LEGISLACIÓN AMBIENTAL Y DERECHOS HUMANOS. APA-003. El hombre en la naturaleza y en la sociedad. Tanto la naturaleza como la sociedad constituyen algo así como el medio ambiente inevitable del hombre, aunque se trata de dos ámbitos diferentes, lo cual quiere decir que el hombre tiene, por un lado, un medio natural y, por el otro, un medio social. Vivimos en medio de la naturaleza, nacemos, nos desarrollamos y morimos en medio de un cierto orden y disposición de las cosas y fenómenos que componen lo que llamamos universo y en cuyo origen no ha cabido al hombre ningún tipo de intervención. No sabemos a ciencia cierta si eso que llamamos "universo" fue producto de un acto deliberado de creación por parte de un ser superior o el resultado de una explosión casual que expelió grandes cantidades de energía que formaron luego las galaxias, los planetas y las condiciones para el surgimiento de la vida al menos en uno de esos planetas. Pero lo cierto es que el hombre estuvo ausente de tales acciones y nada tuvo que ver ni con el diseño ni con la formación de lo que en general llamamos "naturaleza": un todo autónomo, dotado de sus propias leyes, que el hombre se limita meramente a descubrir, a enunciar de un modo racional y, eventualmente, a aprovechar en su propio favor. Distinto es lo que pasa ahora con la sociedad, por sociedad se entiende una "agrupación de individuos que establecen vínculos y relaciones recíprocos e interacciones estables", hay sociedades de animales como de seres humanos. Por otra parte, es efectivo que hay quienes creen que la sociedad es una institución natural "El hombre aislado, decía Aristóteles, o es un bruto o es un Dios", o sea, algo menos o algo más que un hombre-, pero también hay quienes sostienen que la sociedad que forman los hombres a partir de cierto instante es el producto de un pacto que pone término a un estado previo, llamado precisamente de "naturaleza", que, según Rousseau, habría sido un estado de paz y felicidad, y que, según Hobbes, habría sido un estado de guerra de todos contra todos. Vida humana y normas de conducta Clases de normas. La distinción básica entre naturaleza y sociedad, y entre leyes de la naturaleza y normas de conducta, las primeras sujetas al principio de causalidad y las segundas al de imputación, nuestro interés está centrado no en la naturaleza, sino en la sociedad; no en las leyes de la naturaleza, sino en las normas de conducta; no en el principio de causalidad, sino en el de imputación; no, en fin, en las ciencias naturales, sino en las ciencias llamadas normativas, y, en particular, en ese saber normativo que se denomina "ciencia del derecho". El derecho, es un fenómeno que no pertenece a la naturaleza, sino a la sociedad, trata de algo que el hombre hace o produce con un cierto fin; que es algo, además, que contiene normas o que tiene que ver con normas; que, por lo mismo, la experiencia que todos tenemos del derecho es, ante todo, una experiencia normativa; y que, cuando se estudia derecho, lo que se estudia, de preferencia, es un conjunto de normas vigentes en un lugar y tiempo dados, por medio de las cuales los hombres regulan sus comportamientos, establecen derechos y obligaciones recíprocos, prevén posibles conflictos y dan a éstos, cuando se producen, un curso de solución que no pasa simplemente por la aplicación de la ley del más fuerte, y consienten, en fin, en que tales normas puedan ser auxiliadas, a efectos de su cumplimiento, por el uso de la fuerza socialmente organizada. Pero si nos quedamos en el mundo de las normas, tenemos que aclarar qué son ellas, tenemos que aclarar lo que queremos decir cuando hablamos de normas de conducta; tendremos que aclarar, asimismo, cuántas clases de normas de conducta existen y cuáles son las propiedades o características que identifican a la clase de normas que nos interesa -las normas jurídicas- y que, a la vez, permiten diferenciarlas de otras clases de normas de conducta, como es el caso, por ejemplo, de las normas de trato social y de las normas morales. Primero: la vida del hombre en sociedad se desenvuelve con sujeción a distintas clases de normas, a saber, por ejemplo, normas religiosas, normas morales, normas de trato social, normas jurídicas, reglas técnicas de carácter convencional. Segundo: las distintas clases de normas difieren bastante entre sí si nos fijamos en la autoridad que las dicta e impone, en los sujetos cuyas conductas pretenden regular, en sus contenidos, en el tipo de deberes que imponen, en los fines que persiguen, y en los castigos que contemplan para el caso de que no se las cumpla. Así, todos sabemos o intuimos de algún modo que la autoridad que dicta normas religiosas no es la misma que está autorizada para dictar normas jurídicas. Todos sabemos, asimismo, que los sujetos imperados por las normas de una determinada religión no son los mismos que están imperados por las normas de trato social. Sabemos, en fin, que los castigos a que quedamos expuestos cuando infringimos alguna de esa clase de normas -por ejemplo las de trato social o las religiosas- no son del mismo tipo que los castigos que debemos afrontar cuando infringimos normas de tipo jurídico. Norma, es una palabra que viene de su similar en latín, que significa a su turno escuadra y que, por extensión, significa regla o modelo. Tenemos que trabajar más, entonces, con estas preguntas: ¿Qué son las normas? ¿Qué queremos decir cuando hablamos de normas? Concepto y funciones del derecho La palabra derecho, no es un concepto objetivo ni universal. Tiene diversas connotaciones. Es un concepto cuya definición está condicionada por factores externos, como las condiciones económicas, sociales, culturales o políticas. Dentro del grupo social, el derecho buscará dar respuesta a una serie de necesidades. Es decir, las condiciones de cada sociedad definirán el derecho de esa sociedad. Dependiendo de la sociedad en la que nos movamos, el derecho regulará determinadas libertades, favoreciéndolas o restringiéndolas. Ejemplo: en una sociedad antidemocrática, el derecho está restringido y es represor de las libertades civiles. En cambio, en una sociedad democrática, el derecho da respuesta a las libertades civiles y las favorece. El derecho también es un concepto ambiguo. La palabra derecho la podemos usar para designar diferentes significados. Entendiendo el derecho como objetivo, tenemos que es todas aquellas normas jurídicas que rigen en un determinado grupo social. También podemos entender el derecho como subjetivo, y tenemos que es todas las cosas que los ciudadanos pueden hacer dentro de la sociedad. El derecho también es sinónimo de justicia, y se refiere a la carga valorativa, emotiva para decidir sobre la justicia de determinadas actuaciones (no hay derecho = no es justo). El derecho también es un concepto dinámico. El concepto de las normas jurídicas está en constante evolución, puede variar su interpretación sin necesidad de que ésta cambie. ¿Por qué surge el derecho? El Derecho surge ligado a la existencia de un grupo social, que busca formas de organizarse. Una de estas reglas de organización es el Derecho (existen otras normas sociales, morales...). Lo que caracteriza al Derecho es que cuando se vulnera, esta vulneración conlleva una reacción por parte del poder dirigida a imponer una sanción al sujeto que ha cometido la infracción. Puede ocurrir que algunas normas jurídicas coincidan con las normas morales / religiosas del grupo social. Un ejemplo de estos casos son las coincidencias de algunas normas del derecho con los mandamientos: no robarás : hurto; no matarás :asesinato... Aunque no es la única forma de organizar la sociedad, actualmente es la forma básica. Todo está regulado por normas jurídicas. El derecho abarca cada vez más todos los ámbitos del grupo social. Corrientes que han dado definiciones de derecho Existen 3 teorías que han dado diferentes definiciones de derecho, coincidiendo con sus corrientes de pensamiento: Teoría iusnaturalista, defiende la existencia de unos valores universalmente válidos que son anteriores a la organización social y que deben ser respetados por los poderes públicos y por los ciudadanos. Se trata de derechos preexistentes a la sociedad. Dentro de esta corriente encontramos a su vez otras dos vertientes: Iusnaturalismo teológico, defiende que la existencia de estos valores es origen divino y que constituyen derecho y deben ser respetados. Estos derechos sólo podían conocerlos el monarca y no tenía ningún límite para decidir qué era derecho y qué no lo era (el monarca tenía un hilo directo con Dios). La iglesia católica aún defiende esta postura. Iusnaturalismo racionalista, defiende que estos derechos naturales pertenecen a la persona por el mero hecho de serlo, y pueden ser conocidos por el hombre a través de la razón. Esta vertiente aparece durante el s. XVIII ligada a cambios políticos y religiosos y al grupo social emergente (la burguesía). Defiende las libertades de la persona y la igualdad entre grupos sociales. El gran ejemplo de esto es la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1789. Todos poseemos estos derechos por ser humanos. Son inalienables e invulnerables y el poder público debe garantizarlos. Teoría positivista Esta teoría considera que es derecho todas las normas jurídicas aprobadas por el órgano competente de acuerdo con el procedimiento establecido, con independencia de cuál sea su contenido. Pone el acento en el elemento formal, y no en elementos valorativos de justicia. Teoría del realismo jurídico Aparece en los años 20, y defiende que el derecho es lo que los jueces dicen que es. Las normas jurídicas se caracterizan por su indeterminación, no son claras. Esto provoca que sólo cuando el juez la aplica a un caso concreto la norma adquiere un significado u otro. A esta teoría se la tacha de radical, puesto que dice que si el derecho solo adquiere sentido cuando lo aplican los jueces, éstos tienen total potestad para decidir qué es justo y qué no lo es. Relación entre Estado y derecho El Estado es una forma de organización política de la sociedad que surge en los siglos XVI XVII en la Europa continental, a raíz de una serie de revoluciones contra la unidad de la iglesia católica. Tiene lugar el nacimiento de nuevas clases sociales que pretenden introducirse en el poder político, se dan cambios en la manera de concebir la sociedad, aparece el individualismo, el racionalismo... Aparecen toda una serie de teorías que propician pactos entre las clases sociales para crear una nueva organización de la sociedad: el Estado Moderno. El Estado de derecho implica que el Estado, como forma de organización política, se legitima a través del derecho. Sirve como mecanismo para limitar el poder. Además, el poder nunca es ilimitado, está limitado por el derecho (anteriormente, el monarca tenía poder ilimitado y además no quedaba sujeto a esas normas que él mismo dictaba). Esta idea aparece para poder garantizar los derechos, las libertades de los ciudadanos. Y es que toda esta concepción del Estado de derecho viene ligada a la aparición de los derechos de las personas. Sólo si el poder está sometido al derecho, podemos garantizar las libertades y derechos de las personas, y podemos garantizar que no se vulneran. Para favorecer esta limitación del poder aparece la división de poderes. El poder no puede estar concentrado en un solo órgano, sino dividirse en legislativo, ejecutivo y judicial. Esta concepción aparece a principios del s. XIX, y la propone Montesquieu. Cada uno de los poderes tiene unas funciones determinadas y no puede desempeñar las de los otros. Si lo hacen, su acción es ilegítima y puede ser vulnerada. Por tanto, los poderes se controlan entre sí. Este modelo evoluciona hasta llegar al Estado Constitucional de Derecho, en el que la legitimación jurídica del poder deriva de un texto constitucional que es la norma jurídica suprema del ordenamiento y que cuenta, además, con legitimidad democrática. La idea es que tiene que existir una Constitución de la que deriva la organización del Estado. La Constitución tiene que ser una norma legitimada por los ciudadanos, puesto que es en éstos en los que reside la soberanía. Hay que tener en cuenta que no todos los estados con constitución son estados constitucionales de derecho, sino que para tener tal consideración, esta norma jurídica debe ser aprobada por el pueblo (una dictadura que presente una constitución no es un estado constitucional de derecho, porque los ciudadanos no intervienen en el proceso). La Constitución como norma jurídica se trata de una norma vinculante. Todo su contenido es de obligado cumplimiento y todos los poderes públicos tienen que cumplirla. La Constitución es la norma jurídica suprema y el resto de normas jurídicas del ordenamiento tienen que respetar lo establecido en la Constitución. El ordenamiento se organiza en forma piramidal, en cuya parte superior está la Constitución. La Constitución da unidad al ordenamiento y reconduce el sistema hacia esa norma. Para hablar de Estado Constitucional de Derecho, la Constitución debe tener un determinado contenido: tiene que incluir la organización y división de poderes y el reconocimiento y garantía de los derechos fundamentales. Funciones del derecho Función de seguridad jurídica: a través del derecho, los ciudadanos sabemos qué podemos y qué no podemos hacer. Las normas delimitan la actuación del ciudadano, y éste sabe lo que está prohibido y sus consecuencias. Función de justicia: sirve para realizar una determinada idea de justicia y de ellos salen las normas jurídicas. Función de libertad: el derecho debe asegurar la libertad de actuación de los ciudadanos (por ejemplo, con los derechos fundamentales, el derecho a la vida, a la libertad de expresión...). El derecho vela para que estas libertades no puedan ser coartadas por los poderes públicos. Conceptos del derecho Ordenamiento jurídico: conjunto de normas que forman parte de un determinado Estado. Se caracteriza por su unidad, coherencia, completitud y por ser dinámico. Es posible la existencia de sub ordenamientos dentro de un mismo ordenamiento. Norma jurídica: proposición prescriptiva derivada de la Constitución y aprobada por los poderes públicos que prevé, directa o indirectamente, una consecuencia jurídica para los supuestos de su infracción. Normas primarias: Normas que prohíben, obligan o permiten realizar determinadas acciones. Normas secundarias: Normas que prevén sanciones para los supuestos en que no se cumplan las normas primarias. Normas de organización: Normas que prevén la forma de constitución, funcionamiento, manifestación y organización de los poderes públicos (ejemplo: Reglamento del Congreso de los Diputados). Normas de comportamiento: Tratan de orientar el comportamiento de los ciudadanos. Normas indefinidas: No tienen tiempo determinado de vigencia (la mayoría). Normas temporales: Su vigencia tiene una duración determinada (la misma norma establece su plazo de vigencia). Normas rígidas: Tienen un mandato taxativo, no susceptible de interpretación. Ejemplo: Derecho de voto a partir de los 18 años. Normas flexibles: Dejan un margen amplio de interpretación. Ejemplo: Incapacidad por deficiencias psíquicas o físicas. Principio de seguridad jurídica: Mecanismos para prever cuáles son las normas aplicables a determinados supuestos. Principio de jerarquía, de publicidad, de legalidad; de irretroactividad de las disposiciones sancionadoras no favorables o restrictivas de los derechos individuales. Principio de jerarquía normativa: Entre dos normas contradictorias de rango diferente prima la superior y la inferior es inválida. Principio cronológico: Entre dos normas contradictorias, una de fecha anterior y la otra de fecha posterior, prima la segunda, y la primera es derogada. Actúa entre normas del mismo rango o si la norma posterior es de rango superior. Principio de competencia: Entre dos normas contradictorias prevalece la norma dictada por el órgano competente para regular la materia y la otra norma es inválida. No obstante, en los supuestos de conflictos entre normas estatales y normas autonómicas es posible que la norma estatal sea inaplicable en el ámbito de una determinada Comunidad Autónoma por invadir competencias autonómicas, pero sea aplicable en el resto del territorio. Competencias exclusivas: Potestad de legislación y ejecución en un mismo órgano o Estado. Competencias compartidas: La potestad de legislación cae sobre el Estado y la potestad de ejecución cae sobre los organismos La potestad de legislación básica cae sobre el Estado y la potestad del desarrollo de la legislación y de la ejecución cae sobre los organismos. Principios generales del derecho Rango: posición que ocupan las normas dentro del ordenamiento. Validez: Una norma es válida si es dictada por el órgano competente, siguiendo el procedimiento establecido, que no regula materias reservadas a otro tipo de norma y que no contradice una norma de rango superior. Derogación: Supuesto en que una norma deja de formar parte del ordenamiento jurídico. Derogación expresa o tácita. Aplicabilidad: Posibilidad de que una determinada norma produzca efectos jurídicos en un ámbito concreto. La aplicación puede darse porque los ciudadanos respetan lo establecido en la norma o porque los órganos competentes aplican la misma en supuestos de vulneración. Normas de aplicabilidad territorial: se aplican a todas las personas que realizan el hecho regulado en el territorio. Ejemplos: Comisión de delitos en territorio guatemalteco por extranjeros, Derecho penal. Normas de aplicabilidad personal: se aplican a las personas con independencia del lugar donde se encuentren. Va ligado a la nacionalidad. Ejemplos: la sucesión se rige por la ley nacional de la persona muerta, Derecho de voto. Persona: Persona física y Persona jurídica. “A efectos civiles, sólo se reputará nacido el feto que tuviere figura humana y viviere veinticuatro horas enteramente desprendido del seno materno”. Las personas tienen reconocida personalidad jurídica, lo que comporta su capacidad. Capacidad jurídica: capacidad para ser titular de derechos y obligaciones. Capacidad de obrar: capacidad para ejercer los derechos y asumir obligaciones. Puede ser limitada, por ejemplo, en los menores de edad e incapacitados. Eficacia: en sentido positivo implica que la conducta de los ciudadanos se adecua a aquello que prevé la norma jurídica. En sentido negativo implica que si la norma no se cumple se impone la sanción que su infracción comporta. Eficiencia: La norma consigue los resultados para los que fue creada. Vigencia: pertinencia de una norma al ordenamiento jurídico con posibilidad de crear efectos jurídicos. Retroactividad: Posibilidad de aplicar una norma a supuestos que se produjeron anteriormente a la entrada en vigor de dicha norma (si es favorable). Ultra actividad: Posibilidad de aplicar una norma para decidir un supuesto concreto cuando la norma ya no está vigente (si es favorable) Realizar un ensayo sobre La relación entre Estado y Derecho; normas jurídicas y que es un estado de derecho. Analizar el documento el Derecho a la desobediencia Civil. De Alfonso Portillo.