Contenido 1. Prospección de yacimiento Técnica mediante la cual se realiza el descubrimiento y la evaluación de las reservas, así como la preparación para la puesta en explotación de los yacimientos de petróleo y gas. Consta de dos etapas: de búsqueda y de prospección. En el curso de la etapa de búsqueda se llevan a cabo los levantamientos geológicos, aeromagnético, y gravimétrico de la localidad, la investigación geoquímica de las rocas y las aguas y el trazado de diferentes mapas. Luego, se efectúa el sondeo de prospección con los pozos de exploración. El resultado de la etapa de búsqueda es la evaluación preliminar de las reservas de los nuevos yacimientos. Los objetivos principales de la etapa de prospección son señalar los límites del yacimiento, determinar su potencial y la saturación de sus estratos y horizontes de petróleo y gas. Una vez concluida la etapa de prospección, se calculan las reservas probadas de petróleo y se elaboran recomendaciones para poner el yacimiento en explotación. La prospección tiene la tarea de localizar probables yacimientos y áreas de aprovechamiento (suelo). En sus trabajos de campo se sirve de métodos de análisis geológicos, geofísicos y geoquímicos. La exploración es el estudio detallado de probables yacimientos. Se aplican los mismos métodos que en la prospección, pero se realiza, además, una intervención directa en el medio ambiente. En el ámbito del reconocimiento, prospección y exploración pueden darse distintos tipos de proyecto, pero el impacto ambiental de tales proyectos depende en primera línea de las actividades particulares de cada proyecto. Uno de los primeros pasos en la búsqueda del petróleo es la obtención de fotografías o imágenes por satélites, avión o radar de una superficie determinada. Esto permite elaborar mapas geológicos en los que se identifican características de un área determinada , tales como vegetación , topografía, corrientes de agua , tipos de roca, fallas geológicas, anomalías térmicas, etc. (relevamientos topografía y geológicos). Esta información da una idea de aquellas zonas que tienen condiciones propicias para la presencia de mantos sedimentarios en el suelo. Toda la información obtenida a lo largo del proceso exploratorio es objeto de interpretación en los centros geológicos y geofísicos de las empresas petroleras. Pero, en ultimo término, la única forma de demostrar la existencia de petróleo en el subsuelo es perforando un pozo. De hecho, casi todas las zonas petrolíferas del mundo fueron identificadas en un principio por la presencia de filtraciones superficiales, y la mayoría de los yacimientos fueron descubiertos por prospectores particulares que se basaban más en la intuición que en la ciencia. Un campo petrolífero puede incluir más de un yacimiento, es decir, más de una única acumulación continua y delimitada de petróleo. De hecho, pueden haber varios depósitos apilados uno encima de otro, aislados por capas intermedias de esquistos y rocas impermeables. El tamaño de esos depósitos varía desde unas pocas decenas de hectáreas hasta decenas de kilómetros cuadrados, y su espesor va desde unos pocos metros hasta varios cientos o incluso más. La mayor parte del petróleo descubierto y explotado en el mundo se encuentra en unos pocos yacimientos grandes. 3. Búsqueda de yacimientos Cuando nació la industria petrolífera, era muy sencillo localizar yacimientos, porque se explotaron los muy superficiales, cuya existencia era conocida, o porque fueron descubiertos por obra del azar. Pero la creciente importancia de esta industria, originó una búsqueda intensiva y racional de nuevos yacimientos, que se transformó en una verdadera ciencia, con aportes de Geología, la física, la química, etc. Actualmente el hallazgo de yacimientos petrolíferos no es obra librada al azar y obedece a una tarea científicamente organizada, que se planifica con mucha antelación. Instrumental de alta precisión y técnicos especializados deben ser trasladados a regiones a menudo deshabitadas, en el desierto o en la selva, obligando a construir caminos y sistemas de comunicación, disponer de helicópteros, instalar campamentos y laboratorios, etc. El conocimiento de la estructura del suelo es fundamental para la determinación racional de las posibilidades de existencia de los yacimientos. Actualmente se utilizan los siguientes métodos de exploración: Exploración superficial: 1) Relevamientos topográficos en escala grande. 2) Relevamientos geológicos superficiales, en zonas donde afloran rocas sedimentarias. 3) Relevamientos geofísicos, basados en métodos: Exploración Profunda. Se realiza en zonas que se consideran favorables, mediante la perforación de pozos profundos: 1. Perfilaje eléctrico, realizado con electrodos que se bajan a distintas profundidades de un pozo de exploración, para determinar la conductibilidad eléctrica de las distintas capas y sus probabilidades de contener petróleo. 2. Perfilaje geoquímico, que determina la presencia de vestigios de hidrocarburos en las capas profundas del subsuelo. Sus datos no pueden ser siempre adecuadamente interpretados. 3. Perfilaje térmico, efectuado con termómetros de máxima y mínima, a distintas profundidades, que diferencia las capas por sus conductibilidades térmicas. También se usa para el control de operaciones de perforación de pozos (cementados, etc.) 4. Cronometraje de perforación, que por distintas velocidades, con que se atraviesan las capas, las individualiza. 5. Fotografía de las paredes de los pozos, que también se utilizan para la individualización de las capas atravesadas. La búsqueda de petróleo y gas natural requiere conocimientos de geografía, geología y geofísica. El petróleo suele encontrarse en ciertos tipos de estructuras geológicas, como anticlinales, trampas por falla y domos salinos, que se hallan bajo algunos terrenos y en muy distintos climas. Tras seleccionar una zona de interés, se llevan a cabo numerosos tipos diferentes de prospecciones geofísicas y se realizan mediciones a fin de obtener una evaluación precisa de las formaciones del subsuelo, a saber: •Prospecciones magnetométricas. Las variaciones del campo magnético terrestre se miden con magnetómetros suspendidos de un aeroplano, a fin de localizar formaciones de rocas sedimentarias cuyas propiedades magnéticas son generalmente débiles en comparación con las de otras rocas. • Prospecciones fotogramétricas aéreas. Las fotografías tomadas con cámaras especiales desde aeroplanos proporcionan vistas tridimensionales de la tierra, que se utilizan para determinar formaciones geológicas en las que puede haber yacimientos de petróleo y gas natural. • Prospecciones gravimétricas. Como las grandes masas de roca densa aumentan la atracción de la gravedad, se utilizan gravímetros para obtener información sobre formaciones subyacentes midiendo pequeñísimas diferencias de gravedad. • Prospecciones sísmicas. Las prospecciones sísmicas proporcionan información sobre las características generales de la estructura del subsuelo. (Las medidas se obtienen a partir de ondas de choque generadas por detonación de cargas explosivas en agujeros de pequeño diámetro; mediante dispositivos vibrantes o de percusión tanto en tierra como en el agua, y mediante descargas explosivas subacuáticas de aire comprimido. 2. Mapas Geológicos Una de las herramientas principales en geología es el mapa geológico. Un mapa geológico es la representación en dos dimensiones y a escala de las características geológicas de una región. En él se representan las rocas que se encuentran en esa zona y que afloran en la superficie, junto con las estructuras geológicas que aparecen, como fallas, pliegues y discordancias. 3. Mapas topográficos Un mapa topográfico es una representación, generalmente parcial, del relieve de la superficie terrestre a una escala definida. A diferencia de los planos topográficos, los mapas topográficos representan amplias áreas del territorio: una zona provincial, una región, un país, o el Mundo. En ellos se incluyen curvas de nivel, que permiten reflejar la forma de la superficie de la Tierra. La utilización de colores en los diversos niveles con otros símbolos y trazos auxiliares, permiten reconocer montañas, valles, ríos, altozanos y otras características del terreno; también se incluye información sobre construcciones humanas, tales como: poblaciones, carreteras, puentes, presas, líneas eléctricas, distintas plantaciones, etc. 4. Mapas Estructurales Un tipo de mapa que se realiza es el estructural, el cual se trata de líneas unidas por puntos de igual profundidad, y nos dan indicios de la forma de la estructura del yacimiento. Los mapas estructurales pueden ser del tope o de la base de la arena que contiene hidrocarburos, pero éste se especializa principalmente en la forma geométrica que posee la roca que en alguna parte de su amplia estructura es posible que contenga hidrocarburos. Bibliografía http://geco.mineroartesanal.com/tikidownload_wiki_attachment.php?attId=140 http://www.lacomunidadpetrolera.com/showthread.php/867Prospecci%C3%B3n-de-yacimientos-%28Oil-deposit-prospecting%29 http://ingenieria-de-yacimientos.blogspot.com/2009/01/estudio-degeometria-de-una-trampa-y.html http://es.wikipedia.org/wiki/Mapa_topogr%C3%A1fico