Sobre el 10 de junio: Día de reafirmacion de la soberanía sobre las Malvinas Humanizando el 10 de junio: los derechos de los excombatientes de Malvinas María Alejandra Silva La porquería más absurda que existe en el mundo es la guerra, pero el estado nacional quiso ayudarnos con lo más fácil y nos dio la atención de PAMI cuando hablamos de la salud de los veteranos. Nosotros lo pedimos porque lo padecemos... todos los días vemos los compañeros que se quieren suicidar, que se quisieron ahorcar y después lo hicieron. También vemos mucha violencia familiar principalmente con sus hijos que tienen 18 años, otros que se están muriendo por grandes problemas hepáticos a causa del alcoholismo. A nosotros nos pasa lo que le pasa a los argentinos, pero con una sumatoria: que estuvimos en Malvinas. Declaraciones de Ruben, Rosario, 16 de mayo de 2006. Habitualmente para esta fecha se escuchan discursos alusivos cargados de sentimiento patriótico, pero se olvida de la dimensión humana del 10 junio: los 14.000 jóvenes de 18 años que estuvieron en Malvinas en 1982 que hoy viven con nosotros y tienen tan solo 43 años de edad. Se suele hablar de la historia argentina contemporánea desprovista de sujetos de carne y hueso que tienen derechos como ciudadanos que han cumplido un deber diferente al común de los habitantes. De modo que se alude al 10 de junio sin interrogarse sobre el destino y la vida de ellos en el día de la fecha, que ha pasado con esos hombres, como son tratados por la sociedad civil, que políticas se han destinado a esta población, cuales son los derechos que todavía siguen siendo una deuda social, como se encuentran de salud, etc. Por eso en este caso se hace referencia a uno de esos derechos: el derecho a la salud. Sin embargo cabe aclarar que entendemos que: “La salud es un derecho humano y parte fundamental del derecho a la vida, así como un deber del estado. La salud es un proceso integral que pasa por condiciones de vida digna, empleo saludable y en condiciones adecuadas, acceso a servicios básicos como agua de calidad, por educación para desarrollar ciudadanía, alimentación adecuada, medio ambiente saludable, sin violencia y servicios de atención de salud accesibles y de calidad en todos los niveles” (I Fórum Internacional por la Defensa de la Salud de los Pueblos, 2002) El motivo del escrito tiene como fin reflexionar sobre algunos aspectos que posibiliten el logro del “derecho a la salud” que a 24 años de la gesta de Malvinas siguen estando pendiente a la hora de dar respuesta a los 14.000 veteranos de guerra y sus familias. 2. Los daños a la salud de los excombatientes que hoy perduran sin resolverse: Recientemente en Rosario se reunieron profesionales de salud mental en la "Jornada de Capacitación Profesional para el Tratamiento al Veterano de Guerra (VG) organizado por el Centro de Ex Combatientes de Malvinas de Rosario. En la misma estaban presentes, además de los profesionales, madres, esposas y los propios veteranos. Las opiniones mas fuertes al comenzar la charla fueron las de un VG, quien dijo; yo termine la secundaria y quería ser medico, pero mi destino se corto, como a muchos de nuestro compañeros...y que es lo feo de Malvinas: que nadie estaba preparado y vimos la muerte a los 18 años...y terminamos siendo lo que somos: veteranos de Malvinas... A continuación, el Dr. en Psicología Alberto Dupen- Especialista en Neurosis Traumática Posguerra comenzó diciendo que su primer paciente con estrés postraumatico fue un trabajador rural de Obera (Misiones) que se encontraba en un campo de te con una fobia, al que después de 2(dos) horas de charla pudo trasladarlo. Luego lo llevo a su casa a vivir durante 9(nueve) días, para poder abordar el tema con la profundidad que se merece, y así observar que el VG dormía con la luz prendida, porque Dupen se despertaba a la mañana y encontraba la luz prendida, además recordaba algunas experiencias vividas de manera repentina con síntomas como: un ardor en el centro del pecho y sentir que se le partía la cabeza por unos minutos, para luego quedar en estado de latencia por 3hs o 4 hs. Esto es preocupante si no se trata, pues con el paso del tiempo, puede acarrear deslizamiento en la parte coronaria y producir un ataque al corazón... En el caso del excombatiente de Misiones, el tratamiento abordo el tema del sueño y se hicieron ejercicios previos con el almohadón para sacar la bronca. Pasado los días el VG volvió a Misiones y le mando a Dupen unos veteranos más que tenían la misma problemática. Este hecho y otro similares demuestran que son pocos los especialistas en el Estrés postraumatico en nuestro país, por lo que Dupen considero necesario comenzar a capacitar en este campo del conocimiento y además luego diseño una guía para el tratamiento del tema. En ambos casos, la escuela que adopta en salud mental es la de la Organización Mundial de la Salud, la cual toma como hito principal el hecho traumático “en si mismo” que tiene identidad y a partir de ahí comienza el tratamiento. Cabe señalar que hay escuelas como el psicoanálisis que dicen algo diferente, pues este hecho traumático de la guerra dispara situaciones vividas en los primeros años de vida. En dicha Jornada de Capacitación, Se comenzó definiendo el síndrome de estrés postraumático (SEP) como algo común a todos los veteranos de todas las guerras, pues es una experiencia limite vivida en un momento dado. En la historia se observan momentos en que fue estudiado, como la guerra de secesión en EUA, siendo denominada de distinta forma: neurosis de guerra, schok a las bombas, etc. Esto hasta el año 1980 que fue la primera vez en la que aparece como estrés postraumatico tomando dos vertientes. Alguien que padece el (SEP) revive permanentemente esos hechos traumáticos. Ya sea dormido o despierto. Según especialistas de Buenos Aires, una persona que ha estado en una guerra, escucha el escape de un auto y no puede discriminar entre esa realidad y sus recuerdos. Y vuelve a sentirse en combate. Otros pacientes tienen trastorno de pánico. La sensación de que se van a morir, de que algo les va a estallar dentro. Empiezan a respirar cada vez más rápido hasta alterar cierto equilibrio interno y quedan casi paralizados. Los síntomas del SEP son: 1) estado de hipervigilancia: es un estado de alerta permanente en todos los lugares que acuda un veterano para poder prever cualquier situación que se pueda desencadenar y poderla resolver lo antes posible. 2) Flash back: son los recuerdos que invaden al veterano con respecto a la guerra y que pueden aparecer como pensamientos, pesadillas o recuerdos. 3) Adormecimiento emocional: implica evitar permanecer en lugares o con personas que recuerden el evento traumático es decir la guerra. Este hecho es paradójico pues ellos lo que mas buscan es estar con sus pares. Este adormecimiento muchas veces se ve asociado con alcohol o drogas para poder relatar lo vivido en Malvinas sin entrar en contacto con la emoción. En ese sentido, Dupen señalo que numerosos excombatientes se encuentran en estado de hipervigilancia que se produce en las horas nocturnas debido a la asociación con los ataques que sufrieron en las islas. Otros pacientes tienen recuerdo de los gritos de sus compañeros heridos que pedían ayuda y ellos no podían hacerlo, además en esos recuerdos no pueden ayudarlos porque no se ve a ningún medico cerca. Por otro lado, hay quienes sienten bronca, y sienten que no tendrían que haber ido a una guerra. El abordaje se conforma de tres pasos. Primero se comienza a analizar el hecho de haber tenido una “experiencia limite”, donde estuvo comprometida la integridad física, se estuvo a punto de perder la vida y cerca de la muerte. En el segundo paso se analiza “como uno vive la situación límite”: con horror, con impotencia, como algo terrorífico. Esto es importante porque hay veces que ante un bombardeo que se sufre en una trinchera, uno vive una situación traumática como algo terrorífico y otro no lo vive de esa manera porque sale corriendo para el otro lado. Esto se produce de manera disímil porque tiene que ver con que hago yo con una situación traumática, si me quedo pasivo o reacciono. Esto es muy importante para ver si se re-experimenta o no el estrés postraumatico. El tercer paso es aquel donde se re-experimenta la experiencia limite en la que no tuvo control, a través de recuerdos frente a nuevas cosas que se le presentan hoy. Otro caso es cuando se comienza a pensar que hubiera pasado con ese hecho. Por eso el último paso es conformar un nuevo significado y sentido para esa imagen y recuerdo, de modo que pueda tener el control de la situación. El dispositivo que se tiene en cuenta en el estrés postraumatico incluye las imágenes, los sonidos o ruidos, los olores, todo. Esto sucede con la hipervigilancia, que si se localiza y se sabe que es, entonces pasa. Un excombatiente comenta que eso le pasa cuando no pueden dormir si escuchan un ruido que no identifican. Otro veterano indica que cuando uno es prisionero y escucha el ruido de gatillar el arma, siente que lo van a matar. En general Dupen indica que hay una regresión y es necesario el contacto físico. También señala que uno tiene que trabajar no con una sino con muchisimas escuelas porque ninguna da la respuesta, porque todos los recursos sirven. 3. Los daños a la familia de los excombatientes: un problema irresuelto Un capitulo aparte y muchas veces oculto es el daño sufrido por los padres de los veteranos. Un excombatiente que forma parte de los organizadores de la capacitación de Dupen dijo: “ Mi padre es uno de ellos, pues en silencio lloraba por no saber que hacer conmigo, engrosa la lista de padres que han muerto a causa del sufrimiento, dicen que mi padre murió porque lloraba en el pasillo, no podía mostrarle a mi madre que estaba mal y se iba al fondo a llorar. Porque nuestros padres fueron esponja, se llevaron todas nuestras broncas y lo absorbieron, absorbieron todo, tenemos muchos padres que fallecieron del corazón fueron un 15% los que murieron en los primeros 5(cinco) años (Ruben, presidente del Centro de Excombatiente de Rosario, 2006) Este caso se suma a otros casos que han visto las transformaciones de sus hijos y no han podido asumirlo y comprenderlo. En una charla informal con Eduardo, un veterano de Guerra de Capital Federal escuche sus opiniones: “todos tuvimos tres vidas: una antes de la guerra, otra en la guerra y esta, la de la postguerra”. De modo que efectivamente han cambiado su forma de ser, sus prioridades, sus gustos, su carácter. Ni pensar en las secuelas de la guerra que impactaron en la familia, cuando los veteranos de guerra volvían a la vida civil con numerosas demandas. Estas demandas eran de tipo social o laboral: pedían trabajo, préstamos, casa, a veces un oído atento que escuchara sus preocupaciones. En general las Voluntarias conseguían satisfacer las demandas, pero sólo en el corto plazo, pues muchos veteranos abandonaban los nuevos puestos de trabajo, los prestamos pronto se malgastaban y los matrimonios se rompían una y otra vez generando situaciones familiares muy difíciles (Ruiz López, 2001). Cabe señalar también que algunos padres murieron del corazón durante el transcurso de la guerra, pues desconocían el paradero de sus hijos y no sabían si estaban vivos o muertos. Muchos padres aun hoy no saben como tratar a sus hijos y my pocos tienen la posibilidad de consultar a psicólogos y psiquiatras para que le den herramientas de abordaje para reconstruir el lazo de afecto y confianza en un nuevo contexto. Por eso en la ciudad autónoma de Bs. As. El plan vigente incluye a los padres en la cobertura de atención. 4. La falta de políticas de salud: una constante Por un lado, se estima que en argentina han muerto más excombatientes en estos 24 años que en la misma guerra. En la guerra murieron 649 argentinos: 323 durante el hundimiento del crucero General Belgrano y 326 en el archipiélago. ¿Cuántos ex combatientes se suicidaron? El Estado no tiene cifras oficiales, pero entre los veteranos la mayoría habla de más de 350 casos. Hay incluso quienes afirman que ya son 454 los ex combatientes que se quitaron la vida, una tragedia que no cesa. Algo similar ha sucedió en el bando contrario, porque “como demuestran las estadísticas, tanto de Argentina como de Gran Bretaña, en ambos casos hoy son más los suicidios de ex combatientes que los caídos en la guerra. El daño mental nunca es tenido en cuenta luego de las guerras y la ayuda psicológica debiera ser proporcionada por los gobiernos”. (Alex Mcdonald, 2006). En nuestro país los gobiernos nacionales, provinciales y locales generalmente han estado ausentes. Algo similar sucede en la otra orilla, pues Colin Waite, cofundador de la Falklands Veterans Foundation (Fundación de Veteranos de Malvinas), una asociación que funciona desde abril de 1997 indica: “hemos reclamado al gobierno que hiciera un relevamiento de este tema, ya que también en Gran Bretaña, como en la Argentina, no hay números oficiales sobre la cantidad de suicidios de ex combatientes.” Sin embargo, "He hablado en extenso con una gran cantidad de veteranos de todos los servicios [de las fuerzas armadas británicas] y el dato más chocante es que dudo de que haya alguien que habiendo servido en 1982 hoy no sufra de alguna forma del síndrome de estrés postraumático (SEPT)", completó Waite (La Nación, 2006). Las políticas en Argentina han sido insuficiente, si bien en el año 1994 se funda el primer programa de salud Nacional que se efectuó en el Ministerio del Interior, que según su fundadora ha atendido a mas de 2000 veteranos de guerra del país (Boletín El Malvinense 294, 2006), han pasado los años y casi todo sigue igual. Cabe señalar las declaraciones vertidas por el presidente del Centro de Excombatiente de Malvinas de Rosario, quien durante as jornadas del 16 de mayo pasado afirmo:”le hemos pedido a la responsable de PAMI que esto no daba para mas, que es necesario que PAMi implemente un plan de salud...pero vamos a ser sinceros, la Licenciada no nos escucho...pero cuando fuimos a plantearle al presidente que los suicidios siguieron, que incluso en abril de este año hubo 3 (tres) mas, entonces la Lic. Ocaña de PAMI nos respondió que a ella le costaba enormemente administrativamente encontrar un espacio en el área de salud mental, y es por eso es que hoy nos encontramos haciendo esta capacitación en Rosario para abordar el tema. En ese sentido también queremos resaltar que la prensa nos ha ayudado bastante pues a diferencia del año pasado (cuando hubo 2-dos- profesionales presentes), hoy contamos con casi 30 (treinta) profesionales. 4. Las obras sociales ¿le dan respuestas a los excombatientes y su familia? En este sentido cabe indicar que todos reciben la asistencia de PAMI, la obra social de los jubilados. Sin embargo actualmente en Rosario escuchamos numerosas denuncias de “desatención” de los adultos mayores. Lo cual nos hace imaginarnos el destino de los excombatientes, para quienes corresponde la aplicación de normativas de procedimiento y coberturas específicas. En ese sentido, se sabe que en cada provincia los centros de excombatientes deben gestionar cada trámite y el cumplimiento del convenio marco firmado en Bs. As. No obstante, nuevamente la pregunta que surge es la siguiente: ¿PAMI es un servicio con personal capacitado para atender una población con problemas de violencia familiar y/o conflictos entre padre e hijos adolescentes?, ¿Los especialistas de psiquiatría y psicología de que dispone son los apropiados para comprender y abordar el estrés postraumatico en veteranos de Malvinas? En Rosario esta es la tercera semana de paro de los médicos de cabecera de PAMI, de modo que el panorama es preocupante si pensamos en la disponibilidad de servicios que reciben los veteranos. En el caso de la provincia de Santa Fe hace un mes se ha firmado un acuerdo por el cual los excombatientes recibirán atención en IAPOS y los medicamentos psiquiátricos serán gratuitos. Sin embargo el mismo dirigente del centro de Excombatiente ha dicho en una entrevista en LT 2 que con eso no alcanza para resolver el problema de salud mental de los veteranos. Este hecho se reafirma aun mas cuando se trata de una población que habitualmente no consulta al medico clínico, sumado a la problemática especifica de la población masculina (independientemente de la clase social y el tipo de trabajo) frecuentemente acuden al servicio de salud en los últimos momentos del padecimiento de una patología o del sufrimiento de molestias, dolores o trastornos varios. Para el caso de IAPOS nuevamente surgen los mismos interrogantes que para PAMI ¿existe personal capacitado para atender a una población con SEP?, ¿los profesionales de salud mental conocen la problematica específica vivida por un VG? A las obras sociales, al igual que al sector publico, les falta lograr un cambio de paradigma en salud de tal magnitud que comprenda que si pretende captar y atender a los VG debe recurrir al lugar donde vive cada uno de ellos. En ese sentido existe experiencia y personal en el sistema de salud público (los promotores de salud y/o agentes sanitarios), que habitualmente tiene a su cargo la visita domiciliaria. Claro que en el caso de esta población seria apropiado que ese papel lo cumplieran los mismos veteranos como se hace en el caso de las visitas previstas en el Programa Permanente de Salud Integral para Excombatientes de Malvinas de la ciudad Autónoma, de reciente data. 6. OTRO PROBLEMA: la disputa de psicólogos y psiquiatras En las jornadas de Capacitación de Dupen, surgieron disputas entre los sostenedores de diferentes corrientes ideológicas de la psicología y de la psiquiatría. Una de las participantes, especialista en psicología en catástrofe, señalo que participo en Santa Fe para contener a los inundados del año 2003 observando que tal disputa entre paradigmas es un tema a debatir. Otra profesional indico que hay otros medios para resolver los problemas de salud mental como el arte, la radio abierta, exposiciones de fotos, etc. Uno de los presentes manifestó que “el abrazo” es muy importante en el ambiente familiar. En la observación del encuentro se constataba “la disputa de poder” entre diferentes miradas del problema, intentando imponer su visión como la única valedera. En ese momento intervino una de las madres presentes diciendo: “ no importa el método, la escuela, si se apela a la imnosis para revisar los recuerdos o se utilizada la técnica de pegarle al almohadón, lo que importa es que si esto va a movilizar a los profesionales que todos estos años estuvieron ausente, bienvenido sea”....”Interesa la finalidad, porque de esa manera pasaron 24 años y en Rosario, Santa Fe y muchas provincias como Misiones (donde vive mi hijo) no se ha hecho nada de nada con respecto a al salud integral” Idea que fue reforzada por un excombatiente presente que contó que muchos compañeros se encuentran bien gracias a la asistencia de profesionales de diferentes escuelas. A lo que Dupen respondió afirmando: “es tan importante la contención sea cual sea el enfoque porque sino aparece otro problema como la violencia familiar (con su madre, padre, hermanos, esposa e hijos), porque uno agrede al que mas se quiere.” En esa misma senda, un excombatiente manifestó: “me doy cuenta que soy agresivo, reacciono mal...no me callo, duermo poco, porque me aparecen imágenes de los combates, sobretodo el mal trato del suboficial que era mi jefe, que comía y a mi no me daba nada porque decía que yo tenia que cuidarlo afuera...” Otro excombatiente de Rosario contó un hecho vivido recientemente en las calles del centro de la ciudad, cuando al ver a una señora que le robaban el bolso, intento ayudarla y comenzó a correr al ladrón...pero en ese momento que corría le vinieron todas la imágenes de la guerra...cuando también debía correr ante un bombardeo... Dupen manifestó que el cuerpo tiene vivencias, pero si uno lo puede convertir en palabras esto se libera, pero por el contrario, lo que no se hace palabra se hace síntoma. Por eso es preciso que superar las disputas de una vez por todas en Rosario y Santa Fe que permita generar acciones e incorporar a todas las vertientes y miradas. Una de las profesionales involucradas dijo” hay que dar un debate conceptual, mas allá de la técnica y la critica, yo también tengo bronca por Malvinas, no solo hay que ver que se pueda descargar la bronca para que no venga para dentro del VG y no quede en el y su familia, sino que hay que dirigirla. Ella señalo que ella también tiene bronca por Galtieri y porque los mandaron a los 18 años”. Otro asistente, un medico presente que no estuvo en Malvinas por numero bajo, dice: "mas allá de las escuelas, hay que valorar la gran experiencia que tienen los que hicieron algo porque lo importante es saber que es lo también podemos hacer en Rosario, porque parece que aquí es la lucha sobre acordar cual es la escuela. Me parece que ya tuvimos bastante tiempo para discutir sobre la causa de Malvinas y sobre las diferentes escuelas...creo que ya es hora de preocuparnos por aprender a manejar a los excombatientes, y ahora hay que actuar porque ellos no reconocen que algo les paso, y mientras tanto nosotros desde salud no sabemos como hacer para solucionar esto, creo que hay que ir a buscarlo a la casa al que no se acerca al centro... y me pregunto: ¿cuanto tiempo mas vamos a seguir con esto?...de una vez por todas tenemos que aprender a tratarlos a los VG...” 7. Reflexiones: ¿cuando se darán cuenta de que faltan respuestas en salud? De todo lo antes mencionado se desprenden varias cuestiones sobre las que reflexionar. En primer término, se observa un avance en la cantidad de psicólogos y psiquiatras interesados en conocer algo más sobre el estrés postraumatico que afecta a los veteranos de guerra y sus familias. No obstante, todavía falta mucho por hacer para terminar con las mezquindades de la disputa entre escuelas psicológicas y psiquiátricas, que a primera vista parecen mas preocupadas por “su poder”, dominio e imposición que por otra cosa. Si bien PAMI y IAPOS han hecho algún avance, todavía es extremadamente insuficiente porque no responde a los problemas reales de los veteranos y sus familias. Si ratificamos que “La salud es un derecho humano y parte fundamental del derecho a la vida, así como un deber del estado”, entonces la falta de políticas es lamentable porque hasta el momento en Rosario y Santa Fe solo hay algunas acciones puntuales sobre temas específicos, que no llegan a convertirse en políticas de salud integral a largo plazo. También falta incorporar la imprescindible visita domiciliaria de los VG, ya que ellos se niegan a concurrir al medico y al sistema de salud. Esto ya fue señalado en el caso del Programa de la Provincia de buenos Aires que dice: “Esta resistencia debe ser enmarcada en las características de este grupo en riesgo: el aislamiento, el desamparo y la desconfianza en las Instituciones y en la sociedad, por sentir que les dio la espalda al regreso de la guerra”. Por eso en todos los casos se incluye la participación de los excombatientes de Malvinas como facilitadores. En síntesis, los caminos por andar son aun mayores si además consideramos que: “La pobreza y el mal estado de salud están íntimamente ligados. Esto puede verse a nivel de cada país (desarrollado o no) y entre países. Los pobres mueren antes y tienen mayores niveles de morbilidad. Las causas para esto son múltiples: malas condiciones de vida incluyendo vivienda y alimentación, mala infraestructura disponible (agua potable, tratamiento de las excretas), pobre o ninguna accesibilidad a servicios sanitarios de calidad.”(Rodríguez, 2005). Lo cual implica señalar que aquellos veteranos de guerra pobre son mas vulnerables, y en la medida en que no se tomen medidas integrales seguirán existiendo problemas de salud diferenciales no resueltos. Finalmente, los problemas son varios y los desafíos son numerosos en cuanto al “derecho a la salud” de los excombatientes de Malvinas, pero solo hace falta comenzar a cambiar la perspectiva, la mirada y actuar desde los diferentes ámbitos, respetando la diversidad de enfoques en un contexto de convivencia democrática. 8. Bibliografía consultada I Fórum Internacional por la Defensa de la Salud de los Pueblos, (2002), Brasil. Boletín El Malvinense Nº 294, Buenos Aires, Mayo, 2006. Diario La Nación (2006), El cuadro es similar entre los británicos: Calculan en 250 los muertos de posguerra, Buenos Aires, 28 de febrero, http://www.lanacion.com.ar/784521 Galak, Oliver (2006) No cesan los suicidios de ex combatientes de Malvinas: Los veteranos denuncian la falta de atención del Estado, Diario La Nación, Web cite: http://www.lanacion.com.ar/edicionimpresa/politica/nota.asp?nota_id=784519. Jornada de Capacitación Profesional para el Tratamiento al Veterano de Guerra, a cargo del Dr. en Psicología Alberto Dupen- Especialista en Neurosis Traumática Posguerra, organizado por el Centro de Ex Combatientes de Malvinas de Rosario, Rosario, 16 de mayo de 2006. Ley Nº 1.636, Programa Permanente de Salud para ex-combatientes de Malvinas, Buenos Aires, 16 de diciembre de 2004, web site: http://www.cedom.gov.ar/es/legislacion/normas/leyes/html/ley1636.html MALVINAS 20 AÑOS DESPUES: UN PLAN DE SALUD ESPECIAL PARA EXCOMBATIENTES: Psiquiatras y veteranos, juntos para salvar vidas Programa Malvinas de la Dirección de Salud Mental de la Provincia de Buenos Aires Mcdonald, Alex ( 2006), TESTIMONIOS DE UN SOLDADO INGLÉS, Buenos Aires, 14 de mayo, Pagina web de la Universidad de Belgrano, web site: http://www.ub.edu.ar/destacados/dest_malvinas/relatos_de_un_soldado_ingles.htm Rodríguez Carlos Aníbal, (2005), DESIGUALDADES EN SALUD Y SEGURIDAD EN EL TRABAJO QUE SON INEQUIDADES: CAUSAS Y CONSECUENCIAS, Publicado Por NETSAREA, 7 de marzo de 2005. España. Ruiz López, Alejandra (2001), ESTRÉS POSTRAUMATICO ENMASCARADO, Mimeo, Buenos Aires. Silva, Maria Alejandra (2006), EXCOMBATIENTES DE MALVINAS ¿hasta cuando se verá postergado su derecho a la salud?, Sección “Derechos Humanos” del Boletín Enredando, web site: www.enredando.org.ar