Índice El poder en Costa Rica ……………………………………………………... 2 Detentadores del Poder ……………………………………………………... 5 Clases de Poderes …………………………………………………………… 7 Control Político ………………………………………………………………. 23 División Bipartita Legislativa ………………………………………………… 26 Poderes Legítimos y ilegítimos ……………………………………………... 40 El Poder en Costa Rica A pesar de ser un país pequeño en extensión y población, Costa Rica se destaca entre las naciones del mundo por su sistema democrático. No siempre ha sido un país democrático. Costa Rica ha evitado en lo posible, mucha de la violencia que existe en América Central. Desde los últimos años del siglo XIX, sólo dos periodos de relativa violencia han marcado su desarrollo democrático. En 1917, Federico Tinoco Granados gobernó como dictador dos años, después de un golpe de estado. En 1948 José Figueres Ferrer lideró un levantamiento armado conocido como la “Guerra del 48” a raíz de una elección presidencial acusada por la oposición de nulidad y fraude. Después de la guerra, se creó la Junta Fundadora de la Segunda República. El año siguiente, el mismo Figueres abolió el ejército, y desde entonces, Costa Rica ha sido uno de los pocos países en operar bajo el sistema democrático sin la ayuda de un ejército armado. Una baja de aproximadamente 2000 personas en los 44 días que duró la Guerra Civil resultaron de este levantamiento, el hecho más sangriento en la historia del país en el Siglo XX, pero la Junta creó una constitución: La Constitución Política de 1949, garantizando las libres elecciones con sufragio universal y el fin del ejército armado. Figueres Ferrer llegó a ser benemérito de la patria, ganando la primera elección bajo la nueva constitución en 1953. Desde entonces, el país ha llevado a cabo trece elecciones, la última de ellas en el año 2010. Es a partir de este momento cuando Costa Rica pasa a ser una República democrática, libre e independiente, según nuestra Constitución Política promulgada en 1949 y hoy vigente. La democracia, es el aquel sistema de gobierno, en el cual la soberanía del poder reside y está sustentada, en pueblo. Es éste, por medio de elecciones directas o indirectas, quien elige las principales autoridades del país. Asimismo, es el pueblo, quien puede cambiar o ratificar a estas mismas autoridades, en las siguientes elecciones populares. Por este motivo los griegos hablaban de la democracia, como el gobierno del pueblo; de hecho este es su significado exacto. 2 Es así, como se puede conformar una democracia directa, donde el pueblo es quien toma todas las decisiones ejecutivas y legislativas, o la democracia representativa, donde el pueblo por medio de votación popular escoge las autoridades que representarán a la ciudadanía, en la toma de decisiones. La Constitución que actualmente nos rige fue decretada el 9 de noviembre de 1949. Fue tomada como base la Constitución de 1871 incorporándose variaciones de acuerdo al adelanto de la época, como con el Servicio Civil, las Instituciones Autónomas, el Tribunal Supremo de Elecciones y la no reelección consecutiva de Presidente de la República y de los Diputados de la Asamblea Legislativa. Nuestra Constitución también establece la República con una división del Gobierno en tres poderes distintos e independientes entre sí. La elección del Presidente, Vicepresidente, los Diputados, Munícipes y Síndicos se realiza cada cuatro años, el primer domingo de febrero y constituye la renovación total del Poder Ejecutivo, Legislativo y las municipalidades. Las elecciones se llevan a cabo por medio del sufragio que consiste en el libre derecho al voto en forma directa, universal y secreta por medio de papeletas. El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) es el encargado de organizar, dirigir y vigilar los actos relativos al sufragio. El TSE está integrado por 3 magistrados propietarios y 6 suplentes nombrados por la Corte Suprema de Justicia por un periodo de 6 años. Gobierno El sistema de Gobierno de Costa Rica es democrático, así lo establece El Artículo 9 de nuestra Constitución “El Gobierno de la República es popular, representativo, alternativo y responsable. Lo ejercen tres Poderes distintos e independientes entre sí: Legislativo, Ejecutivo y Judicial” Poder Ejecutivo En primer lugar, el Ejecutivo está formado por el Presidente de la República, los Vicepresidentes y los Ministros de Gobierno. Es decir, se consagra constitucionalmente la pluripersonalidad de este poder según la constitución política de 1949. Art. 130. Poder Legislativo 3 Es unicameral. En primer lugar, se establece que el poder de legislar reside en el pueblo, pero que éste lo delega por medio del sufragio en la Asamblea Legislativa, anteriormente llamado Congreso Constitucional. Poder Judicial El Poder Judicial está organizado en tres ámbitos que dependen de lo Corte Suprema de Justicia y comprenden desde la administración de la justicia, hasta el trabajo de todos sus empleados. Estos ámbitos son: Ámbito Judicial, Ámbito Auxiliar de Justicia y Ámbito Administrativo. Por las funciones tan particulares y autónomas que realiza en Costa Rica se considera al Tribunal Supremo de Elecciones como un cuarto poder, y su misión del es organizar, dirigir y vigilar los actos relativos al sufragio, garantizando el respeto al ordenamiento jurídico en los procesos electorales y en la creación y funcionamiento de los partidos y mantiene un registro del estado civil continuo, Ninguno de estos Poderes puede delegar el ejercicio de funciones que le son propias. SALA Cada sala tiene la función de administrar la justicia sobre ciertos problemas específicos. Solo les llegan asuntos de mucha importancia y allí se toma la decisión definitiva. Los salas I, II y III están formadas por cinco magistrados cada una, la sala Constitucional La Sala I es la que se encarga de todos los asuntos relacionados con los bienes de valor económico (casas, terrenos, préstamos, etc.) La Sala II tiene a su cargo todos los conflictos de trabajo (despidos, vacaciones, etc.) También se ocupa de los asuntos de familia (matrimonios, divorcios, etc.) La Sala III resuelve todos los problemas penales (estafas, robos, homicidios, asaltos, etc.) La Sala Constitucional vela por el estricto respeto a la Constitución. 4 Existen otras organizaciones como: Régimen Municipal Las Municipalidades estarán a cargo de la administración de los intereses y servicios locales en cada cantón. Contraloría General de la República Es una institución auxiliar de la Asamblea Legislativa en la vigilancia de la Hacienda Pública. Tiene total independencia en el desempeño de sus labores. Tesorería Nacional Es el único organismo autorizado legalmente para pagar a nombre del Estado y recibir las cantidades que, a título de rentas o por cualquier otro motivo, deban ingresar en las arcas nacionales. DETENTADORES DEL PODER Los detentadores de los poderes oficiales y visibles son aquellos órganos y autoridades y correspondientes funcionarios que están encargados por la Constitución del Estado — normalmente, aunque no siempre, contenida en un documento formal — de desempeñar determinadas funciones en interés de la sociedad estatal. El poder político que ellos ejercen esta unido al cargo, y a través sólo del cargo se atribuye el dominio al detentador del mismo. En el sistema político del constitucionalismo, el poder esta despersonalizado y separado de la persona; el poder es inherente al cargo independientemente de la persona que en un momento dado lo ejerza. A lo largo de la evolución histórica de la sociedad estatal se han formado 4 detentadores del poder de este tipo. 1. El gobierno, el más antiguo y, fundamentalmente, el más imprescindible de todos, está encargado dentro del marco del estado constitucional de las funciones gubernamentales de tomar y ejecutar la decisión. El ámbito de actuación del gobierno cambia según el periodo histórico y el tipo específico de gobierno. 2. La Asamblea (el parlamento) como representante de los destinatarios del poder, está en primera línea encargada de la legislación y de la función de controlar al gobierno. La 5 calificación de la asamblea como representante de la masa de los destinatarios del poder era meramente simbólica cuando la pertenencia al parlamento, por razón del sufragio restringido, quedaba reservada a la clase aristocrática plutocrática y burguesa. La asamblea se convirtió en una auténtica representación de la totalidad de los destinatarios del poder cuando su composición, ampliada por el sufragio, correspondió a las diversas corrientes políticas dentro del electorado, tal como se refleja en los partidos políticos. 3. El tercer grupo de detentadores del poder son los propios destinatarios del poder, que, al organizarse en los cuadros de los partidos políticos, se elevan a la condición de un detentador del poder independiente participando directamente en el proceso político a través de elecciones, procedimientos de referéndum e impacto de la opinión pública en los otros órganos estatales. 4. Finalmente, deben ser considerados como legítimos detentadores del poder los tribunales de justicia cuando, en situaciones excepcionales, en lugar de ejercer meramente la función subordinada de aplicar la ley al correspondiente conflicto de intereses, reclaman el derecho de declarar invalidas las leyes emitidas por el parlamento y el gobierno (control judicial de la constitucionalidad de las leyes). La cuestión de si los partidos políticos deben ser clasificados como oficiales y legítimos detentadores del poder puede quedar en suspenso. Dado que la mayor parte de las constituciones los ignoran de manera expresa, no son oficiales; sin embargo, difícilmente puede dudarse de su status como legítimos detentadores del poder en la moderna sociedad de masas. Por su capacidad de movilizar y activar a los destinatarios del poder para que cumplan su función de electores los partidos son indispensables en el proceso político de todas las organizaciones estatales contemporáneas, bien sean constitucionales o autocráticas. En nuestra sociedad tecnológica de masas ha surgido un nuevo tipo de invisibles detentadores del poder en forma de grupos pluralistas y agrupaciones de intereses que dominan los medios de comunicación de masas. La infiltración y configuración del proceso político a través de los grupos pluralistas y de su vanguardia —los grupos de presión y lobbies— es quizás, en comparación con otros tiempos, el fenómeno político más significativo en la moderna sociedad de masas. Ahora que la masa de destinatarios del poder participa activamente como electorado en el proceso político, la formación de la opinión pública que refleja y a su vez moldea la 6 voluntad del electorado, se ha convertido en el aspecto más importante de la dinámica del poder en la sociedad pluralista de nuestros días. Los grupos pluralistas, que disponen de lealtad de sus partidarios y adheridos son detentadores invisibles del poder a estos hay que añadir los que dominan y controlan en favor de dichos grupos los medios de comunicación de masas a través de los cuales se forma y estimula la opinión pública y, con ello, la actuación del electorado como supremo detentador del poder. En el Estado constitucional y democrático, los medios de comunicación de masas son igualmente accesibles a todos, mientras que en el sistema político designado como «autocracia» están monopolizados por un único detentador del poder. CLASES DE PODERES. Poder: Puede referirse a múltiples conceptos dependiendo del campo o área de conocimiento. A un nivel básico se identifica con estamentos de poder -como los gobiernos, ejércitos o multinacionales-, también se identifica con la noción de fuerza -fuerzas de seguridad-. Sin embargo la noción de poder suele estar más relacionada a la acción social colectiva que a la fuerza física. También se entiende como la capacidad para cambiar la realidad. Ciencias políticas, sociales y del derecho Poder (sociología) Por poder se entiende cada oportunidad o posibilidad existente en una relación social que permite a un individuo cumplir su propia. Gran parte del debate sociológico reciente sobre el poder gira en torno al problema de su definición, y su naturaleza como constructiva o como permisiva. Así, el poder puede ser visto como un conjunto de formas de constreñir la acción del ser humano, pero también como lo que permite que la acción sea posible, al menos en una cierta medida. Gran parte de este debate está relacionado con los trabajos de Foucault, quien, siguiendo a Maquiavelo, ve al poder como "una compleja situación estratégica en una determinada sociedad". Siendo puramente estructural, su concepto involucra tanto las características de constricción como de facilitación. Para Max Weber la sociedad moderna está amenazada por el fenómeno creciente de la concentración del poder dentro de las organizaciones. Su discípulo Robert Michels advirtió que en las organizaciones modernas, tanto privadas como estatales, se tiende a quedar bajo el 7 control de reducidos, pero poderosos grupos políticos o financieros. Aunque los líderes son elegidos democráticamente, según Michels, con la mejor intención, por las dos partes, se observa una tendencia a integrarse en élites del poder que se preocupan básicamente por la defensa de sus propios intereses y posiciones a toda costa. En otras palabras podría decirse que en la actualidad corremos el peligro de que las élites del poder, nacidas en la sociedad a través de procedimientos legítimos, entren en un proceso mediante el cual el poder aumenta y se perpetua a sí mismo retroalimentándose y produciendo, por tanto, más poder. La imposición no requiere necesariamente de la coacción (fuerza o amenaza de fuerza). Así, el "poder" en el sentido sociológico incluye tanto al poder físico como al poder político, al igual que muchos otros de los tipos de poder existentes. Se podría definir el "poder" como la mayor o menor capacidad unilateral (real o percibida) o potencial de producir cambios significativos, habitualmente sobre las vidas de otras personas, a través de las acciones realizadas por uno mismo o por otros. Pero por otra parte, al decir de Paulo Freire, el poder debe alojarse en la cabeza del dominado y llevarle a considerar como natural lo que desde el nacimiento se le esta imponiendo. Las leyes del poder son una interpretación de la evolución usada por individuos, con la finalidad de permitir al individuo desarrollarse al más alto nivel de confort que pueda alcanzar en su marco social. El ejercicio del poder es endémico en los humanos, como seres sociales y gregarios que son. Nótese que en castellano "poder", al igual que en francés, pouvoir, no solamente es un sustantivo, sino también el verbo "ser capaz de". En inglés, el nombre "poder" se traduce comopower, que también significa "potencia", lo que indica una cierta capacidad virtual o potencial. En alemán, en cambio, la palabra para designar "poder" es Macht, cuya raíz etimológica esmachen, que significa "hacer". De manera bastante interesante, la palabra del mandarín que significa poder también deriva de una forma verbal con el sentido "ser capaz de", neng (能).Nengli (能力), "poder", significa literalmente "la fuerza de ser capaz de Poder político El poder político es una consecuencia lógica del ejercicio de las funciones por parte de las personas que ocupan un cargo representativo dentro de un sistema de gobierno en un país. El poder político se identifica en sistemas democráticos con el poder Ejecutivo y legislativo de un país, mientras que el tercer poder del Estado, el poder judicial, está dentro de un esquema 8 distinto ya que su legitimidad no está sostenida por el voto del pueblo como los otros dos poderes, si no por el fiel cumplimiento del ejercicio de sus funciones. El poder político es legitimo cuando es elegido conforme a las leyes del país (Constitución). En países democráticos tiene como sustento la legitimidad otorgada por el pueblo por medio del voto popular (Elecciones). El poder político es abusivo cuando se excede en el ejercicio de sus funciones, avanzado en materias que está dentro del ámbito de los otros poderes. (Intromisión de poderes). El poder político es ilegítimo cuando utiliza mecanismos no autorizados por las leyes y se adueña del poder gubernamental (Ejecutivo-legislativo) sin tener la legitimidad del pueblo, otorgada por el voto popular. Manifestaciones del poder Coacción: Es el medio utilizado para que terceros sigan una determinada conducta. Puede ser física o psíquica. Coerción: La coacción dio paso a la coerción que es la situación donde el tercero realiza el mandato debido a la amenaza del uso de la violencia, es decir, la potencialidad del uso de esa violencia. Se excluye así el papel totalmente activo (ordenar y hacer cumplir) reservando a la autoridad un papel parcialmente activo (sólo ordenar). La coacción se fundamentaba en el temor de un daño seguro en el caso de incumplir lo ordenado. De esta vertiente del poder se desarrolló lo que posteriormente se conocieron como delitos contra la autoridad, es decir, desafiar al poder. Criticas Pero este poder según los Anarquistas clásicos hace que se ponga en perspectiva la libertad del individuo, dando como fin la dominación de este a través de reglas coactivas "derecho" las cuales en vez de ordenar subordinan Legitimación del poder Poder sagrado: La primera forma de legitimación utilizada se basó en la religión y la divinidad. El poderoso ya no lo era sólo porque podía ejercer violencia o porque tenía un vínculo de temor que le asegurara esa posición. Ahora el poderoso se instituía como un ser distinto, superior y ligado a los dioses. El poder de origen divino era incontestable, a no ser por otro poder de igual estatus o instituido por un dios diferente. A grandes rasgos este fue el desarrollo esquemático hasta la Revolución francesa. 9 Poder tribal: Un ejemplo de este caso, sería el Imperio Mongol. Soberanía Nacional: Las ideas que inspiraron la Revolución francesa y sus resultados negaron que el poder tenga origen divino y lograron darle vuelta al esquema señalando que la fuente del poder no eran las características del poderoso sino únicamente la voluntad de los súbditos que lo dejaban tener el poder. Esta idea llevó al convencimiento de que el verdadero poder nacía de la masa de súbditos, el pueblo, y este debía tener la capacidad de delegar tal poder en quien le placiera y en las condiciones que considerase más apropiadas y durante el tiempo que creyera conveniente. Teorías del poder Jean-William Lapierre: El poder político es una función social que consiste en tomar decisiones soberanamente para el conjunto de la sociedad global y de asegurar su ejecución por medio de la autoridad legítima y la supremacía de la fuerza pública. 1. Teoría elitista: El poder está concentrado en pocas manos políticas, sociales o económicas (élites). Por ejemplo, Mosca, Pareto, Michels. 2. Teoría pluralista de Dahl: El poder está repartido entre grupos de la sociedad. Las decisiones son un agregado de los intereses de la sociedad. 3. Teoría neocorporatista: El poder está repartido en 3 unidades constitutivas (Gobierno, patronal y sindicatos) que negocian entre ellos y adoptan las grandes decisiones económicas, etc.: Poder absoluto. Absolutismo Luis XIV de Francia, ejemplo de rey absolutista, pintura de Hyacinthe Rigaud. El absolutismo es una forma de gobierno en la cual el poder del dirigente no está sujeto a ninguna limitación institucional que no sea la ley divina.1 Es un poder único desde el punto de vista formal, indivisible, inalienable, intranscriptible y libre. Los actos positivos del ejercicio del poder (legislación, administración y jurisdicción) se apoyaron en la última instancia de decisión: la suprema monarquía, emanando de ella, no estando por encima sino por debajo. En términos kantianos el poder absoluto consiste en que "el soberano del Estado tiene con respecto a sus súbditos solamente derechos y ningún deber (coactivo); el soberano no puede ser sometido a juicio por la violación de una ley que el mismo haya elaborado, ya que está 10 desligado del respeto a la ley popular (populum legis)".[cita requerida] Según Bobbio, esta definición es compartida por todos los naturalistas como Rosseau o Hobbes. Abarcó los siglos XVI, XVII, XVIII y la primera mitad del XIX, cuando las revoluciones burguesas de 1820, 1830 y 1848 acabaron con la Restauración del Congreso de Viena. Como excepción a esta caducidad del absolutismo se debe citar al Imperio ruso, donde los zares mantuvieron su práctica hasta la Revolución Bolchevique de 1917. La teoría del derecho divino del poder real o del absolutismo teológico nació en Francia en el último cuarto del siglo XVI y en el ambiente de las guerras de religión. Aunque en Europa la divinización del monarca nunca llegó tan lejos como en Asia —en algunos países se identificaba al rey con el mismo Dios—, el rey siempre tuvo cierto poder sobre las iglesias nacionales a través del regalismo. Poder constituyente Poder constituyente es la denominación del p que tiene la atribución de establecer la norma fundamental de un ordenamiento jurídico, dando origen a un Estado y su sistema político y, posteriormente, de modificarla o enmendarla. Esta facultad es ejercida al constituir un nuevo Estado y al reformar la Constitución vigente. Por lo anterior, habitualmente se distingue un poder constituyente primario u originario y un poder constituyente derivado. El poder constituyente ha sido definido como la "voluntad política creadora del orden, que requiere naturaleza originaria, eficacia y carácter creadora" y como la "voluntad originaria, soberana, suprema y directa que tiene un pueblo, para constituir un Estado dándole una personalidad al mismo y darse la organización jurídica y política que más le convenga".1 De todos modos, existen concepciones que consideran que el poder constituyente originario puede recaer en el pueblo o en la nación. Se considera que el poder constituyente existe en los regímenes de Constitución rígida, en el que la elaboración de las normas constitucionales requiere un procedimiento diferente al de las leyes. Poderes públicos En Poderes públicos es un término utilizado para designar al conjunto de los poderes del Estado, especialmente en su dimensiones del Estado, especialmente en su 11 dimensión coactiva, como aquellos a quienes corresponde el uso legítimo de la violencia (en términos de Max Weber, el monopolio de la violencia). En el sentido abstracto de la expresión, se entiende poder como la facultad de mandar y ser obedecido, y público como actividad del Estado. Poder público es la capacidad que tiene el estado para obligar a alguien a realizar un acto determinado. El poder público es necesario para el funcionamiento de grupos sociales que confluyen en un espacio físico cualquiera. Se requiere de un orden y del establecimiento de reglas que permitan la convivencia humana, la cual se traduce en el ejercicio del poder. En toda sociedad se conforman grupos que, de una u otra manera crean un centro de poder que irradia su acción en diversas direcciones como: religión, economía, cultura, incluso la moda y que como dice Bourdieu, la sociedad es una verdadera “constelación Estado, especialmente en su dimensión coactiva, como aquellos a quienes corresponde el uso legítimo de la violencia (en términos de Max Weber, el monopolio de la violencia). En un sentido material de la expresión, poder público (aunque se suele usar en plural: "poderes públicos") significa conjunto de órganos e instituciones del Estado. Constituye una capacidad jurídica legítima que poseen los tres poderes del Estado para ejercer en forma eficaz, mediante la coactividad, las acciones y los cometidos que les son conferidos por la Constitución o Ley fundamental de un Estado. El poder nace como una necesidad de asegurar la convivencia humana, por lo tanto, si no hay orden y autoridad, se destruye la posibilidad de convivir y de interactuar en una sociedad capaz de alcanzar la categoría de Estado. Categorías: Los tres poderes clásicos descriptos por Montesquieu: Poder legislativo. Se denomina poder legislativo a una de las tres facultades y funciones primordiales del estado (junto con el poder ejecutivo y el judicial), que consiste en la aprobación de normas con rango de ley. Es una de las tres ramas en que tradicionalmente se divide el poder de un Estado. En una democracia, el poder legislativo elabora y modifica las leyes existentes de acuerdo con la opinión de los ciudadanos. Su función específica es la aprobación de las leyes y, 12 generalmente, está a cargo de un cuerpo deliberativo (congreso, parlamento o asamblea de representantes). Charles de Secondat, Barón de Montesquieu propuso, en su célebre libro El espíritu de las leyes, que era necesario que las funciones del Estado se dividieran entre distintos poderes (legislativo, ejecutivo y judicial), para que mediante unos arreglos de las características el poder se auto controle, a fin de evitar la tiranía. Poder ejecutivo. Poder ejecutivo En la ciencia política y el derecho constitucional, el poder ejecutivo es una de las tres facultades y funciones primordiales del Estado (junto con la legislativa y la judicial), consistente en hacer cumplir las leyes y que suele ejercer el gobierno o el propio jefe del Estado. Se distingue así del poder legislativo, que promulga o revoca leyes, y del poder judicial, que interpreta, hace respetar o invalida las mismas. Es responsable de la gestión diaria del Estado. El poder ejecutivo concibe y ejecuta políticas generales de acuerdo con las cuales las leyes tienen que ser aplicadas, representa a la Nación en sus relaciones diplomáticas, sostiene a las Fuerzas Armadas y en ocasiones aconseja con respecto a la legislación. En los estados democráticos, el poder ejecutivo está considerado como administrador y ejecutor de la voluntad popular a la cual representa y de la que debe ser su más firme garante. La misión ejecutiva de un estado totalitario, en cambio, es ejercida al margen de limitaciones legales o jurídicas. En muchos países, se utiliza la palabra gobierno para referirse al poder ejecutivo, pero este uso puede resultar confuso en un contexto internacional. El poder ejecutivo suele ser unipersonal. El jefe de gobierno es la figura visible y de mayor importancia del poder ejecutivo. En un sistema presidencial, el jefe de Gobierno (o Presidente) es también el jefe de Estado, mientras que en un sistema parlamentario es generalmente el líder del partido con mayor representación en el poder legislativo y es comúnmente llamado Primer Ministro (Taoiseach en la República de Irlanda, Canciller Federal en Alemania y Austria, etc.). En Francia, el poder ejecutivo se reparte entre el Presidente y el Primer Ministro, sistema que se ha reproducido en una serie de antiguas colonias francesas. Suiza y Bosnia y Herzegovina también han colegiado sistemas para la función de Jefe de Estado y de Gobierno. En Suiza, el Consejo Federal está integrado por 7 miembros, uno de los 13 cuales lo preside de manera rotativa. Por su parte, Bosnia y Herzegovina posee una presidencia colegiada de tres miembros. En el pasado, Uruguay tuvo un sistema de gobierno colegiado, el Consejo Nacional de Gobierno. Poder Judicial El Poder Judicial es un poder del Estado que, de conformidad con el ordenamiento jurídico, es el encargado de administrar justicia en la sociedad, mediante la aplicación de las normas jurídicas en la resolución de conflictos. Por "Poder", en el sentido de poder público, se entiende a la organización, institución o conjunto de órganos del Estado, que en el caso del Poder Judicial son los órganos judiciales o jurisdiccionales: juzgados y tribunales, que ejercen la potestad jurisdiccional, que suele gozar de imparcialidad y autonomía. Según la teoría clásica de Montesquieu de la separación de poderes, que distingue entre poder legislativo, ejecutivo y judicial, la división garantiza la libertad del ciudadano. Montesquieu compuso su teoría después de un viaje a Inglaterra en donde interpretó que un poder judicial independiente puede ser un freno eficaz del poder ejecutivo. Bajo esta separación de poderes, nace el llamado estado de derecho, en el cual los poderes públicos están igualmente sometidos al imperio de la ley. El Poder judicial debe ser independiente para poder someter a los restantes poderes, en especial el ejecutivo, cuando estos contravengan el ordenamiento jurídico y convertirse en el encargado de hacer efectivo la idea del Derecho como elemento regulador de la vida social. Cuarto poder, expresión con la cual solía designarse a la prensa, en alusión a la extraordinaria influencia que ésta ejercía en los años previos a la Revolución francesa], hasta la llegada de los todavía más poderosos medios de comunicación; TV, radio, Internet, etc. Su creación es atribuida al escritor, orador y político anglo-irlandés, muy famoso e influyente en su época, Edmund Burke (1729-1797), dando con ella una prueba casi profética de perspicacia política, ya que en aquel momento la prensa no había logrado, ni siquiera en Inglaterra, el extraordinario poder que alcanzaría más tarde en todos los países libres. En tiempos modernos muchos críticos consideran que la prensa no se limita a reflejar la opinión pública, sino que puede crear esa misma opinión pública, proporcionando la casi totalidad de la información con la que ésta cuenta en cualquier momento dado, siendo uno de los generadores del denominado mainstream (en español "corriente generalizada" o "intereses comunes. 14 El quinto poder EL Quinto poder, continuación de la serie de los tres poderes clásicos de Montesquieu (ejecutivo, legislativo y judicial), ocuparía el quinto lugar tras el cuarto poder que se atribuye a los medios de comunicación. Como concepto es de muy reciente aparición (comienzos del siglo XXI -primeras referencias en 2003-), y se ha aplicado a dos fenómenos muy distintos entre sí: la intervención económica del Estado (específicamente del gobierno) sobre el mercado, por un lado; y, por otro, los nuevos fenómenos sociales surgidos en torno a la red Internet. La intervención económica del gobierno como quinto poder Según algunos, sería el poder que, añadido a su capacidad de equilibrio, control o influencia sobre los tres clásicos de naturaleza política y el cuarto de naturaleza informativa, ejercen los gobiernos (que deberían teóricamente ser titulares únicamente del poder ejecutivo según la división de poderes de la teoría política liberal) en la esfera económica a través de las empresas públicas y los mecanismos de intervencionismo económico (fundamentalmente financiero).1 Históricamente la relación del poder con la economía ha sido muy estrecha, sobre todo con el mercantilismo de la Edad Moderna, pero desde la Edad Contemporánea pueden definirse cuatro posturas, explicitadas sobre todo a partir del enfrentamiento a la crisis de 1929: El liberalismo, proveniente del liberalismo económico clásico de Adam Smith y redundado como neoliberalismo (ideología dominante de la globalización especialmente desde la caída del Muro de Berlín), propugna un estado mínimo o subsidiario restringido a garantizar las condiciones para que pueda funcionar el mercado libre. El comunismo, desarrollado en la Unión Soviética y los países del denominado socialismo realmente existente, propugnó el control total de la economía por un Estado sometido a la dictadura del proletariado, con la apropiación de los medios de producción y la imposición de la planificación económica. Los fascismos desarrollaron una intervención económica paternalista y centralizadora que puede definirse como corporativismo (véase Fascismo # componente social). El Estado Social, de inspiración socialdemócrata y keynesiana, confía en la capacidad redistributiva de los impuestos progresivos, el gasto público y la planificación indicativa, así como la existencia de un sector público que controle los sectores 15 estratégicos (armamento, energía, transportes...) y oriente la economía en competencia con el sector privado. La reciente crisis financiera de 2008 ha supuesto un replanteamiento del papel del Estado en la economía de mercado, que pone en cuestión la relación entre capitalismo y democracia que en el periodo anterior habían llegado a considerarse términos identificables (Véase capitalismo democrático).I Internet como quinto poder Según otra posible visión, la Internet como superación de los medios de comunicación tradicionales, y las posibilidades de organización social en red, serían el quinto poder -en especial la Blogosfera, las Wikis y todo lo denominado Web 2.0-, que en este caso escaparía a su ejercicio por parte del Estado y de los medios de comunicación masivos privados tradicionales y sería ejercido por la sociedad por sí misma: Periodistas, universitarios, militantes de asociaciones, lectores de diarios, oyentes de radios, telespectadores, usuarios de Internet, todos se unen para forjar un arma colectiva de debate y de acción democrática. Los globalizadotes habían declarado que el siglo XXI sería el de las empresas globales; la asociación Media Watch Global afirma que será el siglo en el que la comunicación y la información pertenecerán finalmente a todos los ciudadanos. Es desde ese punto de vista que la revista Time ha dedicado la famosa portada anual que dedica al "hombre del año" de 2006 a un ordenador cuya pantalla está ocupada por un espejo que refleja el rostro del lector y la palabra YOU (TÚ).3el uso de las empresas públicas y la capacidad de intervención económica (según otros, sería Internet, como superadora de los medios de comunicación). SSexto poder El Sexto poder, continuación de los tres poderes clásicos de Montesquieu, legislativo, ejecutivo y judicial, después del cuarto poder de los medios de comunicación y el quinto poder, el intervencionismo económico o Internet. El sexto poder sería el poder territorial que se ejerce regional o localmente gracias a la descentralización política. La división del poder territorial puede adoptar diversas formas, como las entidades de estructura étnica, como en Argentina (mapuche, wichí), Bolivia (comunidades indígenas aimara, quechua, guaraní), Canadá (INIT), Panamá (kuna); o las de estructura constitucional, como son los estados federales de Estados Unidos o Alemania, o las comunidades autónomas de 16 España. La pérdida de competencias políticas por los estados nación, por una parte por la integración supranacional (Comunidad Andina, MERCOSUR, Unión Europea, globalización, etc.) y por otro por el movimiento descentralizador, significan para algunos que el estado residual queda relegado a un conjunto de funciones de insegura deficiente. Poder fáctico Poder fáctico es el que se ejerce al margen de los cauces formales (es decir, que no coincide necesariamente con el aparato del Estado) y se sirve de su autoridad informal o su capacidad de presión para influir políticamente. El poder fáctico ni está legitimado ni siempre busca la legitimación para ejercerse, pero ejerce de facto (de hecho) el poder aunque no lo haga de iure (legalmente) ya que su mera existencia le hace ser determinante. La mayor parte de las veces no es necesario que se imponga por la fuerza: le basta con explicitar, o incluso con sugerir sus deseos para que se conviertan en realidad. La clave de su ejercicio es su capacidad de control de mecanismos externos a la política para lograr poder político, como por ejemplo el dominio de recursos vitales o estratégicos, que le dan el control de la ideología, la sociedad y la economía. Por ejemplo en vez de controlar un gobierno de turno, controlar o influenciar su legislación, de manera legal o cuasi-legal. Un ejemplo típico de poder fáctico es la influencia ejercida por grupos de poder como pueden ser: la banca, la oligarquía, el lobby israelí en EE.UU., o los intereses plutocráticos, así como la Iglesia, las centrales sindicales o los medios de comunicación masiva. En ciertos corpus teóricos-ideológicos se denomina al fenómeno causado por el poder fáctico como mercantilismo empresarial o capitalismo de Estado.1 Ejemplos de su aplicación Habitualmente el término se aplica en plural: "los poderes fácticos en España durante el final del Franquismo y la Transición eran la Iglesia, el Ejército y la Banca (o los capitalistas)", y en el debate político español se sigue hablando de poderes fácticos post-franquistas todavía influyentes. Similares ejemplos de enumeración de poderes pueden encontrarse en países de América Latina, con la adición del poder exterior que supone la presencia de los intereses de Estados Unidos.5 Más recientemente, a partir del Golpe de Estado en Honduras de 2009 y la destitución del presidente Manuel Zelaya por la fuerza, se ha hablado mucho de los "poderes fácticos", o sea, 17 los poderes detrás del poder, en ese país centroamericano. En este caso se habla de familias y grupos que controlan o dominan de forma desproporcionada distintos aspectos importantes de la vida economía y política nacional.6 El mismo fenómeno se ha visto en grandes partes de América Latina, por ejemplo, antes de la Guerra Civil de El Salvador de 1980-1992 el país fue dominado por "las catorce familias".7 Para algunos analistas, el papel central que juega los "poderes lácticos" pone en duda la solidez y estabilidad de la democracia en muchos países. La consideración de la prensa como un cuarto poder la aproximaría al concepto de "poder fáctico", pero no a los medios de comunicación mismos (que serían un poder más, al estilo de los tres poderes clásicos de Montesquieu, y por tanto ni más ni menos fáctico que ellos), sino a los que los controlan (grupos empresariales, por ejemplo).8 Muy habitualmente se alude de forma metafórica a la forma en que los poderes fácticos gravitan sobre la vida pública, con la mera amenaza de su actuación: como por ejemplo en la expresión "ruido de sables" o incluso "ruido de sotanas". Un sentido semejante tienen algunos usos del término baculazo para denominar a las decisiones eclesiásticas, y del decuartelazo para denominar a los pronunciamientos militares. Poder económico. Por poder económico se entiende, en un marco donde los capitalistas son los propietarios del capital, a aquel poder que crea el capital. A través de este poder, mediante la disposición de los recursos los propietarios de los medios de producción (capital) deciden qué producir y a quién emplear. A través de sus decisiones de inversión pueden, en buena medida, fijar el rumbo del desarrollo social. De esta manera, la gama de bienes que los capitalistas pueden consumir es mucho más amplia que la de los no propietarios.1 2 Para el economista David Anisi, el poder es el ejercicio de apropiación del tiempo de los demás, y se mide como la relación entre el tiempo obtenido de los demás y el tiempo necesario para conseguir esa movilización. Poder duro(hard power) Fuerzas armadas 18 Las fuerzas armadas de un Estado son sus ejércitos y cuerpos policiales. Suelen dividirse en ramas, servicios armados separados que agrupan los recursos militares empleados por dicho estado en tierra (ejército), mar (armada) y aire (fuerza aérea). Existen como medio para la defensa nacional del país, y en su caso también poder atacar favoreciendo la política exterior de su cuerpo diplomático. En el caso de los cuerpos policiales su objetivo es usar la fuerza de forma controlada para imponer el orden y hacer cumplir la legislación. En algunos países los gobiernos tienen fuerzas armadas irregulares que se llaman grupos paramilitares. El estudio del empleo de las fuerzas armadas es conocido como la ciencia militar. En sentido amplio esto involucra la consideración de ataque y defensa en tres "niveles": estrategia, arte operativo y táctica. Cada una de estas áreas estudian la aplicación del uso de la fuerza para alcanzar un objetivo deseado. Las fuerzas armadas nacionales pueden ser organizadas como fuerzas permanentes (o un ejército regular), lo cual describe a un ejército profesional cuya única profesión es la de prepararse y entrar en combate. En contraste existe el ejército civil. Un ejército civil es únicamente movilizado a medida que se lo requiere. Su ventaja yace en su costo reducido para la sociedad. La desventaja es que un ejército civil se encuentra menos entrenado y organizado. Históricamente los ejércitos profesionales usualmente triunfan contra ejércitos civiles aún mayores en número en enfrentamientos de combate. Un punto medio entre ambos sistemas requiere un cuadro de dirigentes compuesto por suboficiales profesionales y oficiales que actúan como un esqueleto para una fuerza en gran escala. En tiempos de guerra este esqueleto es completado con reclutas y reservistas (ex soldados que se ofrecen por un salario reducido para ser entrenados ocasionalmente con el cuadro de dirigentes para mantener sus habilidades militares intactas), quienes conforman la unidad de tiempos de guerra. Para los gobiernos que optan por esta fórmula, esto genera un equilibrio entre los pros y contras de cada sistema organizativo y permite la formación de ejércitos gigantescos (en términos de millones de combatientes), necesarios en guerras modernas de gran escala. Las fuerzas armadas en muchos países grandes se dividen generalmente en un ejército, una fuerza aérea y una armada (si el país tiene costa). Estas divisiones pueden ser exclusivamente para facilitar el entrenamiento y mantenimiento, o pueden ser ramas completamente independientes responsables de conducir operaciones independientemente de 19 los demás servicios. La mayoría de los países pequeños poseen una única organización militar que abarca todas las fuerzas armadas. Beneficios y costes El beneficio obvio de cualquier milicia es el proveer protección de fuerzas armadas extranjeras y de conflictos internos. En décadas recientes los ejércitos permanentes han sido utilizadas también para roles de apoyo en emergencias civiles en situaciones de desastre. Por otro lado, las fuerzas armadas pueden dañar también a una sociedad al ingresar en guerras contraproducentes (o simplemente inexitosas). Las investigaciones científicas y tecnológicas militares en ocasiones producen beneficios colaterales, aunque muchos argumentan que se obtendrían aún mayores beneficios de destinar el capital directamente a investigaciones que mejoren la vida en vez de destruirla.1 La sobre-inversión en fuerzas armadas puede agotar una sociedad de fuerza de trabajo y material, produciendo un impacto significativo en los estándares de vida civiles. De prolongarse durante un período de tiempo importante esto resulta en investigaciones y desarrollo civiles reducidos, degradando la habilidad de la sociedad de mejorar su infraestructura. Esta falta de desarrollo a su vez afecta a la milicia en un círculo vicioso. La Unión Soviética fue un ejemplo moderno típico de este problema debido a su intervención en Afganistán, hoy en día Estados Unidos reúne las condiciones para sufrir el mismo fenómeno por su participación en la invasión de Irak. Poder Blando(soft power) Poder blando, en inglés soft power, es un término usado en relaciones internacionales para describir la capacidad de un actor político, como por ejemplo un estado, para incidir en las acciones o intereses de otros actores valiéndose de medios culturales e ideológicos. El término fue acuñado por el profesor de la Universidad Harvard Joseph Nye en su libro de 1990Bound to Lead: The Changing Nature of American Power, que luego desarrollaría en 2004 en Soft Power: The Means to Success in World Politics. El valor del término como teoría política ha sido discutido, sin embargo ha sido ampliamente utilizado como forma de diferenciar el poder sutil de la cultura o las ideas frente a las formas más coercitivas, también llamadas poder duro, como la acción militar o la presión económica. Poder militar puede designar a: Una potencia militar o el poder militar de una gran potencia. 20 Un gobierno militar. La capacidad militar de las fuerzas armadas de una nación. La capacidad máxima de un avión militar. En términos históricos, otras magistraturas el imperium o romanas (consulado jurisdicción del imperator romano romano, dictadura romana, y de etc.) o del estrategos y otras magistraturas de las poleis griegas. Poder temporal . Poder temporal Es llamado poder temporal a la influencia de poder, tanto gubernamental como político, que ejerce el Vaticano sobre los pueblos, en particular al vicario de Cristo o Papa, en contraste con su poder espiritual sobre la Iglesia católica y otros grupos también llamado poder eterno. Este poder o actividad trajo consigo el estado papal autogobernable, el cual actualmente se limita a la Ciudad del Van. En su época de esplendor llegó a ser un país con su propia moneda y legislatura, etc., a la par de cualquier otra nación del mundo. Algunos llaman a este estado nacional, gobernado bajo una autoridad religiosa, como "tea", comparándose así con algunos pueblos musulmanes que viven también una forma de teocracia. Algunos historiadores clasifican la coronación de en el año 800 como el momento en que la Iglesia católica romana comenzó a aplicar una política internacional del poder temporal. El poder temporal siempre ha sido discutido en la política, la filosofía y la teología en las naciones donde el Vaticano ejerce este poder en diferentes grados, siendo que este poder es aplicado dependiendo del Papa en cuestión, el tiempo y las constituciones y el apoyo popular del pueblo católico romano. La discusión en los círculos políticos, filosóficos y teológicos se centra en que este poder ha sido mal usado para beneficio de unos, llevándolo así a estar apartado del poder eternal o mejor dicho alejándolo de las doctrinas religiosas en cuestión. Un ejemplo del uso cuestionable de esta influencia de poder sobre el mundo fue en la época de la Inc. Para algunos críticos, en la época de la inquisición el poder temporal católico fue ejercido con mayor influencia, y así se alejaba más de los evangelios y la curia romana. La respuesta más popular ante este tipo de crítica es que la meta final de esta política es, o era, la extensión del eo a todo el mundo. 21 Por razones prácticas, o bien de Realpolitik, el poder temporal del Papa acabó el de 1870 cuando la armada italiana entró en y completó el movimiento llamado Risorgiment. Formalmente, el poder temporal terminó en 1929 con el Tratado de Leerán que establece la coexistencia de La Ciudad del Vaticano (el concordato). Poder civil o autoridad civil Autoridad civil Autoridad civil o poder civil es una expresión que designa a la parte del aparato del Estado de la que depende el mantenimiento de len (co) pero que no corresponde a las autoridades. También se usa el término para distinguirlo de las autoridades religiosas o poder religioso; aunque es más habitual que, en ese contexto, se hable de poder secular (especialmente en el derecho canónico), o incluso de "gobierno humano", en oposición al "gobierno de Dios" o "gobierno divino".Entre los primeros usos del concepto está el de la reflexión evangélica sobre la sumisión al poder civil a propósito del tributo al César (Dad a Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César); y posteriormente las de los padres de la Iglesia, especialmente San Agustín (Civitate Dei y el denominado agustinismo político). En la época medieval el concepto fue desarrollado polémicamente a través de la teoría de las dos espadas y otras duras polémicas entre pontificado e imperio, los dos poderes universales. En época moderna, el humanismo abrió el campo intelectual a la reflexión de las ciencias políticas, más o menos alejadas del teocentrismo medieval (desde el maquiavelismo hasta el neoescolasticismo de la Escuela de Salamanca). La práctica política de las monarquías autoritarias y los estados modernos fueron experimentando distintas formas de relación con el poder eclesiástico, desde el regalismo en los países católicos hasta la Reforma protestante. Entre otras experiencias, se cuenta el concepto de "civil government" (no debe confundirse con el uso que se da a "gobierno civil" en castellano) que se atribuye a Roger Williams en 1636. Este clérigo fundó la colonia de Rhode Island and Providence Plantations (Rhode Island), y planteaba la creación de un "muro de separación" entre Iglesia y Estado para prevenir la corrupción de la Iglesia y mantener el orden civil (Bloudy Tenent of Persecution, 1644). Poderes universales. Poderes universales es la expresión utilizada en Europa Occidental desde la Edad Media para referirse al Pontificado y al Imperio, por cuanto ambos se disputaban el llamado Dominiummundi (dominio del mundo, concepto ideológico con implicaciones tanto terrenales como trascendentes en un plano espiritual), y mantenían con el resto de los agentes políticos una pretensión de superioridad, cuya efectiva plasmación en la realidad fue muy 22 desigual, dada la existencia de factores como la dispersión territorial, el bajo nivel de desarrollo técnico y productivo del modo de producción feudal y la tendencia social y política del feudalismo a la descentralización del poder. No obstante, los poderes universales pervivieron durante la Edad Moderna, aunque su inoperancia en las relaciones internacionales fue evidente desde la segunda mitad del siglo XVII. El comienzo de la Edad Contemporánea y la Revolución liberal, con las guerras napoleónicas y las unificaciones nacionales alemana e italiana, supusieron el fin efectivo del Imperio y el confinamiento territorial del Papado al Vaticano, que aún así mantuvo su capacidad de influencia en el mundo actual. Las relaciones sociales de poder Relaciones sociales de poder Las relaciones sociales de poder son una multitud de interacciones, reguladas por normas sociales, entre dos o más personas o grupos sociales, en donde una(o) de ella(o)s ejerce poder sobre otra(o) (habitualmente disciplinario o involuntario) en forma coercitiva. Este concepto es muy utilizado en antropología política para estudiar el poder coercitivo social (policía, ejército, etc.). EL CONTROL POLITICO Hablar del concepto de Constitución, nos remite imperativamente al estudio de Una idea consubstancial a éste y que resulta de suma importancia: el Control Político. Así, el concepto de Constitución ha variado significativamente desde la Antigüedad hasta nuestros días, el concepto de Constitución lleva dentro de sí el germen del equilibrio de los diferentes poderes dentro de la estructura del Estado. Esta idea de control político, que hemos considerado como consubstancial al concepto mismo de Constitución, no siempre ha recibido un reconocimiento pleno y expreso por parte de la dogmática constitucional, y, en la historia de la humanidad, hemos podido ver como distintos tipos de formas de Gobierno pasaban avasallantes por encima de las instituciones de control político. Los antiguos consideraron esta institución como parte fundamental e inherente al concepto de Constitución. Asimismo, en la Edad Media se fue fortaleciendo la noción de control del poder, pero no se llegó a perfeccionar un ordenamiento jurídico que lo garantizara. Sin embargo, la teoría del Estado va evolucionando y en su construcción conceptual encontraremos que a veces se aleja y, en ocasiones, se acerca a esa justificación de los controles sobre los distintos detentadores del poder. Con la llegada de la Edad Moderna y la idea de soberanía, las instituciones de control van a ser concebidas de distintas formas. Lo cierto es que, por 23 momentos la doctrina dejó de lado cuestiones como la división de poderes, su equilibrio y su garantía de control. Ahora bien, desde los inicios del siglo XX nuestra institución objeto de estudio vuelve a ser retomada por la doctrina constitucional, pasando a ser nuevamente un elemento fundamental en el constitucionalismo moderno. Particularmente en nuestra constitución se encuentran tres poderes el legislativo, el ejecutivo, y el judicial, teniendo el control político el poder legislativo por mandato constitucional el cual realizan tanto desde las diferentes comisiones, como a partir del Plenario Legislativo y otras instancias de prensa. Particularmente, el inciso 23 del artículo 121 de la Constitución Política, establece la facultad de nombrar comisiones investigadoras para que rindan el informe correspondiente de temas indagados. Asimismo, les asiste las facultades de interpelar a los ministros de Gobierno y nombrar a magistrados de la Corte Suprema de Justicia, entre otras funciones de control. La función de investigación de estos foros parlamentarios, permite presentar sus respectivos informes, que son enviados al Plenario Legislativo para su conocimiento, sin que ello los limite de ejercer otros controles políticos ante la opinión pública. En apoyo a estas funciones investigadoras, el Departamento de Comisiones brinda el soporte técnico necesario para su consecución y cumplimiento constitucional. Las atribuciones y límites para los trabajos de una Comisión investigadora, emanados de la Constitución Política, también se sustentan en los artículos 90 y 111, siguientes y concordantes del Reglamento de la Asamblea Legislativa. Asimismo, resulta relevante la integración de múltiples fallos de la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, referentes a los ámbitos de acción de las Comisiones Investigadoras del Parlamento. Las Comisiones Especiales de Investigación, en tanto instancias a las que les corresponde el ejercicio de la función de control político del Parlamento, tienen y cumplen funciones específicas, claramente distintas a las que le competen al control jurisdiccional, del cual es titular exclusivo el Poder Judicial. En tal sentido y a diferencia de lo que ocurre en el caso de los órganos jurisdiccionales, el control político encomendado a estas Comisiones Investigadoras -que por definición ejercen un control que, en última instancia, descansa en criterios de necesidad política, libre y razonablemente valorados por los órganos parlamentarios-, no está sujeto a un canon fijo y 24 predeterminado, aunque sí enmarcado dentro de los límites que imponen la Justicia, la Verdad y el Interés Público. De ahí que, en su ejercicio, estas Comisiones de Investigación, no deben necesariamente ajustarse al principio de legalidad a que vienen obligados los órganos del Poder Judicial, en el sentido de tener que limitarse a resolver únicamente con fundamento en los hechos de cada caso concreto y en el Derecho vigente aplicable, procesal o de fondo. Indudablemente, tampoco es dable a una Comisión de esta naturaleza, violentar aspectos esenciales del procedimiento por ser este consustancial al Derecho Humano de presunción de inocencia. Comisiones investigadoras. En virtud del tema de las Comisiones de Investigación, es importante destacar los siguientes elementos: 1. La Asamblea Legislativa tiene la facultad de nombrar comisiones de su seno para que investiguen cualquier asunto que se les encomiende, y rindan el informe correspondiente; además, el libre acceso a todas las dependencias oficiales para realizar las investigaciones con la posibilidad de recabar los datos que juzguen necesarios y que, en virtud de ello, puedan recibir toda clase de pruebas y hacer comparecer ante sí a cualquier persona, con el objeto de interrogarla. 2. La potestad para investigar conferida a la Comisión, se deriva de la norma jurídica Suprema establecida en el inciso 23) del artículo 121 de la Constitución Política. 3. Sobre las potestades de investigación de las Comisiones Legislativas, la Sala Constitucional ha determinado, mediante el voto 1898-97 de las 13:18 horas del 4 de abril de 1997, que la función de las comisiones investigadoras es investigar un determinado asunto, es decir, hechos que le hayan sido encomendados por el Plenario. Así, según el voto en referencia, las comisiones no cumplen una función de control jurídico, ni jurisdiccional. Sin embargo, dichas labores pueden “...culminar con una censura moral a funcionarios o particulares, o recomendaciones que les afecten, por conductas que social o políticamente sea reprochables, aún cuando no pudieran serlo jurídicamente...”, además, en el voto número 1956-97 de las quince horas 15 minutos del 8 de abril de 1997, la Sala Constitucional indicó que el objeto de investigación de dichas Comisiones “...es sumamente amplio, ya que establece que esas Comisiones 25 pueden investigar -cualquier asunto que la Asamblea les encomiende-, de manera que su poder investigativo no está constitucionalmente restringido a determinada materia, ni su objeto lo es únicamente el control político, aún cuando éste sea, por demás, el de mayor peso...”. En función de ello, se considera que la potestad de investigación legislativa, tiene como finalidad general servir de instrumento a la Asamblea, para que ejerza en forma más eficaz las funciones que la propia Constitución le ha otorgado. La atribución del control político emanada del artículo 84 del Reglamento de la Asamblea, establece las comisiones permanentes especiales. Sobre el particular, cabe aclarar que no todas ejercen funciones investigadoras, salvo las siguientes: Comisión de Relaciones Internacionales y Comercio Exterior, Comisión de Consultas de Constitucionalidad, Comisión para el Control del Ingreso y del Gasto Públicos, Comisión de Narcotráfico, Comisión de la Mujer, Comisión de la Juventud, Comisión de Nombramientos y Comisión del Ambiente. FORMAS DE GOBIERNO Y ESTADO Examen de las formas de gobierno y de las formas del Estado El Estado se caracteriza desde el punto de vista sociológico, como hace notar Groppali, por los diferentes matices de su elemento humano, de su población; por la religión de la misma, por su raza, por la lengua, por las costumbres, por el pasado histórico, por la cultura particular, es decir, por los ingredientes que contribuyen a constituir la nacionalidad considerada como adjetivo sociológico. Todos esos matices, toda esa serie de caracteres que contribuyen a formar la nacionalidad, le dan una personalidad propia, que se deriva de las características sociológicas de su población. 26 El Estado también adquiere un matiz propio, una personalidad especial, un carácter peculiar, que lo distingue de las otras organizaciones políticas similares, por las circunstancias especiales de su territorio, por su geografía. Pero, además, desde el punto de vista jurídico, el Estado se individualiza, se distingue de otras organizaciones políticas, también por la especial estructura de sus órganos fundamentales y la situación en que los mismos, se encuentran respecto de los otros, de los elementos constitutivos de la sociedad estatal, de la población y del poder, y respecto de ese auxiliar indispensable para la vida del Estado, que es el territorio. Entonces vemos que la personalidad concreta del Estado, aquello que nos hace distinguir un país de otro, tiene su apoyo en el triple aspecto sociológico, geográfico y jurídico. El aspecto sociológico, constituido por los matices especiales de su población. El geográfico, por la ubicación especial de su territorio, y el jurídico, por la particular estructura del orden de esta calificación, por su peculiar estructura jurídica. La palabra “Estado” designa la organización política en su conjunto, en su completa unidad formada por los diversos elementos que la constituyen. “Gobierno” se utiliza para designar el conjunto de los deberes públicos, de los órganos a quienes se atribuye el ejercicio supremo de la soberanía. El Estado es un concepto más amplio; abarca todo el todo. El gobierno únicamente se refiere a uno de sus elementos, el que tiene la dirección misma del Estado, o sea, los órganos a través de los cuales éste se manifiesta. El Estado se integra por la unión de los dos grupos, gobernantes y gobernados. El gobierno es definido por Orlando, como el conjunto de medios por los cuales la soberanía se traduce en actos. El gobierno es el conjunto de instituciones, organizadas por el ordenamiento jurídico, para el ejercicio de la soberanía. El gobierno se encuentra en la cúspide del Estado, en el vértice del ordenamiento jurídico. Otros autores definen al gobierno como el conjunto de individuos a quienes el ordenamiento jurídico confiere la potestad de dirigir el Estado. Esta definición no abarca más que el aspecto subjetivo del gobierno, al decir “conjunto de individuos...”, sin tomar en consideración su aspecto objetivo, o sea, el constituido por los órganos, por las organizaciones gubernamentales en sí mismas, independientemente de sus titulares, de ese conjunto de individuos (gobernantes), también son parte del gobierno los órganos mismos. 27 Las formas de gobierno se refieren a los diferentes modos de constitución de los órganos del Estado, de sus poderes y de las relaciones de esos poderes entre sí. Por el contrario, las formas de Estado se refieren a la estructura misma de la organización política en su totalidad y unidad. La consecuencia de esta distinción, es que puede variar la forma de gobierno, sin que varíe concomitantemente la forma del Estado, y viceversa; ambas situaciones son independientes. Evolución del problema Esta distinción que acabamos de hacer entre formas de gobierno y formas de Estado, es de reciente elaboración. En la Antigüedad y en la Edad Media, los autores se limitaban a examinar al Estado como un complejo de órganos, observando que la soberanía era una cualidad que correspondía, no al Estado en sí, sino a alguno de sus órganos fundamentales. No se hacía, en realidad, un estudio de las formas de Estado, sino que las consideraciones se referían exclusivamente a las formas de gobierno. Herodoto en Los nueve libros de la Historia hace referencia a las diversas formas de gobierno clasificándolas en monarquía, democracia y aristocracia. Platón, en La Republica, hizo una reseña de las formas de gobierno. Para Platón existen tantas formas en el alma del hombre como formas de gobierno. Estas son: "la Timocracia representada por el hombre timocrático; la oligarquía representada por el hombre oligárquico; la democracia representada por el hombre democrático; y por último la tiranía representada por el hombre tiránico."(Platón, La República, Libro VIII Pág.273) La Timocracia es el gobierno de los hombres de plata, o guerreros estos solo piensan en generar combates y conquistas y no piensan en fomentar el estudio. La oligarquía o el gobierno de los ricos, estos son los que poseen gran cantidad de riqueza y estos manejan los puestos públicos según la cantidad de riqueza que posean. La democracia, es el gobierno de los pobres, los cuales fomentaran el libertinaje provocado por un exceso de libertades, para Platón este gobierno es el peor, por que la ignorancia es la que prevalece. La tiranía es el gobierno de una sola persona demagoga y déspota, en esta el tirano se deja llevar por los vicios provocados por las pasiones más salvajes. 28 La clasificación de las mismas, de manera genial la hizo también Aristóteles, que se sirvió del método inductivo para establecer sus postulados en materia política. Se dio cuenta de que, en ocasiones, el poder era ejercido por un solo individuo, y clasificó al Estado que se encuentra en esta situación, que tiene como titular de la soberanía a una sola persona, como monarquía (de monos: uno). En ocasiones ese poder se ejercía por un grupo de individuos. Aristóteles la denominó aristocracia. Había otra situación, se trataba de un conjunto de ellos, y denominó a esta forma, democracia1 o politeía. Aristóteles consideró que la forma de gobierno más conveniente es la democracia; no obstante, llamó “puras” y “perfectas” a todas las formas, si se encaminaban a realizar el bien de la comunidad. Pero tomó en cuenta que la forma de gobierno, no obstante la clasificación que le correspondiese, podría corromperse y encaminarse, no a obtener el bien general, sino el particular de los gobernantes, degenerando así la monarquía en tiranía; la aristocracia en oligarquía, y la democracia en octogracia o demagogia. Aristóteles hizo la clasificación de las formas de gobierno partiendo de los diferentes modos de organización del poder supremo del Estado; de acuerdo con el número de individuos que aparecían como titulares de ese poder. Este criterio cuantitativo de Aristóteles es extrínseco; toma únicamente en cuenta el aspecto exterior del gobierno, no sus cualidades intrínsecas. Pero no obstante ese defecto, de que únicamente se trate de una clasificación extrínseca, que toma en cuenta la forma y no la materia, el valor de esta clasificación aristotélica hizo que fuese seguida por largo tiempo. En Roma, Polibio, adoptó la clasificación de Aristóteles, aun cuando la construcción que él hizo se basó en el estudio de la Historia de Roma, y de acuerdo con esa base de su análisis, consideró que la mejor forma de gobierno seria la mixta, que existió en la época de mayor poderío político romano, en la que el poder estaría dividido entre el monarca y el pueblo o entre una aristocracia y el pueblo. Recordemos la teoría de Polibio en relación con el “ciclo fatal de las formas de gobierno”; la monarquía degenerando en tiranía; ésta, derrocada por la aristocracia; a su vez sería derrocada por el pueblo, para instaurar la democracia como forma de gobierno; ésta dando lugar a la demagogia, que, a su vez, sería sustituida nuevamente por la monarquía, cerrándose así el ciclo. Polibio consideró que la fuerza de Roma derivaba de su gobierno mixto, en el que sabiamente se mezclaban la monarquía (consulado), la aristocracia (senado) y la democracia (comicios). Además, los tres poderes del Estado se encuentran en un plano de igualdad. . 29 Este pensamiento fue seguido por Cicerón y por Tácito. Pasó después en la historia posterior, al Cristianismo, y en la Edad Media fue recogido por Dante. En el Renacimiento siguió en boga, en Italia, esta idea del gobierno mixto, citándose en esta época la Republica de Venecia como ejemplo de una mezcla de gobierno aristocrático y democrático. Los pensadores se dedicaron a determinar cuál de las formas de gobierno sería la más perfecta y conveniente para el desarrollo de los Estados. Al ocuparse de este problema, perdieron de vista la circunstancia fundamental de que no existe una forma de gobierno ideal que pueda presentarse como arquetipo, como modelo absoluto, para realizar la felicidad política. Las formas de gobierno son accidentales y deben resultar de las especiales circunstancias históricas y sociológicas de los Estados. Una de las circunstancias más dañinas para el desarrollo político de los pueblos, ha sido que para el desarrollo de su vida interior no han tomado en cuenta el factor principios derivados de su condición histórica y sociológica, sino que han querido tomar, como modelos ideales a seguir, formas de gobierno que tal vez sean magníficas para regir la vida de los Estados en que se originaron, pero que al ser trasplantadas a otros países, sin tener ese arraigo histórico y sociológico, han motivado una disociación entre el pueblo y el gobierno, ocasionando los trastornos que tanto daño han causado a estas republicas desde su independencia. Maquiavelo hizo una clasificación bipartita de las formas de gobierno, iniciando El Príncipe con la afirmación de que todos los Estados o son Republicas o son Principados. Maquiavelo trató de fundamentar su clasificación tomando en cuenta no razones éticas, como Aristóteles, sino argumentos tomados de la diferente estructuración jurídica del órgano supremo del Estado. La doctrina moderna sufrió la influencia de Maquiavelo. Jellinek clasifica las formas de gobierno en monarquía y republica. Kelsen distingue las formas de gobierno en autocracia y democracia, con fundamento en el número de sujetos que participen en la producción de las normas jurídicas. Hermann Heller, en su Teoría del Estado estudia este problema al efectuar el análisis del poder. Bajo el rubro de poder del Estado y formas del Estado, indica que: “la manera como se distribuye el poder del Estado determina la forma del mismo” considera de acuerdo con este supuesto que existen dos formas fundamentales de Estado: Autocracia y democracia y precisa su contenido de la siguiente manera: “En la democracia rige el principio de la soberanía del 30 pueblo; todo poder estatal procede del pueblo; en la autocracia, el principio de la soberanía del dominador; el jefe del Estado reúne en sí todo el poder del Estado. Monarquía y República Casi todos los autores posteriores a Maquiavelo siguieron clasificando las formas de gobierno en Monarquía y Republica. Esas clasificaciones generales admiten subdivisiones, de acuerdo con la estructuración especial que se haga de las mismas. La Monarquía es el gobierno típico de un individuo. El poder supremo radica en una sola persona, que es el monarca o rey. No es el único caso en que el poder sea ejercido por uno solo; pero sí es la forma más típica del mismo y lleva consigo, de ordinario, una tradición histórica reforzada por su carácter hereditario, que hace que el monarca tenga esa calidad, la calidad de rey, a título propio, no como un órgano o representación de la colectividad, sino propio, no como un órgano o representación de la colectividad, sino como alguien que tiene inherente a su propia persona la dignidad real. Se asigna a esta forma de gobierno una cualidad estabilizadora de la vida política. La sucesión hereditaria del cargo es una de las características de la Monarquía, pues aun cuando existen ejemplos de Monarquía electiva, como es el caso del Estado del Vaticano, e incluso de República Hereditaria, en la que la dignidad del Jefe del Estado se heredaba, no obstante la característica típica de la Monarquía es precisamente que sea hereditaria y no electiva. Las particularidades de la transmisión hereditaria las fijan las leyes de los Estados. Una desventaja que señala a la Monarquía hereditaria es la circunstancia de que la sucesión recaiga fatalmente en los descendientes, que con frecuencia no tienen las dotes que son necesarias para gobernar. La Historia nos proporciona numerosos ejemplos en los que a un rey capaz sucede un monarca con defectos físicos o morales que destruye, que anula toda la buena labor que habían realizado sus antecesores. La Monarquía puede ser absoluta o constitucional. En la Monarquía absoluta el rey se encuentra colocado en una situación superior a la constitución; es el único titular de la 31 soberanía. En la Monarquía Constitucional, el rey se encuentra sujeto a las disposiciones constitucionales; está bajo la ley y además de él existen otros órganos que ejercen la soberanía. La Monarquía puede ser constitucional pura, si el rey ejerce de manera directa la soberanía, o bien la Monarquía puede ser parlamentaria, cuando el ejercicio de la soberanía recae en los ministros designados por el Parlamento y que son responsables ante el mismo. Tal es la situación de Inglaterra. En las Republicas la Jefatura del Estado puede atribuirse a una persona o a un conjunto de ellas, y su designación, es selectiva. La forma republicana, a su vez, puede ser directa o indirecta. Es directa cuando, por ejemplo, en algunos pequeños cantones suizos, la población participa en las tareas estatales personalmente, reuniéndose en asambleas para elaborar leyes, nombrar magistrados, etc. En la forma indirecta de la Republica se mantiene el principio de que la soberanía radica en el pueblo; pero se afirma que su ejercicio es relegado por éste en los gobernantes y se limita a designarlos. En algunas republicas se conserva, en parte, la intervención del pueblo en el gobierno, mediante el referéndum, la iniciativa legislativa y los jurados populares, en los que participa directamente el pueblo en la función jurisdiccional. Las Republicas también pueden clasificarse en Presidenciales y Constitucionales. En las Republicas con régimen presidencial, el Jefe del Estado tiene independencia respecto del órgano legislativo. En esta situación, el Presidente designa directamente sus ministros, que son responsables ante él. En las Republicas Parlamentarias, los ministros son responsables ante el Parlamento, que tiene la dirección política del Estado. 32 La Democracia Si bien desde el punto de vista cuantitativo, el punto de vista aristotélico respecto de las formas de gobierno, sigue siendo valida, para penetrar mejor en la verdadera significación de las formas de gobierno, hay que atender principalmente no a ese criterio cuantitativo formal, sino a su funcionamiento efectivo. La famosa definición de Lincoln de la democracia, como gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo, es la que puede proporcionar, el sentido y la misión de la democracia como forma de gobierno. Gobierno del pueblo, es decir, dirección autoritaria de las actividades de la comunidad política, por el conjunto de órganos del Estado, encargados de esa tarea, por el pueblo significando con ello la posibilidad efectiva de que el grupo gobernante sea designado por la propia comunidad política en su integridad y que ese grupo gobernante provenga igualmente de dicha comunidad. En forma más sencilla: que todo ciudadano tenga acceso a las tareas del poder, al ser sin privilegios para nadie sujeto activo y pasivo del sufragio universal y para el pueblo, lo que significa que las tareas del poder publico, como energía del gobierno se han de enfocar hacia la obtención del bien publico, como misión propia del Estado. Estado Simple y Estado Compuesto Desde el punto de vista general, afirma Groppali, las diversas formas de Estado pueden reducirse a dos fundamentales. El Estado puede ser simple o compuesto o complejo, como también se le llama. Estado simple o unitario, es aquel en el que la soberanía se ejercita directamente sobre un mismo pueblo, que se encuentra en un mismo territorio. Estado compuesto, complejo o Federal o Confederado, es el formado de una u otra manera por la unión de dos o más Estados, es el que se encuentra constituido por otros Estados o que comprende dentro de sí, como elementos constitutivos diversas entidades políticas menores. Un ejemplo de Estado compuesto es el Estado Federal, que es un Estado que comprende dentro de sí los llamados Estados miembros de la Federación, como la Republica Mexicana. 33 En el Estado unitario, los poderes de la división clásica, Legislativo, Ejecutivo y Judicial, son únicos. En la Federación, cada Estado miembro tiene esos poderes en relación con su territorio, y además de los poderes locales, existen los Poderes Federales, con atribuciones propias, cuyo espacio abarca la totalidad del Estado. Jellinek divide las Uniones de Estados en dos grupos: 1. La constituida por los que, no obstante la unión, continúan teniendo representación internacional. Tales son las Confederaciones, las Uniones Reales, los Protectorados y las Uniones Administrativas. 2. Las que significan la inclusión de los Estados que se reúnen dentro de una organización constitucional y carecen de esa representación internacional, que se atribuye al Estado superior que forma la Unión. Tales son los Estados Federales. Características del Estado Federal Las características del Estado Federal son las siguientes: 1) Un territorio propio, constituido como unidad por la suma de los territorios de los Estados miembros. 2) Una población, que dentro del Estado miembro, forma la población propia del mismo con derechos y deberes de ciudadanía en relación con la Entidad Local. Esa población de los Estados miembros, tomada en su conjunto, forma la población del Estado Federal. En relación con el Estado Federal, los pobladores del Estado miembro también tienen derechos y deberes específicos. 3) Una sola soberanía. El poder supremo es el del Estado Federal. Los Estados miembros participan del poder, pero sólo dentro de los ámbitos y espacios de su circunscripción y en las materias y calidades que la Constitución les atribuye. 4) La personalidad del Estado Federal es única. En el plano internacional no representa papel alguno los Estados miembros. El Poder Legislativo Federal ordinariamente se compone de dos Cámaras: una de diputados y otra de senadores, siendo estos últimos representantes de los Estados miembros. Los diputados se eligen, generalmente, por cierto número de habitantes; en esta forma, la cantidad de diputados varía con el aumento o disminución de la población. En cambio, el número 34 de senadores sólo varía su aumentan o disminuyen los Estados miembros, porque su elección se hace asignando un número fijo por Estado. La Confederación Otra forma compleja de Estado es la Confederación. Esta modalidad surge, generalmente, por un acuerdo entre varios Estados que convienen su unión, pero sin formar un nuevo Estado superior a las partes Confederadas. No hay, pues, en esta fusión estatal un súper-Estado, con soberanía que se imponga a los poderes de los Estados miembros. Solamente quedan unidos los Estados por lo términos del pacto de Confederación; en todo lo restante quedan enteramente libres, pueden encauzar su actividad a su arbitrio, tanto en el plano interno como en el internacional. Únicamente sufren restricciones en aquello que se encuentra previsto por el pacto. Jellinek precisa claramente la distinción entre Estado Federal y Confederación: el Estado Federal surge de la estructuración que hace del mismo el Derecho Público interno, el Derecho Constitucional. En cambio, la Confederación tiene su base ene l Derecho Internacional. En un caso se trata de una comunidad nacional; en el otro, nos encontramos con una comunidad internacional. La Federación está formada por el conjunto de Estados miembros, que permanecen unidos por los preceptos constitucionales y subordinados a la soberanía del Estado superior, que han creado al unirse. En cambio, la Confederación se constituye mediante un tratado que da origen, a relaciones jurídicas entre los Estados asociados, pero sin que se constituya un nuevo Estado superior. Por ultimo; el Poder central en la Confederación sólo rige las relaciones entre el mismo y los Estados Confederados. En el Estado Federal, la soberanía de la Federación se ejerce sobre los Estados miembros y también de manera directa, sobre los ciudadanos, que además de los derechos y deberes particulares que tiene en relación con el Estado miembro, con la Entidad Local, igualmente tienen derechos y deberes en relación con la Federación, con el Estado Federal. Unión Real y Unión Personal Otro caso de Estado compuesto es la Unión Real. Ésta tiene lugar cuando dos o más Estados Monárquicos tienen un solo rey, y por esta circunstancia, en virtud de un Tratado, crean órganos comunes de gobierno. 35 Existe Unión Personal, cuando un Estado ofrece la Corona a un rey que ya lo es de otro Estado. Se distingue esta Unión de la Real en la circunstancia de que no crean órganos comunes; cada Estado conserva su propia forma constitucional. De todos modos, tanto en la Unión Real como en la Personal no se crea un Estado nuevo, sino que simplemente se asocian dos o más Estados, que permanecen en su individualidad, alterada sólo por las circunstancias de la Unión. Tipos Especiales de Organización Política Estos tipos de especiales de organización política no entran dentro de una clasificación general, sino que presentan características especiales, que plantean a la doctrina el problema de clasificarlos dentro de un cartabón determinado. La Sociedad de las Naciones Con posterioridad a la Guerra de 1914 a 1918, al entrar en vigor el Tratado de Versalles, que se celebró a su fin, el Pacto aprobado en la Conferencia de París de 1919 instituyó el organismo conocido como Sociedad de las Naciones, con la finalidad fundamental de preservar la paz entre los pueblos, procurando evitar que en lo sucesivo pudiese repetirse un conflicto tan espantoso como fue la Primera Guerra Mundial. La doctrina trató de clasificar este organismo, colocándolo dentro de alguno de los tipos compuestos de Estado, al no poderlo catalogar dentro de alguno de esos tipos específicos, considerarlo como una formación política sui géneris, de tipo completamente nuevo, de características distintas a las que componen esos otros Estados. La Sociedad de las Naciones, en realidad –como dice Groppali-, no constituía un Estado, sino una unión de Estados con un fin especifico de cooperación, de paz y de seguridad, de intereses comunes, y como tal, abierta a todos los Estados. Sociedad de Naciones, sociedad de Estados con características especiales que la distinguen de las otras formas de Estado compuestas. Esa sociedad tenía personalidad propia. Estaba constituida por diversos organismos y, no obstante su personalidad internacional, dejaba 36 intacta la personalidad de los Estados miembros, que sólo quedaban ligados por las estipulaciones del Pacto, permaneciendo completamente independientes en todo lo demás. La sociedad de las Naciones se extinguió, prácticamente, al desatarse la Segunda Guerra Mundial. La Organización de las Naciones Unidas La Segunda Guerra Mundial ocasionó la sustitución de la Sociedad de las Naciones por la Organización e las Naciones Unidas, por la ONU. En Dumbarton Oaks se presentaron y discutieron los proyectos relativos a su constitución en 1944, y fueron aprobados en 1945, en San Francisco. El funcionamiento de este organismo, cuando se trata de asuntos importantes, es por unanimidad de votos. Se concede, no obstante, un derecho de veto a favor de determinados Estados, que forman lo que se llama el “Consejo de Seguridad”, del cual forman parte cinco Estados: Estados Unidos, Inglaterra, Francia, China y Rusia. Esta situación, que concede el veto a cinco Estados, que se encuentran colocados de esa manera en una situación de primacía. La ONU., al igual que la Sociedad de las Naciones, no es un Estado; no constituye un nuevo Estado superior a los Estados miembros, sino que se trata de una unión o asociación de Estados que conservan su independencia y soberanía y que se ligan únicamente en los términos del pacto, de manera internacional, con otros Estados, con objeto de lograr determinados fines de interés general para la comunidad de los Estados. El Estado del Vaticano La iglesia perdió el territorio que poseía en la Península Italiana: los Estados Pontificios, y no obstante, conservó su calidad de sujeto de Derecho Internacional; continuó presentando el carácter reconocido generalmente de persona jurídica internacional. De acuerdo con el Tratado celebrado entre Italia y la Santa Sede en 1929, Tratado de Letrán, se reconoce a la Santa Sede la propiedad plena y la potestad exclusiva de jurisdicción 37 soberana sobre el Vaticano, con todas sus pertenencias y dotaciones. En esta forma fue creada la Ciudad del Vaticano. El Estado Italiano acordó también, en virtud de ese pacto, reconocer al Estado del Vaticano bajo la soberanía del Sumo Pontífice. Si se observa detenidamente su estructura, nos damos cuenta de que reúne en la misma, tiene en sí, todos los elementos que asignamos a una organización política cualquiera para considerarla como Estado: tiene una población, constituida por las personas que habitan en la circunscripción territorial que se le ha asignado, y esa población está sujeta a un poder, poder constituido por la autoridad del Sumo Pontífice, que es soberana, es la autoridad de jerarquía superior en su territorio. Además, existe también otro de los elementos esenciales que consideramos deben contribuir a formar el Estado, y es el orden jurídico. En el Estado del Vaticano existe un ordenamiento jurídico propio, constituido por las Leyes fundamentales de la Ciudad del Vaticano. Además, posee también el ingrediente teleológico, tiene una finalidad especifica; como todo Estado, vela por el bien común de sus habitantes. Por ello no es fácil sostener la posición de algunos autores que afirman que la Ciudad del Vaticano no constituye un nuevo Estado y que solamente representa el territorio en que reside el Sumo Pontífice, como sujeto de Derecho Internacional, por tratarse de una institución auxiliar con personalidad propia para la realización de fines espirituales, que son los fines de la Iglesia. Otros autores consideran que debe observarse un doble aspecto en la Santa Sede: como institución suprema de la Iglesia Católica y como Estado de la Ciudad del Vaticano, constituyendo dos sujetos distintos de Derecho Internacional, personificados en la misma Santa Sede. En esta forma surge un Estado, el del Vaticano, que actúa asociado a una institución, que es la Santa Sede, como cabeza suprema de la Iglesia. Algunos dicen que se trata de un caso similar al que se presenta en la Uniones Reales. Otros dicen que se trata de una Unión Personal. Pero si se examina detenidamente la situación, se ve que en realidad no encaja el Estado del Vaticano en ninguno de esos tipos específicos de Uniones de Estados compuestos, porque esas formas de Unión suponen la asociación de dos o más Estados, y en este caso se trata de la unión de un solo Estado, con un organismo que no lo es; con un organismo que es una Iglesia, una potestad espiritual universal. 38 Groppali, por su parte, considera que la Ciudad del Vaticano es un Estado Monárquico absoluto de tipo patrimonial, pero con características especiales que lo distinguen y le dan un tipo específico y singular, porque: 1. La soberanía no pertenece al mismo Estado de la Ciudad del Vaticano, sino a otro sujeto, a la Santa Sede y, a través de ella a su titular, el sumo Pontífice. 2. En esta forma, la Santa Sede reviste la doble calidad de órgano supremo de la Iglesia y de la Ciudad del Vaticano. Su soberanía es doble también: soberanía espiritual de la Iglesia Católica respecto de sus miembros repartidos de manera universal y soberanía temporal de la Santa Sede. Como jefe, como cabeza suprema de la Ciudad del Vaticano, pero solo respecto a sus habitantes. 3. De acuerdo con el articulo 3 del Tratado de Letrán, el Estado de la Ciudad del Vaticano fue creado para asegurar a la Santa Sede una condición de hecho y de derecho que le garantiza la absoluta independencia para el cumplimento de su alta misión en el mundo. 4. En atención a que la Santa Sede, por su finalidad ultraterrenal, espiritual, debe permanecer en el campo internacional totalmente ajena a los conflictos entre los Estados, el Tratado de Letrán dice en su articulo 24 que la Ciudad del Vaticano, en todo caso y siempre, será considerada territorio neutral e inviolable. La Comunidad Británica de Naciones También presenta características singulares que motivan controversias, divergencias de opiniones doctrinales, al no poderse catalogar dentro de alguno de los tipos tradicionales de Estados complejos. La evolución del imperio ingles, unido entre si cada vez en forma más tenue y que en la actualidad casi reduce su unión a tener un mismo monarca, como símbolo de unidad, presenta también el problema de determinar el tipo especial de comunidad política a que corresponde. La doctrina ha tratado de establecer si los dominios británicos son Estados vasallos, o bien, Estados miembros de una Federación o Confederación de Estados, o Unión real o Unión Personal. Pero no ha sido posible hacer englobar la situación de esa comunidad de Naciones dentro de uno de esos moldes precisos, porque la realidad es más compleja que los lineamientos rígidos de esas clasificaciones. Lo cierto es que representa un tipo especial. 39 Se asemeja a la Confederación, porque los Dominios son verdaderos Estados autónomos e independientes, con todos los ingredientes específicos del Estado. Pero también participa esa Comunidad de elementos que la hacen asemejarse a la Unión Real, por tener un mismo monarca e, igualmente, por poseer también algún órgano en común, como un Supremo Tribunal judicial que existe en Inglaterra para dirimir, en forma de apelación, determinadas controversias jurídicas que se originan en los Estados Asociados. QUIEN TIENE EL PODER. Bueno si hablamos de quien tiene el poder legítimo debemos decir que este lo tiene el gobierno y todas sus instituciones tales como: el poder legislativo, el poder judicial, el poder ejecutivo, y luego todas las demás que dependen o se desprenden de estas y esto se respalda en el articulo 2 3 y 4 de nuestra constitución política Y se sustenta en que tanto el presidente de la república como diputados y funcionarios del gobierno fueron escogidos por todos los costarricenses bajo libre elección lo cual también lo vemos en el artículo 105,106 121, 9 y 6 de nuestra constitución política. Debo decir que ningún poder está por encima de nuestra constitución política esto lo vemos en el articulo 10 y 121 de nuestra constitución. Como hemos dicho los encargados de ser la voz del pueblo son los diputados y estos entre sus funciones tienen la obligación y el deber de legislar o sea tienen el poder para actuar en nombre del pueblo como lo es claramente conocido, sin embargo sabemos que detrás de estos poderes se esconden grandes influencias, entre ellas podemos decir que muchas cosas que se hacen y se aprueban responden a intereses políticos, económicos o particulares (las familias y firmas con gran poder económico) y que favorece a unos pocos, además sabemos que el poder corrompe, cualquiera que sea el circulo o estatus donde se quiera ver. Tras el poder legislativo, ejecutivo y judicial encontramos lo que llamaremos poder ilegitimo pero que es un poder real y a este les ha denominado como el cuarto y quinto poder, si se les puede llamar así. Hablaremos del cuarto poder es el poder de la información, la cual está en manos de unos pocos privilegiados, que tienen como finalidad informar y obviamente que esa información llegue a los demás. Sabemos son capaces de atraer lo opinión de la sociedad, influyendo en ella de una manera muy fuerte, se puede decir que es un elemento de manipulación, atreves del que se defienden diversas posturas e ideologías y que influye inconscientemente sobre todos. Ahora bien este poder lo tiene los medios de comunicación 40 que son por ejemplo la prensa escrita, radio y televisión y vemos muchas veces como se manipula la forma en que se maneja dicha información y forma en que se dice o se comunica, ya sea exaltando o exagerando o por la contrario de disminuir o incluso encubrir algún asunto. Pero este poder no se salva de la influencia que ejercen ciertos sectores políticos económicos fuertes de este país que manejan o manipulan los medios de información. Por otra parte vemos como los medios de comunicación deciden que es notica y que no, etc. Al hablar de poder e información hay que interrelacionar tres conceptos: información, periodismo y publicidad. Cuando en el mundo de la información se dan intereses publicitarios, la libertad del periodista y del creador disminuye, lo que es un obstáculo para que reconozcamos la existencia de una publicidad correcta, informativa, veraz y no agresiva. En mi opinión considero que hoy en día todos los medios de comunicación tienen demasiada influencia sobre nuestra manera de pensar, nos atacan, nos manipulan, violan la intimidad de los famosos, los acosan... todo por llevarse a la boca un pedazo de gloria, por estar ejerciendo lo que hoy llamamos el cuarto poder . Los medios de comunicación, hoy por hoy, hacen lo que se les antoja, no hay reglas, no hay control... sólo un montón de información, creerla o no es cosa nuestra. El quinto poder lo podemos dividir en dos partes, las cuales son dos fenómenos muy diferentes entre sí pero que tienen también una gran influencia y un gran poder real. Uno de ellos es: Poder político económico, que tiene o ejerce sus tentáculos tanto como en el ámbito político, como por ejemplo en la toma de algunas decisiones del gobierno y también sobre los medios de comunicación esto en todos sus ámbitos, tanto de información como de publicidad. La otra parte jira entorno al internet y a las redes sociales; pienso yo que este es uno de los más fuertes, pues sus alcances tiene la particularidad de llegar a estratos internacionales, ya que las noticias y la información llegan en tiempo real, un ejemplo de esto es que algunos países que se jactan de ser democráticos ocurren grandes abusos sobre algunos sectores de la sociedad, como lo hemos visto en Venezuela con el presidente Hugo Chaves, que no permite o restringe la información sobre los medios de comunicación ósea se violenta la libertad de expresión, hasta llegó al punto de cerrar cadenas televisión y medios de comunicación otro ejemplo de esto se da en los Estados Unidos de Norte América, donde se dictan o aprueban leyes discriminatorias sobres los afro-estadounidenses lo cual ha ocurrido, durante más de un siglo o también mas reciente sobre emigrantes, tanto, latinos como emigrantes también oriundos de países musulmanes. Actual muchos países europeos implementaron políticas funestas sobre sectores como los inmigrantes indocumentados y todo esto lo podemos saber gracias a las denuncias por medio de las redes sociales. 41 Este poder es tan fuerte que algunos países las prohíben para que estos delitos no salgan a la luz pública. Entonces para concluir ¿Qué significa el poder detrás del trono? Es el poder real detrás del poder formal que es ilegitimo y que ejerce de unas formas solapada pero que sus consecuencias puede ser muy importantes o determinantes para un país o nación ya sea esto para bien o para mal. Además de todo esto podemos desprender que el poder legitimo es sujeto de derecho público y que el poder ilegitimo responde al derecho privado como por ejemplo una multinacional (ejerce su poder económico) o un político de renombre que ejerce sus influencias y estas obedecen a intereses particulares 42