CARACTERISTICAS DE LA GENERACIÓN DEL 98 Con el nombre de Generación del 98 se conoce a un grupo de escritores que desarrolla su creación literaria a finales del siglo XIX y principios del siglo XX y que surge como consecuencia de la crisis política, económica y moral de España de finales del siglo XIX, el agotamiento de las formas literarias del realismo y el influjo extranjero. Sus características son: el idealismo, el tono crítico, la actitud individualista y la defensa del subjetivismo. No obstante, la inicial exaltación europeísta de los autores del 98 y su rebeldía contra lo que representaba la tradición española fueron evolucionando hacia una renuncia a la lucha por transformar la sociedad y hacia una creciente evocación nostálgica del pasado. Le sucedió una actitud lírica y contemplativa que dio paso a un proceso de interiorización y de intimismo que les llevó a la búsqueda de la esencia de España y a la reflexión sobre el hombre y su destino. Los dos asuntos que más inquietaron a los autores del 98 son el tema de España y el tema existencial. El tema de España desde el paisaje castellano, la historia y la literatura; y el tema existencial desde el sentido de la vida, el deseo de inmortalidad o escepticismo humano. El estilo se caracteriza por: el antirretoricismo, la sencillez y claridad, el subjetivismo y el uso de un léxico con sabor local. Destacamos la presencia de un estilo personal muy diferenciado del de los demás autores y la preferencia por la oración breve, el párrafo corto y la expresión natural. Los autores más representativos del 98 son: Unamuno (Niebla; San Manuel Bueno, mártir), Azorín (La voluntad; Doña Inés), Baroja (La busca; El árbol de las ciencias; Zalacain el aventurero) y de Valle-Inclán (Sonatas, Tirano Banderas).