Indice 1.-Desarrollo general del contexto natural y cultural de la civilización egipcia. - Situación geografía/clima/paisaje. - Divisiones administrativas. - Organización del estado egipcio predinastico y dinástico, periodos, el imperio. - Características principales de la sociedad. - Características principales de la religión. - Características principales de la economía. - ciudad. 2.- Desarrollo general del arte y la arquitectura egipcia. - Características principales del arte egipcio. - Características principales de los temas fundamentales de la arquitectura egipcia, através de los diferentes periodos históricos. 3.- Desarrollo del tema asignado a cada grupo: TEMPLO FUNERARIO DE LA REINA HATSHEPSUT. - Ubicación geográfica. - Paisaje y asentamiento. - Definición de las características significativas del tema que influyen sobre la resolución arquitectónica del edificio. - Análisis del edificio: - Componentes formales - Componentes funcionales - Componentes espaciales - Componentes constructivos 4.- Comparación analítica con una obra del siglo XX. 5.- Conclusión. 6.-Bibliografia utilizada. Situación geográfica Egipto esta situado en el ángulo nordeste del continente africano. (figura 1) La región más importante del país es la del Valle del Nilo, que lo atraviesa en toda su longitud de sur a norte. Corre entre 2 cadenas de montañas, la Líbica y la Arábiga en la región del alto Egipto. (figura 1.a) Al llegar cerca de la ciudad de Menfis se divide en 7 brazos principales, formando su famoso delta (100 km. De largo y 500 km. De ancho) en el bajo Egipto que es una región muy fértil, de clima cálido, húmedo y de innumerables canales. Finalmente desemboca en el mar Mediterráneo. El Nilo ha posibilitado la vida en medio del más riguroso desierto, gracias a sus inundaciones. Cada año con las grandes lluvias del verano y el deshielo, el Nilo comienza a elevar su nivel atrasando consigo un manto de humus y de sustancias fértiles. Al aumentar la creciente, se desborda y cubre todo el valle, durante Julio y Agosto. Lugo en los 3 meses siguientes, las aguas se retiran dejando una capa de limo negro. Inmediatamente se siembra y 4 meses después se cosecha. El Nilo, permitió entonces, la existencia de una desarrollada economía, capaz de constituir un fuerte estado y de originar una cultura, basada en la religión, de notables amplitud y complejidad. División administrativa La administración se caracterizo por la centralización y la complejidad de los cargos. Tras el faraón figuraba el visir que se encargaba del poder ejecutivo, dirigiendo diferentes oficinas, graneros y empresas reales. A la cabeza de la burocracia se encontraba el visir, en ocasiones uno en el norte y otro en el sur. El visir del norte vivía en Heliópolis y el del sur en Tebas. Cada una de las zonas se dividía en provincias llamadas nomos. Cada una constaba de una capital y un territorio con otros núcleos de población. Estos personajes irán adquiriendo cada vez más parcelas de poder, especialmente en los momentos de decadencia, como en los períodos intermedios. A su vez las provincias estaban divididas en distritos a cuyo frente se situaba un funcionario que dependía del visir. Se puede decir que el visir gobernaba Egipto ayudado de su corte de funcionarios, quienes formaban una clase privilegiada a la que se colmaba de constantes premios y favores. Otro aspecto importante del gobierno era la administración de la justicia, mediante procesos contra quienes evadían las obligaciones exigidas por el gobierno. La administración provincial también evoluciona. El gobernado del nomo era un cargo de nombramiento real que gozaba de gran prestigio. Con el tiempo se fue disolviendo y los monarcas adquirieron mas autonomía, llegando a constituir dinastías locales. Organización del estado Periodo predinástico: Los primeros habitantes eran nómadas y vivían agrupados en clanes. Una vez radicados definitivamente a orillas del Nilo, y ante la necesidad de organizare para el mejor aprovechamiento del río, varios clanes se reunieron constituyendo los Nomos. Los vencedores fueron creando pequeños estados locales, y aparecieron algunas ciudades, como núcleos de organización económica y centros de control político. Los gobernantes del ato Egipto, (Menes) impusieron su dominio sobre el bajo Egipto, de esta manera se unifican los 2 reinos, llegando así bajo el poder de Menes, quien funda la primera dinastía. Periodo dinástico: (3100 a.C. - 2868 a. C.) Durante los 2 primeros siglos la vida del nuevo estado, gobernaron las dinastías I y II. Los reyes de estas dinastías, dedicaron sus esfuerzos a consolidar la unidad lograda por Menes y a fortalecer los cimientos del nuevo estado, constituyendo una monarquía centralizada, que se considera descendiente de los dioses por lo que el faraón, es considerado un rey sobre la tierra. Estas 2 dinastías procedían del nomos Tinis, una de las divisiones administrativas del alto Egipto, esta fue la capital del país. A este periodo se lo denomina, periodo Tinita. En este periodo se adoptaron el calendario y la escritura jeroglífica. Imperio antiguo: (3000 a. C. y 2200 a. C.) Con la III dinastía se traslada la capital a Menfis y se inicia el periodo Menfita que da comienzo a un periodo de gran esplendor. A esta época se la denomina "edad de las pirámides". Culturalmente hay una ruptura con el periodo anterior, resultado del rápido desarrollo de los conocimientos del arte y la tecnología. En esta dinastía el faraón Zoser, manda a construir la pirámide escalonada de Saqqara, para asegurarse su inmortalidad.(figura 6) Con la IV dinastía se construyen las pirámides de Keops, Kefren y Micerinos. Es esta la época de mayor centralización del poder real. (figura 7) Durante la V dinastía, el principal acontecimiento es el ascenso del culto al dios Ra (sol). Esto significo un debilitamiento del concepto tradicional de monarquía, puesto que al reconocer al faraón su dependencia del dios, disminuía la frontera que le separaba de los demás hombres, entre quienes se fomento una optimista visión de un mundo tuteado por la acción benefactora del dios sol. Con la VI dinastía la nobleza, y los altos funcionarios del estado acumulan mayor poder, que el faraón, y esto llevo a tener signos de decadencia y los nomos tendían a disgregarse. Esta decadencia puede observarse en las tumbas privadas del área Menfita, cuya decoración es mucho mas modesta que las realizadas hasta entonces. Los numerosos reyes de finales de la dinastía VI, VII, VIII fueron aceptados en todo el país, pero de hecho no hubo ningún control central fuerte. El país se dividía en 42 nomos o distritos, y la administración, muy jerarquizada y centralizada, alcanzó notable eficacia. Los funcionarios provinciales convirtieron sus cargos en hereditarios, tratando a sus nomos como si fueran propiedad privada, cuyos intereses defendieron a menudo hasta por la fuerza contra sus vecinos. El hambre se generalizo, por inundaciones bajas. Primer periodo intermedio: (2200 a. C.- 2040 a.C.) Durante la IX dinastía, el país disfruto de mas tranquilidad y los faraones del medio Egipto lograron extender su dominio sobre la mayor parte del territorio de Egipto. En la X dinastía, los príncipes entraron en guerra contra los fuertes gobernadores de Tebas, en el sur de Egipto, que consiguieron derrocar estas dinastías y fundar la XI. Imperio medio: (2040 hasta fines del siglo XVIII a.C.) Se caracterizó por el predominio de la clase militar, que llevó sus conquistas hasta el sur de Palestina, con objeto de prevenir invasiones. Mentuhotep inicia su reinado, reunificando al pais y limitando el poder de los monarcas y altos funcionarios. Hubo reordenamientos administrativos. La capital se traslada a Menfis. Segundo periodo intermedio: Una serie de migraciones perturbó todo el Próximo oriente, y su reflujo llegó hasta Egipto. Las dinastías de este período fueron impuestas por los invasores siriopalestinos que se establecieron en el delta. El último de estos pueblos, que se conoce como los hicsos, conquistó el Bajo Egipto e instauró allí sus dinastías, la XV y la XVI, pero los soberanos de Tebas pusieron fin a este período de desestabilización. Ahmosis conquistó la capital, Avaris, y expulsó a los hicsos de Egipto, volviendo a unificar el país. Imperio nuevo: Bajo en nuevo imperio, Egipto se revelo ante el mundo como una nación conquistadora, en manos de Tutmosis I y Tutmosis II. La política de expansión en Asia, tienen por finalidad expulsar de la región a, los restos de hicsos, pero que luego se transforman en verdaderas guerras de conquistas. Del contacto constante, con los pueblos orientales nacieron corrientes de influencia artística e intelectual que pusieron en comunicación mas intima las distintas civilizaciones de las cuencas mediterráneas. Tebas fue capital del estado, donde converjan los tributos de los pueblos de Asia y el alto Nilo. Esta riqueza, junto con la mano de obra proporcionada por los prisioneros de guerra, permitió a los reyes del nuevo imperio, emprender la construcción de templos gigantescos. Los territorios conquistados, estaban obligados a pagar un tributo anual, consistente en riquezas naturales y productos manufacturados. Durante el reinado de Tutmosis III, fue el momento de máxima expansión, sus dominios se extendieron desde la 4 catarata en Nubia, hasta el Eufrates, fijando así las fronteras de su imperio. A su muerte y durante los reinados de sus sucesores Amenofis II y Tutmosis IV, el prestigio y la riqueza de Egipto se mantendrán inalterados. Con Amenofis III, Egipto alcanza su mayor poder. Es una época de notable desarrollo artístico y se realiza una importante obra constructiva (ampliaciones en Luxor y Karnak). El clero de Amón adquiere gran poder y riquezas. Se abandonan las empresas militares en Asia y la posición egipcia se debilita. Toma la corona Amenofis IV (Akenaton) y rompe con el culto a Amón, y proclama una nueva religión que considera a Atón. Traslada la capital a una nueva ciudad: Aketaton. Las provincias asiáticas quedan liberadas a su suerte: los hititas ocupan posesiones egipcias y muchas ciudades se rebelan. Con la muerte de Akhenaton la nueva religión es abandonada y se restaura el culto a Amón. A los breves reinados de Tutankamon y Ai sucede el de un general, Horemheb, quien restaura el orden interno y reinicia las campañas militares en Asia. Rameses I que sucede a Horemheb, funda la dinastía XIX. Después de 2 años de reinado le sucede Seti I. Egipto comienza un periodo de recuperación. Llega al trono Rameses II. Egipto vive entonces su ultimo y más brillante esplendor. Realiza una enérgica política militar en Asia. Se firma un tratado de paz entre Ramses II y el rey Hitita. Luego de esto, los años siguientes, fueron de paz para Egipto y se realizan importantes construcciones (ampliación de templos). Con la muerte de Ramses II sus sucesores habrán de hacer frente a un nuevo peligro: los "pueblos del norte y del mar", que amenazan al cercano oriente. Asciende Rameses III, quien logra vencer estos pueblos y los expulsa de Egipto, pese a este triunfo el imperio se debilita rápidamente. Se inicia una larga época de luchas y guerras internas. El imperio de Asia se pierde definitivamente. Assarhdon, rey asirio, invade Egipto y toma Menfis, proclamendose rey del alto y bajo Egipto. Estallan rebeliones que obligan al rey asirio a realizar nuevas campañas. Su sucesor, Assurbanipal, realiza una nueva campaña a Egipto llegando hasta Tebas, que es saqueada. Con todo, Egipto aún fue capaz de repeler a los Pueblos del mar, aunque dio lugar a la llegada de los dorios al Egeo y a Asia Menor (1200 a.J.C.) y la consiguiente destrucción del imperio hitita. Tercer período intermedio: (1085-715 a.C.) (Comprende las dinastías XXI-XXIV) Este período marca el fin de la unidad egipcia, y durante él reinó varias dinastías extranjeras que provocaron una multiplicación de los principados independientes hacia mediados del siglo VIII. Egipto perdió para siempre su soberanía. Imperio tardío: (750-33 a.C. ) En adelante, sus reyes fueron extranjeros impuestos por los invasores, hasta que, en el siglo I a. C., se convirtió en provincia romana. Sociedad La sociedad egipcia se hallaba dividida en 3 grupos: La oligarquía, que monopoliza la cultura, los cargos de gobierno y los privilegios otorgados por el faraón; los oficios, que estaban subordinados a dicha elite (escribas, sacerdotes menores, soldados, artesanos, etc.); y una inmensa mayoría de campesinos analfabetos. La vida diaria de estos últimos se refleja vívidamente en los relieves y pinturas de las paredes de las grandes tumbas (mastabas) donde se enterró la aristocracia egipcia: parece una sociedad dinámica, vitalicia, alegre, en la que las diversas ocupaciones (agricultores, pastores, carpinteros, etc.) cumplen de buen grado su cometido, en un mundo, que el gobierno faraónico supo integrar y armonizar, haciendo de Egipto una tierra civilizada. Esa población trabajaba las propiedades de la corona, y los templos, o los dominios particulares, en un estado de semiservidumbre. Egipto tuvo una economía agrícola por encima de todo, cuyos excedentes sirvieron para sostener un comercio exterior. Las importaciones de productos de lujo esencialmente, beneficiaron a las clases altas, atendiendo sus necesidades. Las actividades artesanales, el arte, cumplieron en gran parte similar fin. El gobierno central, motor de las actividades en el país, patrocina también un molde de cultura y arte, que constituye él más elocuente testimonio de la civilización faraónica. El imperio antiguo fue una etapa de gran creatividad e inventiva, y tanto la corte, como los funcionarios y los templos, generaron una demanda de productos artesanales y servicios, atendida por una gran cantidad de escribas o artesanos, en los que se observa un alto grado de especialización y calidad. En el arte se impusieron entonces cánones estilísticos que perduran largos siglos. La cerámica, la joyería, los trabajos de carpintería, los objetos hechos en piedra, hueso y marfil muestran la destreza de aquellos artesanos. Durante el imperio nuevo, Egipto siguió siendo un país con una población prioritariamente dedicada al trabajo agrícola, por encima de la cual se situaba el sector artesanal, movilizando en gran escala para los numerosos programas constructivos de aquel periodo, y 2 estamentos cuya importancia se ha destacado: el personal administrativo y él ejercito. Tanto los campesinos como quienes ejercían los oficios de menos estimación social, (albañiles, mineros, etc.) trabajaban para las propiedades reales, nobiliarias o de los templos, o para los talleres y oficinas estatales. Dependían del faraón, que los mantenía, teniendo muy limitados derechos. Mejor consideración gozaban los artesanos especializados (escultores, pintores,, etc.) y ciertos artistas que llegaron a tener sus propias escuelas, sobre todo quienes trabajaron para embellecer la nueva capital de Akhenatón. Algunos actuaban por cuenta propia, otros al servicio de la corona o de los nobles. También los escribas gozaban de gran aprecio y sobre ellos recaía en última instancia el funcionamiento de la compleja administración. Esta constatada, la presencia de los esclavos, sobre todo sirios o nubios, prisioneros del faraón, otros privados. No se les daba mal trato, e incluso disfrutaban de ciertos derechos. Gobierno El régimen de gobierno egipcio era: monárquico: el rey se llamaba "faraón" (gran señor) y su poder era hereditario. Teocrático: era considerado dios, hijo y encarnación de Ra, el dios del sol. Tanto en vida como en muerte, se le rendían honores divinos. Una muy numerosa e influyente casta sacerdotal rodeaban al faraón y lo asesoraba en sus funciones religiosas y de gobierno. Absoluto: el faraón detentaba la suma autoridad. Todos los funcionarios del país no eran sino sus representantes y ciegos ejecutores de sus ordenes. La vida del faraón transcurría en un suntuoso palacio rodeado de una numerosa corte y llevando una existencia totalmente regida por un severo ceremonial. Justicia Era ejercida en nombre del faraón por un Supremo Tribunal de 30 sacerdotes jefes de las comunidades religiosas de Tebas, Menfis y de acuerdo a códigos secretos, solo conocidos de los jueces. Las sentencias, en general justas y benignas, consistían en multas, prisión, azotes, amputaciones y hasta pena de muerte. Los principales delitos perseguidos eran el homicidio. La calumnia, la falsificación y el adulterio. Las leyes contra los ladrones eran muy benignas, y por temor a la venganza de los bandidos y violadores de tumbas, solo se pronunciaba contra estos últimos, sentencia de castigos morales. Religión En sus comienzos el pueblo egipcio fue monoteísta (adoración de un único dios). Al mismo tiempo, cada nomo, reverenciaba un animal o una planta, que venia a ser el emblema de la tribu, y por el cual se creían ligados a la divinidad. Pero con el transcurso del tiempo fue adorando estos emblemas, de modo que a principios del periodo Tinita, en Egipto reinaba el politeísmo, (adoración de distintos dioses), estos se representaban, con torsos humanos y cabezas animales o humanas, y símbolos. A veces al animal o el ave expresaban las características del dios. A través de sus dioses interpretaban el mundo que los rodeaba, y todas sus actividades estaban relacionadas con la religión. La economía estuvo organizada alrededor de los templos, que no significa necesariamente que se hiciera mas religiosa, ya que con toda probabilidad los templos no diferían de los otras terratenientes. En Egipto, estaba la religión oficial del estado y la popular. Religión oficial: consistía en el culto y en las fiestas que se celebraban en los templos principales. El culto se fundaba en la reciprocidad. El faraón se preocupaba de los dioses y cuidaba sus imágenes. Los dioses, por su parte, establecían su residencia en sus imágenes y mostraban su favor al faraón, y a la humanidad. Religión popular: fuera de los festivales religiosos, el culto oficial era algo irrelevante para las personas particulares. El pueblo llano acuda a los santuarios locales, y en ellos oraba, presentaba sus ofrendas o depositaba sus consultas oculares. También iban a centros de peregrinación. La religon egipcia fue decayendo durante el Imperio romano, donde perdido definitivamente su independencia, y esto fue el principio del fin de la religión, que llegó con el cristianismo. El avance de la nueva religión entró también en Egipto y se gano el favor del pueblo. El cristianismo surge como una religión que aporta soluciones que no habían conseguido los dioses que durante tanto tiempo habían tenido su lugar en el Panteón egipcio. Economía Agricultura (teocrático de regadío) La vida en Egipto dependía de los cultivos de las tierras inundadas por el Nilo. Las cosechas principales eran el trigo, la cebada y el lino. Entre los animales que criaban por su carne había cerdos, ovejas, cabras, gansos y patos. Un sistema de diques, estanques y canales de riego se extendía por todas las tierras de cultivo. La importancia de las actividades rurales en la vida del país queda bien testimoniada por las numerosas escenas con faenas del campo que ornan las paredes de las tumbas o por el hecho, bastante sugerente, de que la escritura jeroglífica tomara muchos de sus signos del entorno agrícola. Se cultivaron el trigo y la cebada. Realizadas la siega y la trilla, los escribas anotaban las cantidades cosechadas. Cada año efectuaban un recuento de ganado. Era un modo de valorar la riqueza de una persona. El ganado era presentado ante el escriba, quien anotaba el número, para fijar los impuestos que tenía que pagar el propietario. Miles de campesinos no tenían nada que hacer durante las inundaciones, por lo que se empleaban en la construcción de templos y pirámides. El comercio Durante la mayor parte de su existencia, el antiguo Egipto fue el país más rico del mundo. Los egipcios cultivaban más alimentos de los que necesitaban, por lo que exportaban el excedente: lino, papiro y pescado seco, a cambio de artículos de lujo como incienso, plata y madera fina de cedro. Los caballos procedían de Asia, mientras que del sur, de Nubia y de Punt, les llegaba oro, marfil, ébano e incienso. Las plumas y los huevos de avestruz eran los regalos que los egipcios ofrecían a faraones de países del sur. Los mercaderes también suministraban a Egipto artículos exóticos, como incienso y animales salvajes, procedentes de tierras más lejanas del sur. Gran parte del comercio se realizaba por barco. Las embarcaciones navegaban por el Nilo y por el mar Mediterráneo, transportando mercancías de un lugar a otro. Las expediciones que pasaban por el mar Rojo para llegar a Punt regresaban cargadas de marfil e incienso. En varias épocas, Egipto controló países vecinos como Palestina, el Sinaí, Nubia y explotó sus riquezas. Origen de las ciudades Características principales del arte egipcio Escultura El escultor egipcio prefiere materiales resistentes como el granito, el basalto o el pórfido, son durables y susceptibles al pulimento. Rara vez usan materiales blandos. También fueron utilizados metales, especialmente el oro para recubrir sarcófagos o enriquecer pequeñas esculturas. La estatuaria se concibió sobre todo como decoración de templos y tumbas. La escultura se caracteriza por el uso permanente de la ley de frontalidad. La cabeza siempre en el eje del busto y los brazos rigurosamente pegados al cuerpo, dan a las obras la apariencia de elemento arquitectónico. Son cúbicas, de cuatro perfiles, inmóviles e inertes. Encontramos también esculturas policromadas. (figura 3) La regularidad de los rasgos, la calma del rostro va bien con esas miradas asombrosas, que traspasan y se cargan de eternidad. Son imágenes hieráticas, de gran respeto a la divinidad. El modelado de las figuras es poderosamente sintético, los pliegues son geométricos y hay abstracción en la concepción de las formas. Los temas son casi siempre religiosos o representaciones de los faraones. La escultura egipcia siempre persiguió un esquema constante: la inmovilidad, sus figuras nunca nos Figura 3 dan la idea de movimiento. Sólo en el corto período de Amenofis IV, alcanza cierto realismo expresivo que no tuvo continuidad con Tutankamon, que restauró el modo tradicional. A pesar de la inmovilidad de la propuesta egipcia, las imágenes están dotadas de gran belleza, como en el caso de La cabeza de Nefertiti. En la estatuaria egipcia se distinguen: Estatuas de pie o sentadas, arrodilladas o en cuclillas. Escriba sentado. (figura 3) Parejas familiares. Ra-Hotep y Nofret sentados Triadas Divinas o Reales. Triada de Ramsés II o Micerino Cabezas. Nefertiti. Akhenatón. Esfinges o estatuas colosales. Esfinge de Gizeh. Colosos de Abu-Simbel Las estatuas de parejas familiares, demuestran el orgullo egipcio por su familia y el deseo de perpetuar en el más allá su buena fortuna terrestre. Para la eternidad el hombre sería representado joven y, la esposa, cariñosa, maternal y los hijos pequeños y dependientes. Las estatuas colosales tenían un papel más arquitectónico y fueron erigidas para embellecer los templos o lo que es más importante, para la glorificación de los reyes cuyos nombres llevaban. Los colosos son simplemente grandes estatuas hechas precisamente del mismo modo que las pequeñas. Los bajorrelieves: ligados a la arquitectura como decoración de los muros, en las columnas, pilastras, sepulcros o templos o bien en estelas funerarias (piedras de sepultura), muestran geometrización de líneas y ritmos creados por la repetición de personajes. La cabeza y los pies aparecen de perfil mientras que el resto del cuerpo, de frente. Tomaron temas de la vida cotidiana y a pesar de las complicadas reglas religiosas, supieron infundirles vida y movimiento. El relieve puede ser alzado o hueco. Es alzado cuando se excava la superficie que rodea a las figuras de manera que éstas sobresalgan del fondo. Es hueco cuando los perfiles de las figuras se graban en la superficie. Pintura Está en función de la arquitectura y por lo tanto apoyada en sus muros. Los temas están unidos al sentido religioso pero copian escenas de la vida cotidiana: caza pesca, cosecha, laboreo, etc. El Faraón debía ver claramente su vida cuando volviera de su muerte, por lo tanto las pinturas debían ser de fácil lectura. La imagen representada debe reproducir el modelo en su totalidad y no bajo el aspecto parcial que nos da la visión. Todas las partes del cuerpo humano se representan bajo el ángulo desde el que aparecen más completas. A la cabeza de perfil con un ojo frontal se le añade un tronco visto de frente y dos piernas en actitud de andar. La composición se ordena sobre la base de lo que denominamos perspectiva jerárquica, que atribuye tamaños mayores a los personajes importantes y menores a los de baja jerarquía. El espacio es bidimensional, esto significa que no hay sugerencia de profundidad. La superficie donde se apoyan las figuras son planos neutros que no aluden a un fondo específico. Las figuras están de pie sobre líneas horizontales, que pueden representar el suelo. La línea es completamente cerrada y homogénea, es decir que tiene igual grosor en todo su recorrido y no sufre engrosamientos y adelgazamiento paulatinos. En muchos casos las figuras se suceden creando ritmos de inusitada belleza, se repiten motivos o se alternan, con pausas e intervalos. Las composiciones están basadas generalmente en leyes de simetría aproximada. Esto se refiere al ordenamiento en que a ambos lados de un eje las formas se sitúan con la misma importancia y atracción visual. Los egipcios trabajaron el color en forma plana, sin apelar al modulado o esfumado y anulando de este modo la idea de volumen. Pese a la rigidez de los cánones, la pintura egipcia se nos muestra ágil, fresca y ,llena de vida, sobre todo en los episodios inspirados en las costumbres de la sociedad egipcia o en los dibujos de flores y animales. Muchas representaciones incluyen a escultores, carpinteros, alfareros, tejedores, cordeleros, etc. Escenas la vida pastoril, de caza, pesca, fiestas con instrumentos musicales, funciones sagradas, crean alrededor del muerto, una atmósfera familiar con los aspectos más dulces y agradables de la vida. Las pinturas se llevaban a cabo mediante un fondo de piedra preparado con una fina capa de yeso. Se aplicó como decoración de los muros, bajorrelieves, columnas y capiteles de los monumentos funerarios. (figura 4) También los egipcios decoraban a gran escala ya que le tenían miedo al vacío. Características principales de los temas fundamentales de la arquitectura egipcia, a través de los diferentes periodos históricos Figura 4 La arquitectura egipcia se manifestó, sobre todo, con dos tipos de construcciones religiosas: tumbas (reine la muerte) y templos (reine la vida). El material empleado fue la piedra, trabajada en sillares. Como elementos de sustentación se utilizaron pilares y columnas con capiteles de motivo floral (flor de loto y planta de papiro) y fustes muy variados. Tumbas En el período predinástico, las tumbas no eran más que fosas ovales o rectangulares donde se disponían los cuerpos encogidos de los difuntos acompañados de los objetos personales (collares, brazaletes, instrumentos de caza) y de recipientes que contenían comida y bebida. Estos agujeros se cubrían pobremente, a lo mejor con un techo de madera y un montículo de arena que con el tiempo desaparecía; así el cuerpo del difunto se exponía a una destrucción rápida. Con la intención de evitar este riesgo, los reyes y los Corte de la pirámide de Saqqara nobles de las primeras dinastías cubrieron la parte de abajo de la tumba (que ya contaba con una planta más complicada). Luego aparece la mastaba, (figura 5) que ofrece el aspecto de una pirámide truncada de planta rectangular, dentro de la cual existe una pequeña sala, para las ofrendas, una reducida capilla y, bajo tierra, la cámara mortuoria a la que se accede por un pozo, que se ciega una vez colocado el cadáver. En Gizeh y Saqqara se encuentran las agrupaciones más importantes de mastabas. En la III Dinastía la capital se trasladó a Menfis y los faraones iniciaron la construcción de Figura 6 pirámides, que sustituyeron a las mastabas como tumbas reales. El arquitecto, científico y pensador Imhotep construyó para el faraón Zoser, el conjunto de Saqqara (figura 6) que se trataba de una necrópolis integrada por una pirámide escalonada de piedra y un grupo de templos, altares y dependencias afines. La gran pirámide escalonada donde reposan los restos del faraón está compuesta de varias mastabas superpuestas. En la IV dinastía se construyen las pirámides de Keops, (figura 7) Kefrén y Micerinos. Las pirámides en su interior encierran dos cámaras funerarias, una en el centro y otra bajo tierra, a las que se accede por estrechos corredores que se ciegan con grandes bloques de piedra, para garantizar la inaccesibilidad una vez colocado el cadáver, las esculturas y ajuar que en la cámara alta se depositan. Junto a las pirámides se sitúan templos funerarios, una calzada conduce al Nilo, donde se construye otro templo y otras dependencias que crean un ambiente en el que la pirámide es el centro de atención. En relación. con la pirámide de Kefrén, está la esfinge de Gizeh. La arquitectura del Imperio Medio no está bien representada, dada la escasez de ejemplos conservados. No obstante, una pequeña construcción vinculada a Sesostris Figura 7 I,(figura 8) faraón de la XII Dinastía, ha sido recuperada de uno de los últimos pilónos (puertas monumentales) del templo de Karnak, para el que se utilizaron sus ladrillos como material de relleno. Esta pequeña capilla puede considerarse como el ejemplo típico del estilo de la época. Esencialmente cúbica en su diseño y construida bajo un riguroso sistema de pilares y estructuras adinteladas, este pequeño edificio tiene una pureza de líneas y unas proporciones tan equilibradas que le otorgan sin lugar a dudas un carácter de eternidad. Los entrepaños están decorados con bellos relieves del faraón y divinidades egipcias. Figura 8 Los faraones de las dinastías XVIII fueron grandes constructores de arquitectura religiosa. Tras el restablecimiento de la capital en Tebas la realeza divina de los faraones se asoció al dios local Amón, que llegó a ser la divinidad suprema más importante de Egipto y reinaba sobre los dioses secundarios. Casi todos los faraones del Imperio Nuevo se preocuparon por ampliar y hacer nuevos añadidos en el conjunto de templos de Karnak, centro de culto de Amón, convirtiéndose así en uno de los más impresionantes complejos religiosos de la historia. Sus gigantescos pilónos, la gran sala hipóstila, los vestíbulos plegados de columnas, los obeliscos y las estatuas dispuestas en numerosos lugares, llevan directamente a pensar en el poder y majestuosidad del faraón y el estado de aquella época. Otro ejemplo seria el de Luxor. En la ribera occidental del Nilo, cerca de la necrópolis de Tebas, se construyeron templos para el culto y honras fúnebres de los faraones. Durante el Imperio Nuevo, los cuerpos de estos faraones se enterraron en tumbas excavadas en la roca en el entorno denominado Valle de los Reyes, ya en pleno desierto, con los templos funerarios o mortuorios a cierta distancia fuera del valle. Un ejemplo es el de la reina Hatshepsut en Deir al-Bahari, (figura 8) levantado por el arquitecto Sebemut. Situado frente a los acantilados del río Nilo, Junto al templo de Mentuhotep II, de la XI Dinastía, y probablemente inspirado en él, el templo es una extensa terraza con numerosas capillas para los dioses y relieves representando los éxitos logrados por Hatshepsut a lo largo de su reinado. Otros faraones no siguieron estos precedentes, y construyeron sus Figura 8 templos al borde de las tierras fértiles, lejos de los escarpados riscos del desierto. En la época de Ramsés II (figura 9), uno de los más importantes faraones del Imperio Nuevo, se levantaron los gigantescos templos de Abu Simbel, en Nubia, el sur de Egipto. Fueron excavados en el interior de la roca, sobre la falda de una montaña y con las fachadas custodiadas por cuatro figuras monumentales del faraón y su esposa respectivamente. Columnas Egipcias Las columnas se emplearon no sólo como elementos constructivos, para sujetar las estructuras, sino también como decoración, articulación y simbolismo. Los egipcios pensaban que las columnas salían del suelo fertilizando para dar protección, sustento y permanencia a la tierra y a sus pobladores. Las columnas más comunes eran: la Papirifrome abierta o cerrada, Lotiforme y la Hathórica. Generalmente eran monolíticas. (figura 9) Obeliscos La palabra obelisco deriva del griego Obeliskos (espetón para asar). Llamado TEJEN en la lengua sagrada de los antiguos egipcios, es sinónimo de "protección", "defensa". La aguja de piedra, que por regla general se erigía por parejas, tenía por función perforar las nubes y dispersar las fuerzas negativas que siempre amenazaban con acumularse, bajo la forma de tormentas visibles o invisibles, por encima del templo. Era como un símbolo del rayo petrificado. El obelisco, es una piedra con frecuencia monolítica, de base cuadrancular, puesta derecha y terminada en punta. Se ponía en el centro de amplios espacios de los templos dedicados al dios solar Ra. El obelisco consta de dos partes: - el cuerpo: es un largo bloque de sección troncocónica, - el piramidón: es la punta piramidal que corona el monolito y se asentaba sobre un basamento recubierto de oro (metal considerado por los egipcios como "la carne de los dioses"). Este piramidón simboliza los rayos del sol que llevaban hasta la tumba un gran poder vivificante que supuestamente tenía algún efecto en la posterior resurrección del difunto. Los obeliscos fueron una ambicionada presa para los insaciables conquistadores de Egipto El pilono Representaba la entrada al templo y era una pared monumental formada por un alto y ancho muro de forma de tronco de pirámide con una puerta central. Cada una de las dos torres que formaban el pilono representaba los acantilados de cada lado del valle del Nilo, pero también son a la vez las dos montañas que flanquean el disco solar. Las paredes, trapezoidales, contenían aberturas en las que se colocaban mástiles y banderolas, que simbolizaban la persencia del dios. Generalmente estaban precedidos de obeliscos que aluden a la morada del dios, a la relación entre lo terrestre y lo solar, lo sagrado, o colosos de reyes (simbolizando los hijos vivientes del dios). Normalmente estaban decorados con relieves de temas históricos o religiosos o sacrificio de prisioneros por parte del faraón en presencia del dios al que está dedicado el templo. El patio Se construía a cielo abierto y se decoraba con relieves que hacían referencia a las hazañas del rey o imagenes de adoración. El patio estaba rodeado de columnas, normalmente en tres de sus lados (sala hípetra) y solía contener colosos. Podía haber mas de un patio con su consiguiente pilon de acceso. La sala hipóstila Después del patio se encontraba la sala hipóstila, que durante el Reino Nuevo se encontraba sobre una plataforma o a veces al ras de suelo. Podía estar precedida por un vestíbulo. Las salas hipóstilas llegaron a ser uno de los mayores logros de la arquitectura egipcia. Era un recinto de columnas altas y gruesas que formaban un bosque de piedra y que sostenían una cubierta arquitrabada. Generalmente las filas centrales eran más altas que las laterales y esto y el espacio se elevaba en la zona del eje central del templo formando una especie de nave principal. Esto permitía abrir ventanas laterales por las que penetraba la luz, aunque escasa ya que a medida que se accedía al santuario se disminuía la cantidad de luz. La función de la sala era como salón de recepción del dios. Los relieves con los que estaba decorada representaban escenas de las ceremonias religiosas que se realizaban en el templo. El acceso a la sala hipóstila estaba restringido a los altos funcionarios, escribas y gente notable. Cuando el templo tenía mas de una sala hipóstila el acceso a cada una de ellas era cada vez más restringido y dependía del grado en la jerarquía social. Dependencias del dios Pasada la sala hipóstila se encontraban una serie de cámaras y la sala de la barca sagrada, dependencia en la que se situaba la barca. Al final del templo se encontraba el santuario, una pequeña estancia con la imagen del dios. Era la sala principal del templo, aunque no la más vistosa. El tabernáculo realizado en piedra, granito o madera era la parte más importante del templo y a esta zona sólo el faraón tenían acceso. Alrededor de las cámaras y el santuario se encontraban otra dependencias menores, utilizadas en el culto de dioses locales, dedicadas a la protección de dioses exteriores que visitaban el templo en las procesiones, o salas para albergar los objetos necesarios para llevar a cabo el ritual religioso. La iluminación de los templos se basaba en la disminución de la luz, según se iba accediendo al santuario que era la zona más oscura, mientras que los patios, abiertos, representaban la parte más iluminada. el contacto con el pueblo. Los templos más importantes incluían otra serie de elementos exteriores, como tribunas, mammisi, perteneceientes a la era ptolemaica, y el lago sagrado. La tribuna se encontraba delante de los pilares y unida a ellos por una avenida enlosada bordeada de esfinges: el dromos. Se empleaba como lugar en el que el faraón supervisaba las ceremonias religiosas que se celebraban en el patio. Los mamisi consistían en pequeños edificios, delante de los pilones, decorados con colores alegres y escenas de diosas tocando instrumentos y danzas burlescas pues eran el lugar escogido por la diosa madre para esperar el nacimiento de su hijo. El lago era un gran estanque, profundo para aprovechar las aguas del Nilo en épocas de sequía, con escaleras que descendían fuese cual fuese el nivel del agua. Los lagos cuadrados, con paredes ligeramente curvadas eran la representación de las aguas primigenias de las que había surgido el Mundo. Era el lugar en el que se efectuaban los rituales ligados a la resurrección de Osiris. Todo el recinto del templo estaba rodeado por un muro. Además existían templos que tenían consagrados animales sagrados,en cuyo caso incluían dependencias destinadas al animal. El acceso al templo estaba totalmente vedado al pueblo, que sólo podía acceder al primer patio. A partir del Reino Nuevo se autorizó a algunos privilegiados poder colocar estatuas en los exteriores del templo. A las salas hipóstilas sólo alguna gente de mayor jerarquía podía acceder y al santuario estaba vetado el acceso a todo el mundo salvo el faraón y el sacerdote delegado por este para llevar a cabo los rituales. Conclusión El río Nilo, el valle y su delta fueron los conductores de la civilización egipcia. Estos factores geográficos acompañados de la creencia religiosa, fueron elementos determinantes en la vida diaria de los egipcios, como también en la búsqueda de un sistema y modelo constructivo que la representara e identificara como una de las más grandes e importantes civilizaciones del mundo. El deseo de concretar un orden eterno era esencial para demostrar la continuidad de la vida después de la muerte. Esto los llevó a la construcción de obras (tumbas y templos) que, por sus materiales, formas y escala, perdurarían a través de los siglos y le darían al egipcio su presencia en un espacio sin limites en el desierto. Orden y constancia son los términos que mejor expresan las intenciones fundamentales de la arquitectura egipcia y que claramente se aprecian durante todos los períodos. En general, las construcciones representaban cuatro ideas fundamentales: El oasis cerrado, la masa megalítica, el orden ortogonal y el recorrido o eje que, a través de grabados y relieves, fueron representados historias pasadas y de la vida cotidiana que servían a la vez de decoración y solucionaban el problema de los miedo a los espacios vacíos. No consiguieron evolucionar en la representación del dibujo (conceptos claramente dominados en la escultura). El espacio es bidimensional, los planos neutros, las líneas cerradas y homogéneas y sus composiciones están basadas generalmente en leyes de simetría aproximada. Esta civilización, con el doble de tiempo de presencia que la nuestra, nos muestra la grandeza a la que el hombre es capaz de llegar, en la busqueda permanente de sobresalir y destacar sus obras para expresar ideas, sentimientos y emociones respondiendo a sus necesidades. Bibliografía Historia universal TOMO 1: De la humanidad prehistórica, al imperio Bizantino (s.VII) Editorial Océano. Historia Antigua y Medieval. Editorial Stella. Enciclopedia temática Océano, TOMO 4. Editorial Océano. Mundos extraños lugares asombrosos. Editorial Reade´s Digest. Atlas, Culturas del mundo. Egipto dioses-templos y faraones. Tomo 1 y 2. Editorial Folio. Arquitectura en los planos Trachtember E. Hytan. Editorial Akal. Norberg Schulz, arquitectura occidental. Editorial G.G. Historia universal visualizada, TOMO 1 Editorial Omeba Enciclopedia ENCARTA. Paginas en Internet: www.egipto.com www.egiptomania.com www.miesbcn.com/pabellonesp01.htm www.artehistoria.com www.