1 Osvaldo Gómez Hernández (1928-1996) Nació el 29 de Febrero de 1928 en el seno de una familia humilde, en Jagüey Grande, Matanzas. Desde muy pequeño mostró su gran afición hacia la naturaleza, sintiendo desde entonces una gran predilección por los invertebrados marinos. Finalizados sus estudios primarios y secundarios, comienza a trabajar como maestro en la escuela La Progresiva de Cárdenas, donde muy pronto se distingue como un gran estudioso de la Zoología, la Botánica y la Mineralogía, contribuyendo a la formación de varias generaciones de egresados. Desde entonces, participó en varias expediciones a la Península de Hicacos, relacionándose con algunos biólogos cubanos y extranjeros de renombre. Gracias a su enorme interés por los invetebrados marinos desde entonces comenzó a gestar junto a sus alumnos, numerosas y valiosas colectas. Ya entonces era un gran conocedor de los diversos grupos de invertebrados bentónicos de nuestras aguas. Dos intereses fundamentales lo movían en su juventud: continuar sus clases en la Progresiva y concluir sus estudios universitarios en la Universidad de La Habana. Esto último lo logró, al egresar de la Facultad de Ciencias en 1964. Tan pronto como se decide la apertura del Acuario Nacional de Cuba, en Miramar, Ciudad de La Habana, en la década de los 60, es llamado a formar parte de su personal profesional, hasta tanto no se fundara el Instituto de Oceanología de la Academia de Ciencias de Cuba (hoy Ministerio de Ciencias, Tecnología y Medio Ambiente) Ya en el Instituto de Oceanología, fue responsable del laboratorio del departamento de Bentos durante varios años. Realizó estudios de Postgrado en Dinamarca en 1966 y en Cuba algunos otros, impartidos por especialistas de la FAO y la UNESCO. También fue contraparte de renombrados bentonistas y Carcinólogos de la URSS, Alemania, Rumania, Bulgaria, Yugoslavia, Islandia y EE.UU. Creó en el Instituto de Oceanología una respetable colección de invertebrados marinos, con especial interés en los braquiuros. Sin desligarse jamás de la actividad docente de Pre y Postgrado universitaria, fue profesor de casi todas las generaciones de biólogos marinos del país y fundador del Centro de Investigaciones Marinas de la Universidad de La Habana. Impartiendo clases de pre y post grado de Zoobentos I, II y II y de Ecología, exitosamente. Además, gracias a sus amplios conocimientos contribuyó, en cierta medida al desarrollo de la Museología Nacional y al conocimiento de los crecimientos incrustantes e indeseables cubanos, presentando a la máxima dirección del país varios informes importantes. Pero a nuestro juicio, su contribución más notable al desarrollo de la Biología Marina cubana consistió en la formación de los primeros bentonistas, gracias a sus amenas y bien documentadas clases de Zoobentos, apoyado en sus estudios y colectas realizados o lo largo de toda nuestra plataforma. Además devino como el más notable Carcinólogo cubano, dedicado al estudio de los decápodos, dentro de los cuales, los braquiuros (cangrejos) han sido la temática en que logró obtener un mayor dominio, en Cuba y el área. 2 Obtuvo el grado de Dr. En Ciencias Biológicas (Ph.D.) en la Universidad de La Habana en 1982, con el estudio de las 300 especies de braquiuros cubanos, obra de gran valor, que desafortunadamente, quedó sin publicar. Participó en las Expediciones del B/I Académico Kowaliewsky, en 1965 y más recientemente en las dos Cubano-españolas a bordo del B/I Felipe Poey y la Cuba-USA, en el B/I Ulises, en la década de los 90, con biólogos de la Smithsonian Institution (Nacional Museum of Natural History) Estudió las colecciones de las mencionadas expediciones, así como la parte de los crustáceos de la Expedición del B/I Atlantis, de finales de la década del 30, depositados en colecciones cubanas. Publicó en Cuba y en el exterior más de 40 trabajos científicos como autor o coautor entre los crustáceos, sobre cefalocáridos, cirripedios, peracáridos, camarones, anomuros, langostas y braquiuros. De otros grupos, tales como anémonas, pogonóforos, holoturias y moluscos, publicó algunos otros trabajos, fundamentalmente en revistas nacionales. Por sus méritos como profesor y científico obtuvo las siguientes condecoraciones: la Medalla José María de Mendive, la Medalla Pepito Tey, la Medalla por la Educación Cubana. La Medalla por la Alfabetización y la Medalla de Fundador de la Academia de Ciencias de Cuba. Por sus grandes conocimientos en el área de los invertebrados marinos, su carácter afable, su disposición a ayudar y modestia sin límites, el Dr. Gómez, se ganó para siempre el respeto y la admiración de todos los que lo conocimos. En lo personal, fue un magnífico esposo, padre, colega y amigo ejemplar, de todos los que tuvimos el privilegio de conocerle. Al cumplirse los 10 años de su desaparición física, en Cárdenas, en 1996, se desarrolló una actividad conmemorativa en el Centro de Investigaciones Marinas, con la asistencia de todos sus trabajadores, así como de los ex colegas y ex alumnos más queridos. El Dr. Gómez, puede ser considerado como el iniciador de los estudios carcinológicos cubanos y formador de los que en la actualidad continúan desarrollando la Taxonomía de los crustáceos de Cuba y regiones adyacentes.