El hombre y la arquitectura El hombre, desde que se conocen datos de su existencia, ha ido evolucionando logrando satisfacer sus necesidades a medida que problemas de diversa índole se interponían en su camino. Tales necesidades representaban el hecho de la subsistencia y para que ello sea posible, el hombre en primer instancia debía alimentarse y buscar un refugio ante las inclemencias del tiempo y la vida animal existente que se encontraba en iguales condiciones que él. La arquitectura también ha ido evolucionando desde sus orígenes, mediante el empleo de diversos materiales y la aparición de nuevas tecnologías que permiten otorgarle un significado mas acabado a una obra arquitectónica. Vale aclarar que el objetivo de este trabajo no consiste en analizar de que manera o en que forma el hombre genera arquitectura a lo largo del tiempo, o bien como utiliza los materiales o nuevas tecnologías para lograr construir un edificio, sino buscar una conexión análoga entre el hombre y la arquitectura. Esta analogía, comprende diversos aspectos, tales como: Sustento estructural Ideológico Significativo Tecnológico y Constitutivo basándonos en el concepto de que el hombre es lo que representa. Remontándonos al pasado, en el período clásico donde en las tierras mediterráneas prevalecía la imagen de hombres sabios y filósofos, la arquitectura se caracterizaba por la pureza y perfección de sus elementos. En este aspecto se hace referencia a valores significativos e ideológicos. Al mencionar las necesidades humanas, surgen también las necesidades arquitectónicas, tal como planteaba Le Corbusier la idea de un edificio aislado al cuál llegan distintas líneas de alimentación. La imagen de cada individuo es tan importante como la arquitectura del edificio al que asiste o representa. De este modo la apariencia es un factor de gran importancia en lo que respecta a la imagen. Tal es el caso de un cura vestido con su atuendo tradicional, como las características formales de una catedral, o el traje que utiliza un empleado bancario. En el largo camino de la evolución donde el hombre ha ido salteando obstáculos, ha sabido mantenerse siempre, aprendiendo de los errores cometidos y con la tendencia de ir mejorando día a día e intentando superar el mayor logro alcanzado. Esta tendencia se refleja también en la arquitectura. Las nuevas tecnologías juegan un papel fundamental en este campo, permitiendo mejores condiciones de confort y en definitiva mejores condiciones de vida. Es quizás este el punto de mayor concordancia entre temas tan diferentes, puesto que a lo largo de este período de evolución, se ha podido por sobre todas las cosas continuar (y por que no mejorar) con una tendencia, la tendencia de poder seguir dando vida a la arquitectura, y la tendencia de seguir dando vidas humanas para que estos logros sean posibles.