por prejuicios personales. Esto se asemeja mucho a la vida real cuando los hombres convencidos de sus decisiones tratan de manipular las causas y efectos de los hechos producidos para simplemente tener razón y allí, falsean la verdad. Estos hombres no buscan la verdad del el caso, no interesa quien mato realmente al padre del acusado, importa no ceder ante el otro. Esto es común en la vida cotidiana: no hay que dar signos de debilidad. Y en este caso, poseer una duda razonable es para muchos miembros de este jurado un signo de tal debilidad, por eso al votar en secreto los votos cambian y por eso, más de uno cambia el voto después de una nueva discusión. Esto además responde a la generación natural de líderes dentro de un grupo humano, enseguida las personalidades más dóciles se encarrilan tras un conductor. Ninguna de las pruebas contra el joven (vale aclarar de bajos recursos y con antecedentes de violencia), es totalmente certera, el testimonio de los dos testigos principales hace que se generen contradicciones entre ellos, ¿cómo el anciano de abajo escucho los ruidos si en ese momento pasaba un tren a mas de 80 decibeles al lado de su ventana?, ¿cómo vio la testigo a través de un tren en movimiento tan claramente como el joven acuchillo al padre sin lentes?... Estos detalles no pueden pasar inadvertidos ni para los miembros del jurado ni para la defensa del acusado, pero así fue, solo un hombre con conciencia moral se tomo el trabajo de recorrer el barrio del chico, de pensar como era el ruido cuando vivía cerca de las vías y pasaba el tren… Esta película lleva al recuerdo de otras películas, como el hombre sin pasado, al hombre moderno no le importa quién es, cómo esta y porque esta como está el prójimo, solo piensa en sus cosas, en su interés, en su beneficio y en su bienestar, sin poder entender que el bienestar individual y egoísta hace que no se pueda llegar al verdadero bien que es el bien general, que le proporcionara aun un mayor bienestar individual. Estos mismos hombres que querían terminar cuanto antes e irse a su casa son los mismos hombres que gobiernan pueblos enteros y deciden en función de sus intereses, con la carga de sus valoraciones culturales, haciendo que sus ideas concebidas de antemano sobre determinados grupos humanos y sus actitudes decida por ellos y no sea la búsqueda de la verdad y el bien para la mayoría lo que los guie. Dios hizo libre al hombre pero desde ese momento le otorgó una responsabilidad y esta, es eludida por 11 de los 12 miembros del jurado al no reflexionar a conciencia sobre el caso. Esta película no es una casualidad, es consecuencia de la realidad cotidiana del hombre. Sentarse a reflexionar sobre el bien o el mal, esa regla de oro, es considerado una pérdida de tiempo. Y esto hace pensar cuál es el concepto de justicia para estos hombres, si es dar a cada uno lo suyo según corresponda con lo que cada uno ha brindado a la sociedad, desdichados cuando les toque a ellos ser juzgados, porque han sido injustos. Han sido injustos al no dar al joven el voto que realmente ha surgido del proceso judicial sino que han partido de sus juicios previos para dar veredicto. En el caso de la película entre los 12 había un hombre que fue responsable con su libertad porque busco la verdad y en su búsqueda abrió los ojos a otros 11 y los condujo hacia ella, no porque el sepa cuál es la verdad (si el hijo mato efectivamente al padre) sino porque la misma verdad lo atrajo a través de la reflexión. Pero no en todos los ámbitos donde se toman decisiones, desde las más simples (el material del piso de un plan de viviendas) hasta las más complejas (programas de salud, políticas educativas), hay hombres capacitados moralmente para guiar al resto a la verdad y por ende al bienestar general de la sociedad. Y ese es uno de los grandes problemas de las sociedades actuales. Los líderes han sido absorbidos tanto por el socialismo o el liberalismo negando su esencia de seres racionalmente morales. AUSPICIAN “La Linterna Mágica”: Sociedad Sirio Libanesa Visite nuestro sitio web: www.lalinternamagica.com.ar