PALABRA QUE DA VIDA -Reflexionemos- ¡ESTA ES LA SEÑAL PARA ESTA GENERACIÓN¡ A NOSOTROS NOS CORRESPONDE DAR RAZÓN DEL TALANTE PROFÉTICO Y SABIO DE JESÚS ANTE UNA GENERACIÓN QUE EN NUESTROS DÍAS ES CADA VEZ MÁS APÁTICA, INDIFERENTE, INSENSIBLE, INDIVIDUALISTA Y CONTRARIA AL AUTÉNTICO MENSAJE CRISTIANO. LUNES 14 DE OCTUBRE DE 2013 Del Evangelio según san Lucas 11, 29-32 Habiéndose reunido la gente, comenzó a decir: «Esta generación es una generación malvada; pide una señal, y no se le dará otra señal que la señal de Jonás. Porque, así como Jonás fue señal para los ninivitas, así lo será el Hijo del hombre para esta generación. La reina del Mediodía se levantará en el Juicio con los hombres de esta generación y los condenará: porque ella vino de los confines de la tierra a oír la sabiduría de Salomón, y aquí hay algo más que Salomón. Los ninivitas se levantarán en el Juicio con esta generación y la condenarán; porque ellos se convirtieron por la predicación de Jonás, y aquí hay algo más que Jonás.» LECTURAS COMPLEMENTARIAS: ROMANOS 1, 1-7 - POR CRISTO HEMOS RECIBIDO ESTE DON Y ESTA MISIÓN: HA- CER QUE LOS GENTILES RESPONDAN A LA FE SALMO 97 - EL SEÑOR DA A CONOCER SU VICTORIA CONTEXTO – A diferencia del texto paralelo de Mateo, Lucas no apunta a la resurrección de Jesús, aludida en los tres días que permaneció Jonás dentro del pez (Jonás 2, 1), sino que más bien se fija en la predicación y la sabiduría de Jesús (mas importante que Jonás y Salomon). Ese es el signo que Dios da a aquella generación, la cual buscaba en lo maravilloso la presencia de Dios. EL MAESTRO NOS ENSEÑA A DETECTAR SEÑALES - El símbolo de Jonás sigue allí llamándonos la atención para que también nosotros hoy revisemos nuestra vida, dejemos las falsas seguridades y comencemos a cambiar de actitud; la vida tenemos que irla haciendo crecer a la medida de Jesús, el ser humano ideal que sigue siendo para nosotros el mejor camino de acceder a Dios y a su Reino. Abandonemos, entonces, la actitud farisaica de autosuficientes y de creernos mejores que los demás. Y empecemos a buscar la sabiduría para que no nos juzgue la reina del Mediodía y para que nos nos condenen los ninivitas. PARA REFLEXIONAR SABIDURÍA, PREDICACIÓN Y CONVERSIÓN Sabiduría, predicación y conversión son palabras claves en el evangelio de hoy. Jesús advierte que su generación es apática, indiferente e incrédula ante la Buena Nueva que se anuncia. Decide enfrentarla, llamarla por su nombre y ponerla en el lugar adecuado. No duda, pues, en descubrir su maldad y perversidad. Como en otros pasajes, Jesús hace memoria de la actitud que tienen personas extranjeras como la reina del sur o la población ninivita, atraídas por la sabiduría de Salomón y por la predicación de Jonás. Cabe resaltar la contundencia y la radicalidad con las que Jesús se presenta a sí mismo como la señal mayor entre profe- tas y sabios, aunque no le escuchen ni le crean. La sabiduría de Salomón y la predicación de Jonás quedan superadas por Jesús. La escucha y la conversión representan las actitudes de quien quiera ponerse en el camino hacia Jerusalén. No es cuestión de grandes prodigios o milagros, sino de reconocer la acción salvadora de Dios en Jesús de Nazaret. A nosotros nos corresponde dar razón del talante profético y sabio de Jesús ante una generación que en nuestros días es cada vez más apática, indiferente, insensible, individualista y contraria al auténtico mensaje cristiano. PARA ORAR Señor Dios nuestro: Estábamos pidiendo milagros y tú no nos has dado otra señal que la presencia en fe de tu Hijo Jesús aquí entre nosotros. Que esto sea suficiente para sustentarnos y así poder caminar junto con nuestros hermanos por el camino -unas veces suave, otras escabroso- del servicio, la comunión y la amistad. Ayúdanos a alzarnos y animarnos unos a otros por el poder de nuestro Señor resucitado, Jesucristo. Amén. PARA ACTUAR – El está ahí, todo el universo lo señala en un grito silencioso… animémonos a mirar el sol de frente, con mirada clara, dispuestos a ver lo que es y no tanto lo que se pretende desde vanos egoísmos y mezquinas necesidades. LE PEDÍ A DIOS Le pedí a Dios estar en primera fila ... Él me colocó en el último lugar para que conociera la paciencia y la humildad. Le pedí ser el centro del mundo... Él me enseñó que la vanidad me aparta del centro de cualquier cosa. Le pedí fama y gloria... pero Él me concedió sencillez y comprensión para que mi ego no fuera a herir a los demás. Le pedí a Dios un auto que viajara veloz... Él me concedió un paso firme por el sendero correcto para que no atropellara mis sentimientos. Le pedí Tener una mansión pero... Él me dio una pequeña casa llena de ternura y amor. Le pedí poseer dinero para tener muchos amigos pero... Él me concedió algo mejor: me ofreció Su amistad no a cambio de mi dinero sino de mi sinceridad. Le Pedí a Dios poseer mucha belleza y sin embargo... Él me dio sensibilidad y belleza espiritual para que no me sintiera más que los demás. Le pedí a Dios ser siempre feliz, pero... Él me hizo conocer la tristeza para que comprendiera que la vida no sólo esta compuesta de cosas bellas y para que tuviera compasión por el sufrimiento de los demás. Le pedí un carácter fuerte pero... Él me concedió un corazón blando y un carácter pasivo para que pudiera amar y ayudar a los demás. Le pedí tener el mundo a mis pies pero... Él me hizo comprender que es mejor tener amigos en el corazón. Por todo eso Dios mío... nunca me concedas todo lo que te pido… concédeme lo que hasta hoy he tenido la dicha de poseer. «A esta generación no se le dará más signo que el signo de Jonás» El tiempo es la moneda de tu vida. Es la única moneda que tienes, y sólo tú puedes determinar cómo gastarla. Ten cuidado, no la malgastes y no permitas que otras personas la gasten por ti. Carl Sandburg