CRISIS ECONÓMICA EN CHILOÉ

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CRISIS ECONÓMICA EN CHILOÉ
La mirada de los jóvenes de la comunidad terapéutica vÃ-nculos Chiloé Â
“Hace dos años estaba haciendo el curso para trabajar en una salmonera y en la mitad del curso, éste se acabó, y con
él se acabó todo, quedamos en blanco, sin curso y sin pega. A partir de ahÃ- buscar por otros medios, trabajosÂ
esporádicos de pintura, etc., pero eso funciona sólo en los veranos, además hay tantas personas cesantes que bajó el
valor de la mano de obra… al final quedé sin pega por todos lados.― AsÃ- recuerda un joven de la Provincia de Chiloé,
forma en que comenzó a ser afectado por la crisis que se vive en la Región de Los lagos.Â
Y es que la Crisis económica producida por la caÃ-da de la exportación del salmón y su crianza producto de la
presencia del virus ISA, que afecta desde hace dos años a la décima y undécima región, tiene rostros y expresiones
concretas en las comunidades más empobrecidas de Chiloé. Es por esta razón que conversamos con un grupo de
jóvenes habitantes de la Isla grande de Chiloé, quienes analizan y miran como esta crisis ha afectado y ha tenido
impacto en sus vidas. Los jóvenes que forman parte de un proceso de rehabilitación de consumo de drogas y alcohol
en la Comunidad Terapéutica VÃ-nculos Chiloé.
La enfermedad que contrae el salmón les provoca hemorragia ocular, palidecen sus branquias y meses después, los
mata. Pero este virus, no sólo tiene afectado a este pez tan apetecido en Europa, tiene muy afectado a las ciudades
que dependen de esta actividad. Recordemos que en su momento de auge esta actividad creó cerca de 55 mil nuevos
empleos.
En la región de Los Lagos, la actividad vinculada al salmón representó el 30% del PIB de la región, el 70 % de las
exportaciones y fue en esta Región donde se concentró el 80% de la producción del apetitoso pescado.
Para los habitantes de la provincia de Chiloé el auge de la industria del salmón tuvo dos caras. Por un lado durante
varios años de las dos últimas dos décadas, la Región presentó un desempleo muy bajo y uno de los más bajos a
nivel nacional; hubo una ebullición en el crecimiento de las ciudades y del comercio de la isla. Sin embargo, reconocen
que este auge terminó con algunas de las caracterÃ-sticas tradicionales enclavadas en las costumbres de los
habitantes de este territorio.
Para los jóvenes de la Comunidad Terapéutica VÃ-nculos Chiloé, el desarrollo de la actividad del salmón provocó en
sus familias y comunidades la transformación de las condiciones de ruralidad de sus habitantes. Recuerdan que “las
familias del campo vivÃ-an y desarrollaban sus actividades de subsistencia todos juntos, con los vecinos y amigos. El
trabajo era una actividad de las familias en conjunto, ahÃ- trabajaban todos juntos, los adultos y los niños―. Este trabajo
permitÃ-a un intercambio económico solidario entre los distintos tipos de productores, pescadores y campesinos.
Muchas personas intercambiaban los productos de su trabajo, por cosas necesarias para su subsistencia. Esos
intercambios se hacÃ-an sin mediar dinero.
Recuerdan casi con nostalgia  “en la isla se sembraba trigo y se producÃ-a todo lo que sale del trigo, habÃ-an molinos, s
hacÃ-an 4 ó 5 veces al año curantos al hoyo, para todas las fiestas y muchas mingas, actividades de trabajo donde
participaban todos los de la comunidad, eso se ha perdido todo, ahora para una minga hay que pagar―. AsÃ- van dando
cuenta de las transformaciones que se experimentaron en los últimos 20 años. Hoy casi no se siembra trigo y la
agricultura existente es más de subsistencia.
A partir del auge de la industria, recuerdan, “las familias comenzaron a dejar el campo para ir a trabajar a las salmoneras,
entonces los campos dejaron de sembrarse y sólo se sembraron pequeños pedazos de tierra que alcanzaban a
abasteces el consumo familiar―. Se comenzó a experimentar una transformación en las costumbres y roles de las
familias, “empezaron a contar con plata en efectivo, todos los meses; se empezó a gastar más plata en
electrodomésticos y la isla se comenzó a poner consumista―...  “Los adultos comenzaron a migrar hacia las ciuda
que esos lugares habÃ-a trabajo, sólo los mayores quedaron en el campo―, y con ello se fue dejando abandonada una
tradición, una forma de subsistir, una forma de economÃ-a y una cultura, en post de un desarrollo que auguraba dinero
rápido, modernidad, bienestar e integración.
Los integrantes de las familias se incorporaron a las faenas productivas, en estas faenas no sólo trabajaban los
hombres, también debieron integrarse las mujeres, cumpliendo turnos de dÃ-a y noche. Los niños comenzaron a
quedar solos en las casas. Pasaron de ser parte de comunidades campesinas y llegaron a ciudades donde se
transformaron en los pobres de la ciudad, ocupando los márgenes de ésta (una historia cien veces repetida en la
historia de Chile). A cambio de eso se comenzó a disfrutar del dinero en efectivo y del crédito que otorgan las casas
comerciales. “Hoy se ven niños con celulares que cuestan cien mil pesos y tienen muchas funciones―, dice uno de los
jóvenes que participa de la conversación, pero es sólo el afán de tener algo caro, que tal vez nunca utilicen en su
totalidad.
El germen del dinero rápido afectó también a algunas comunidades Huilliches, señala uno de los participantes de esta
conversación “antes las comunidades trabajaban la tierra y el bosque, habÃ-a una visión a largo plazo y la plata en
efectivo no era una urgencia. En cambio lo que sucede ahora, es que las comunidades explotan el bosque y una vez
que lo han transformado en madera o leña ahÃ- queda. Lo transforman rápidamente en plata y queda botado―… “Se h
abandonado el trabajo en la tierra y eso es producto de estas transformaciones y del consumismo―, señala otro
participante de la conversación. Â
Estas nuevas formas han tenido un deterioro aún mayor en medio de la crisis que afecta a la principal actividad
económica de la provincia de Chiloé. El trabajo decayó y se instaló la cesantÃ-a como un presente obligado para las
familias y para los jóvenes de la provincia. “En mi casa afecto fundamentalmente a mis padres y mi hermano, no tienen
trabajo hace como un año, sólo hacen trabajos pequeños de carpinterÃ-a―, “al no haber trabajo en las salmoneras hay
menos trabajo de carpinterÃ-a, porque hay menos gente que construye casas y que hace reparaciones―. La falta de
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Generado: 7 September, 2016, 21:07
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dinero y de trabajo ha afectado a otros rubros y otros servicios, uno de los jóvenes nos señala que su madre trabaja
en un restaurante y “hay dÃ-as enteros en que no hace nada, no van clientes y tienen que estar ahÃ-―.
Con este escenario las vidas de los habitantes de la isla se ha visto muy deteriorada y los proyectos familiares y los
proyectos individuales han sido interrumpidos, “nosotros habÃ-amos proyectado arreglar el piso de la casa, que se
pudrió y no lo hemos podido reparar―. Como este proyecto, muchos se han visto truncados, incluso la posibilidad de
iniciar nuevas formas para salir adelante e integrarse socialmente, como parte de los procesos terapéuticos como los
que viven los jóvenes que son parte de la Comunidad Terapéutica VÃ-nculos Chiloé, se vuelven cuesta arriba. Y es que
esta crisis no ha afectado a todos por igual, ha castigado de forma más dura y severa a los trabajadores y trabajadoras
que vivieron los últimos años de las actividades asociadas al salmón y que hipotecaron la tradición chilota por la
ilusión de un sueldo mensual. Â
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