ARTÍCULO MAYO 2014 Javier de Luis Román Co-investigador del Centro de Investigación en Endocrinología y Nutrición Clínica (C.I.E.N.C.) Nº 974 TÍTULO: Effect of a high monounsaturated vs high polyunsaturated fat hypocaloric diets in nonalcoholic fatty liver disease. AUTORES: Aller R, de Luis DA, Izaola O, de la Fuente B, Bachiller R. REVISTA: Eur Rev Med Pharmacol Sci. 2014 Apr;18(7):1041-7. RESUMEN: OBJETIVO: La elevación de las trasaminasas es un problema importante en los pacientes obesos. Decidimos examinar los cambios en la elevación de las transaminasas después de la reducción de peso en pacientes obesos con y sin esteatohepatitis no alcoholica (EHNA) secundario a dos dietas hipocalóricas, una con alto contenido de grasa monoinsaturada frente a otra con alto contenido en grasas poliinsaturadas. Una población de 306 pacientes obesos se asignó al azar a uno de los dos grupos: Dieta M (dieta hipocalórica rica en grasas monoinsaturadas) y Diet P (alta dieta hipocalórica grasa poliinsaturada). Los pacientes se clasificaron en el grupo I (pacientes obesos, n = 262), cuando la actividad de la ALT sérica fue normal o grupo II (pacientes con NAFLD, n = 44) cuando la actividad de ALT en suero fue de (≥ 43 UI / L). En el grupo con dieta M, el índice de masa corporal, el peso, la masa grasa, la circunferencia de cintura, presión arterial sistólica, el colesterol total, el colesterol LDL), insulina y HOMA-R disminuyeron. En el grupo con dieta P, el índice de masa corporal, el peso, la masa grasa, la circunferencia de cintura, presión arterial sistólica, el colesterol total, el colesterol LDL), insulina y HOMA-R disminuyeron, también. En el grupo II, la alanina aminotransferasa [(dieta M) -20,3 ± 19,2 UI / L vs (dieta P) -14,2 ± 20,1 UI / L], aspartato aminotransferasa [(dieta M) -11,3 ± 12,2 UI / L vs ( dieta P) -11,1 ± 10,1 UI / L], y gamaglutamil transferasa [(dieta M) -18,1 ± 12,2 UI / L vs (dieta P) -10,9 ± 20,1 UI / L] mejorado con ambas dietas. Se demuestra que la reducción de peso secundaria a dos dietas hipocalóricas se asoció con una mejoría en la hipertransaminasemia y resistencia a la insulina en pacientes con NAFLD. 1 Nº 975 TÍTULO: Reference values and universal screening of thyroid dysfunction in pregnant women. AUTORES: Díaz-Soto G, Largo E, Alvarez-Colomo C, Martínez-Pino I, de Luis D. REVISTA: Endocrinol Nutr. 2014 Apr 16. pii: S1575-0922(14)00089-8. doi: 10.1016/j.endonu.2014.03.002. [Epub ahead of print] RESUMEN: La realización del cribado universal de la disfunción tiroidea en la mujer embarazada es uno de los temas de mayor controversia en la endocrinología actual. Frente a las guías clínicas de la ATA (American Thyroid Association) que reconocen la imposibilidad de llegar a un consenso al respecto y aconsejan el cribado selectivo en la población de riesgo (1), otras sociedades científicas abogan por el cribado universal en la población gestante, entre ellas la SEEN (Sociedad Española de Endocrinologia y Nutricion) (2). Sin embargo, los intervalos de normalidad de TSH y T4Libre en la mujer embarazada propuestos por la ATA son asumidos sin la valoración critica necesaria. El artículo publicado por Lombardo Grifol et al incide en este aspecto ya publicado previamente en el órgano de difusión de la SEEN. Resulta especialmente significativo como el intervalo de normalidad de la TSH en la población española de áreas muy distantes geográficamente, con diferentes técnicas de laboratorio y metodología estadística, difiere mucho de la aconsejada por las guías internacionales (TSH<2,5 uIU/mL durante el primer trimestre) y, a pesar de ello, es muy semejante entre si (3-5). En enero de 2013, en colaboración con los Servicios de Ginecología y Obstetricia y Análisis Clínicos, el Hospital Clínico Universitario de Valladolid inicia el cribado universal de la disfunción tiroidea. Durante el año 2013, fueron estudiadas 1316 mujeres en la 10ª semana de gestación evaluando niveles de TSH, T4Libre y autoinmunidad (Cobas 6000 Roche Diagnostics). Se calcularon los intervalos de normalidad para TSH y T4L en la 10ª semana de gestación una vez excluidas aquellas mujeres (11%) con patología tiroidea previa, autoinmunidad positiva y/o tratamiento modificador del perfil tiroideo según las recomendaciones para el cálculo de intervalos de normalidad de la IFCC (desarrollar siglas). Para ello se realizó la normalización de la distribución de los niveles de T4L y TSH mediante su trasformación logarítmica y el posterior cálculo de los intervalos de confianza para los percentiles 2,5 y 97,5, que corresponden a los límites inferior y superior de la normalidad, respectivamente (6). Los resultados obtenidos en nuestra población son semejantes a los publicados previamente en población española –Tabla 1- (3-5), pero difieren significativamente de los aconsejados por la ATA y la SEEN (1-2). Esta situación a pesar de llamativa no es exclusiva, sino que estudios recientes reportan intervalos de normalidad semejantes en mujeres embarazadas sanas en otros países lo que apoya la importancia del cálculo de los valores de normalidad para cada laboratorio (7). A este respecto, es importante resaltar como las guías americanas aconsejan el punto de corte de normalidad en 2,5 uIU/mL solo en el caso de no disponerse de valores de referencia para las técnicas propias y para la misma población a estudio. Además, a la vista de los resultados, los niveles en población española son persistentemente más elevados independientemente de la técnicas y la población estudiada. Obviamente, establecer un determinado intervalo de normalidad condiciona la práctica clínica, pero también supone importantes consecuencias económicas y asistenciales. En nuestra población y durante el año 2013, establecer como límite superior de la normalidad de TSH un valor de 2,5 uIU/mL hubiera supuesto la valoración y tratamiento con levotiroxina a dosis elevadas de 436 mujeres 2 gestantes, es decir un 38% de nuestra población. Frente al tratamiento de 130 mujeres (11%) según los criterios de normalidad calculados para nuestra área (TSH ≥ 4,05 uIU/mL). Además, es fundamental resaltar como de la totalidad de los diagnósticos de hipotiroidismo realizados durante el 2013 exclusivamente 62 mujeres (5%) presentaron niveles de TSH ≥ 5 uIU/mL, y de ellas tan solo 7 gestantes (0,6%) valores de TSH ≥ 10 uIU/mL clasificables como hipotiroidismos severos. En conclusión y desde nuestro punto de vista, el cribado universal está justificado ya que permite el diagnóstico y tratamiento adecuado de un porcentaje pequeño pero significativo de mujeres gestantes con hipotiroidismo que pudiera afectar a la adecuada evolución del embarazo y probablemente al desarrollo fetal e infantil (8-9). Sin embargo, la universalización del cribado exige del cálculo de los valores de normalidad para nuestra población y técnicas de laboratorio en cada hospital. El establecimiento universal de un punto de corte sin tener en cuenta las características diferenciadoras de cada población (ingesta de yodo, patología autoinmune subclínica, etc) no solo supone una importante sobrecarga asistencial con su consiguiente gasto económico asociado, sino también una importante carga psicológica durante un periodo especialmente sensible, e indudablemente el sobretratamiento de un importante porcentaje de nuestra población con el consiguiente riesgo añadido. 3 Nº 976 TÍTULO: Relation of the rs6923761 Gene Variant in Glucagon-Like Peptide 1 Receptor with Weight, Cardiovascular Risk Factor, and Serum Adipokine Levels in Obese Female Subjects. AUTORES: de Luis DA, Aller R, de la Fuente B, Primo D, Conde R. REVISTA: J Clin Lab Anal. 2014 Mar 28. doi: 10.1002/jcla.21735. [Epub ahead of print] RESUMEN: Los estudios del receptor del péptido similar al glucagón 1 (GLP-1) se han dirigido a la identificación de polimorfismos en el gen receptor de GLP-1 que puede ser un factor que contribuye en la patogénesis de la diabetes mellitus y en la presencia de factores de riesgo cardiovascular. Sin embargo, el papel de las variantes de GLP-1 sobre el peso corporal, factores de riesgo cardiovascular, y adipoquinas sigue siendo poco claras en pacientes obesos. Nuestro objetivo fue analizar los efectos del polimorfismo del receptor de GLP-1 rs6923761 en el peso corporal, factores de riesgo cardiovascular y los niveles de adipocitoquinas sericas en las mujeres obesas no diabéticas. Una muestra de 645 mujeres caucásicas obesos no diabéticas fue analizada de forma prospectiva. Se midieron la glucosa en ayunas, proteína C reactiva (PCR), la insulina, resistencia a la insulina (HOMA (HOMA)), el colesterol total, colesterol LDL, colesterol HDL, la concentración de triglicéridos y adipoquinas. También se determinaron el peso, índice de masa corporal (IMC), circunferencia de la cintura, la masa grasa por bioimpedancia, y presión arterial. Trescientos veintisiete participantes (50,7%) tenían el genotipo GG y 318 (49,3%) de los sujetos del estudio tenían los siguientes genotipos; GA (270, el 41,9%) o AA (48, el 7,4%) (segundo grupo). En el grupo salvaje (genotipo GG), IMC (1,8 ± 2,3 kg/m2, p <0.05), peso (3,1 ± 1,3 kg; P <0,05), la masa grasa (2,4 ± 1,1 kg, p <0,05), circunferencia de la cintura ( 2.7 ± 1.9 cm, p <0,05), los niveles de triglicéridos (10,4 ± 5,3 mg / dl, p <0,05), la interleucina 6 (IL-6) (1,5 ± 0,9 ng / dl, p <0,05), la resistina (1,1 ± 0,3 ng / dl, p <0,05) y leptina (30,1 ± 10,3 ng / dl, P <0,05) fueron más altos que el grupo mutante (GA + AA). Los datos de nuestro estudio revelaron una asociación con una disminución de los marcadores metabólicos y cardiovasculares en las mujeres obesas. El peso, IMC, masa grasa, la circunferencia de la cintura, los triglicéridos, la leptina, resistina y la IL-6 niveles en suero fueron más bajos en sujetos con alelo mutado que sin ese alelo. 4 Nº 977 TÍTULO: [Modified texture diet and useful in patients with nutritional risk]. AUTORES: De Luis DA, Aller R, Izaola O. REVISTA: Nutr Hosp. 2014 Jan 20;29(4):751-9. doi: 10.3305/nh.2014.29.4.7003. RESUMEN: El tratamiento nutricional de los pacientes con disfagia y / o personas de edad avanzada deben realizarse con un enfoque multidisciplinario y una herramienta principal es el cambio de la textura de los alimentos. Los pacientes con disfagia, que necesitan una dieta modificada de textura, por lo general no tienen unas necesidades de calorías y nutrientes diferentes a los mostrados por las personas de la misma edad y sexo, a menos que coexista una enfermedad. En estos pacientes, la textura de los alimentos debe ser individualizada según el paciente y la evolución en el tiempo de su enfermedad. El uso de la modificación de la textura en las dietas sin un control produce una clara disminución de la ingesta de calorías y proteínas, asi como trastornos nutricionales. Estos pacientes pueden tener otras enfermedades asociadas, lo que requeriría la modificación especial, como en el caso de la diabetes mellitus, la hipertensión, la osteoporosis y el estreñimiento. A veces es necesario usar productos artificiales para lograr diferentes texturas deseadas y platos precocinados. 5