THE ANGEL SCHOOL Nombre: Curso: GUÍA EVOLUCIÓN Introducción La biología evolutiva es el área de la biología (ciencia) que estudia la evolución biológica (Hecho y proceso) o sea, los cambios de las especies en el tiempo. Esta evolución biológica es explicada por medio de hipótesis y teorías (mecanismos) que se sustentan en evidencias. 1. Evidencias de la evolución orgánica La evidencia directa de la historia de la Tierra se apoya en disciplinas científicas, como la paleontología, geología, taxonomía, anatomía comparada, embriología, genética, bioquímica, biología molecular y biogrografía. Cada una de ellas ha contribuido desde su ámbito a la comprensión y representación del proceso que ha permitido que las formas vivientes cambiaran, generación tras generación, para permitir la colonización de todas las regiones del planeta. Paleontología: La mayor parte de los seres vivos que han habitado el planeta y desaparecieron en el tiempo no han dejado huella de su paso por la Tierra; sin embargo, unos pocos se han conservado en las rocas sedimentarias, a través de un proceso conocido como fosilización. El concepto de fósil significa “encontrado bajo la tierra” y se refiere a partes de plantas o animales o a cualquier impresión, trazo o vestigio morfológico dejado por organismos extinguidos. Los fósiles han preservado en algunos casos la detallada estructura de un organismo, de manera que, al observar secciones bajo el microscopio, se podría dibujar la forma de los vasos sanguíneos y nervios que constituían a un organismo vertebrado. Fósil de una araña en plena caza. Conservado en ámbar en el Valle de Hukawng en Myanmar (Birmania), se trata de uno de los fósiles más raros encontrados hasta la fecha, y se estima que tiene entre 97 y 100 millones de años de antigüedad. Congela el momento en que una araña joven ataca a una avispa en su red, a) Tipos de fosilización: La fosilización es un proceso lento, condicionado por factores geológicos y climáticos. Se reconocen diferentes tipos de fosilización. Compresión e impresión: la fosilización por compresión se da cuando un organismo o parte de él queda atrapado por sedimentos sin descomponerse por completo, por lo cual es posible rescatar restos orgánicos. La impresión de un fósil se obtiene cuando por presión o calor ambiental elevado, los residuos orgánicos desaparecen completamente, dejando una huella del organismo original. Petrificación: Cuando las partes sólidas, como huesos o caparazones, e incluso tejidos blandos, se reemplazan por minerales, como carbonato de calcio o sílice, los fósiles se denominan petrificaciones. Moldes: Se obtienen cuando el material que rodea a un organismo muerto se solidifica; los tejidos luego se desecan y el relleno se rellena con minerales que se endurecen, formando una copia exacta de las estructuras externas del organismo original. Las huellas de pisadas que luego se endurecen son un buen ejemplo de este proceso. Los lugares más apropiados para la fosilización son océanos y lagos, donde los depósitos sedimentarios, como areniscas y piedras calizas, se acumulan gradualmente. b) Fósiles vivientes: En la actualidad, subsisten algunas especies de plantas y animales que han conservado anatomía y formas de vida muy primitivas. Algunos ejemplos son el Nautilus, molusco cefalópodo abundante en el mesozoico, el Celacanto, pez del período Devónico, y el Ginkgo biloba, el género más antiguo de los árboles vivos, del cuales se conocen ejemplares de hasta 200 millones de años. c) Datación de fósiles: La edad de un fósil se puede estimar conociendo la vida media de un elemento radiactivo, que corresponde al tiempo necesario para que la mitad del isótopo inicial se transforme en otro llamado secundario. Así, conociendo la proporción de ambos elementos en la muestra estudiada, es posible estimar el tiempo transcurrido en la transformación y, en consecuencia, la edad del fósil. d) Evidencias evolutivas aportadas por la paleontología: En cada una de las cinco clases del subphylum Vertebrados se han encontrado fósiles que revelan la existencia de especies de transición o eslabones (principio de gradualismo) entre cada una de las clases evolutivas. Basándose en pruebas paleontológicas, se han llegado a establecer líneas evolutivas, como la de Ammonites, Trilobites o el linaje evolutivo del caballo. La genealogía del caballo fue descrita por Marsh en 1879, a partir de registros fósiles encontrados en diferentes estratos geológicos. En ella se pueden distinguir claramente tres tendencias: la reducción en el número de dedos, el aumento de la superficie de trituración de las muelas y el cambio de hábitos alimenticios. Este proceso abarcó unos 65 millones de años y se inició con Eohippus y culminó con Equus es una acumulación de cambios adaptativos relacionados con la presión ambiental. La comparación entre los diferentes organismos que se han fosilizado proporciona tres evidencias en relación al proceso evolutivo: Aumento de diversidad a lo largo del tiempo; la progresiva complejidad estructural de los seres vivos; y las graduales modificaciones anatómicas que indican una progresiva especialización. Taxonomía y Sistemática: A través de la historia, el hombre ha ensayado diferentes métodos y criterios para clasificar a los seres vivos. La Taxonomía es la disciplina científica que se preocupa de esta clasificación, basándose en un sistema jerárquico de grupos, ordenados según sus semejanzas. El actual sistema científico de clasificación se basa en el propuesto en 1735 por Carolus Linneo. Los seres vivos se agrupan en categorías taxonómicas: las especies se incluyen en géneros, varios géneros conforman una familia, las familias se agrupan en órdenes y los órdenes en clases. La siguiente categoría para animales y protistas es el phylum y para plantas y hongos la división; el último nivel taxonómico corresponde a reino. La taxonomía ha contribuido a establecer relaciones de parentesco en los distintos grupos, de acuerdo a las características morfológicas, fisiológicas y genéticas que comparten. El estudio de las relaciones evolutivas entre los organismos, o filogenia, está a cargo de la Sistemática. Los aportes de esta disciplina han permitido construir árboles filogenéticos, en los que se observa la historia evolutiva de los seres vivos desde el origen de los reinos y sus principales divisiones, hasta las especies que conocemos en la actualidad. La clasificación de los organismos puede basase en ancestros comunes. Si todos los subgrupos de un nivel taxonómico tienen un mismo ancestro, se denominan monofiléticos; si, por el contrario, provienen de varias líneas evolutivas, se llaman polifiléticos. Por ejemplo, se cree que los mamíferos evolucionaron de tres grupos de reptiles del Triásico. Las primeras diversificaciones evolutivas ocurrieron en el Cámbrico, hace 550 millones de años; produjeron muchas especies, de las cuales algunas se diversificaron aún más. Otros grupos taxonómicos se extinguieron y fueron sustituidos por otros que emergieron de otras ramas evolutivas. Los grupos taxonómicos extinguidos presentaban características fenotípicas que fueron seleccionadas negativamente por el ambiente; si las condiciones ambientales en el planeta hubieran sido distintas, otras especies, diferentes a las que hoy conocemos, poblarían nuestro medio. Anatomía comparada: Esta disciplina científica nace de las investigaciones preliminares por George Cuvier entre los años 1801 y 1805 y que culminaron con la publicación del libro “Lecciones de Anatomía Comparada”. Años más tarde, estos estudios se profundizaron en otros acerca del Reino Animal. Las evidencias evolutivas aportadas por la anatomía comparada, surgen de haber constatado que las semejanzas básicas entre los grupos de organismos son completamente independientes de la forma de vida que llevan. Richard Owen, en su “Anatomía y Fisiología Comparada”, desarrolla dos conceptos que han sido fundamentales en el estudio evolutivo de los animales: la homología y la analogía. Las extremidades anteriores del hombre, de un topo o de un murciélago, aunque superficialmente sean diferentes, están formadas por huesos, músculos y nervios en posiciones equivalentes. En el hombre, la mano cumple la función de prensión, en el topo de cavar y en el murciélago la del vuelo. Estas estructuras reciben el nombre de órganos homólogos, ya que tienen un origen evolutivo común, pero desempeñan distintas funciones. Existen órganos que cumplen funciones similares, pero las estructuras que los conforman no están relacionadas evolutivamente entre sí. Estos reciben el nombre de órganos análogos. Por ejemplo, las alas de una mariposa cumplen la función del vuelo, lo mismo que las alas de una paloma o las del murciélago; sin embargo, estas estructuras no tienen el mismo origen evolutivo. Otro ejemplo es el de los pulmones de los mamíferos y la tráquea de los insectos, que en su evolución han tenido una forma distinta de resolver la necesidad de obtener oxígeno. La evidencia de estos órganos homólogos y análogos en los seres vivos fue un importante avance en el perfeccionamiento de los estudios evolutivos, ya que permitieron construir filogenias basadas en el parentesco evolutivo de las especies y desechar las filogenias basadas en criterios funcionales. Durante mucho tiempo el estudio comparado de las estructuras morfológicas de los organismos emparentados fue la base de la construcción de la filogenia en los distintos hallazgos aportados por la paleontología. En la actualidad, es fundamental agregar los aportes de otras disciplinas científicas, como la genética y la biología molecular. Embriología: Los primeros estudios conocidos sobre el desarrollo de los seres vivos fueron realizados por Aristóteles. Sin embargo, se considera a Karl Ernst von Baer como el padre de la Embriología. Él introdujo el concepto de hojas embrionarias o germinativas comparativas en el desarrollo embrionario de los animales. La embriología estudia el crecimiento, formación y morfogénesis de los organismos desde que el óvulo es fecundado. Las pruebas embriológicas de la evolución se basan en el estudio comparado de la ontogenia o desarrollo embrionario de los animales. Todos los animales cuyos estados embrionarios son similares, estarían emparentados. El aporte de esta disciplina científica al estudio de la evolución proporciona ejemplos de embriones de diferentes animales con características semejantes. Resulta difícil distinguir entre los embriones de un pez, una tortuga, un pollo, un ratón o un hombre. Sin embargo, en el estado adulto, estas semejanzas no son tan evidentes o, sencillamente, no persisten. La semejanza de los embriones de un grupo taxonómico podría ser una prueba de que estos han evolucionado de un antecesor común. Genética: Esta disciplina científica nace a partir de la publicación de los experimentos realizados por Gregor Mendel en 1845. Los resultados de su estudio fueron redescubiertos en el presente siglo, lo que impulsó el desarrollo de la Genética. Los principios mendelianos, desconocidos para Darwin, a pesar de que fueron contemporáneos, habrían dado las evidencias a los hechos aportados por la teoría de la selección natural. Las ideas darwinianas y la genética moderna se complementaron después en la teoría neodarwiniana, conocida también como Teoría Sintética de la Evolución. La disciplina científica que abordó este estudio se conoce como Genética de Poblaciones. La selección natural, además de las mutaciones, migraciones, deriva génica y los cruzamientos no aleatorios inciden en la evolución de las poblaciones, lo que puede dar lugar a nuevas especies biológicas. Este proceso es el resultado de dos tendencias: por un lado, el aumento de la variabilidad genotípica por mutaciones y recombinaciones meióticas, y por otro, la reducción de esta variabilidad por una presión selectiva del medio. El estudio genético de los organismos facilita la comprensión de los mecanismos hereditarios que generan la variabilidad, cómo se mantiene esta variabilidad en las poblaciones y de qué manera contribuye a los cambios evolutivos. Bioquímica: La presencia de biomoléculas y macromoléculas con estructuras y función semejantes hizo pensar a los científicos que los organismos las han heredado de antepasados comunes, en el transcurso de la evolución. Por ejemplo, el ATP y los sistemas metabólicos que permiten regenerarlo, se encuentra en todos los seres estudiados y son similares a lo largo de las líneas evolutivas. La investigación bioquímica-evolutiva analiza también las semejanzas y diferencias en los pigmentos respiratorios de los animales. La tendencia evolutiva muestra que estos pigmentos tienen proteínas complejas con átomos metálicos en su estructura. Así, los moluscos y los artrópodos tienen el pigmento respiratorio hemocianina que contiene cobre. En los vertebrados, en cambio, hay hemoglobina, que incluye un átomo de hierro. Estas semejanzas funcionales y estructurales hacen pensar que estos organismos provienen de antepasados comunes. Otra evidencia aportada por la Bioquímica tiene relación con numerosas proteínas y enzimas levemente distintas en su composición aminoacídica: cuanto más emparentadas son las especies cuyas enzimas se compara, menor es la diferencia de su composición aminoacídica, especialmente a nivel del sitio activo. Hay proteínas que se han utilizado para estudiar la cercanía evolutiva de diferentes especies: antígenos y anticuerpos. La técnica inmunológica permite establecer y cuantificar las diferencias y semejanzas entre los antígenos de diferentes especies, por la acción de los anticuerpos sobre secuencias aminoacídicas específicas: cuanto más semejante es la composición de aminoácidos de un antígeno en estudio con el anticuerpo, más intensa será la reacción inmunológica. Por el contrario, cuando la semejanza es menor, menos intensa resulta la reacción. Biología Molecular: Las técnicas bioquímicas intentan encontrar relaciones evolutivas entre las especies. A partir de la secuencia de aminoácidos y del análisis del código genético se dedujeron los genes que controlan la síntesis de las proteínas estudiadas para establecer las relaciones de parentesco. Sin embargo hay una limitación que disminuye la validez de estos estudios: el código genético es degenerado, es decir, un mismo codón es el codificador para más de un aminoácido. La solución a este problema se encuentra en las técnicas de la Biología Molecular. Gracias a ellas se compara directamente la secuencia nucleotídica de genes específicos, más segura que la realizada en forma indirecta, a través de la secuencias aminoacídica. La Biología Molecular se apoya en un hecho simple: el material genético de las especies determina en gran medida, las características fenotípicas de los individuos y se hereda de generación en generación. Se pueden establecer así relaciones de origen evolutivo estudiando y analizando las semejanzas y diferencias del material genético de las diferentes especies. Las técnicas de la Biología Molecular permiten estudiar pequeñas cantidades de ADN; los fragmentos se digieren por enzimas de restricción y luego se determina base a base la secuencia nucleotídica. Con la ayuda de programas computaciones se comparan las secuencias y se identifican las regiones con un alto grado de homología, lo que permite postular posibles relaciones filogenéticas. Usando estas técnicas se han estudiado el origen evolutivo de diferentes organismos, como bacterias, protistas, hongos, plantas y del hombre. Se ha evaluado la proximidad genético-evolutiva entre la especie humana, los gorilas y los orangutanes, comprando el ADN mitocondrial. Se eligió este ADN porque tiene una menor tasa de cambio. Si se acepta que la tasa de cambio genético se debe al azar y que ocurre con frecuencia constante en el linaje, se puede postular que el hombre está evolutivamente más emparentado con el gorila, que con el orangután, y que ambos habrían derivado de un ancestro común. Los estudios realizados por la Biología Molecular han establecido que ciertos compuestos proteicos están presentes en organismos remotamente relacionados, como el hombre y una bacteria. Los hallazgos son aún más sorprendentes, pues, como hemos visto, hay proteínas como el citocromo c, que se encuentran en todos los seres vivos y aunque existen diferencias en la composición de algunos aminoácidos, la función y la estructura es la misma. En la tabla se muestran las diferencias en las secuencias de aminoácidos del citocromo c de diferentes especies. Los números indican la cantidad de aminoácidos en que difieren dos especies comparadas Hombre Mono Perro Canguro Pollo Tortuga Atún Polilla Levadura 0 1 11 10 13 15 21 31 45 Hombre 0 10 11 12 14 21 30 45 Mono 0 7 10 9 18 25 45 Perro 0 12 11 18 28 46 Cangur o 0 17 17 28 46 Pollo 0 18 28 49 Tortuga 0 32 47 Atún 0 47 Polilla 0 Levadura Biogeografía: Una de las observaciones que convenció a Darwin de la evolución de las especies fue su distribución geográfica, como en el caso de los pinzones de las Galápagos. Otro ejemplo estudiado es el de las moscas Drosophila, de las que existen unas 1500 especies, 500 de ellas en las islas Hawai. Hay también en estas islas más de 100 especies de moluscos terrestres que no existen en ninguna otra parte del mundo. La inusual diversidad de especies en algunos archipiélagos se explica con facilidad como producto de la evolución. Estas islas se encuentran muy alejadas de los continentes y de otros archipiélagos, por lo que muy pocos colonizadores pudieron llegar a ellas. Pero las especies que llegaron encontraron muchos nichos ecológicos desocupados, sin especies competidoras o depredadoras que limitaran su multiplicación. En respuesta a esta situación, las especies se diversificaron con rapidez, en un proceso que se llama radiación adaptativa (diversificación de especies que ocupan nichos ecológicos preexistentes). En referencia a este punto, y con respecto al caso de los pinzones de las Galápagos, quizá una sóla pareja de ellos, o una pequeña bandada, llegó a la isla. Se asentaron allí, alimentándose de semillas y bayas igual que hacían en tierra firme. Y lo que es más importante: allí no existían depredadores ni se daba competendcia alguna por los alimentos. Además, existía una amplia variedad de nichos ecológicos, sobre todo porque los insectos se había reproducido masivamente por las mismas causas. Los valles, las elevadas formaciones rocosas y los propios límites de las costas favorecieron la separación de poblaciones. Así, tras una rápida proliferación, empezó a dejarse sentir una competencia por el alimento,los pinzones se dividieron en grupos y se separaron unos de otros. De este modo, en aislamiento genético, comenzó un proceso de especialización que, a su vez, dio lugar a nuevos procesos de separación. Algunos grupos permanecieron en el suelo y otros se alojaron en las ramas de los árboles; muchos se transformaron en insectívoros y otros hasta utilizan púas de cactus par escarbar en las grietas en busca de larvas. Alguna pareja se "atrevió" a cruzar a las islas vecinas, convirtiéndose en "fundadora" de nuevas poblaciones que sufrirían los mismos procesos. Así fue como llegaron a formarse las 13 especies actuales de pinzones que habitan en las Islas Galápagos, que actualmente constituyen una subfamilia propia: Geospiza. 2. Teorías sobre el origen de las especies Las primeras explicaciones acerca de cómo evolucionaron las especies surgieron en Grecia. Los escritos de filósofos y matemáticos de la época, como Tales de Mileto, Aristóteles, Anaximandro, Empédocles y Epicuro, revelan una búsqueda de explicaciones naturalistas para dilucidar los fenómenos de la variación de las especies. La diversidad de los seres vivos y su adaptación a los distintos ambientes fue explicada por dos teorías: fijismo y transformismo. El fijismo sostenía que las especies eran inmutables, independientes y estáticas, es decir, no habían cambiado sus características desde que surgieron por primera vez en el planeta. Esta idea perduró hasta mediados del siglo XVIII. Linneo y Cuvier fueron algunos de los científicos que sostenían esta postura. Por su parte, el transformismo sostenía que las especies cambian en el transcurso del tiempo, dando origen a otras diferentes. Esta teoría surge en contraposición a la idea del fijismo y fue planteada por Lamarck. En la actualidad, lo hechos aportados por las diferentes disciplinas científicas permiten establecer que la evolución es un proceso continuo que ha transcurrido en un período largo de tiempo. En ese período, las especies surgen, se desarrollan y dan origen a nuevas especies; unas han colonizado con éxito los ambientes naturales del planeta y otras, que no han tenido éxito, se han extinguido. A continuación se tratan algunas teorías transformistas. a) Teoría de Lamarck. En 1809, Jean Baptiste Lamarck propone la idea del transformismo en la evolución. Este proceso fue explicado como una progresión, desde los organismos más sencillos y pequeños, pasando luego a las plantas y animales más complejos, hasta llegar al máximo de la perfección: el hombre. La teoría evolutiva de Lamarck fue formulada tomando en consideración cuatro principios evolutivos: Existencia de un impulso interno hacia la perfección en todos los seres vivos. Capacidad de los organismos para adaptarse a los cambios ambientales. Principio de uso y desuso de los órganos. La herencia de los caracteres adquiridos. El principio del uso y desuso plantea que los organismos se fortalecen, debilitan o adquieren importancia según el uso que se les dé: el uso los perfecciona y el no uso los reduce o atrofia. Los caracteres que fueron adquiridos se transmiten de generación en generación; si las variaciones se mantienen en el tiempo, la descendencia seguirá manifestando cambios hasta lograr una modificación definitiva. La creencia de principio de los caracteres adquiridos se mantuvo hasta fines del siglo XIX, cuando el biólogo alemán August Weismann demostró la imposibilidad de heredar a los descendientes caracteres adquiridos por los progenitores. Weismann planteó que al iniciarse el desarrollo embrionario de un ser vivo, el material hereditario, que llamó germinoplasma, se aísla tempranamente de otra parte que denominó somatoplasma, la cual constituirá el cuerpo del individuo. El somatoplasma se muere con el individuo, en tanto que el germinoplasma se prolonga a la generación siguiente, a través de la reproducción. Hoy sabemos que si un individuo de tez clara se tuesta al sol, tendrá hijos de tez clara que se volverán morenos sólo si se exponen al sol. De acuerdo a la teoría de Lamarck, en cambio, cada generación heredaría el color de tez oscuro. Años más tarde, se hizo evidente que el medio puede actuar en ocasiones sobre el material hereditario produciendo mutaciones; sin embargo, el resultado de la acción del medio es aleatorio y no tiene relación con la adaptación como lo planteaba Lamarck. b. Teoría de Darwin. El interés de Darwin por la diversificación de las especies y su origen, nace a partir de conversaciones sobre la inmutabilidad de las especies sostenidas con su abuelo Erasmus y el descrédito de las ideas lamarquianas en el ámbito científico de la época. Sin embargo, Darwin a los 18 años no dudaba de la inmutabilidad de las especies. A los 22 años, en 1831, Darwin se embarcaba en el bergantín, HMS Beagle. El objetivo de Darwin era estudiar la diversidad de las especies en distintas latitudes del planeta. En su regreso a Inglaterra, en 1836, agrupa en sus notas tres observaciones claves que le hacen dudar de todas las concepciones existentes hasta ese momento. La primera observación determinante las hizo en las Islas Galápagos: un archipiélago de 13 islas volcánicas con hábitats muy variados. En ella se encontró que los pinzones o gaviotines diferían de isla en isla y presentaban, en general, un parecido con los parecidos en Sudamérica. Se supone que toda esta variedad se originó desde una especie ancestral, que llegó desde el continente. Estos pinzones diferían en su tamaño, en la forma de sus picos y en el nicho ecológico. El más grande se alimentaba de semillas y vivía sobre el suelo y el más pequeño se alimentaba de insecto y vivía sobre los árboles. De esta observación surgen dos problemas: ¿por qué en este grupo de islas los pinzones difieren en su morfología? Y, ¿cuáles son las diferencias con los encontrados en Sudamérica? Las restantes observaciones las recabó en su viaje por Sudamérica. En ese viaje se dio cuenta que algunas especies estaban sustituidas en otras regiones por otras muy semejantes. Por ejemplo, el avestruz del viejo mundo se representaba en las pampas de la Patagonia por una especie similar: el ñandú. Por otro lado, encontró en las pampas restos fósiles de grandes mamíferos cubiertos por armaduras óseas. A estos animales les llamó armadillos fósiles y encontró en el mismo lugar armadillos vivientes. De esta observación surgió una nueva interrogante: ¿por qué animales actuales tienen las mismas características de algunos ya extinguidos? A partir de estas interrogantes Darwin llegó a la idea de la transmutación o evolución de las especies. En el año 1838 postuló el mecanismo que explicaba la evolución: la selección natural. Años más tarde, en 1859 publicaba el libro Origin of Species by Means of Natural Selection, donde expone el resultado de sus observaciones a través de los viajes. El naturalista británico Alfred Wallace, estudiando especies de flora y fauna en las Islas Orientales, también llegó a la idea de la selección natural. Su trabajo fue leído en la misma sesión de la Linnean Society. Los principios en los que se apoya la selección natural son: El mundo no es estático: evoluciona. Las especies cambian continua y gradualmente; se originan unas y se extinguen otras. El proceso evolutivo es gradual y continuo: no consiste en saltos bruscos o discontinuos. Los organismos semejantes están emparentados y descienden de un antepasado común. El proceso evolutivo para Darwin consta de dos etapas: la primera se produce cuando surge la variabilidad; la segunda consiste en una selección a través de la supervivencia en la lucha por la existencia. A continuación se da una serie de antecedentes para comprender mejor la idea de la selección natural. Inspirado en un principio planteado por Malthus, según el cual “las poblaciones naturales crecen en proporción geométrica y el alimento sólo lo hace en una proporción aritmética”. Darwin pudo inferir que, dada la escasez de alimentos, los organismos deben luchar por la existencia, lo que mantiene el número de individuos de cada especie más o menos constante. En consecuencia, los individuos que presentan la combinación de características más idónea para hacer frente al ambiente, tendrán mayores probabilidades de sobrevivir, reproducirse y dejar descendientes. El proceso de evolución no actúa sobre un individuo drásticamente; en una acción lenta y progresiva sobre un grupo o población y se da a distintos estratos de edad. En la selección natural no son los mejores los que sobreviven, sino aquellos con una mayor potencial reproductivo. La selección actúa sobre la variabilidad fenotípica de la población; perecen aquellos organismos cuyos rasgos reducen su viabilidad y potencial reproductivo; sobreviven los que presentan características que responden de mejor manera a las exigencias ambientales. La herencia de las pequeñas variaciones escogidas por la selección, es fuente de una evolución continua. Con relación al papel del medio ambiente, las teorías de Darwin y Lamarck coinciden en apoyarse en el principio de la utilidad para la especie. Una característica puede ser ventajosa o perjudicial para las poblaciones, dependiendo de las condiciones ambientales. Para Darwin, el principio de utilidad va acompañado de los conceptos de adaptación y selección natural. Para Lamarck la utilidad se basa en el uso y desuso de los órganos. Ambos coinciden en la utilidad que tienen los cambios morfológicos para la sobrevivencia de las especies. La teoría de la selección natural se enfrentó con el problema de explicar las grandes tendencias evolutivas. Si bien da cuenta de la aparición gradual de caracteres con gran valor adaptativo por acción de la selección natural, no responde al surgimiento abrupto de rasgos de igual importancia. Los postulados de Darwin fueron aceptados, prácticamente, por todos los científicos de la época y posteriores. Sin embargo, el principio de gradualismo fue cuestionado por algunos evolucionistas de su tiempo. Años más tarde, Hugo de Vries y Goldschmidt defendían la teoría saltacionista, señalando que las nuevas especies se originaban por mutaciones. c) Teoría Sintética de la Evolución: Esta teoría es el resultado de la síntesis de un grupo de biólogos: Huxley, Dobzhansky, Simpson y Mayr, elaborada a mediados del siglo XX, que se conoce también con el nombre de neodarwinismo, ya que combina las ideas de Darwin y Mendel (el padre de la genética), ampliando sus postulados e integrándolos con la Teoría Cromosómica de la herencia, el concepto biológico de especie, la genética de poblaciones, la bioquímica y la citología. La evolución se produce a través de la selección natural. A través de este mecanismo, se seleccionan organismos cuyos rasgos responden de mejor manera al medio ambiente y que se reproducen en mayor número y en menor tiempo. La enorme variabilidad genética que existe al interior de las poblaciones naturales, corresponde al sustrato sobre el que actúa el proceso evolutivo. La teoría sintética de la evolución proporciona un contexto diferente a los planteados anteriormente: el poblacional. En este contexto, el concepto de población se entiende como el grupo de organismos que se reproducen entre sí y que comparten un reservorio génico (la suma de los alelos de todos los individuos de una población). La evolución sería el resultado de los sucesivos cambios a través del tiempo en la composición relativa del reservorio génico. G. Hardy y G. Weinberg plantearon en 1908, en forma independiente, un principio que relaciona los organismos de una población con los cambios en la frecuencia de un alelo. Según este principio, en una población de gran tamaño de individuos, que se reproducen sexualmente y al azar, no se modificarían las frecuencias genotípicas y génicas de una generación a otra; es decir, no habría evolución. En una población natural, el equilibrio propuesto por Hardy-Weinberg no se mantiene, principalmente, por la acción de la selección natural, además de las mutaciones, migraciones, la deriva génica, los cruzamientos no aleatorios y por diferentes factores bióticos y abióticos. Todos estos factores alteran la composición genética de la población y conducen a la evolución. Tessier, otro investigador, señala que la variabilidad de las especies se debe principalmente al grado o “fuerza” de las mutaciones. Luego, la selección natural tiende a eliminar los genes desfavorables para las condiciones de supervivencia de la población. La teoría sintética de la evolución explica el proceso evolutivo a través de la genética de poblaciones e intenta describirlo con ayuda de modelos matemáticos. Los detractores de esta teoría señalan que el valor evolutivo de la selección es discutible, ya que la selección no explica cómo un grupo taxonómico se transforma en otro sin dejar más huellas que los fósiles, y como unos grupos desaparecen, mientras que otros sobreviven en las mismas condiciones de vida. Otro aspecto que se critica de la teoría sintética de la evolución es que el rol de las mutaciones en la evolución se sobrevalora, ya que una serie de mutaciones puede explicar fácilmente alteraciones del metabolismo, pero no la aparición de órganos complejos. El papel que juzga el azar es otro de los temas cuestionados. Sus detractores sostienen que la evolución ha tenido en todos los tiempos una tendencia hacia una finalidad: un órgano específico no puede aparecer por efecto del azar. Durante el presente siglo se han plateado otras teorías evolutivas que intentan explicar cómo se ha producido la evolución. Entre ellas podemos mencionar la teoría del equilibrio puntual de Eldredge y la teoría neutralista de M. Kimura. La teoría del equilibrio puntual sostiene que la evolución no tiene un carácter gradual, sino que en muchos casos se produce a saltos. La teoría neutralista afirma que la mayor parte de las mutaciones que sufre el genoma de una especie, origina genes neutros que no alteran la supervivencia de los organismos. Sin embargo, al heredarse estas mutaciones pueden modificarse y provocar la aparición de nuevas especies. 3. El proceso de la evolución En las secciones anteriores la idea fue abordar las pruebas empíricas otorgadas por diferentes disciplinas científicas y explicar las tres teorías evolutivas más ampliamente desarrolladas. Tomando como referente la teoría sintética de la evolución, es preciso ahora ahondar en el mecanismo que actualmente explica el origen de las especies a través de la evolución orgánica. Especie biológica: El concepto de especie se refiere a un grupo de poblaciones naturales que se cruzan entre sí y se hallan aisladas reproductivamente de los demás grupos. La especie se considera una unidad evolutiva discreta e independiente, ya que puede intercambiar alelos entres sus poblaciones, pero no puede transferirlos a individuos de otras especies. Esta unidad evolutiva comparte un acervo común de genes, de manera que la característica hereditaria de cualquier integrante de la especie se puede transmitir parcialmente a otro individuo de la siguiente generación, en cualquier lugar de su distribución. Si dos poblaciones de la misma especie dejan de aparearse, darán lugar a variedades, razas, subespecies, y por último, a especies distintas. Todo esto acontece en un largo proceso evolutivo de millones de años, lo que constituye la base de la especiación. Las especies no son unidades estáticas, son etapas de un proceso de cambios continuos, potencialmente infinitos. La evolución tiene como producto, la formación de nuevas especies, que surgen en la naturaleza y que se pueden producir potencialmente en la actualidad en forma artificial con técnicas de Biología Molecular. Mecanismos de especiación: La especiación se inicia con una primera etapa en la que se produce el aislamiento reproductivo, con la consiguiente interrupción del flujo génico; en una segunda etapa, en la cual el aislamiento reproductivo se completa, ocurre la divergencia genética y la incompatibilidad reproductiva favorecida por la selección natural. a) Especiación geográfica o alopátrida. La especiación alopátrida se produce cuando una población de similar constitución genética que habita un área extensa, se separa por accidentes geográficos, como ríos, mares, montañas o desiertos. Esta separación podría conducir a la formación de razas geográficas, de las cuales surgirían nuevas especies. La especiación geográfica se produce en dos etapas. En la primera, las dos poblaciones se aíslan geográficamente y entre ellas no hay intercambio genético. En estos grupos surge una divergencia genética que será fundamental para la especiación. La segunda etapa se produce cuando se originan cruzamientos entre los miembros de ambas poblaciones, tras haber reanudado el contacto. El producto que se obtiene está constituido por individuos estériles o inviables. En estas condiciones ya se han producido mecanismos de aislamiento reproductivo entre ambas poblaciones, de manera que los grupos pueden coexistir en el mismo territorio sin intercambiar genes, evolucionando independientemente. b) Especiación simpátrida: Se produce por cambios genéticos en poblaciones que habitan la misma región geográfica, pero que, pese a vivir juntas, divergen hacia especies plenas, debido a que surgen mecanismos de aislamiento reproductivo que hacen posible su especiación. Mecanismos de aislamiento reproductivo El mecanismo de aislamiento reproductivo es fundamental para producir la divergencia genética entre las poblaciones. En el modelo de especiación alopátrida el aislamiento reproductivo se inicia después de la separación geográfica de las poblaciones naturales; en el modelo simpátrido, la especiación se inicia con una primera etapa en la que se produce el aislamiento reproductivo. Este aislamiento se debe a la divergencia genética entre las poblaciones, que produce la interrupción del flujo génico ente los individuos. Posteriormente, el aislamiento se completa al ser favorecido por la selección natural. Como producto del aislamiento reproductivo se establecen barreras biológicas previas a la formación del cigoto, los llamados mecanismos de aislamiento precigóticos, o bien, mecanismos postcigóticos, es decir, posteriores a la formación del cigoto. Mecanismos de aislamiento pre-cigóticos: Aquellos que impiden el apareamiento entre miembros de distintas poblaciones y evitan la formación de una descendencia híbrida. Aislamiento Se produce cuando las poblaciones ocupan el mismo territorio, pero sus hábitats son distintos, ecológico por lo que no están en contacto. Un ejemplo de aislamiento ecológico se observa en las especies del género Ceanothus de California. Algunos de los arbustos representantes de este género se encuentran en un tipo particular de suelo. Otros, con mayor rango de tolerancia habitan suelos con condiciones más adversas. Aislamiento Se da cuando la atracción sexual entre machos y hembras es débil o no se produce. Los etológico destellos de las luciérnagas, el colorido del pavo real, el canto de los pájaros o el croar de las ranas, constituyen señales o rituales específicos de apareamiento. Es un mecanismo muy fuerte de especiación en poblaciones simpátridas. Aislamiento Se produce cuando el apareamiento de los animales o la floración de las plantas ocurren en temporal estaciones distintas o bien en distintos momentos del día. Por ejemplo, la mayoría de los mamíferos cuentan con épocas de celo bien definidas, controladas por la temperatura o duración de la luz. Aislamiento Se produce cuando la estructura reproductiva es diferente, lo que impide la copulación en los mecánico animales o la transferencia de polen en los vegetales. Un ejemplo lo constituye la especialización en la estructura de la flor; Su color, forma y aroma, las hacen atractivas a determinadas especies polinizadoras y a otras no. Aislamiento Se produce cuando los gametos no son compatibles. Generalmente este aislamiento se gamético establece por inviabilidad de los espermios en el tracto femenino de los animales o bien porque el polen no es reconocido en el estigma de las flores. El aislamiento gamético es muy importante en animales marinos que liberan sus óvulos y espermios en el agua, produciéndose la fecundación en el medio externo. En este caso, las sustancias químicas, conocidas como feromonas cumplen un rol muy importante, tanto en la sincronía de la ovulación por parte de la hembra y la liberación de espermios por parte del macho, como en el reconocimiento específico de estos. Mecanismos de aislamiento poscigóticos: Se producen después de la formación del cigoto híbrido interespecífico, debido a incompatibilidades anatómicas o fisiológicas que reducen la viabilidad o fertilidad de la descendencia híbrida Inviabilidad Se produce cuando los cigotos híbridos no llegan a desarrollarse o bien no alcanzarla madurez de los sexual. Por ejemplo, Moore realizó cruzamientos entre 12 especies del género Rana: en híbridos algunos cruzamientos no se produjo segmentación; en otros se llegó al estado de blástula, pero no a la gastrulación. Otro ejemplo de este tipo de aislamiento se produce en el cruzamiento de carnero y cabra; hay fecundación, pero los embriones mueren en las primeras etapas del desarrollo embrionario. Esterilidad Se da cuando los individuos híbridos son incapaces de producir gametos funcionales. La de los esterilidad se produce por alteraciones cromosómicas en el proceso de formación de las células híbridos germinales o por la interacción entre el citoplasma de una procedencia y los gametos de otra. Un ejemplo clásico de este tipo de aislamiento es la mula, un híbrido estéril. Degradació Se produce cuando la descendencia de los híbridos presenta fertilidad o viabilidad reducida. En n de los vegetales se conoce un gran número de casos de degradación de los híbridos. En diferentes híbridos especies de algodón, por ejemplo, los descendientes de F1 son fértiles, pero los híbridos F2 mueren. 4. Evolución de la especie humana La variabilidad de los grupos humanos puede ser explicada en una dimensión evolutiva a partir del análisis de los grupos taxonómicos que le precedieron en el tiempo y que surgen a partir de la línea evolutiva de los primates. Evolución de los primates: Los primeros representantes de la clase mamíferos surgieron hace 200 millones de años: eran carnívoros y semejantes a un ratón, sus hábitos eran nocturnos y habitaban un ambiente dominado por los reptiles. Hace unos 65 millones de años, estos mamíferos primitivos comenzaron una gran expansión que originó tres grupos diferentes: los monotremas, los marsupiales y los placentarios. De este último grupo surgieron los organismos del orden de los primates. Los primates se caracterizan por tener órbitas oculares redondeadas, cinco dedos, pulgar oponible, las uñas dejan libre la zona táctil (característica que favoreció la motricidad fina). Los primeros primates eran de vida arbórea, con adaptaciones visuales, como la tendencia de los ojos a la posición frontal y, por lo tanto a una visión estereoscópica; adaptaciones posturales, con tendencia a la posición erguida, producto de la orientación vertical de la cabeza. El orden primates se divide en dos familias: prosimios (lemures, társidos, tupaideos) y primates superiores o antropoides (monos del Viejo y Nuevo Mundo y homínidos). a) Homínidos: Los homínidos agrupan a los antropomorfos o póngidos y al hombre. Estudios realizados por Leakey en un fósil del Mioceno, denominado Dryopithecus o procónsul, sugieren que, a partir de él surgieron dos líneas evolutivas: una dio origen a los póngidos y otra al Ramapithecus, un supuesto antepasado del hombre. Los procónsules habitaron zonas boscosas y volcánicas en Africa Oriental hace unos 25 o 30 millones de años. Se piensa que los grandes incendios en esa zona provocaron migraciones hacia regiones más abiertas, expandiendo así su distribución. En Koru, una localidad africana, se han encontrado alrededor de 200 muestras fósiles de procónsul, algunas de ellas muy similares a los antropomorfos actuales. Los antropomorfos modernos agrupan cuatro géneros: Hilobates (gibones), Pongo (orangutanes), Pan (chimpancés) y Gorilla (gorilas). Leakey encontró en Kenia restos fósiles de mandíbulas y dientes pertenecientes a un antecesor en la línea evolutiva humana, semejante a los monos antropomorfos. Este animal se denominó Kenyapithecus y vivió durante el Pleistoceno, hace unos 14 millones de años. b) Ramapithecus: Es un homínido que surgió entre unos 10 y 15 millones de años atrás. De acuerdo al hallazgo de restos fósiles de maxilares, la arcada dental era pequeña y ancha, se alimentaba de semillas, y se estima que su estatura era baja y con tendencia a la posición erecta. Esta especie pesaba entre 20 y 40 kilógramos, tenía gran capacidad para la braquiación, pero también era capaz de descender al suelo para buscar alimento. De este grupo se originan los homínidos de cuerpo erguido. Los antropólogos, basados en evidencias fósiles, han identificado dos especies de Ramaphitecus: R. Brevosti y R. Wicheri. Para un importante número de ellos, Ramaphitecus constituye un protohomínido que dio origen a etapas protohumanas y prehumanas de la evolución del hombre. Sin embargo, algunas evidencias moleculares señalan que la separación de los antropomorfos y los humanos sólo se produjo hace 6 millones de años. De ser así, el Ramaphitecus no pertenecería a la línea humana. Según los registros fósiles estudiados por Pilbeon en la Universidad de Harvard, Ramaphitecus habría tenidos una evolución paralela con los homínidos y no una ascendencia común. Proceso de hominización: En el proceso evolutivo del hombre se pueden distinguir cuatro fases: la prehumana, representada por el género Australopithecus; la protohumana, represetnada por Homo habilis; la fase humana antigua, correspondiente a Homo erectus; y la humana moderna, correspondiente a Homo sapiens. El proceso de hominización se inicia lentamente a partir del momento en que un homínido se separa de la línea ancestral. En el siguiente cuadro se resumen las características de las principales especies que habrían participado en el proceso de hominización: Género Especie Australophitecus A. africanus Homo Datación (en mill.de años) 3 Características generales 1,2 m de altura, 20-35 kg de peso Bípedos y de dieta omnívora A. robustus 2,3 - 1,3 Arcos supreorbitales más pronunciados. No era un bípedo muy eficaz y su dieta era más bien herbívora (¿partición de nicho?) H. habilis ? Contemporáneo a Australophitecus (otros lo creen posterior) No era bípedo eficiente H. erectus 1,5 - 0,1 Tamaño corporal similar a nosotros Postura erguida (por varias modificaciones en el esqueleto) Muy hábil en uso de herramientas Cambiaron de nómades a sedentarios tras dominar el fuego, ocuparon cuevas H. sapiens 100 mil a 35 mil Gran capacidad motriz con las manos neanderthalensis años Eran cazadores, desarrollo de industria lítica H. sapiens 35 mil años a la Estructura corporal menos robusta sapiens actualidad Desarrollo de funciones cerebrales complejas Herramientas de diversos materiales Pinturas rupestres Cap. craneana (en cm3) 400 500 650 750 - 1250 1300 - 1400 1500 Eras y Períodos Geologicos 5. Origen y diversificación de la vida El origen de la vida se ha intentado explicar mediante varias hipótesis. Entre los numerosos interrogantes que los científicos y pensadores se plantearon a lo largo de los siglos acerca de "la vida", la pregunta sobre el origen de los organismos que los rodeaban tuvo un papel central. Ante la ausencia de un mecanismo claro que explicara la permanente aparición de nuevos animales, muchos se volcaron hacia la llamada idea de la generación espontánea. Desde épocas muy antiguas, varias culturas creían que los seres vivos simples, tales como los gusanos, los insectos, las ranas y las salamandras podían originarse espontáneamente en el polvo o en el cieno; que los roedores se desarrollaban de los granos húmedos y que los pulgones de las plantas se condensaban a partir de una gota de rocío. Un científico belga, Jan van Helmont (1577-1644), partidario de esta idea, realizó una experiencia para demostrar la existencia de este fenómeno, y la registró de esta manera en su libro Ortus Medicinae, en 1667: " ...Las criaturas tales como los piojos, garrapatas, pulgas y gusanos son nuestros miserables huéspedes y vecinos, pero nacen de nuestras entrañas y excrementos. Porque si colocamos ropa interior llena de sudor con trigo en un recipiente de boca ancha, al cabo de veintiún días el olor cambia, y el fermento, surgiendo de la ropa interior y penetrando a través de las cáscaras de trigo, cambia el trigo en ratones. Pero lo que es más notable aún es que se forman ratones de ambos sexos, y que éstos se pueden cruzar con ratones que hayan nacido de manera normal.... pero lo que es verdaderamente increíble es que los ratones que han surgido del trigo y la ropa íntima sudada no son pequeñitos, ni deformes ni defectuosos, sino que son adultos perfectos..." Esta experiencia resultó un evento muy interesante en la historia de la ciencia. A pesar de que las condiciones experimentales no estaban controladas y no había prueba de que los eventos descriptos por van Helmont de hecho ocurrieran, este trabajo apoyó la idea de la generación espontánea. Tendrían que pasar más de 200 años para llegar a la refutación final de la idea de la generación espontánea. Pasada ya la primera mitad del siglo XVII y la idea de la generación espontánea todavía seguía presente en las mentes de muchos pensadores. En 1668, el toscano Francisco Redi (1626- 1697), médico del gran Duque de Etruria, publicó un libro titulado "Experienze in torno de la generazione deg'Insetti" donde planteó un experimento sencillo pero contundente para refutar las creencias acerca de la aparición súbita y espontánea de los seres vivos. La preocupación de Redi era investigar el origen de los gusanos que aparecían en la carne en descomposición. Para dilucidar si era cierta la noción de que los gusanos surgían por generación espontánea, de Jan van Helmont, o si estos organismos tenían otro origen, Redi llevó a cabo un experimento en el que puso carne de serpiente recién muerta en un grupo de recipientes de boca ancha, algunos con tapas, algunos cubiertos con una tela delgada y otros abiertos, y observó que las larvas aparecían solamente en los frascos abiertos. La explicación fue que los gusanos aparecían sólo en los frascos en los que las moscas podían entrar y depositar sus huevos. El experimento de Redi fue modelo en su época ya que, si bien no controló todas las variables, fue el primer estudio experimental en el que un naturalista utilizó los llamados "testigos". Los resultados de Redi no fueron generalizados a otros organismos más pequeños, pero su experimento sentó las bases para una extensa polémica sobre la generación espontánea de los seres vivos en años subsiguientes. En 1676, estudiando al microscopio una muestra de agua de un charco, Antonio Van Leeuwenhoek (1632-1723), encontró organismos vivos a los que llamó "animálculos": así, se abría ante sus ojos y los de los demás observadores un mundo microscópico. Gran cantidad de personas, incluso los mismos reyes, viajaban a verlo para observar las maravillas ocultas que aparecían a través de las lentes. La llegada de la microscopia durante el siglo XVIII mostró un mundo microscópico enormemente diverso pero, paradójicamente, llevó a que se reavivara con fuerza la creencia en la generación espontánea apoyada en el pasado por estudiosos como Van Helmont. Como hemos visto, la noción de generación espontánea había sido ya rechazada por varios científicos, entre ellos Francesco Redi. En el caso de los "animálculos", la idea de la generación espontánea se restringía a los microorganismos simples, no a los animales visibles por todo el mundo. Aparentemente, sólo era necesario poner sustancias en descomposición en un lugar cálido durante un corto período y las minúsculas "bestias vivas" aparecían bajo la lupa ante los propios ojos. Al menos así pensaba van Leeuwenhoek. De esta forma, a pesar de que la generación espontánea había sido refutada, al menos para el caso de los gusanos, el origen súbito de los microorganismos había resurgido con el advenimiento de microscopios mejorados. Así, en 1748, todavía era una explicación posible para el origen de los seres vivos. Tanto era así que aún provocaba encendidas discusiones entre los científicos partidarios y detractores de esta explicación al origen de nuevos seres vivos. John Needham (1713-1781), un jesuita inglés, y el investigador italiano Lázaro Spallanzani (17291799) sostuvieron una célebre disputa acerca del origen de los microorganismos en caldos de cultivo. Needham, que había adquirido celebridad en la Royal Society, atribuía la presencia de microorganismos en los caldos a la presencia de una "fuerza vital". En 1748, realizó un experimento que sería famoso. Needham colocó caldo de carnero recién retirado del fuego en un tubo de ensayo y cerró el tubo con un corcho. Luego, lo calentó "para matar a todos los animalillos o huevos que pudieran quedar dentro de la botella". Después de algunos días, el caldo estaba lleno de microorganismos. Needham dedujo entonces que estos microorganismos se habían originado de la materia inanimada, y creyó demostrar así la existencia de la generación espontánea, al menos, en los microorganismos. Esta polémica continuaría, todavía por más de un siglo. Por su parte, Spallanzani era contrario a la idea de la generación espontánea que todavía rondaba los ámbitos científicos. Spallanzani era un investigador cuidadoso, que se ordenó como sacerdote, pero se entregó con ardor en poner en duda todas las preconcepciones del momento referidas al mundo natural. Con respecto al experimento realizado por Needham, Spallanzani pensó que el hervor había sido insuficiente y que el caldo no había sido esterilizado adecuadamente. Además, sospechaba que el corcho no cerraba herméticamente el frasco. Por lo tanto, en el año 1768, realizó una nueva serie de experimentos en los que hirvió entre 30 y 45 minutos frascos que contenían un caldo nutritivo. Algunos de los frascos estaban sellados y otros no. Spallanzani observó que en los frascos sellados no había microorganismos y demostró así que la generación espontánea no se producía. Needham, sin embargo, seguía sosteniendo lo contrario y fue a París donde buscó el apoyo del célebre zoólogo Georges Louis Leclerc, conde de Buffon (1707-1788). Ambos personajes desarrollaron nuevas teorías que no tenían ningún correlato con la experiencia. Buffon y Needham objetaron a Spallanzani el procedimiento experimental que había llevado a cabo, sosteniendo que el prolongado hervor había matado la "fuerza vital", algo imperceptible y desconocido que posibilitaba la aparición de la vida en la materia inanimada. Spallanzani continuó realizando otros experimentos, demostrando una y otra vez su postura. Finalmente, se dedicó a realizar otros estudios como los de reproducción animal, fecundación e inseminación artificial en animales, considerando que este tema ya estaba cerrado. Pero aún no estaba dicha la última palabra. De esta manera, a fines del siglo XVII, la problemática sobre la generación espontánea de los microorganismos, varias veces echada por tierra, aún seguía viva. Es en ese entonces que Louis Pasteur (1822-1895) entra en la escena de esta encendida y antigua polémica. Sus estudios abarcaron los temas más diversos y muchos constituyeron verdaderas proezas científicas. Este químico francés, entre muchas otras cosas, sentó las bases de la cirugía aséptica, realizó estudios que ayudaron a atacar el carbunco (una enfermedad infecciosa muy común en aquel tiempo), produjo una vacuna contra la rabia y salvó a la industria de la seda francesa de la extinción al descubrir cómo se transmitía una enfermedad que atacaba al gusano de seda. En 1858, Pasteur hizo su ingreso en la candente problemática de la generación espontánea. El 20 de diciembre de 1858, en una nota dirigida a la Academia de Ciencias, el director del Museo de Historia Natural de Ruan, Félix-Archimède Pouchet (1800-1876), se definió claramente en favor de la generación espontánea y publica al año siguiente un volumen sobre L'Hétérogénie ou Traité de la génération spontanée: "Cuando la meditación me llevó a la certeza de que la generación espontánea es todavía uno de los medios empleados por la Naturaleza para la reproducción de los seres me dediqué a descubrir mediante qué procedimientos podrían evidenciarse estos fenómenos." Tan categórica afirmación provocó numerosas réplicas, y Pasteur escribió a Pouchet: "Pienso que cometéis un error, no al creer en la generación espontánea (porque en semejante problema es difícil no tener ideas preconcebidas), sino al afirmar la generación espontánea. En la ciencias experimentales es siempre erróneo no dudar mientras los hechos no nos obliguen a hacer una afirmación. En mi opinión, se trata de un asunto en el que se carece por completo de pruebas decisivas." Pasteur estaba convencido que, si bien el método experimental puede no ser capaz de resolver completamente el misterio del universo, siempre es capaz de responder sin ambigüedades a preguntas definidas, siempre que sean formuladas en términos precisos. Afirmaba que el método experimental raramente lleva por mal camino, y eso le ocurre solo a aquellos que no lo usan bien. Para sostener su afirmación, Pouchet realizó varios experimentos. Entre ellos, sobre un recipiente de mercurio introdujo con la boca hacia abajo, un frasco lleno de agua destilada y hervida, lo destapó, instiló en él un poco de oxígeno y de nitrógeno obtenidos por métodos químicos, y luego una borra de heno extraída de otro frasco que había mantenido en una estufa durante veinte minutos. Después de algunos días, el agua estaba llena de microorganismos. Pasteur cuestionó la introducción de "aire común" al que adjudica la contaminación microbiana del mercurio. Inicia así las experiencias contundentes que pondrán fin a un debate milenario. A pesar de los resultados de Pasteur, Pouchet no se mostró vencido y continuó sus experimentos. En 1864, la discusión acerca de la generación espontánea de los microorganismos se había vuelto tan fogosa que la Academia de Ciencias de París ofreció un premio para los experimentos que arrojaran nueva luz sobre el problema. Los experimentos debían hacerse en el Museo de Historia Natural con requisitos claramente establecidos. Los partidarios de la generación espontánea tenían sus propios programas preparados y se retiraron en actitud de protesta. Solo quedó Louis Pasteur (1822-1895) para realizar las investigaciones. Pero si los partidarios de la generación espontánea hubieran realizado las experiencias, Pasteur habría perdido el debate. Pasteur usaba agua de levadura para sus cultivos mientras que su contendiente más feroz, Félix-Archimède Pouchet, utilizaba agua de heno, que hoy sabemos que contiene gérmenes que no mueren a 100° C y que se desarrollan ante la entrada de una pequeña cantidad de oxígeno. Este hecho, como veremos, le habría otorgado el triunfo en la discusión. Tiempo después Pasteur descubrió que si no se alcanzaba una temperatura de 120° C no había seguridad de matar a todos los gérmenes. Este descubrimiento determinó que, a partir de ese momento, el autoclave -un instrumento que permite alcanzar el punto de ebullición a temperaturas mayores de 100ºC pasara a ser un elemento indispensable para la antisepsia . Pasteur advirtió la necesidad, no solamente de usar un autoclave, sino también de esterilizar al fuego los instrumentos y los aparatos que se querían esterilizar. Para destruir todos los gérmenes, era necesario pasar los instrumentos por la llama, que los eliminaría más fácilmente mientras más secos estuvieran. Llamativamente, a pesar de los contundentes resultados de Pasteur, la victoria de los detractores de la idea de la generación espontánea no era aún completa. Poco tiempo después de la muerte de Claude Bernard (1813-1878), junto a Pasteur el biólogo más respetado de Francia, la Revue Scientifique publicó artículos de su autoría sobre el proceso de fermentación. Pasteur sostenía que la fermentación era obra directa de algún ser vivo, mientras que Claude Bernard atribuía a los fermentos no sólo el proceso de fermentación sino también la formación de los microbios que lo acompaña; la generación espontánea nuevamente en escena. Para Bernard, la fermentación comenzaba sin gérmenes mientras que Pasteur sostenía que la presencia de gérmenes era indispensable para que la fermentación se iniciara. Ante esta disyuntiva, Pasteur construyó un invernadero hermético. Puso en él uvas, libres de microbios a crecer -ya que éstos se depositan en la maduración de la fruta-. Para evitar la contaminación, rodeó los racimos con algodón. Llegada la época de recolección, se aplastaron las uvas y se las colocó en un ambiente calefaccionado para favorecer la fermentación. El resultado fue definitorio: la fermentación no se produjo en las uvas crecidas en ausencia de microbios, mientras que los racimos que no estaban en el invernadero comenzaron a fermentar a las 48 horas. Luego, al exponer los racimos protegidos al aire o agregarles algunos granos de los racimos previamente expuestos, la fermentación se inició. Los resultados fueron concluyentes: nada podía suplir el papel de los gérmenes en el proceso de fermentación, ni ningún fermento los podía hacer surgir. Entre los muchos experimentos que realizó Pasteur para desechar la generación espontánea, hay uno que merece especial énfasis por su gran simplicidad y su carácter decisivo. Pasteur usó matraces con cuello de cisne que permitían la entrada del oxígeno -elemento que se creía necesario para la vida- mientras que en sus cuellos largos y curvados quedaban atrapadas bacterias, esporas de hongos y otros tipos de vida microbiana. De esta manera, se impedía que el contenido de los matraces se contaminara. Pasteur mostró que si se hervía el líquido en el matraz, matando a los organismos ya presentes, y se dejaba intacto el cuello del frasco, no aparecería ningún microorganismo. Solamente si se rompía el cuello curvado del matraz, permitiendo que los contaminantes entraran en el frasco, aparecerían microorganismos. Algunos de sus matraces originales, todavía estériles, permanecen en exhibición en el Instituto Pasteur de París. Experimento clásico de Pasteur "La Vida es un germen y un germen es Vida" proclamó Pasteur en una brillante "velada científica" en la Sorbona, ante lo más selecto de la sociedad parisina. "Nunca la doctrina de la generación espontánea se recuperará del golpe mortal que le asestó este simple experimento." Al quedar definitivamente refutada la idea de la generación espontánea por los experimentos de Pasteur, el problema del origen de la vida en la Tierra quedó relegado. Los científicos del siglo XIX no disponían aún de una explicación alternativa para este evento. Recién 50 años más tarde, Alexandr I. Oparin (1894-1980) y J.B. John B. S.Haldane, (1892-1964) proporcionaron un marco teórico para interpretar el paso de la materia inanimada a la materia viva, y este problema se tornó susceptible de ser experimentado. Actividad 1: La “justificación” de la generación espontánea Resuelve los siguientes problemas en torno al pensamiento científico y las primeras teorías sobre el origen de la vida a) ¿Cómo influyó el empirismo en la mantención de la teoría de la generación espontánea? ¿Qué rol tuvo la microscopía? Justifica b) ¿Cómo crees tú que la mayoría de las personas se explica el origen de la vida? Inventa una pregunta que podría utilizarse para averiguar si aún hay quienes apoyan la teoría de la generación espontánea. Por ejemplo: ¿en qué casos las bacterias aparecen espontáneamente en algún órgano del cuerpo?, ¿puede decirse que la reproducción asexual es un mecanismo de generación espontánea?, si usted cree que la vida solo puede surgir de lo vivo, ¿ha habido vida desde siempre en nuestro planeta?... c) Averigua el significado de los términos “vitalismo” y “mecanismo”. Luego relaciónalos con la discusión en torno al origen de la vida d) Inventa tu propio diseño experimental para probar la falsedad de la teoría de la generación espontánea. Existen evidencias que la vida se inició a partir de una evolución química ¿Cómo comenzó la vida? Como hemos visto, la hipótesis más aceptada entre los científicos actuales enuncia que la vida se desarrolla a partir de materia no viva. Este proceso, llamado evolución química, se compone de varias etapas. Primero, la síntesis de pequeñas moléculas orgánicas. Posteriormente, la acumulación de estas a lo largo del tiempo. Las macromoléculas grandes, como proteínas y ácidos nucleicos, se formaron de moléculas más pequeñas. Las macromoléculas interactuaron entre si y formaron estructuras más complejas que, a fin de cuentas, podían metabolizar y replicarse. Estas dieron lugar a estructuras semejantes a células que finalmente dieron origen a las primeras células verdaderas. Las células primitivas, una vez formadas, evolucionaron durante miles de millones de años hasta dar lugar a la diversidad biológica que existe en nuestro planeta. Se cree que la vida en la Tierra se origino una sola vez, y que esto ocurrió en condiciones ambientales muy distintas a las actuales. Por lo tanto, para entender el origen de la vida, se deben estudiar las condiciones primitivas de la Tierra. Aunque jamás tendremos una certeza absoluta acerca de ellas, ciertas pruebas científicas, obtenidas de diferentes fuentes, proporcionan datos importantes al respecto. Las condiciones iniciales en la Tierra habrían sido inhóspitas para casi todos los seres vivos de la actualidad. La atmósfera altamente reductora carecía de oxigeno. La erupción de volcanes y el consecuente desprendimiento de gases contribuyó a la formación de la atmósfera. Violentas tormentas eléctricas produjeron lluvias torrenciales que erosionaron la superficie de la Tierra. La formación de la Tierra y de todo el sistema solar está relacionada con la formación del Universo. Se cree que la distribución no siempre ha sido la que se conoce actualmente. Hace 10.000 o 20.000 millones de años, el Universo era una masa densa y compacta que explotó (el Big Bang), dispersando en el espacio polvos, residuos y gases. A partir de entonces, aún se expande de modo que se encuentra en expansión constante. Al enfriarse tales materiales, se formaron átomos de diferentes elementos, ante todo helio e hidrógeno. La disminución de la temperatura y la compresión de la materia dio lugar a la formación de estrellas y planetas. El sol de nuestro sistema es una estrella de segunda o tercera generación, formada hace cinco mil o 10 mil millones de años. Las fuerzas gravitacionales que actuaban sobre la materia solar provocaron la compresión de ésta, la cual dio lugar a gran cantidad de calor. Este indujo la formación de elementos distintos al helio y al hidrógeno. Parte de este material fue expulsado del sol y, uniéndose a restos, polvos y gases que lo rodeaban, formó los planetas. De acuerdo a los astrofísicos y geólogos, la Tierra tiene una edad de 4600 millones de años de antigüedad. La materia que la conforma se compactó como resultado de la acción de fuerzas gravitatorias; los elementos más pesados, como níquel y hierro, formaron el núcleo central; los elementos de peso medio formaron el manto, y los ligeros quedaron cerca de la superficie. La primera atmósfera, compuesta en gran parte por los elementos más ligeros, helio e hidrógeno, se perdió debido a que las fuerzas gravitacionales de la Tierra no fueron capaces de retenerla. Se piensa que al inicio, la temperatura de la Tierra era baja, pero al continuar la compactación gravitacional se produjo calor. Este aumentó en respuesta a la energía de la desintegración radiactiva. El calor se liberó en manantiales térmicos o volcanes, que a su vez produjeron gases, los cuales formaron la segunda atmósfera en el inicio de la Tierra. La atmósfera era reducida, con poco oxigeno libre o sin él. Los gases producidos incluían dióxido de carbono (CO2), monóxido de carbono (CO), vapor de agua (H20), hidrógeno (H2) y nitrógeno (N2). Probablemente esta atmósfera contenía también un poco de amoniaco (NH3), sulfuro de hidrógeno (H2S) y metano (CH4), aunque estas moléculas reducidas bien pudieron haberse degradado por la radiación ultravioleta del sol. Es probable que la atmósfera primitiva contuviera poco o nada de oxígeno libre (O2). Con el enfriamiento gradual de la Tierra, el vapor de agua se condensó, produciendo lluvias torrenciales que formaron océanos. Además, estas lluvias erosionaron la superficie de la Tierra, agregando minerales a los océanos, haciéndolos "salados". Representaciones de la superficie de la Tierra antes de que hubiese vida. Nótese las fuentes de energía de distintos orígenes (actividad volcánica, geotérmica, eléctrica, meteoritos) y la presencia de agua Hay cuatro requisitos de la evolución química: Primero, la vida sólo podía evolucionar en ausencia de oxígeno libre. Como tal elemento es muy reactivo, su presencia en la atmósfera habría producido la degradación de las moléculas orgánicas necesarias en el origen de la vida. Sin embargo, la atmósfera de la Tierra tenía gran capacidad de reducción, por lo que el oxigeno libre habría formado óxidos con otros elementos. Un segundo requerimiento para el origen de la vida debió ser la energía. La Tierra era un lugar con gran cantidad de energía, tormentas violentas, volcanes e intensa radiación, incluso la radiación ultravioleta del sol. Probablemente "aquel" sol producía mas radiación ultravioleta que el actual, y la Tierra no poseía una capa protectora de ozono para bloquear esta radiación. Tercero, los elementos químicos que constituyen las piezas necesarias para la evolución química debían estar presentes. Estos elementos incluyen agua, minerales inorgánicos disueltos (presentes en forma de iones) y gases presentes en la atmósfera; como último requisito, tiempo. Tiempo para que las moléculas pudieran acumularse y reaccionar entre sí. La edad de la Tierra proporciona el tiempo necesario para la evolución química. La Tierra tiene unos 4600 millones de años, y se cuenta con pruebas geológicas que hacen pensar en la aparición de formas simples de vida, hace 3500 millones de años. Actividades: a) Estructura una tabla que permita explicar el proceso de la evolución química en cinco etapas. b) Caracteriza las condiciones primitivas de la Tierra y compara la atmósfera primitiva con la actual c) Sintetiza los requisitos de la evolución química d) Si el oxígeno es supuestamente tan dañino para las moléculas orgánicas, ¿cómo se explica que a los animales nos beneficia? e) ¿Se puede plantear que la coincidencia de los cuatro factores mencionados podrían fundar vida en otros planetas? Las moléculas orgánicas se podrían haber originado de moléculas inorgánicas Es necesario considerar el origen de las moléculas orgánicas debido a que constituyen la materia prima de la formación de los seres vivos. El concepto de formación espontánea de moléculas orgánicas simples, como azúcares, nucleótidos y aminoácidos, a partir de materia no viva, se propuso en 1920 por dos científicos que trabajaron de modo independiente: Oparin, un bioquímico ruso, y Haldane, un genetista escocés. Su hipótesis fue puesta a prueba en 1950 por Urey y Miller, quienes diseñaron un aparato que simulaba las condiciones que se cree prevalecían en el inicio de la Tierra La atmósfera con que iniciaron sus experimentos era rica en H2, CH4, H20 y NH3. Los científicos expusieron esta atmósfera a una descarga eléctrica que simulaba la luz y la actividad eléctrica de la atmósfera. El análisis de los elementos químicos producidos en una semana reveló la síntesis de aminoácidos y otras moléculas orgánicas. En la actualidad, se piensa que la atmósfera, en su fase inicial, no contenía gran cantidad de metano (CH4) ni amoniaco (NH3). Sin embargo, otros experimentos similares, en los que se utilizó diferentes combinaciones de gases, produjeron una variedad de moléculas orgánicas, incluso bases de nucleótidos de ARN y ADN. Esquema del montaje experimental de Miller y Urey Miller y su montaje real Oparin supuso que las moléculas orgánicas se acumularon durante algún tiempo, en mares poco profundos, en forma de un "mar de sopa orgánica”. Este investigador consideró que en tales circunstancias, las moléculas orgánicas más grandes (polímeros) se formarían por la unión de moléculas más pequeñas (monómeros). Con base en los datos acumulados desde entonces, casi todos los científicos consideran que la polimerización necesaria para la formación de proteínas, ácidos nucleicos y otras moléculas orgánicas no pudo haber ocurrido en esas circunstancias. Muchas reacciones de polimerización involucran una síntesis por deshidratación, en la que dos moléculas se unen por la eliminación de agua y es poco probable que una reacción en la que se produce agua ocurra en el agua, en ausencia de las enzimas necesarias. Además, tampoco es posible que los monómeros orgánicos en el océano hayan alcanzado niveles, o cantidades lo suficientemente elevados como para estimular su polimerización. Es más probable que los polímeros orgánicos se hayan sintetizado y acumulado en rocas o en superficies de arcilla. La arcilla es un sitio favorable para la polimerización porque contiene iones de hierro y zinc, que pueden actuar como catalizadores. Además, la arcilla enlaza las formas exactas de azúcares y aminoácidos encontrados en los organismos vivos. También pueden presentarse otros aminoácidos y azúcares, pero éstos no se unen a la arcilla. Para comprobar la formación de polímeros en estas condiciones, Fox calentó una mezcla de aminoácidos secos y obtuvo polipéptidos. Al producto de esta polimerización espontánea le dio el nombre de protenoide. Microsferas formadas por agitación de proteínas y lípidos en un medio líquido. Estas microferas pueden incorporar material de la solución circundante, crecer e incluso “reproducirse”, como varias de las que se ven en la micrografía ¿Podrían los polímeros una vez producidos formar estructuras más complejas? Los científicos han trabajado con diferentes protobiontes, ensambles espontáneos de polímeros orgánicos y se ha logrado elaborar protobiontes semejantes a seres vivos simples, lo cual nos permite imaginar la forma en que las moléculas complejas no vivas realizaron tan gigantesco brinco para convertirse en células vivas. Al crecer, con frecuencia los protobiontes se dividen en dos. Sus condiciones internas son distintas de las externas. Su organización es sorprendente, tomando en cuenta su composición bastante simple. Una variedad de protobionte, conocida como microesfera, se formó por la adición de agua y protenoides Las microesferas son esféricas y poseen propiedades osmóticas. Algunas generan un potencial eléctrico a través de su superficie, similar al potencial de membrana de las células. También absorben materiales de su entorno y responden a cambios en la concentración osmótica como si estuvieran rodeadas por membranas, aunque no contienen lípidos. Los liposomas son protobiontes hechos de lípidos. En el agua adquieren una estructura esférica, rodeada por una bicapa lipídica de estructura semejante a la de las membranas celulares. Como último ejemplo de los protobiontes puede mencionarse el coacervado. Oparin formó coacervados con mezclas más o menos complejas de polipéptidos, ácidos nucleicos y polisacáridos. Los coacervados pueden llevar a cabo un metabolismo muy simple.Cuando formó un coacervado con cadenas cortas de RNA y la enzima responsable de la replicación de ácidos nucleicos, y lo colocó en un medio con nucleótidos de trifosfatos, los coacervados “crecieron”, se replicaron y dividieron. Actividades. a) ¿Por qué la evolución se preocupa del origen de las moléculas orgánicas? b) ¿Se puede decir que Oparin propuso un nuevo tipo de generación espontánea? Justifica c) ¿Cómo expresarías, en síntesis, el experimento de Miller y Urey? d) ¿Por qué no se considera aceptable el proceso de polimerización propuesto por Oparin? e) ¿Cuál es la relevancia del experimento de Fox? ¿Por qué usar arcilla? Fundamenta f) Define: polímero, protobionte, microsfera, liposoma y coacervado ¿Cuál de ellos podría considerarse un ser vivo? Existe evidencia fósil de la formación de células primitivas El estudio de los protobiontes es útil para reconocer que las “pre-células” pueden presentar algunas propiedades de los seres vivos, Sin embargo, fue necesario un salto mayor para pasar de los agregados moleculares, como los protobiontes, a las células vivas. Micrografía de células fósiles de tipo bacteriano, descubiertas en un depósito de cuarzo negro en Australia. Su data es de 3500 m. de años. Estromatolitos australianos Los datos obtenidos de los registros fósiles muestran que las primeras células prosperaron hace 3500 millones de años. Sin duda alguna, las primeras células que evolucionaron fueron las procarióticas. En rocas de Australia y Sudáfrica se han encontrado fósiles microscópicos de este tipo de células de 3400 a 3500 millones de años Los estromatolitos son otro tipo de restos fosiliferos de las primeras células de la Tierra. Dichas rocas columnares están compuestas por capas múltiples de aquellas células, por lo general, cianobacterias. Todavía se encuentran estromatolitos vivos en manantiales térmicos y en estanques poco profundos de agua fresca y salada. Con el tiempo, se acumula sedimento alrededor de las células y poco a poco, éste se mineraliza. Mientras tanto, crece una nueva capa de células vivas sobre las células muertas. Los estromatolitos se presentan en diversas partes del mundo: en el Gran Lago de los Esclavos canadiense y las Gunflint Iron Formations en el Lago Superior de Estados Unidos. Algunos son muy antiguos, por ejemplo, un grupo en la región occidental de Australia tiene varios miles de millones de años (figura 7). Todavía hay colonias vivas que forman estromatolitos en el Yellowstone National Park y en la bahía Shark, en Australia. Podría decirse que el origen de las células a partir de macromoléculas fue un gran avance en el origen de la vida. Quizá no haya sido un gran avance, sino una serie de pequeños avances. Dos etapas cruciales de dicho proceso fueron el origen de la reproducción molecular y del metabolismo. Actividades. a) En estricto rigor la expresión “el origen de las células a partir de moléculas fue un gran avance”. Explica por qué y de qué forma se podría corregir para no generar faltas conceptuales b) ¿Qué le falta a un protobionte para poder ser considerado una célula primitiva? c) ¿Por qué resulta tan evidente pensar que las primeras células tuvieron que ser procariontes, si en la actualidad siguen siendo las células más abundantes y diversas? d) Investiga de qué manera se puede averiguar que un fósil tiene “n” millones de años. Decide qué tan exacto y confiable es el método. Un paso clave en las primeras etapas de la evolución fue la transferencia de información molecular Un ácido núcleico está formado por nucleótidos. A su vez, cada nucleótido está formado por una base nitrogenada, un grupo fosfato y una azúcar de 5 carbonos. De esta forma, para alargar una cadena de ADN o ARN, se hace necesario disponer una cadena de nucleótidos, originando un polinucleótido. Los polinucleótidos se forman en la arcilla de la misma forma en que lo hacen los polipéptidos. Se cree que el ARN fue la primera molécula informativa que “evolucionó” en la progresión hacia la primera célula. Se cree que las proteínas y el ADN vinieron después. Una de las características más sorprendentes del ARN es que con frecuencia posee propiedades catalíticas. El ARN catalítico o ribozima, funciona como enzima. En las células de la actualidad se utiliza como auxiliar en el procesamiento de los productos finales: ARNr, ARNt y ARNm ( ). Antes de la evolución de las células verdaderas, es probable que la ribozima haya catalizado la formación de ARN en la arcilla o estanques rocosos poco profundos. Una evidencia de esto es que si se agrega ribozima a un tubo de ensayo con nucleótidos de ARN, la replicación de nuevo ARN puede ocurrir en ausencia de otras moléculas de función enzimática. Esta reacción se incrementa si se agrega zinc, metal normalmente presente en la arcilla, como catalizador. El ARN también puede dirigir la síntesis de proteínas. Algunas moléculas actuales de cadena sencilla de ARN se pliegan sobre sí mismas por la interacción de los nucleótidos que componen la cadena. En ocasiones la conformación de la molécula plegada es tal que se une débilmente a un aminoácido. Si los aminoácidos son mantenidos en estrecha cercanía entre sí por moléculas de ARN, pueden unirse uno a otro para formar un polipéptido. En las células vivas, se transfiere información del ADN al ARN y de éste a las proteínas. Se ha estudiado el mecanismo probable de la evolución del ARN y de las proteínas. El último paso en la evolución de las moléculas de información sería la incorporación del ADN en los sistemas de transferencia de información. Como el ADN es una doble hélice, es más estable y menos reactivo que el ARN. Sin embargo, el ARN es necesario en cualquier forma, debido a que el ADN no posee actividad catalítica. Hay varios pasos fundamentales previos a la formación de células vivas verdaderas, a partir de agregados macromoleculares. Hoy día se tiene poca información acerca de la forma en que esto ocurrió. Por ejemplo, ¿Cómo se originó el código genético? Ello debe haber ocurrido en una etapa muy temprana del origen de la vida, ya que prácticamente todos los organismos vivos poseen el mismo código. Por otro lado, podría cuestionarse la forma en que una membrana formada por lípidos y proteínas puede envolver a un complejo macromolecular, permitiendo la acumulación de algunas moléculas y la exclusión de otras. Actividades a) ¿Qué característica del ARN, permite suponer que se formó antes que el ADN y las proteínas? b) ¿Qué utilidad pudo tener el zinc, si en el mismo texto se admite que el ARN posee actividad catalítica? c) Las proteínas más simples poseen algunas decenas de aminoácidos. Cada aminoácido se ubica en el lugar adecuado tras una lectura de tres bases nitrogenadas de tres nucleótidos consecutivos, dispuestos en un orden definido. ¿Cómo se explica entonces el surgimiento de polipéptidos azarosos y al mismo tiempo funcionales? ¿Cómo explicar proteínas de miles de aminoácidos? Esquema que explica el origen inverso del metabolismo Es probable que el metabolismo haya surgido mediante pasos inversos El metabolismo, es decir, todas las reacciones bioquímicas efectuadas por un organismo, comprende una amplia secuencia de reacciones que se llevan a cabo paso a paso. Por lo mismo, es probable que el metabolismo se haya originado un paso a la vez. En 1945 Horowitz afirmó que un organismo obtendría las enzimas necesarias para los procesos metabólicos por mutaciones génicas sucesivas. Sin embargo, la formación de estas enzimas ocurriría en orden inverso a la secuencia en que se dan utilizadas en el metabolismo normal. Por ejemplo, supongamos que el primer organismo primitivo requería un compuesto orgánico, Z, para su crecimiento (figura 8). Esta sustancia, Z, y una gran variedad de compuestos orgánicos, Y, X, W, V, U, etc., estaban presentes en el entorno. Se habían sintetizado previamente, en forma espontánea. Este organismo sería capaz de sobrevivir en tanto que el compuesto Z estuviera presente. Si ocurriera una mutación para una nueva enzima que le permitiera a este organismo sintetizar el compuesto Z, a partir del compuesto Y, el organismo con esta mutación sería capaz de sobrevivir aun cuando se agotase la fuente del compuesto Z. Una segunda mutación para la enzima catalizadora de la síntesis de Y a partir del compuesto X, permitiría la supervivencia a pesar del agotamiento de este compuesto. Mutaciones similares darían lugar a la formación de enzimas que permitirían a estos organismos utilizar sucesivamente algunas sustancias más, W, V, U y otras. Actividades a) ¿Qué relación existe entre una mutación génica y la síntesis de una enzima? b) ¿Se puede decir que la teoría de Horowitz contradice una de las propiedades fundamentales de las enzimas: ser específicas? c) Establece una relación entre el desarrollo de secuencias metabólicas más largas y: • la capacidad adaptativa de un organismo. • el tamaño del organismo • la complejidad del organismo • el requerimiento de oxígeno del organismo Existen evidencias respecto al origen energético y nutricional de las primeras células Las primeras células fueron definitivamente procarióticas anaerobias. Algunas pueden haber sido heterotróficas; es decir, que las moléculas orgánicas necesarias para su producción de energía no son sintetizadas por la célula, sino que ésta obtiene tales moléculas del medio. Probablemente dichas células consumían muchas moléculas orgánicas formadas con espontaneidad: azúcares, nucleótidos y aminoácidos, entre otros. Las células de este tipo obtienen la energía necesaria para el mantenimiento de la vida por la fermentación de estos compuestos orgánicos. Por supuesto, la fermentación de tales compuestos constituye un proceso anaerobio. La biología molecular desempeña una función cada vez más importante en la determinación de las características de las primeras células. En 1988 Lake realizó una comparación cuidadosa del ARN de diferentes organismos. Este análisis mostró que todos los organismos vivos tienen un ancestro común que probablemente fue un procariote que metabolizó azufre y vivió en manantiales térmicos. Ello contrasta con el punto de vista anterior que establecía que el último ancestro común era un heterótrofo; además, confirma la utilidad de las técnicas moleculares en la biología evolutiva. Cuando se interpreta adecuadamente la información obtenida de los estudios moleculares es útil para responder algunas preguntas difíciles. Antes del agotamiento de las moléculas orgánicas, pudieron ocurrir mutaciones que otorgaron a los organismos poseedores una ventaja selectiva distintiva. Estas células podían obtener energía de una nueva fuente, la luz solar. Además eran capaces de almacenar la energía radiante en forma de un compuesto químico, adenosin trifosfato (ATP). Probablemente fueron capaces de expandir este proceso, almacenando energía radiante en forma de energía química, en moléculas orgánicas más permanentes, como los azúcares. Estos organismos fotosintéticos no requerían de compuestos energéticos, cuya disponibilidad era limitada en su entorno. La fotosíntesis no requiere solamente de energía solar, sino también de una fuente de hidrógeno, utilizado para reducir el dióxido de carbono, en la síntesis de moléculas orgánicas. Probablemente los primeros autótrofos fotosintéticos utilizaron la energía solar para desdoblar moléculas ricas en hidrógeno, como hidróxido de azufre, H2S, liberando azufre elemental en el proceso. De hecho, las actuales sulfobacterias verdes y púrpuras utilizan H2S. Un tercer grupo de bacterias, las púrpuras no sulfurosas, utilizan otras moléculas orgánicas o gas de hidrógeno, como fuente de la que obtienen hidrógeno. Las cianobacterias fueron los primeros autótrofos fotosintéticos que desdoblaron ( = descompusieron) el agua para obtener hidrógeno. El agua es abundante en la Tierra, y la ventaja selectiva de poder desdoblarla favoreció la supervivencia de las cianobacterias. En el proceso de desdoblamiento del agua, se libera oxígeno en forma de gas, 02. Inicialmente el oxígeno liberado de la fotosíntesis oxidaba minerales del océano y de la corteza terrestre. Con el tiempo, llegó a liberarse más oxígeno del que podía ser utilizado por estos depósitos, y el oxígeno comenzó a acumularse en el océano y en la atmósfera. La cronología de estos episodios se calculó según datos geológicos y fósiles. Probablemente los primeros autótrofos evolucionaron hace cerca de 3400 millones de años. Las rocas de esa época contienen trazas de clorofila. Las cianobacterias aparecieron hace unos 2500 a 2700 millones de años. Algunos datos, como los estromatolitos, son utilizados para establecer la fecha de aparición de éstas. Para hace 2000 millones de años, las cianobacterias habían producido suficiente oxígeno como para iniciar un cambio importante en la atmósfera. Gráfico de los cambios en la concentración de CO2 y O2 en la atmósfera en distintos períodos de la evolución Actividades a) ¿Cuáles serían las características de las primeras células, en cuanto a la obtención de energía y nutrientes? ¿Sobre qué evidencia se basa este supuesto? b) Investiga: ¿existen actualmente organismos capaces de fabricar ATP o hacer fotosíntesis sin organelos especializados (mitocondrias y cloroplastos)? c) Explica el origen del oxigeno gaseoso y establece la cronología de este proceso d) ¿Qué consecuencia tuvo el aumento sostenido del oxígeno ambiental? El incremento del oxígeno atmosférico favoreció la aparición de organismos aerobios El aumento en el oxígeno atmosférico tuvo un profundo efecto en la Tierra y en la vida. Primero, en la parte superior de la atmósfera, reaccionó y dio lugar al ozono 03. El ozono cubrió la Tierra evitando que gran parte de la radiación ultravioleta del sol penetrara hacia la superficie de la Tierra. De esta manera permitió que los organismos vivieran más cerca de la superficie, tanto en los medios acuáticos, como en la tierra. Como la energía de la radiación ultravioleta se utilizaba durante la generación espontánea de moléculas orgánicas, la síntesis de éstas disminuyó. Los anaerobios obligados se intoxicaban con el oxígeno; muchas especies desaparecieron. Sin embargo, algunos anaerobios evolucionaron para neutralizar el oxígeno, de manera que éste no pudiera afectarlos. Algunos organismos incluso crearon mecanismos para utilizar el oxígeno, y así pudieron subsistir en este ambiente. Como resultado de esto, se desarrolló la capacidad de utilizar el oxígeno y extraer energía de los alimentos. Esta respiración aerobia se agregó al proceso de glucólisis. Al igual que otros procesos metabólicos, la respiración probablemente se desarrolló paso a paso. Hubo varias consecuencias en la evolución de los organismos que podían utilizar oxígeno. Los que adquirieron respiración aerobia podían obtener de la utilización de una sola molécula de glucosa más energía que la que obtenían los anaerobios de la fermentación. Así, los aerobios poseían energía adicional para sus actividades. Esto los hizo más competitivos que los anaerobios, lo que, aunado a la toxicidad del oxígeno sobre estos últimos, desplazó a los anaerobios a un papel secundario en la Tierra. En la actualidad, casi todos los organismos, incluidas plantas, protistas, procariotes y hongos, llevan a cabo la respiración aerobia. La evolución de la respiración aerobia tuvo efecto estabilizador en el oxígeno y dióxido de carbono de la biosfera. Los organismos fotosintéticos utilizaban dióxido de carbono corno fuente de carbono. Sin el advenimiento de la respiración aerobia, esta materia prima se habría agotado rápidamente en la atmósfera. Durante esta respiración se libera dióxido de carbono, como producto de desecho, a partir de la degradación completa de moléculas orgánicas. Por tanto, se inició el reciclaje de carbono en la biosfera, moviéndose de un medio abiótico a los organismos fotosintéticos, y de éstos a los heterótrofos que ingerían plantas. Posteriormente, mediante la respiración, el carbono liberaba de regreso en el medio abiótico, en forma de dióxido de carbono, para reiniciar el ciclo. De esta manera se producía oxigeno en la fotosíntesis, y se utilizaba en la respiración aerobia. Esquema que explica la formación del ozono Actividades: a) Relaciona los efectos del aumento del oxígeno atmosférico con el origen de los microorganismos aeróbicos. b) Explica las ventajas comparativas de los organismos aerobios sobre los anaerobios c) ¿Es correcto decir que los organismos fermentadores no alcanzaron niveles superiores de complejidad “a causa de ser fermentadores”? d) ¿Por qué se asume que la disminución de la radiación UV favoreció el surgimiento de nuevas formas de vida? e) Identifica tres efectos que tuvo la respiración aeróbica en los ciclos de la materia (cualquier ciclo) f) ¿Sería correcto establecer niveles crecientes de estabilidad y autonomía en la evolución del metabolismo energético – nutricional? La teoría endosimbiótica explica la aparición de células eucariontes Es lógico considerar que los ancestros de los organismos modernos tuvieron una constitución muy sencilla. Entre los organismos modernos, las formas más simples de vida celular son los procariotes. Esta es una de las razones por las que los biólogos creen que las primeras células fueron procarióticas. Probablemente recuerdes que estas células carecen de membrana nuclear y de membranas de organelos, como mitocondria, retículo endoplásmico, cloroplastos y aparato de Golgi. De hecho, carecen de todos estos organelos. Los eucariotes aparecieron en el registro fósil correspondiente hace millones de años. ¿Cómo se originaron los eucariotes, a partir de los procariotes? La teoría endosimbiótica afirma que las mitocondrias, cloroplastos, y quizá también los centriolos y demás organelos surgieron de relaciones simbióticas entre dos organismos procarióticos. Luego, los cloroplastos se consideran bacterias fotosintéticas (aunque no suelen considerarse cianobacterias) y las mitocondrias son vistas como bacterias precedentes (o bacterias fotosintéticas que han perdido su capacidad de fotosíntesis). Estos endosimbiontes fueron originalmente ingeridos por una célula, pero no digeridos por ella. Sobrevivieron y se reprodujeron junto con la célula huésped, de manera que las generaciones siguientes de dichas células contenían también a estos endosimbiontes. Los dos organismos desarrollaron una relación de mutualismo y al final perdieron su capacidad de vivir fuera del huésped La teoría estipula que cada uno de los "socios" llevó a la relación algo de lo cual el otro "socio” carecía. Por ejemplo, la mitocondria proporcionó la capacidad de utilizar el metabolismo oxidativo, ausente en la célula huésped original; los cloroplastos proporcionaron la capacidad de utilizar una fuente simple de carbono (dióxido de carbono); algunas bacterias proporcionaron la capacidad de desplazamiento, convirtiéndose, a fin de cuentas, en un flagelo. La célula huésped aportó hábitat seguro y materia prima o nutrientes. La prueba principal de esta teoría es que en la actualidad la mitocondria y los cloroplastos poseen parte de un aparato genético propio, aunque no todo. Poseen su propio ADN (en forma de un cromosoma circular, como el de las células procarióticas) y sus propios ribosomas (más parecidos a los ribosomas de las células procarióticas que al de las eucarióticas). Poseen parte de la maquinaria de síntesis de proteínas, incluyendo moléculas de ARNt, y son capaces de llevar a cabo la síntesis proteínica en forma limitada. Mitocondrias y cloroplastos son capaces de autorreplicarse, lo cual significa que se dividen en forma independiente de la célula en que residen. Además, es posible intoxicar estos organelos con antibióticos que afectan a las bacterias, pero no a las células eucarióticas. Ambos organelos se cubren por una doble membrana. Se cree que la membrana externa se originó por invaginación de la membrana plasmática de la célula huésped, en tanto que la interna se desarrolló de la membrana plasmática del endosimbionte. En la actualidad se observan varias relaciones endosimbióticas. Muchos corales poseen algas dentro de sus células. Esta es una de las razones por las que los arrecifes de coral son tan productivos. Un protozoario Myxotrixcha paradoxa, vive en el intestino de las termitas, y varios endosimbiontes, incluyendo una espiroqueta, están unidos al protozoario, y actúan como flagelos. En las células del tunicado colonial Diplosoma virens, viven algunos procariotes fotosintéticos. Esta relación es particularmente curiosa porque se trata de una cloroxibacteria, y no de una cianobacteria. Las cloroxibacterias se descubrieron apenas hace poco y poseen el mismo sistema pigmentario (clorofila a, clorofila b, y carotenos) que los cloroplastos. Esquema que explica el proceso de formación de células eucariotas a partir de procariotas, mediante la teoría endosimbiótica La teoría endosimbiótica no constituye la respuesta final a la evolución de las células eucarióticas a partir de las procarióticas. Por ejemplo, esta teoría no explica la forma en que el material genético en el núcleo quedó envuelto por una membrana. Además, son insustanciales los datos que apoyan la evolución de las estructuras móviles, como cilios y flagelos, a partir de procariotes. En los flagelos no hay rastros de material genético; hasta ahora, la disposición de 9 + 2 en los microtúbulos de los flagelos no se ha observado en ningún procariote. Actividades: a) Señala tres fundamentos de la teoría endosimbiótica b) ¿Qué situación de las células eucariontes no es explicada por esta teoría? (además de las señaladas en el texto) c) Intenta explicar por qué se podría haber producido una fagocitosis sin digestión? d) ¿Qué es más ventajoso: ser procarionte o eucarionte? ¿El hecho que actualmente haya de ambos, sería evidencia que da exactamente lo mismo? e) ¿Por qué es teoría y no hipótesis endosimbiótica? f) Construye una hipótesis – análoga a la teoría endosimbiótica – para explicar uno de los últimos eslabones de la cadena: la aparición de organismos pluricelulares. Tu hipótesis debe incluir un fundamento acerca del por qué generó ventajas esta estrategia de “ser vivo”.