Mujeres sin Padre: ¿Que le sucede a la mujer adulta que ha sido criado sin su padre? por Gabriella Kortsch, Ph.D. Niñas pequeñas que viven sin su padre no lo hacen solamente porque él se ha muerto, o porque ha abandonado a la familia, o por divorcio, sino también debido a un padre que puede estar físicamente presente, pero que está emotivamente ausente, o enfermo durante una temporada larga de alguna manera (depresión clínica, enfermedad terminal, etc.), o porque el padre es alcóholico, o un trabajalcólico o porque de alguna manera el padre es una decepción para su hija, como puede ser el caso con un padre débil de carácter, poco efectivo, etc. Tales tipos diferentes de ausencia en la vida de la niña pueden tener consecuencias mayores de diferentes tipos, dado que una trayectoria de desarrollo sana a nivel emotivo y socio-psicológico durante los primeros años de vida suele requerir algún tipo de patrón positivo paterno (aunque sea un hombre de confianza que no es el padre). Viéndose Reflejado Óptimamente la niña necesita verse reflejada en el amor – hacia ella - que percibe en los ojos de su padre. Así comienza a desarrollar auto-confianza y auto-estima. Así desarrolla una familiaridad sana con la emoción que se siente al percibir una expresión positiva de amor. Es así también como desarrolla una apreciación por su propio aspecto, su cuerpo, su manera de ser. Es así como desarrolla lo que los Jungianos llamarían su animus, su ser contra-sexual, su ser masculino, que la ayudará a ser proactiva, productiva y creativa en el mundo externo durante su proceso de entrar en la vida adulta. Sin embargo, si la niña no tiene tal relación con su padre, si lo que percibe es rechazo, o frialdad emotiva, o abandono de algún tipo (aunque sea psicológico o emotivo), o si sencillamente él no se encuentra disponible, la manera en que se auto-percibe se manchará, su auto-confianza se desformará, o incluso llegará a ser no-existente. Su visión interna de lo que es una relación tierna de pareja se distorsionará o será disfuncional, y puede que le parezca, sin importar su belleza, su sociabilidad, amabilidad, su inteligencia, etc., que ella carece de atractivo. Creer en uno mismo Sin duda, la auto-confianza y la auto-estima se pueden forjar a través de los empeños propios a lo largo de la vida, incluso habiendo tenido una falta total de la presencia de un padre, pero el sendero hacia el éxito en tales empeños, y las razones por las que siquiera se intentan, suelen ser bastante diferentes para la mujer adulta que fue criada con una relación positiva con su padre, comparada con aquella que no tuvo esa suerte. Aquella puede sobresalir porque cree en si misma, mientras que ésta necesita sobresalir para alcanzar a ver un vislumbre de aprobación y reconocimiento en los ojos de aquellos que le dan mensajes de aprobación, honor o prestigio. El valor de tal creencia en uno mismo (en vez de solo poderlo conseguir a través de la aprobación externa), fácilmente adquirido por la mujer con una relación positiva con su padre, es inapreciable en la vida adulta, y la falta de tal creencia en muchas de las incontables mujeres que se criaron sin tal imagen positiva paterna, puede provocar que la trayectoria de la vida esté cargada de dificultades. El Campo Polifacética de las Relaciones de Pareja Posiblemente el campo de las relaciones de pareja es donde se viven los procesos más dolorosos de aprender la manera de llevar la falta temprana de un padre. Si una niña no ha sido asegurada de su valor como mujer por aquella relación temprana con el padre, encuentra dificultades en su relación con los hombres, precisamente porque a menudo puede buscar de modo involuntario el reconocimiento en los ojos del amado … y eso la puede llevar por un camino precoz de promiscuidad … que a su vez la hace sentir que es “mala”, y sin embargo, allí sigue, inexorablemente visitando lecho tras lecho, encerrándose con abrazo encarnizado con hombre tras hombre, en la infructuosa esperanza de que éste o aquel o el próximo por fin le de aquello que nunca tuvo como niña – la auto-confirmación.. Casándose con “Papa” Otras mujeres pueden buscar otra avenida: enamorándose de un hombre mayor y por tanto, casándose con “papa”. En ese momento pueden acaecer distintos escenarios. Si el hombre es psicológicamente consciente y maduro (algo que a menudo, pero no siempre es deficiente en hombres mayores que buscan mujeres mas jóvenes), puede tener un idea vaga de lo que sucede. Por lo tanto, una vez que ella empiece – dentro de los parámetros seguros de la relación o del matrimonio – el proceso de crecimiento, que inevitablemente la llevarán a separarse de su marido de alguna manera emotiva y psicológica necesaria para que ella llegue a ser ella misma, el no palidecerá de miedo por ese proceso, y le permitirá el espacio necesario, y la libertad para hacerlo. En tal caso, con toda probabilidad, el matrimonio prosperará y continuará a crecer. Sin embargo, si el hombre no es consciente en el sentido descrito, y ve su búsqueda de crecimiento como una amenaza a la superioridad que siente al haberse casado con una mujer joven y por tanto aun no desarrollada, muy posiblemente intentará reprimir y censurarla, o a manipularla psicológicamente haciéndola creer que no vale nada, que es tontita, o – y parece que eso es un favorito perenne – de que necesita ayuda profesional para que se calme y vuelva a portarse como antes. Evitar Involucrar las Emociones Otro possible scenario (y hay muchos mas que por rezones de espacio no se comentaran en este articulo), es el de evitar las relaciones de pareja del todo, o de evitar involucrar la emociones (ver también mi articulo: Te Necesito … No Te Necesito: ¿Forma Parte de la Relacion de Pareja la Dependencia? para ver otro tipo de escenario expresado como desamparo emotivo (una necesidad no sana y dependiente del otro) – tanto en hombres como mujeres). Ejemplos de otro tipo abundan para dar vida a los personajes variados que evitan involucrar de modo auténtico sus emociones en una relación de pareja: la tia solterona, que dedica su vida a sus sobrinos, o que se hace profesora y dedica su vida a su profesion. La monja, que dedica su vida a Dios, o la prostituta, que, aunque involucra su cuerpo, pocas veces involucra sus emociones. Otro ejemplo es el de la mujer seductora que mantiene el control de las riendas en sus manos dado que siempre seduce, pero nunca realmente llega a involucrar sus emociones (la versión femenina del Don Juan, del Casanova). Una versión algo más difícil de reconocer del mismo escenario se ve en el caso de una mujer que regularmente tiene relaciones de pareja con hombres casados que nunca dejan a sus respectivas esposas por ella. A un nivel inconsciente eso le va muy bien, dado que le da la excusa perfecta de no tener nunca que llegar a comprometerse a nivel emotiva. Encontrando Auto-Confianza, Reconocimiento y Auto-Confirmación en uno Mismo El tema se centra, evidentemente, en el hecho de que la auto-confianza y el reconocimiento que tan ansiosamente se busca, se debe de encontrar dentro de uno mismo en vez de por allí, en el mundo exterior – al menos inicialmente – para que tengan un valor autentico y duradero. El mundo de las emociones que se evitan por miedo o porque uno nunca realmente aprendió lo que es el amor, se tiene que encontrar primero dentro de uno mismo (en otras palabras, es necesario amarse a uno mismo antes de amar a otro). La tarea de lograr eso requiere que la persona se haga muy consciente de si misma (observándose a si misma, observando al diálogo interior, los mensajes del cuerpo, y todas las emociones que ocurran, buenas o males, dado que todas ellas nos dan pistas sobre el ser auténtico), y emplear una honestidad absoluta sobre uno mismo durante ese proceso. Una advertencia al lector: este proceso no es para concluir rápidamente durante un fin de semana. Debe de seguirse a lo largo de la vida para que se convierta en costumbre, y así pavimentará el camino hacia donde se llegue a encontrar la verdadera auto-confianza interior y el amor hacia uno mismo, que a su vez llevará a la revocación de la necesidad de encontrar todo esto en el otro. Esto es otro más de los caminos que llevan al la libertad interior. Gabriella Kortsch es doctora en psicología, se dedica al coaching integral, a la hipnoterapia clínica, al coaching de parejas, y es escritora y conferenciante profesional. Emite un programa semanal de radio (en inglés) desde 2003 en la Costa del Sol en España, que también se puede oír en el Internet o como clips de audio en su portal. Ella trabaja con clientes para llevarlos hacia un mayor éxito personal, profesional y de pareja utilizando un enfoque integral basado en el desenvolvimiento del potencial humano. También ofrece talleres en el campo del desarrollo personal en España e Inglaterra. Suscríbete y motívate con su boletín vanguardista, ahora disponible en español e inglés. También puedes leer y colgar tus comentarios en su blog (en inglés).