El efecto Fohen El efecto Fohen, o Föhn, es la pérdida de humedad y aumento de temperatura que experimenta una masa de aire tras el paso por una montaña o cordillera de considerable altitud. Tiene importantes efectos climáticos e influye fisiológicamente en las personas. Tal como se ha visto en el capítulo Orografía, la ascendencia y descendencia del aire sobre una cordillera genera alteraciones en la intensidad y dirección de viento. Sin embargo se generan también fenómenos termodinámicos de condensación y calentamiento que alteran la humedad y temperatura de a masa de aire de una forma radical. Al ascender por la ladera de una cordillera, el viento se va enfriando a medida que gana altura hasta llegar a un nivel en el que se condensa el vapor de agua formando nubes. Es la denominada altura o nivel de condensación, a partir de la cual las nubes siguen creciendo hasta la cima dejando lluvias intermitentes y lloviznas en la ladera de barlovento de la montaña. Sección de una cadena montañosa generadora de efecto Fohen. Estas nubes se denominan de estancamiento ya que permanecen "adheridas" a la ladera de barlovento de la montaña mientras con cambie la dirección de viento. Si el aire es muy húmedo, el estancamiento se forma en los primeros tramos de la ladera, como es el caso del levante mediterráneo sobre las sierras costeras o el viento del norte sobre la vertiente cantábrica. Al llegar a la cima, el aire ese ha desprendido de la mayor parte de su humedad y es más frío. Cuando desciende por la ladera de sotavento se calienta a medida que baja sin ganar humedad, llegando seco y cálido al pie de la ladera. El calentamiento puede llegar a ser notable, de hasta 7ºC. Un aire, por ejemplo, que llega con 20º de temperatura a la ladera de barlovento de una cordillera de 2.000 metros puede llegar a la ladera de sotavento con una temperatura de unos 27º aproximadamente. Cuanto más alta sea la montaña, mayor será el calentamiento. A este proceso de calentamiento y pérdida de humedad del aire se le denomina efecto foehn, nombre que viene de la región alpina del Tirol, donde, cuando sopla viento húmedo del sur, el aire llega seco y cálido después de sobrepasar los Alpes. 1 Efectos climatológicos y fisiológicos del Fohen El efecto Fohen puede condicionar por completo las características climáticas y geográficas en general de un lugar determinado. Este viento, recalentado y seco, que llega al pie de la ladera de sotavento de una montaña, puede resultar tan nocivo que incluso puede estropear una cosecha; y en las persona y animales puede crear estados de ansiedad y nerviosismo. El viento que se calienta y seca aumenta sensiblemente su carga de iones pesados (los positivos), pediendo los ligeros (los negativos); es decir experimenta una ionización positiva que tiene efectos fisiológicos sobre las personas que se manifiestan con alteraciones del carácter, depresiones, etc. Estadísticamente se ha comprobado, por ejemplo, que el número de suicidios en las áreas sometidas a drásticos efectos Fohen, el número de suicidios y de casos de depresión se incrementan sensiblemente cuando sopla este viento. Las zonas que geográficamente están sometidas a este tipo de vientos la mayor parte del año son áridas o semiáridas, como algunas zonas de la Patagonia argentina, región en la que los vientos dominantes del oeste experimentan un importante efecto Fohen en la cordillera de los Andes: los vientos cargados de humedad del océano Pacífico se encuentran con la empinada y alta cordillera, donde dejan casi toda su humedad y descienden muy secos hacia la Patagonia. Ejemplos de efectos Fohen Además del viento del este en la Patagonia y del Fohen propiamente dicho en el Tirol, hay muchos vientos famosos que presentan este efecto. En la península ibérica el los casos más claros son el poniente (ponent) de la región valenciana, que llega muy cálido y seco después de atravesar la orografía de la península, el sur y sureste en la costa cantábrica y el este en Galicia. También la tramontana llega reseca en el norte del Ampurdán gerundense debido a un efecto Fohen en los Pirineos, especialmente cuando sopla más al NO. Otros vientos famosos que presentan el efecto Fohen son el chinook que sopla tras las montañas rocosas del norte de EEUU y Canadá; los alisios del NO que soplan resecos en el desierto de Kalahari, tras atravesar los montes Drakenberg. redaccion@seguridad-mar.com 2