TFG-H 140.pdf

Anuncio
Universidad de Valladolid
Facultad de Enfermería
GRADO EN ENFERMERÍA
Curso académico 2013/14
TRABAJO DE FIN DE GRADO
LA HIGIENE DE MANOS Y SU IMPORTANCIA EN EL ÁMBITO
SANITARIO
Autor/a: Mireia Lidón Ausensi López
Tutor/a: C. Alicia San José Arribas
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
La inteligencia recreadora es la capacidad de hacer visible la invisible
complejidad para poder elegir recrearse recreando el mundo. Es la
capacidad para transformar lo simple en complejo o hacer lo complejo en
simple.
Leonardo Da Vinci
Agradecimientos
Quiero agradecer a todas las personas que han hecho posible la realización de este
trabajo:
1. A mi madre y mi hermana, que en todo momento me apoyaron y no me
presionaron durante la realización del mismo, sino que contribuyeron a
incrementar mi motivación.
2. A Pedro Martín Villamor, profesor de la Facultad de Enfermería, quién
no sólo se preocupa por nuestros futuros, sino que hace lo que está en su
mano para ayudarnos y proporcionarnos soluciones ante cualquier
contratiempo.
3. A la profesora y tutora del trabajo de fin de grado, C. Alicia San José
Arribas, también miembro de la Facultad de Enfermería, quien mantuvo
la paciencia y proporcionó su sabiduría y conocimientos para la correcta
realización del mismo.
4. A mis amigas y amigos quienes me han sabido animar y redireccionar en
los momentos difíciles y de controversia.
5. A nuestros pacientes que sufren nuestras carencias y en los que revierten
nuestros aciertos.
II
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Resumen
Para entender la importancia de la higiene de manos en la práctica sanitaria, es
necesario remontarse a sus orígenes. El punto de partida se encuentra en los trabajos de
campo del Dr. Ignaz Phillipp Semmelweis, quien impuso como práctica sanitaria el
lavado de manos antes y después de la atención de los pacientes, reduciendo de forma
significativa la fiebre puerperal. Fue el primero en probar científicamente la importancia
del lavado de manos con antiséptico, 662 años después de los escritos de Maimónides.
Las figuras de Nightingale, Koch, Lister y Pasteur contribuyeron con sus
aportaciones para el cuidado y seguridad de los pacientes.
En el S. XX, los beneficios de una buena higiene de manos son ampliamente
conocidos. Los esfuerzos se centrarán en promover programas específicos para la
adhesión y correcta realización de las técnicas, así como en reducir las barreras que
dificultan la adhesión por parte del personal sanitario.
En el presente trabajo, se realiza una revisión bibliografía de diferentes estudios
referentes a la higiene de manos, infecciones asociadas a la asistencia sanitaria,
programas de promoción, protocolos de higienización y su adherencia a los mismos.
Para ello se han consultado diferentes fuentes: libros, guías de práctica clínica, artículos
académicos, información de organismos y sociedades científicas nacionales e
internacionales, etc.
Gracias a estudios como el EPINE, se conoce la situación actual en España en el
campo de las infecciones asociadas a la asistencia sanitaria.
“Una atención limpia es una atención más segura.
manos”. Campaña Mundial Anual de la OMS
III
Salve vidas: lávese las
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Abreviaturas
APIC
......... “Association for Professionals in infection Control and Epidemiology” =
Asociación de Profesionales para el Control de la Infección y Epidemiología
CCAA
......... Comunidades Autónomas
CDC
......... “Centers for Disease Control” = Centros de Control de Enfermedades
DAM
......... Desinfección alcohólica de las manos
EPINE
......... Estudio de Prevalencia de Infección Nosocomial en España
HICPAC ......... “Healthcare Infection Control Practices Advisory Committe” = Comité
Consultivo sobre Prácticas de Control de la Infección en Sanidad
HM
......... Higiene de manos
HURH
......... Hospital Universitario Rio Hortega
IAAS
......... Infecciones asociadas a la asistencia sanitaria
IINN
......... Infecciones nosocomiales
IN
......... Infección nosocomial
IRAS
......... Infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria
LM
......... Lavado de manos
OMS
......... Organización Mundial de la Salud
SEEIUC ......... Sociedad Española de Enfermería Intensiva y Unidades Coronarias
SEMICYUC ....... Sociedad Española de Medicina Intensiva y Cuidados Críticos
SEMPSPH ........ Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene
SNS
......... Sistema Nacional de Salud
TCAE
......... Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería
UCI
......... Unidad de Cuidados Intensivos
WHO
......... World Health Organization
IV
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
ÍNDICE
1. Introducción…………………………………………………………………1
2. Objetivos…………………………………………………………………….5
3. Metodología.…………….…………………………………………………..6
4. Desarrollo……………………………………………………………………7
4.1. Lavado de manos. Perspectiva histórica…………………………………......7
4.2. Importancia de la higiene de manos……………………………………….11
4.3. Recomendaciones y directrices de la OMS sobre higiene de manos en la
Atención Sanitaria…………………………………………………………..12
4.3.1. Productos utilizados en el lavado de manos………………………...13
4.3.2. Técnicas para la higienización de las manos………………………..14
4.3.3. Métodos para promocionar la higiene de manos…………………...16
4.3.3.1.
Programas de formación y motivación……………………....17
4.3.3.2.
Guías asistenciales……………………………………………..19
4.4. Frecuencia y adhesión de la higiene de manos entre el personal
sanitario……………………………………………………………………….19
4.4.1. Motivos por los que no se cumplen los planes preventivos de
actuación
frente
al
contagio
y
transmisión
de
las
IAAS……………………………………………………………………...20
4.5. Estudios de investigación…………………………………………………….21
V
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
5. Resultados………………………………………………………………….24
6. Conclusiones……………………………………………………………….25
7. Bibliografía………………………………………………………………...28
8. Anexos……………………..……………………………………………….33
VI
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
1. Introducción
Los sistemas sanitarios han experimentado un enorme progreso con la aparición de
nuevas técnicas de diagnóstico y terapia, mejoras en los factores organizativos y
personales de los profesionales, etc., algo que sin duda ha favorecido una asistencia
compleja e íntegra del enfermo. Pese a ello, todavía es imposible garantizar una
atención 100% segura para los pacientes e indirectamente para el personal sanitario,
evitando así los riesgos adheridos a la práctica sanitaria [1,2].
El principal problema al que se enfrentan es el derivado de las Infecciones
Asociadas a la Asistencia Sanitaria (IAAS), también conocidas como infecciones
nosocomiales (IINN), infecciones relacionadas con la atención sanitaria (IRAS) o
infecciones intrahospitalarias [1]. Una infección se define como una invasión de
gérmenes o microorganismos patógenos, perjudiciales para la salud (bacterias, hongos,
virus, parásitos), que se reproducen y multiplican en el organismo humano,
desencadenando una enfermedad [3,6].
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las IAAS son «infecciones
contraídas por un paciente durante su tratamiento en un hospital u otro centro sanitario,
que dicho paciente no tenía ni estaba incubando en el momento de su ingreso [1]. Las
IAAS pueden afectar a pacientes en cualquier tipo de entorno en el que reciban atención
sanitaria, y pueden aparecer también después de que el paciente reciba el alta.
Asimismo, se incluyen las infecciones ocupacionales contraídas por el personal
sanitario» [1,2]. Por tanto, el paciente se verá expuesto al riesgo de una IAAS por el
simple hecho de recibir atención en un centro hospitalario, particularmente cuando
requiera de tratamientos o de procedimientos invasivos [3].
La Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene
(SEMPSPH), organiza desde 1990 el mayor y más consolidado estudio de prevalencia
de IAAS en España, el estudio EPINE. Según datos del EPINE 2012, más del 70% de
las IAAS se deben a cuatro tipos de infecciones de distribución muy similar: 20,7%
infecciones del tracto respiratorio bajo, 19% infecciones del tracto urinario (ITU),
1
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
21,8% infecciones del sitio quirúrgico (ISQ) y 14,8% infecciones del torrente
sanguíneo, siendo la más representativa la bacteriemia [4,5] (Ver anexo I).
Las IAAS se asocian frecuentemente a una bacteria o virus, ocasionalmente a
hongos y muy rara vez a parásitos [3,6]. Se pueden distinguir dos tipos principales de
bacterias que causan IAAS en función de su estructura: cocos Gram-positivos (G+) y
bacilos Gram-negativos (G-). Los diferenciamos también en función de los resultados
obtenidos por la tinción de Gram: si se tiñen de azul oscuro o violeta son positivos. Si el
tinte no se fija y adquieren un color rosado, son negativos [3]. Sin embargo, los
gérmenes más preocupantes entre los responsables de este tipo de infecciones son los
resistentes a los antibióticos, como por ejemplo el Staphylococcus aureus (G+), el
Enterococcus (G-) resistente a la vancomicina, la Klebsiella (G-) productora de
carbapenemasa o algunos emergentes como el Clostridium difficile (G+)[4](Ver anexo
II). Los síntomas que se generan en el individuo se deben a lesiones celulares locales, a
la secreción de toxinas del microorganismo patógeno o a la reacción resultante del
sistema inmunitario al interaccionar anticuerpo-antígeno [3,6].
Ante esto, surgió la necesidad de establecer una asistencia de calidad que afrontara
la demanda de pacientes y familiares de sentirse seguros con los cuidados recibidos.
Para ello, era vital concienciar a todo el personal sanitario -que estuviese en contacto
directo con los pacientes o su entorno- de la importancia en la higiene de manos (HM)
como vía principal de transmisión de los gérmenes patógenos durante la estancia
sanitaria. Se ha observado que, aunque se tratara de una técnica sencilla y primordial
para el control y prevención de las IAAS, existía un bajo grado de cumplimiento por
parte del personal sanitario [1].
En las IAAS, las personas que están potencialmente infectadas, portan microbios
que pueden viajar por una ruta única o pueden transmitirse por varias vías y contagiar a
otros pacientes. Los modos de propagación de una IAAS son los siguientes [3,7]:
I.
Transmisión aérea: viajando a través del aire, ya sean núcleos (pequeñas partículas)
que se originan en gotitas evaporadas, cuyos microorganismos permanecen en
suspensión aérea por largos períodos de tiempo, partículas de polvo que contienen
2
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
el agente infeccioso o descamaciones cutáneas, que pueden ser inhalados a grandes
distancias del emisor dependiendo de factores ambientales. Algunos de los
microorganismos que se transmiten de este modo son: Mycobacterium tuberculosis,
y los virus de la rubéola y la varicela.
II.
Transmisión por contacto: es el modo más frecuente y también el más fácilmente
evitable. Se divide en tres subgrupos:
i.
Transmisión por gotas: principalmente al toser, estornudar o hablar a menos de
un metro de distancia del emisor. Se origina por el contacto con las mucosas o la
conjuntiva, de gotas de gran tamaño que contengan microorganismos. Como es
el caso de el aislamiento de Staphylococcus aureus resistente a meticilina
(SARM) en esputo.
ii.
Contacto directo: implica contacto entre dos superficies corporales. Es preciso
un huésped susceptible de adquirir los microorganismos (mayor facilidad en
inmunodeprimidos) y una persona infectada o colonizada. O a través de un
intermediario, como puede ser el personal de enfermería, que realiza actividades
de cuidado al paciente que requieren de contacto personal directo.
iii.
Contacto indirecto: mediante objetos o superficies que hayan estado en contacto
previo con la persona infectada y posteriormente con el huésped susceptible. Se
conoce como el entorno próximo al paciente. También indirectamente a través de
un intermediario.
III.
Transmisión por vehículo: se aplica a microorganismos que se transmiten vía
objetos contaminados, como medicamentos, juguetes, alimentos, agua, dispositivos
y equipamientos médicos, así como productos biológicos (sangre, tejidos u
órganos).
IV.
Transmisión por vector: la transmisión puede darse a través de la contaminación
simple vía vectores animales (ratas u otras alimañas) o artrópodos (mosquitos,
moscas, etc.).
Los reservorios humanos o personas que portan el agente infeccioso pueden ser de
tres tipos [3]:
3
FACULTAD DE ENFERMERÍA
I.
II.
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Personas enfermas: con signos y síntomas de la enfermedad.
Personas colonizadas: que albergan un agente infeccioso pero no presentan la
infección.
III.
Portadores: quiénes están infectados pero no muestran signos ni síntomas, y además
transmiten la infección a otros.
De aquí a que la HM, sea una medida de control y prevención de infecciones de vital
importancia [7].
Así, el propósito de este trabajo es analizar, mediante revisión bibliográfica, la
importancia de la HM en la prevención de las enfermedades hospitalarias. Y el grado de
influencia que tiene el mal hábito de no lavarse las manos de manera correcta o no lo
suficiente en la extensión y propagación de dichas enfermedades.
En la actualidad, y gracias al estudio EPINE, se puede observar una ligera
disminución –aunque no la suficiente- en la tasa de prevalencia de contraer una IAAS
tanto presente o importada en el ingreso, como adquirida durante el mismo. Todo ello a
pesar de la evolución en los programas de formación y promoción de la Técnica del
Lavado de Manos (LM) [1, 2, 4] (ver anexo III).
Así, el personal de enfermería juega un papel muy importante en el control y
prevención de las IAAS, tanto por ser el principal cuidador y mantener una constante
relación próxima con los pacientes como por la inevitable función que desempeña en
educación para la salud de pacientes, familiares y resto del personal sanitario. E [1].
Por otra parte, existen programas que potencian la cultura de seguridad clínica en
prevención de las IAAS. Dichos programas han sido incorporados en las unidades y
servicios hospitalarios de las diferentes Comunidades Autónomas (CCAA) desde el año
2005, cuando la OMS lanzó el Primer Reto Mundial para la Seguridad del Paciente bajo
el lema: “Una Atención Limpia es una Atención Segura”. Desde entonces, en nuestro
país se han puesto en marcha estrategias para aumentar la adherencia de los
profesionales a la HM, impulsadas por la Agencia de Calidad del Ministerio de Sanidad
y Política Social (MSPS) [2]. Un ejemplo de ello, es el caso de la Unidad de
4
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Reanimación Quirúrgica y Anestesia del HURH de Valladolid, que cuenta con los
programas “Bacteriemia Zero”, “Neumonía Zero”, y las campañas de HM, financiados
y promovidos por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, formando
parte de su política de calidad y seguridad del paciente.
2. Objetivos
Objetivo general:
 Adquirir y actualizar los conocimientos sobre la higienización de manos entre el
personal sanitario.
Objetivos específicos:
 Conocer las recomendaciones para una correcta HM: indicaciones, técnica y otros
aspectos a considerar.
 Identificar los factores/ barreras que intervienen en el bajo cumplimiento de la HM
por parte del personal sanitario.
 Fomentar el uso de las soluciones hidroalcohólicas con el motivo de reducir las
barreras que afectan a una correcta HM.
 Conocer la situación actual de la prevalencia de las IAAS en los hospitales
españoles.
 Enfatizar la necesidad de invertir en programas de promoción y formación del
personal sanitario en materia de HM.
 Fomentar estudios epidemiológicos sobre las IAAS y de prevalencia en HM, para
contribuir a la identificación de problemas, vigilancia y evaluación de estrategias de
prevención y control en seguridad del paciente.
5
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
3. Metodología
Se ha realizado una revisión e investigación bibliográfica, recurriendo a libros,
artículos académicos y páginas de internet como fuente primaria. Se ha recogido
información de sociedades científicas y otras entidades de interés sanitario: Sociedad
Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (SEMPSPH), Sociedad
Española de Enfermería Intensiva y Unidades Coronarias (SEEIUC), Sociedad
Española de Medicina Intensiva y Cuidados Críticos (SEMICYUC), Ministerio de
Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad (MSSSI), Ministerio de Sanidad, Política Social
e Igualdad (MSPSI) y Ministerio de Sanidad y Consumo (MSC).
Para la realización de la revisión acerca de las recomendaciones sobre la correcta
HM,
se
han revisado
documentos elaborados por organismos reconocidos
internacionalmente como el Centers For Disease Control and prevention (CDC) y La
Organización Mundial de la Salud (OMS). También se ha hecho uso de protocolos
elaborados por servicios de salud de distintas CCAA, además de una selección de guías
prácticas para el desarrollo y mejora de la HM entre el personal sanitario.
Como fuentes secundarias se han consultado bases de datos de ciencias de la salud:
CUIDEN, PubMed, Elsevier, Medline, Cochrane Plus y Google académico; atendiendo
a las palabras clave: lavado de manos o higiene de manos (handwashing or hand
hygiene), prevención (prevention), higiene de manos e infección (hand hygiene &
infection), desinfección de manos (Hand disinfection), mecanismos de transmisión
(transmission mechanisms), trabajadores de la salud o infecciones (health workers or
infections), educación sanitaria (health education), gérmenes (germs), transmisión de
microorganismos (transmission of microorganisms), flora bacteriana habitual (normal
bacterial flora), estudios de investigación e Infecciones nosocomiales (research studies
& nosocomial infections), control de la infección (infection control).
Se limita la búsqueda, en un principio, a publicaciones posteriores al año 2000, sin
embargo, se ha sobrepasado el límite por interés científico y necesidad de contrastación
y ampliación del tema seleccionado. Los idiomas elegidos han sido español e inglés,
aunque no se han hecho limitaciones de otros idiomas.
6
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Como resultado de la investigación en las bases de datos anteriormente mencionadas
se han encontrado un total de 72 fuentes. De todas las fuentes consultadas han sido
aceptadas un total de 36, escogidas por su pertinencia y adecuación al tema, siendo
incluidas en la bibliografía.
La búsqueda de información se realizó de Abril a Junio de 2014. Para mayor
cumplimentación del estudio, se han añadido tablas y figuras recogidas durante la
revisión bibliográfica.
4. Desarrollo
4.1. Lavado de manos. Perspectiva histórica
La primera referencia que existe acerca del LM data de finales del siglo XII cuando,
en el año 1199, el médico judío Moshé ben Maimón -más conocido como Maimónidesescribió en uno de sus tratados: “nunca olvide lavar sus manos después de tocar a una
persona enferma” [8, 9]. Serían necesarios varios siglos más para que la práctica fuera
rescatada del olvido como concepto en sí, y se aplicase un agente antiséptico. En 1822,
un farmacéutico francés demostró que las soluciones que contenían cloruro de cal o de
sosa eliminaban los malos olores asociados al contacto con cadáveres humanos y que
tales soluciones se podían usar como desinfectantes y antisépticos [10].
En 1846, el Dr. Ignaz Phillipp Semmelweis, obstetra húngaro, observó cómo las
mujeres asistidas durante el parto por estudiantes o médicos en la 1ª división clínica
ginecológica del Allgemeines KrankenHaus de Viena, mostraban una tasa más alta de
mortalidad frente a aquellas que parían atendidas por parteras (comadronas) en la 2ª
división clínica [11, 12, 15]. ¿Cuáles eran las diferencias entre las dos salas? ¿Y entre
los médicos y las parteras? Semmelweis, mediante un método hipotético-deductivo,
observó similitudes entre los síntomas desarrollados por su colega de profesión
Kolletschka, recientemente fallecido, y las puérperas [11, 12, 14, 15]. A diferencia de las
parteras, los médicos realizaban autopsias previas a las consultas de ginecología,
transportando “materia cadavérica” a las parturientas [11-15]. ¿Podría haber sido esto
7
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
la causa de las “fiebres puerperales”? ¿Qué habría ocurrido si los médicos tomasen
las precauciones necesarias? [15].
Comenzaron a higienizar el instrumental médico-quirúrgico y las manos de los
médicos. Semmelweis propuso que médicos y alumnos de la 1ª división clínica se
lavaran las manos con una disolución clorada antes de atender y examinar a sus
pacientes, así como tras realizar las autopsias. Una vez hecho esto, el índice de
mortalidad de la 1ª división disminuyó del 12,11% al 1,28%, llegando a ser menor que
el 1,33% de la 2ª división [11-15].
El profesor Skoda, defensor y maestro de Semmelweis, fue uno de los que trataron sin éxito- de extender la teoría de la asepsia por Europa. Como resultado de las
investigaciones de Skoda en la muerte por fiebre puerperal, se llegó a la siguiente
conclusión: “Las manos por su simple contacto pueden ser infectantes” [11]. Tras este
gran descubrimiento se empezó a aplicar la misma pauta de actuación para otros casos y
la mortalidad infantil se redujo en un porcentaje muy alto (algo impensable por aquel
entonces) [11, 14].
El Dr. Phillipp Semmelweis redactó en 1857 su obra “De la Etiología, el Concepto y
la Profilaxis de la Fiebre Puerperal”, publicada en 1861. Lo que hoy en día parece tan
evidente, representó en su momento un cambio de visión asimilado por pocos, ya que
tuvo que avanzar y abrirse camino en medio de incomprensiones y dificultades. [11, 12,
15].
Otras contribuciones en el campo de la asepsia fueron las de Florence Nightingale y
William Farr, quienes en 1856, interesados por la mortalidad de los hospitales ingleses,
escribieron “Notas sobre Hospitales”. Se trataba de un trabajo conjunto que presentaba
un estudio comparativo entre hospitales, utilizando un denominador común para
elaborar tasas de mortalidad: número total de admisiones e ingresos hospitalarios. Se
consideró la primera referencia a la vigilancia epidemiológica en los hospitales por parte
del personal de enfermería, mediante la HM en una UCI [17].
Así como a Semmelweis se le puede considerar el padre de la asepsia, Joseph Lister
fue el pionero en la eliminación de la microbiota transitoria de la piel mediante el uso de
8
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
agentes antisépticos. Esta práctica ha evolucionado hasta nuestros días, en el empleo de
geles no acuosos con contenido alcohólico, suponiendo una alternativa de similar o
mayor eficacia que el LM [11, 13].
Lister realizó su primera experiencia clínica en 1865, empleando un apósito
impregnado con ácido carbólico en la fractura abierta de un muchacho. Tras seis
semanas de tratamiento, la herida y el hueso curaron sin signos de infección alguna [15,
16].
Esa experiencia la utilizó con éxito en otros casos de abscesos drenados y heridas de
muñones de amputación. Desarrolló un aparato para aplicar el ácido carbólico en forma
de spray y, con el tiempo, Lister empleó el mismo proceso para la desinfección del
instrumental quirúrgico y la higienización de las manos del equipo quirúrgico [16].
La contribución de Lister a la medicina fue tan grande, que la Historia de la Cirugía
puede ser dividida en dos grandes fases, antes y después de Lister [11, 16].
En el último tercio del S. XIX, tuvieron lugar los descubrimientos de Luis Pasteur y
Robert Koch, que ayudaron a establecer una mentalidad “etiopatológica” en la
comprensión de las enfermedades infecciosas de origen bacteriano. Se demostró así la
existencia del “Contagium Animatum”; los microorganismos [11-12].
El cambio de siglo trajo consigo un gran número de avances técnicos, biológicos y
médicos, que a su vez permitieron la consolidación de la Microbiología como ciencia
[15]. Así, los métodos de cultivo, microscopia, tinciones y los sistemas de esterilización
permitieron eliminar las grandes dosis de especulación que hasta entonces habían
predominado.
En 1961, el servicio médico público de los Estados Unidos de América (EEUU),
realizó una película de entrenamiento que mostraba la utilización de técnicas de LM
recomendadas para los trabajadores sanitarios [18]. En esa época, las recomendaciones
pedían que el personal se lavase las manos con agua y jabón antes y después del
contacto con cada paciente durante 1-2 minutos. Se pensaba que el aclarado de manos
9
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
con un agente antiséptico era menos eficaz que el LM, por lo que se recomendaba
solamente en emergencias o en áreas donde los lavabos eran inaccesibles.
En 1975 y 1985, el Centers for Disease Control (CDC, Atlanta, EEUU) publicó una
serie de pautas escritas sobre la práctica del LM en hospitales. Éstas recomendaban el
LM con jabón no antimicrobiano (neutro) entre la mayor parte de los contactos con
pacientes, y el lavado con jabón antimicrobiano antes y después de realizar
procedimientos invasivos o en el cuidado de pacientes de alto riesgo. El uso de agentes
antisépticos sin agua o desinfección alcohólica de las manos (DAM) fue recomendado
solamente cuando los lavabos no estaban disponibles [19, 20].
En 1988 y 1995, la Association for Professionals in infection Control and
Epidemiology (APIC) publicó unas pautas para la antisepsia y el LM. Las indicaciones
recomendadas para el lavado eran similares a las enumeradas por el CDC. La pauta
APIC de 1995 recomendó el uso de soluciones alcohólicas para DAM en un mayor
número de supuestos clínicos que los recomendados en anteriores pautas [21, 22].
En 1995 y 1996, el Healthcare Infection Control Practices Advisory Committee
(HICPAC, EEUU), recomendó el uso de un jabón antimicrobiano o un agente
antiséptico en seco para la desinfección de las manos a la salida de las habitaciones de
los pacientes infectados por patógenos multirresistentes (enterococo resistente a
vancomicina –ERV- o Staphylococcus Aureus resistente a meticilina –MRSA-) [23].
Fue necesaria una década, para que se evidenciaran de forma científica los beneficios
del proceso de higienización de manos frente al LM tradicional. De este modo, y gracias
al impulso de organismos internacionales, se empezó a utilizar la denominación de HM
porque se trataba de un proceso más completo y efectivo. Así, en 2005-2006, el Reto
Mundial para la Seguridad del Paciente «Una atención limpia es una atención más
segura», centró parte de su atención en mejorar las pautas y prácticas de HM en la
atención sanitaria, además de ayudar en la aplicación de las intervenciones eficaces.
Como parte de este enfoque, las Directrices de la OMS sobre HM en la atención
sanitaria (borrador avanzado) [2], preparadas con la ayuda de más de 100 expertos
internacionales, se encuentran en fase de ensayo o de aplicación en diversas partes del
10
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
mundo. El desafío que afrontaba el Reto supuso una realidad de alcance mundial: hoy
día no hay hospital, consultorio, sistema sanitario, establecimiento o centro de salud que
pueda negar la importancia del cumplimiento de las recomendaciones sobre HM.
4.2. Importancia de la higiene de manos
Todos los seres humanos son portadores de una flora bacteriana habitual que recubre
la superficie de la piel y el interior del cuerpo de las personas sanas [24]. Además de la
flora bacteriana normal, también se adquieren gérmenes por contacto con otras personas
u objetos del entorno; gérmenes patógenos (agentes infecciosos que pueden ser
bacterias, virus, hongos o parásitos) que a su vez son fáciles de recoger y trasladar [25].
Una de las mejores formas de evitar la propagación de los gérmenes es la HM. Pese a
que la mayoría de la gente piensa que los gérmenes se propagan a través del aire, (cierto
en algunos casos), estos se propagan con mayor facilidad a través de las manos [1, 3,
25].
Las IAAS son el evento adverso más frecuente durante la atención sanitaria. Cada
día provocan la prolongación de las estancias hospitalarias, discapacidad a largo plazo,
mayor resistencia de los microorganismos a los antimicrobianos, costes adicionales para
los sistemas de salud, los pacientes y sus familias, así como muertes innecesarias [25,
26]. Según datos del EPINE de 2012, se reflejó una reducción paulatina en la
prevalencia total de afectados, alrededor del 5,6% (ver anexo IV); sin embargo, siguen
siendo miles las personas que mueren diariamente en todo el mundo a causa de las
IAAS, lo que se traduce en cientos de millones de pacientes afectados cada año. Estos
datos reflejan también cómo se sitúan los porcentajes de prevalencia de pacientes con
IAAS adquiridas durante la hospitalización por CCAA (ver anexo V), destacando la
Rioja con los registros más bajos y las Palmas de Gran Canaria con los más elevados [1,
4, 25, 26].
Existe una estrecha relación entre la HM y la adquisición y/o propagación de IAAS.
Así, un incremento en la utilización de la técnica -por parte de los profesionalesreflejará mejoras en la incidencia de IAAS. [25, 26].
11
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
4.3. Recomendaciones y directrices de la OMS sobre higiene de manos en la
Atención Sanitaria
La OMS propone una Estrategia Multimodal para promover y mejorar la HM en los
centros sanitarios de todo el mundo [25, 27]. Para ello pone a disposición de los
usuarios unas indicaciones para el lavado y la antisepsia de las manos [2, 25-27], que
son las siguientes:
I.
Lávese las manos con agua y jabón cuando estén visiblemente sucias, manchadas
con sangre u otros fluidos corporales, o bien cuando haya sospechas fundadas o
pruebas de exposición a organismos con capacidad de esporular, así como después
de utilizar el inodoro.
II.
Utilice preferentemente la fricción con una solución desinfectante a base de
alcohol, como medio habitual para la antisepsia sistemática de las manos cuando
éstas no estén visiblemente sucias. Es más rápido, más eficaz y mejor tolerado por
las manos que lavarlas con agua y jabón.
III.
Proceda a la HM, bien con una preparación alcohólica o mediante agua y jabón:
i.
Antes y después del contacto directo con pacientes.
ii.
Después de quitarse los guantes.
iii.
Antes de manipular un dispositivo invasivo (se usen guantes o no) como parte de
la asistencia al paciente.
iv.
Después de entrar en contacto con líquidos o excreciones corporales, mucosas,
piel no intacta o vendajes de heridas.
v.
Al atender al paciente, cuando se pase de un área del cuerpo contaminada a otra
limpia.
vi.
Después de entrar en contacto con objetos (incluyendo equipo médico) del
entorno del paciente.
IV.
Lávese las manos con agua y jabón simple o antimicrobiano, o con una solución
alcohólica antes de manipular medicamentos o preparar alimentos.
V.
No utilice jabones antimicrobianos cuando ya se haya utilizado una preparación
alcohólica para la fricción de las manos.
12
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
4.3.1. Productos utilizados en el lavado de manos
Existe una gran variedad de productos dentro del ámbito sanitario, para el lavado y
desinfección de las manos. Principalmente se clasifican en tres grupos [28]:
I.
Jabón simple: es el jabón de arrastre con base de detergente, contiene ácidos grasos
e hidróxidos esterificados de sodio o potasio. Su actividad como detergente da lugar
a la retirada de suciedad y una mínima actividad antimicrobiana. Pueden emplearse
jabones simples líquidos, en pastilla, en hojas o en polvo.
II.
Jabones antisépticos: son los Biocidas que destruyen o inhiben el crecimiento de
microorganismos sobre tejidos vivos. Poseen menor toxicidad frente a los
desinfectantes de objetos y superficies inanimadas. Los antisépticos más utilizados
son la povidona yodada al 7,5% y la clorhexidina al 4% (ver anexo VI).
III.
Soluciones y geles de base alcohólica: los alcoholes han sido conocidos desde la
antigüedad y usados en medicina, aunque la síntesis del etanol fue realizada a
mediados del siglo XIX (1855). Una de sus principales características, además de
antimicrobiano, es la de potenciar la actividad de muchos antisépticos y
desinfectantes. En medicina sólo se emplean los de bajo peso molecular:
etanol/alcohol etílico e isopropanol/alcohol isopropílico. La actividad depende de la
concentración; siendo los de 60-80% los de mayor eficacia, pues necesitan agua
para actuar [28- 30]. En la actualidad, la DAM es el único medio conocido para
eliminar de manera rápida y eficaz una gran diversidad de microorganismos
potencialmente nocivos. La OMS recomienda este proceso (ver anexo VII).
4.3.2. Técnicas para la higienización de las manos
Todo profesional/dispensador de servicios de atención sanitaria (personal médico,
personal de enfermería, TCAE, celador) o cualquiera que participe directa o
indirectamente en la atención a un paciente (farmacia, cocina, cuidadores, familiares y
amigos), debe mantener la HM y saber cómo hacerlo correctamente en el momento
adecuado.
13
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Antes de realizar la HM es preciso liberar manos y muñecas (reloj, sortijas,
pulseras…). Todo profesional ha de mantener una buena higiene personal; debe tener las
uñas limpias y cortas (puntas de menos de 0,5 cm de largo) y abstenerse de usar laca de
uñas o uñas postizas. Asimismo, el cabello se llevará corto o recogido y la barba y
bigote estarán cortos y limpios. Además, hay otra serie de aspectos a tener en cuenta [2,
25, 31, 33]:
 Utilizar guantes cuando pueda producirse contacto con sangre u otros materiales
potencialmente infecciosos, con membranas mucosas o con piel no intacta.
 Retirar los guantes después de realizar cuidados a un paciente. No utilizar el mismo
par de guantes para realizar cuidados a más de un paciente y no lavarse los guantes
entre usos con diferentes pacientes.
 Cambiar de guantes durante los cuidados a un mismo paciente si pasamos de una
zona contaminada a otra limpia.
 Lavar o desinfectar las manos al quitarse o cambiarse de guantes.
Según la OMS se diferencian cinco momentos indispensables para la HM [25]: antes
del contacto con el paciente, antes de realizar una tarea aséptica, después del riesgo de
exposición a fluidos orgánicos, después del contacto con el paciente y después del
contacto con el entorno del paciente. La práctica debe de hacerse siguiendo todas las
indicaciones, tanto si se usan guantes como si no (ver anexos VIII y IX).
Además de la educación del personal sanitario -en lo referente a una correcta HMhay que destacar la importancia de la educación al paciente y/o cuidador, a través de los
protocolos disponibles en todos los centros sanitarios del país. El personal de enfermería
es el responsable de enseñar la importancia de la HM, así como la técnica, momentos y
productos adecuados que deben de utilizarse [2, 25, 31].
La OMS pone a disposición del usuario carteles gráficos explicativos de cómo debe
realizarse la HM, bien con agua y jabón o con solución hidroalcohólica [2, 25, 31]:
14
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
 ‹‹ ¡Desinféctese las manos por higiene! Lávese las manos solo cuando estén
visiblemente sucias ›› (Ver anexo X).
 ‹‹ ¡Lávese las manos si están visiblemente sucias! De lo contrario, use un producto
desinfectante de las manos ›› (Ver anexo XI).
Estas técnicas resultan agresivas para la piel; considerando que a lo largo de una
misma jornada el personal sanitario puede llegar a lavarse las manos hasta 30 veces o
más, debe mantenerse un cuidado continuo de las manos [2, 25]:
 Aplicar regularmente una crema o loción de manos protectora, como mínimo una
vez al día.
 No lavar las manos con agua y jabón inmediatamente antes o después de frotarlas
con alcohol.
 No utilizar agua caliente para lavarse las manos.
 Es casi tan importante el secado como el lavado. Por ello, después de frotar las
manos con desinfectante o de lavarlas con jabón, se deben dejar secar
completamente antes de poner guantes.
Por último, y no por ello menos importante, unos requisitos recomendables para una
óptima HM [2, 25, 31]:
 El agua que se utilice para el aclarado ha de ser corriente.
 Mejor si se trata de un lavabo grande que exija poco mantenimiento, con
dispositivos contra salpicaduras.
 Controles sin activación manual (utilización de los codos).
 Se utilizará un sistema de secado sin contaminación (toallas desechables, a ser
posible).
4.3.3. Métodos para promocionar la higiene de manos
En Octubre de 2004, el Director General de la OMS puso en marcha La Alianza
Mundial para la Seguridad del Paciente [33]. Entró en vigor en el año 2005,
15
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
identificando seis campos de acción. Uno de ellos, que es el que concierne al tema que
se está tratando; Soluciones para la Seguridad del Paciente, aparece definido como
“Todo diseño o intervención de sistema que haya demostrado la capacidad de prevenir
o mitigar el daño al paciente, proveniente de los procesos de atención sanitaria” [34].
En ese mismo año, la Comisión Conjunta y la Comisión Internacional Conjunta
fueron designadas como Centros Colaboradores de la OMS en Soluciones para la
Seguridad del Paciente con el propósito de iniciar, coordinar, difundir y acelerar las
mejoras en materia de seguridad del paciente a nivel mundial. Esta Alianza supuso un
medio que promovió la colaboración internacional y la acción de los Estados Miembros;
expertos, usuarios y grupos de profesionales y de la industria. Entre las soluciones que
se propusieron para la seguridad del paciente se encontraba mejorar la HM para
prevenir las IAAS [33, 34].
Las intervenciones ideadas para la mejora de la HM en todo un país requieren
grandes recursos económicos y humanos, sobre todo en campañas multifacéticas y
multimodales como la que nos precede. La escasez presupuestaria de los países en vías
de desarrollo y economías en transición supone una clara limitación en las campañas de
fomento de la HM. Sin embargo, en estos países la carga de las IAAS es más elevada y
los beneficios de las campañas de fomento de la HM podrían ser mayores frente a los
obtenidos en países industrializados: reducción de infecciones con el consiguiente
descenso de la morbilidad y de los costes relacionados con las IAAS [32-34].
Es preciso promover la cultura de seguridad a todos los niveles de atención sanitaria
mediante un enfoque de gestión proactiva, preventiva y de aprendizaje. Asimismo, para
conocer y mejorar dicha cultura, es necesaria la medición de actitudes y
comportamientos relacionados con la seguridad en el trabajo y en el contexto general
del mismo. El desarrollo de la Estrategia Nacional en Seguridad del Paciente ha
permitido adoptar instrumentos de medida de la cultura de seguridad y su aplicación en
el ámbito hospitalario y de atención primaria [2, 32].
16
FACULTAD DE ENFERMERÍA
4.3.3.1.
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Programas de formación y motivación
Para que los programas de fomento de la HM sean bien acogidos por los
profesionales sanitarios, éstos deben centrarse en los factores que influyen en el
comportamiento además del tipo de productos necesarios para dicha higiene. Ha de ser
una estrategia multifacética y multimodal, incluyendo la formación y contando con el
apoyo de los estamentos directivos para su aplicación. Se recomienda instruir sobre el
tipo de actividades asistenciales que pueden contaminar las manos, enfatizando las
ventajas e inconvenientes acerca de los diversos métodos de limpieza de manos. Del
mismo modo, es aconsejable vigilar la adherencia de los profesionales sanitarios a las
prácticas recomendadas de HM, proporcionando la información necesaria para su
desempeño. En última instancia, es preciso consolidar las alianzas entre los pacientes,
sus familiares y los profesionales de la salud para fomentar la HM en la atención
sanitaria [2, 26, 31, 33].
EL 5 de mayo de 2009, el programa de Seguridad del Paciente de la OMS dio
iniciativa a la campaña ‹‹Salve vidas: lávese las manos›› como parte y principal
componente del Primer Reto del programa ‹‹Una atención limpia es una atención más
segura›› [35]. Desde entonces, su objetivo es promover la HM para que se reconozca
universalmente que el control de las infecciones constituye una base sólida y esencial
para la seguridad de los pacientes, además de contribuir a la reducción de las IAAS y
sus consecuencias [36]. Para facilitar esta tarea se creó una red informal y voluntaria
promovida por la OMS, “CleanHandsNet” [37]. Subyacía el deseo de reunir a los
dirigentes de entidades nacionales y subnacionales para, a través del intercambio de
información y experiencias, concienciar al personal sanitario de una mayor observación
en la práctica de la HM. Este objetivo se llevaba a cabo trabajando en las esferas que
guardaban relación con las líneas directrices del programa ‹‹Una atención limpia es una
atención más segura››: establecimiento de redes y comunicación, apoyo técnico,
evaluación y retroinformación, investigación y desarrollo, formación y capacitación.
Como consecuencia, se ha reducido el porcentaje de afectados por
aumentado la seguridad de los pacientes en todo el mundo [33, 35-37].
17
IAAS y ha
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
La campaña mundial ‹‹Salve vidas: lávese las manos›› fue destinada para mejorar las
prácticas de HM del personal sanitario. Hoy en día se encuentran adheridos a esta
campaña 5.000 hospitales y centros de salud de 127 países, entre ellos España, donde se
dispone del material necesario para la puesta en marcha de esta práctica, así como para
su evaluación [35-37].
La intención de la OMS es celebrar cada 5 de mayo una jornada mundial dedicada a
esta campaña, para concienciar a la población en la necesidad de una correcta HM. Es
paradójico que, siendo uno de los métodos más simples y eficaces que existen para
disminuir las IAAS, todavía se omita su práctica en un 60 % de las situaciones [35].
Durante el año 2010, la Agencia de Calidad en colaboración con la OMS, con la
Sociedad Española de Medicina Intensiva y Cuidados Críticos (SEMICYUC) y la
Sociedad Española de Enfermería Intensiva y Unidades Coronarias (SEEIUC), han
desarrollado varios proyectos relacionados con la Seguridad del Paciente y por lo tanto
con la correcta HM [40]. Estos proyectos incluyen una serie de prácticas seguras dentro
de los servicios especiales de los hospitales (ej.: la Unidad de Cuidados Intensivos,
UCI). Destacan dos:
I.
Proyecto Bacteriemia Zero (BZ): prevención de las bacteriemias relacionadas con
catéter venoso.
II.
Proyecto Neumonía Zero (NZ): prevención neumonía asociada a ventilación
mecánica.
En 2012 se publica la Hand Hygiene in Outpatient and Home-based Care and Longterm Care Facilities [27], una guía de aplicación de la estrategia multimodal de la OMS
para la mejora de la HM y un acercamiento a “Mis Cinco Momentos Para la HM”. A
través de este método de observación directa, se monitorizan en sesiones de 20 minutos
las indicaciones de HM y la acción realizada (LM, DAM u oportunidad perdida cuando
no se realiza ninguna acción). Se trata de un sistema de medida eficaz pero complejo. Ya
que es preciso entrenar a los observadores y realizar una validación inter-observador
previa para poder evaluar el cumplimiento de los trabajadores sanitarios [25].
18
FACULTAD DE ENFERMERÍA
4.3.3.2.
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Guías asistenciales
En la actualidad existen diferentes recomendaciones para la HM, elaboradas por
distintas organizaciones internacionales. Se encuentran un sinfín de guías prácticas y
manuales que introducen, sumergen y facilitan el conocimiento y desarrollo de prácticas
seguras para el paciente; sin embargo, no todas están acreditadas y por tanto no son
fiables. A continuación se hace referencia a una serie de documentos acreditados y útiles
a la hora de reforzar el conocimiento del personal sanitario:
I.
II.
Guía Práctica de Prevención de las Infecciones Nosocomiales, 2003 [31].
La investigación en seguridad del paciente. Mayor conocimiento para una atención
más segura. Alianza Mundial para la Seguridad del Paciente, 2008 419].
III.
Guía de aplicación de la estrategia multimodal de la OMS para la mejora de la
higiene de manos, 2010 [42]
IV.
V.
Manual técnico de referencia para la higiene de manos, 2010 [43].
Hand Hygiene in Outpatient and Home-based Care and Long-term Care Facilities,
2012 (versión en inglés) [27].
4.4. Frecuencia y adhesión de la HM entre el personal sanitario
En estudios observacionales llevados a cabo en distintos hospitales de los EEUU, el
personal sanitario (profesionales de la medicina, TCAE y personal de enfermería) se
lavó las manos un promedio de 5 a 30 veces por turno, aunque hubo miembros del
personal de enfermería que se lavaron las manos hasta 100 veces por turno [43-49].
Dependiendo de las diferentes áreas y servicios del hospital, se observaron
variaciones significativas en la HM: en cuanto a la duración -muchas veces escasa- con
un promedio de 6,6 a 24 segundos, o al no cubrir -a menudo- todas las superficies de
muñeca, manos y dedos durante el lavado[13, 50-55].
En un estudio del año 2001 llevado a cabo por Pittet, de 2.834 oportunidades de HM,
la tasa de incumplimiento alcanza el 48% [13]. Según diferentes estudios sobre el grado
de cumplimiento de la HM, las cifras oscilan entre el 30% y el 50% [56]. Pittet
confirmó modestos niveles del cumplimiento de la HM en una institución de enseñanza
19
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
y mostró que variaba en función del área del hospital y del tipo de trabajador de la
salud. Los resultados muestran que puede ser útil la orientación de la educación en los
programas nacionales. La formación continua, distribución de folletos informativos,
talleres y conferencias, así como la devolución de datos sobre las tasas de
cumplimiento, se han asociado con una mejoría transitoria [13].
Desde 1990 se lleva a cabo anualmente el Estudio EPINE, que se centra en la
aparición de las IAAS en la red nacional de hospitales. El último estudio data de mayojunio de 2013. De un total de 281 hospitales y 56.067 pacientes se extrajeron los
resultados, acotados en función de su sexo, edad, número y tipo de infecciones, origen
de las IAAS y servicios de atención hospitalaria. Asimismo, realizó una clasificación en
función del tamaño, tipo de hospital y áreas de asistencia sanitaria; variables que
afectaron en la prevalencia de las IAAS [57] (ver anexos XII-XVII).
4.4.1. Motivos por los que no se cumplen los planes preventivos de
actuación frente al contagio y transmisión de las IAAS
Entre los factores que afectan a la adhesión, definidos como barreras percibidas por
el personal sanitario para la adecuada HM, se encuentran [13, 58]:
 Suministros inaccesibles o en número insuficiente: lavabo, solución alcohólica.
 Falta de jabón o toallas de papel.
 Creencias acerca de que el lavado no es tan importante como ponerse los guantes.
 Creencias sobre una no evidencia científica suficiente que avale la HM.
 Falta de información que demuestre el impacto de mejora de la HM en las tasas de
IAAS.
 Carga de trabajo excesiva y falta de personal.
 Falta de tiempo.
 Olvido.
 Percepción de las necesidades del paciente como prioridad.
 El jabón o solución alcohólica irrita y seca la piel.
 Creencias de que el uso de guantes sustituye u obvia la necesidad del lavado.
20
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
 Creencias sobre que lavarse las manos en presencia de un paciente hace que pueda
sentirse discriminado.
 Desconocimiento, ignorancia o desacuerdo con las directrices y protocolos
existentes.
 Falta de participación activa en la promoción a nivel individual o institucional.
 Falta de sanciones a los no cumplidores.
4.5.
Estudios de investigación
Para comprender la magnitud y etiología de los daños ocasionados a los pacientes y
encontrar soluciones innovadoras o adaptar soluciones a diferentes contextos es
necesario ampliar conocimientos, además de mejorar el rendimiento y aprovechamiento
de los recursos y conocimientos disponibles [32, 41]. Según el objetivo del programa de
investigación de la Alianza Mundial para la Seguridad del Paciente, es preciso
fomentar proyectos de investigación cualitativa y cuantitativa. Mediante la aplicación de
los resultados de la investigación se logrará una mayor seguridad de la atención
sanitaria y se reducirán los daños ocasionados a los pacientes a nivel mundial [41].
Encontrar soluciones que permitan mejorar la seguridad de los pacientes, conlleva
marcar un ciclo de investigación con las siguientes facetas:
I.
Determinar la magnitud del daño y el número y tipos de situaciones adversas que
perjudican a los pacientes.
II.
Entender las causas principales de los daños ocasionados a los pacientes.
III.
Encontrar soluciones para conseguir que la atención sanitaria sea más segura.
IV.
Evaluar el impacto de las soluciones en situaciones de la vida real.
Como se trata de un ciclo, una vez termina el último punto, volvería al comienzo del
mismo [41].
Las actuaciones de mejora de las prácticas seguras necesitan basarse en el
conocimiento científico. Por otra parte, la participación en procesos de investigación en
los servicios de salud fomenta el interés profesional por el análisis de sus actuaciones y
21
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
por la mejora de las mismas [32]. Del mismo modo, conocer la epidemiología de los
factores de riesgo es una práctica fundamental para desarrollar las estrategias de
prevención que los evite o, en su defecto, para minimizar sus consecuencias si no han
podido ser evitados [31, 32].
A la hora de realizar un estudio, el recuento de pacientes infectados ofrece
información limitada que puede resultar difícil de interpretar. Se necesitan más datos
para describir con exactitud el problema a partir de la población, cuantificar su
importancia, interpretar las variaciones y establecer comparaciones. Así, el análisis de
los factores de riesgo exige información sobre pacientes tanto afectados como sanos.
Entonces se podrán calcular las tasas de incidencia de infección y las ajustadas en
función del riesgo. Si se entiende la “vigilancia pasiva” como aquella llevada a cabo por
el personal ajeno al grupo de control de infecciones (vigilancia en el laboratorio,
información extraída de la historia clínica después del alta hospitalaria, notificación de
infecciones por parte del personal médico o miembros del personal de enfermería, etc.),
ésta resulta insuficiente y poco fiable a la hora de obtener datos para el grupo de control.
Por tanto, se recomienda alguna forma de vigilancia activa, bien sean estudios de
prevalencia o de incidencia [31] (ver anexo XVIII).
Con un estudio de prevalencia (también denominado estudio cruzado o transversal)
se pueden identificar las IAAS en todo un hospital o en determinadas unidades “in situ”
(prevalencia puntual). Dicho estudio se desarrolla como sigue: un equipo de
investigadores cualificados visita a cada paciente del hospital o unidad, y en el mismo
día se revisan las historias clínicas y la atención del personal de enfermería. Por último,
se identifican los pacientes infectados y se recogen datos sobre los factores de riesgo. El
criterio de valoración es una tasa de prevalencia donde influye la duración de la
estancia, que es mayor en pacientes infectados y la duración de la infección en función
si sigue “activa” en el momento del estudio [31, 32].
Si se pretende obtener tasas fiables o realizar comparaciones estadísticas, el número
de pacientes de la muestra a estudiar ha de ser elevado. El estudio de prevalencia es
sencillo, rápido y relativamente barato. Permite, a través de la actividad en todo el
22
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
hospital, crear una mayor conciencia de los problemas causados por las IAAS entre el
personal clínico y facilitar la visibilidad del equipo de control de infecciones [31].
Por otro lado, un estudio de incidencia (también denominado estudio continuo o
longitudinal), identifica en el transcurso del tiempo la aparición de nuevas infecciones, y
exige la observación de todos los pacientes en una población y período determinados.
Este estudio resulta más eficaz para detectar diferencias en tasas de incidencia de
infecciones, seguir las tendencias, vincular las IAAS con los factores de riesgo y
realizar comparaciones entre hospitales y unidades. La carga de trabajo que supone el
estudio de incidencia es mayor en comparación con el requerido en las tasas de
prevalencia. Además, requiere más tiempo y es más costoso, por lo que suele realizarse
de manera permanente sólo en determinadas unidades de alto riesgo (cuidados
intensivos) o por períodos limitados de tiempo, discriminando la investigación a ciertas
infecciones [31, 32].
Desde el año 2005, instituciones internacionales, nacionales y autonómicas se han
implicado en el Proyecto de Seguridad Clínica. Es importante citar el Programa de
Seguridad Clínica de la OMS y la colaboración del Ministerio de Sanidad y Consumo
(MSC) con los diferentes servicios autonómicos de salud. La implantación de prácticas
clínicas seguras, junto con una mayor observancia del HM, forma parte de su estrategia
de mejora con el objetivo de prevenir la IAAS [2, 41, 56]. Sin embargo, existen una
serie de factores que aún limitan los medios para llevar a cabo investigaciones en
materia de seguridad del paciente; destacando la escasa sensibilización, el insuficiente
apoyo político y dotación económica que se invierte, el limitado desarrollo
metodológico en determinados países en vías de desarrollo, la escasez de instrumentos
adecuados y de profesionales cualificados [41].
5. Resultados
A día de hoy, existen numerosos estudios acerca de la HM , origen y transmisión de
las IAAS, así como protocolos de actuación a seguir. La mayoría de la bibliografía
publicada muestra una relación temporal entre la mejora en el cumplimiento de la HM y
23
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
la reducción de las tasas de infección. Sin embargo, las infecciones son consideradas
como un problema multifactorial y como tal, para observar buenos resultados, no es
suficiente con el control de la HM, sino que debe incluirse en campañas de prevención,
apoyo institucional y esfuerzos a distintos niveles de actuación.
Concretamente, hay que fomentar estudios epidemiológicos acerca de las IAAS y de
prevalencia en HM, para contribuir a la identificación de problemas, vigilancia y
evaluación de estrategias de prevención y control en seguridad del paciente, nivel de
cumplimiento de los programas de formación en higiene de manos, etc.
Si bien no existe duda alguna acerca de la eficacia de la HM como estrategia para
evitar la transmisión de microorganismos, el verdadero problema radica en la escasa
adherencia de esta recomendación a nivel mundial. Se han descrito barreras reportadas
por los trabajadores sanitarios para el incumplimiento de esta norma, así como
estrategias para aumentar la adherencia.
Parece que una de las recomendaciones más eficaces para lograr un mayor grado de
cumplimiento -sin dejar de ser un método efectivo para la descontaminación de las
manos- es la utilización de productos de base alcohólica, quedando relegada la
utilización de agua y jabón cuando las manos estén visiblemente sucias, manchadas de
sangre u otros fluidos corporales, cuando exista una fuerte sospecha/evidencia de
exposición a organismos potencialmente formadores de esporas o después de utilizar los
sanitarios. Organismos internacionales como el CDC y la OMS respaldan la
introducción de productos de base alcohólica, sin embargo, esto no es suficiente para
aumentar la adherencia del personal en los protocolos de HM.
En vista a los resultados, es necesario invertir en los programas de formación en
materia de HM destinados tanto al personal sanitario como a los pacientes. Dichos
programas contarían con un seguimiento pormenorizado desde su implantación,
feedback y cumplimiento del mismo.
Por último, recordar que, mientras el cambio en el sistema es un requerimiento en la
mayoría de los lugares, el cambio sostenido en el comportamiento humano es aún más
importante y depende en esencia del apoyo de los colegas de profesión.
24
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
“Una Atención Limpia es una Atención Segura” no es tanto una elección como un
derecho básico. Las manos limpias evitan el sufrimiento del paciente y salvan vidas.
6. Conclusiones
Como enfermeros, nuestras manos son nuestra profesión y nuestro soporte en el
cuidado, pero también son un vehículo de transmisión de microorganismos y por tanto
debemos concienciarnos de la importancia de llevar a cabo una correcta HM.
La epidemiología puede ayudar al personal sanitario, particularmente al personal de
enfermería, a comprender la ocurrencia, magnitud, distribución y severidad de las
IAAS. De esta forma, se podrá dar prioridad a los problemas potenciales de salud,
ayudando a definir estrategias adecuadas y eficientes de prevención y control.
Del mismo modo, comprender cómo opera la cadena de infección, especialmente los
modos de transmisión, ayudaría a los profesionales a prevenir la aparición de IAAS.
En definitiva, es necesario implantar un programa de educación continua del
personal sanitario en HM y evaluar periódicamente su eficacia mediante cortes de
prevalencia seriados.
En la actualidad existen diferentes protocolos estándar para la recogida de datos en
materia de HM, bien de observación directa o indirecta. Sería interesante que cada
CCAA, cada provincia o en su defecto cada centro hospitalario, estructurase un
protocolo en función de sus características. Un método de observación indirecto que, en
contraste con el método de observación directa que propone la OMS, resultaría menos
trabajoso y más barato. Podría usarse de manera continuada en el tiempo y, además, el
tiempo de formación del observador seria mínimo. Sólo se precisaría una recogida de
datos entre los trabajadores sanitarios a medida que se realizan o no las técnicas de HM
ante los ojos del observador (un cargo rotativo dentro del personal de enfermería por
aéreas).
Los datos recogidos se reflejarían en una ficha de corte de prevalencia de HM, que
contendría como mínimo: datos demográficos (servicio, departamento, nº de camas,
25
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
turno…), trabajadores sanitarios presentes en el momento de la observación, datos de
estructuras (nº de lavabos, nº de dispensadores de jabón y de desinfectantes
hidroalcohólicos, toallas de papel en diferentes localizaciones) y condiciones de las
mismas. Además, sería necesario marcar la prevalencia de HM en las diferentes áreas y
lavabos de la unidad, según profesional de salud y método de HM utilizado. De esta
forma, se conseguiría el objetivo de identificación de problemas, vigilancia y evaluación
de estrategias en prevención y control de la seguridad del paciente.
Si lo que se pretende es obtener unos resultados satisfactorios y asegurar la
implantación y el cumplimiento de los programas de formación, tal y como se ha
introducido anteriormente, de poco sirve contar con el material adecuado si antes no “se
educa” al personal que va a llevar a cabo estos protocolos.
Es necesario concienciar al personal sanitario, no sólo en la importancia del proceso
de la HM, sino también en la correcta actitud para el desarrollo y cumplimiento del
mismo. Por eso son tan importantes los programas de formación. La educación del
personal sanitario es esencial para mejorar la práctica de la HM y forma parte integral
de las estrategias promocionales de la misma, lo que conlleva a una reducción de las
infecciones sanitarias.
Además, el hecho de incluir al paciente como elemento activo dentro de estos
programas de formación ayudará a que el proceso se perciba y lleve a cabo de forma
global e interrelacionada en todos los eslabones. Cuanta más información se posea, se
estará en vías de obtener mejores resultados en la adherencia.
Y en cuanto a educación, estos programas de formación en HM se pueden
implementar ya en las bases de nuestro sistema educativo, ofreciendo cursos para llevar
a cabo una correcta higiene en colegios y en otros niveles de la enseñanza obligatoria,
ya que, ¿a cuántos de nosotros nos han enseñado la importancia de lavarnos las manos,
y el hacerlo de forma correcta?
26
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
7. Bibliografía
[1] Organización Mundial de la Salud (OMS). Programa «Una atención limpia es una atención
más segura ». Carga mundial de infecciones asociadas a la atención sanitaria [sede web].
Campaña “Salve vidas: límpiese las manos”, 2014. Disponible en:
http://www.who.int/gpsc/country_work/burden_hcai/es/
[2] OMS. Alianza Mundial para la Seguridad del Paciente. Directrices de la OMS sobre la Higiene
de Manos en la Atención Sanitaria (borrador avanzado) [sede web]. Ginebra (Suiza) 2005.
Disponible en:
http://www.who.int/patientsafety/information_centre/Spanish_HH_Guidelines.pdf
[3] Unahalekhaka A, Emori G. Epidemiología de las infecciones asociadas a la atención en salud.
Cap. 3 [sede web]. 2013. Disponible
en:http://www.theific.org/basic_concepts/spanish/IFIC%20Spanish%20Book%202013_ch3_PR
ESS.pdf
[4] Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (SEMPSPH). Estudio de
prevalencia de las infecciones nosocomiales en los hospitales españoles [sede web]. Informe
EPINE-EPPS 2012. 19 Jun 2013. Disponible en:
http://hws.vhebron.net/epine/Descargas/Resultados%20EPINEEPPS%202012%20Resumen%20(v1_1).pdf
[5] Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad (MSSSI). Estudio de prevalencia de las
infecciones nosocomiales en los hospitales españoles [sede web]. Informe EPINE 2011.
Disponible en:
https://www.msssi.gob.es/gabinete/notasPrensa.do?id=2434
[6] Enciclopedia de salud. Definición de infección [sede web]. Nov 2013. Disponible en:
http://www.enciclopediasalud.com/definiciones/infeccion?anterior=reservorio-de-infeccion
[7] KRAMES PATIENT EDUCATION. Cómo prevenir la propagación de infecciones. Conemaugh
Health System [sede web]. 2006. Disponible en:
http://conemaugh.kramesonline.com/Spanish/HealthSheets/3,S,85110
[8] Tovar L.F. Servicios y Asesorías en Infectología. Lavado de manos [sede web]. Jun. 2012.
Disponible en: www.susmedicos.com/art_lavado_manos.htm
[9] Casal Mª.T., Casal M.. Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica. Ocho siglos de la
muerte de un gran médico: “Maimonides El Español” [en línea]. Dic. 2004; 22(10). [accesado 28
Abril 2014]; Disponible en: http://zl.elsevier.es/es/revista/enfermedades-infecciosasmicrobiologia-clinica-28/ocho-siglos-muerte-un-gran-medico-maimonides-13069208-articuloespecial-2004
[10] Labarraque AG. Instructions and observations regarding the use of the chlorides of soda
and lime. American Journal of the Medical Sciences, 1831; 1(15):207-10.
[11] Hempel GC. La investigación científica: invención y contrastación. En: Hempel GC editor.
Filosofía de la Ciencia Natural. Madrid: Alianza Editorial, S.A.; 1973. p. 16-21
[12] Grupo de Estudio para la Formación y Docencia en Enfermedades Infecciosas y
Microbiología Clínica (GEFOR). Ignaz Phillipp Semmelweis. 2009. Disponible en :
http://www.gefor.4t.com/arte/semmelweis.htm
27
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
[13] Pittet D. Improving Adherence to Hand Hygiene Practice: A multidisciplinary Approach.
Emerg Infect Dis [en línea]. 2001 Mar-Apr [accesado 13 May 2014]; 7(2): p. 234-240.
Disponible en: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2631736/
[14] Escuela de Medicina. Pontificia Universidad Católica de Chile. Apuntes de Historia de la
Medicina de la 1ª mitad del siglo XIX: Ignaz Semmelweis [en línea]. 2010. [accesado 18 Abril
2014]. Disponible en:
http://escuela.med.puc.cl/publ/HistoriaMedicina/SigloXIXIgnazSemmelweis.html
[15] Gómez-Esteban P. La teoría microbiana de las enfermedades (I) [sede web]. Dic 2013.
Disponible en: http://eltamiz.com/2013/12/19/teoria-microbiana-enfermedad/
[16] Tan SY, Tasaki A. Joseph Lister (1827-1912): father of antisepsis. Singapore Med J. 2007 Jul;
48(7):605-6.
[17] Salazar A, Guarin G, Arroyave M, Ochoa J, Ochoa M. La higiene de las manos en una unidad
de cuidado intensivo. Aquichan 2008:8-18.
[18] Coppage CM. Hand washing in patient care (motion picture). Washington, D.C.: US Public
Health Service; 1961.
[19] Boyce JM, Pittet D. Guideline for hand hygiene in health-care Settings: recommendations
of the Healthcare Infection Control Practices Advisory Committee and the
HICPAC/SHEA/APIC/IDSA Hand Hygiene Task Force. Infect Control Hosp Epidemiol. 2002 Dec;
23(12 Suppl):S3-40.
[20] Steere AC, Mallison GF. Hand washing practices for the prevention of nosocomial
infections. Ann Intern Med. 1975 Nov; 83(5):683-90.
[21] Larson E. Draft guideline for use of topical antimicrobial agents. Am J Infect Control. 1987
Dec; 15(6):25A-36A.
[22] Larson EL. APIC guideline for hand washing and hand antisepsis in health care settings. Am
J Infect Control. 1995 Aug; 23(4):251-69.
[23] Recommendations for preventing the spread of vancomycin resistance. Hospital Infection
Control Practices Advisory Committee (HICPAC). Infect Control Hosp Epidemiol. 1995 Feb;
16(2):105-13.
[24] Montiel FA. Flora bacteriana habitual. Boletín de la escuela de medicina. 26(3) [sede web].
1997. Disponible en: http://escuela.med.puc.cl/publ/boletin/laboratorio/florabacteriana.html
[25] Brochure, OMS. World Alliance for Patient Safety. WHO Guidelines on hand hygiene in
healthcare. “Save Lives, Clean Your Hands” [sede web]. 2012. Disponible en:
http://www.who.int/gpsc/5may/tools/ES_PSP_GPSC1_Higiene-de-lasManos_BrochureSpanish-2012.pdf
[26] OMS. Programa «Una atención limpia es una atención más segura ». Pruebas que
corroboran la importancia de la higiene de las manos [sede web]. Campaña “Salve vidas:
límpiese las manos”, 2014. Disponible en: http://www.who.int/gpsc/country_work/es/
[27] WHO. Hand Hygiene in Outpatient and Home-based Care and Long-term Care Facilities
[sede web]. 2012. Disponible en:
http://apps.who.int/iris/bitstream/10665/78060/1/9789241503372_eng.pdf?ua=1
[28] Arévalo JM, Arribas JL, Hernández MJ, Lizán M, Coordinador: Herruzo R.
28
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Guía de utilización de antisépticos. Grupo de trabajo sobre Desinfectantes y
Antisépticos de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e
Higiene [sede web]. 1998. Disponible en:
http://www.mpsp.org/mpsp/Documentos/Desinfec/antisep.htm
http://200.5.106.165/html/Departamentos/Samp/Microbiologia/Guia%20para%20la%20utiliza
cion%20de%20antisepticos%20en%20PDF.pdf
[29] OMS. Programa «Una alianza mundial para una atención más segura ». Guía para la
elaboración a nivel local de formulaciones recomendadas por la OMS para la desinfección de
las manos [sede web]. “Save Lives: Clean Your Hands”, 2012. Disponible en:
http://www.who.int/gpsc/5may/tools/ES_PSP_GPSC1_GuiaParaLaElaboracionLocalWEB2012.pdf?ua=1
[30] Monge Jodrá V. INCLIMECC (Indicadores Clínicos de Mejora Contínua de Calidad). Medidas
Generales para el Control de la Infección [sede web]. Madrid, desde 1994. Disponible en:
http://www.saludpreventiva.com/web/index.php?pagina=capitulo1.html&comando=des_reco
mendaciones
[31] OMS. Prevención de las Infecciones Nosocomiales. Guía Práctica. 2ª ed. [sede web]. Malta:
who.int; 2003. p. 9-33. [Acceso el 9 de mayo de 2014]. Disponible en:
http://www.who.int/csr/resources/publications/drugresist/en/PISpanish3.pdf?ua=1
[32] Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad (MSPSI). Desarrollo de la Estrategia
Nacional en Seguridad del Paciente 2005-2011. Oficina de Planificación sanitaria y Calidad.
Agencia de Calidad del SNS [sede web]. Diciembre, 2011. p. 14-36. [Acceso 19 de abril de
2014]. Disponible en:
http://www.msssi.gob.es/organizacion/sns/planCalidadSNS/docs/estrategia_sp_sns_2005_201
1.pdf
[33] OMS. Seguridad del Paciente [sede web]. 2014. Disponible en:
http://www.who.int/patientsafety/es/
[34] The Joint Commission, Join Commission International, World Health Organization.
Preámbulo a las soluciones para la seguridad del paciente [sede web]. Mayo, 2007. Disponible
en:
http://www.who.int/patientsafety/solutions/patientsafety/PatientSolutionsSPANISH.pdf?ua=1
[35] OMS. Información acerca de la campaña “Salve vidas: lávese las manos” [sede web]. 2014.
Disponible en: http://www.who.int/gpsc/5may/background/es/
[36] Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad (MSSSI). Plan de Calidad para el
Sistema Nacional de Salud (SNS). Boletín Vol.1, nº. 6 [sede web]. Julio, 2007. Disponible en:
http://www.msssi.gob.es/organizacion/sns/planCalidadSNS/boletinAgencia/boletin6/index.htm
l
WHO. Task Force on Hand Higiene. Una atención limpia es una atención segura. Primer Reto
Mundial por la Seguridad del Paciente [sede web]. 2007. Disponible en:
http://www.who.int/gpsc/es/index.html
[37] OMS. La red CleanHandsNet de la OMS- Información sobre la participación. Programa
‹‹Una atención limpia es una atención más segura›› [sede web]. 2014. Disponible en:
29
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
http://www.who.int/gpsc/national_campaigns/participation/es/
[38] Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad (MSSSI). Plan de Calidad para el
Sistema Nacional de Salud (SNS). Boletín Vol. 3, nº. 9 [sede web]. Octubre, 2009. Disponible en:
http://www.msssi.gob.es/organizacion/sns/planCalidadSNS/boletinAgencia/boletin30/index.ht
m
[39] Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (SEMPSPH). Noticias:
La SEMPSPH te invita a compartir este vídeo sobre la importancia de la Higiene de Manos [sede
web]. 2014. Disponible en: http://www.sempsph.com/es/noticias/117368
[40] Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad (MSPSI). Informe anual del Sistema
Nacional de Salud 2010. Informes, Estudios e Investigación [sede web]. 2012; p. 130-47.
Disponible en:
http://www.msssi.gob.es/organizacion/sns/planCalidadSNS/pdf/equidad/informeAnual2010/in
formeAnualSNS2010.pdf
[41] OMS. Alianza Mundial para la Seguridad del Paciente, La investigación en Seguridad del
Paciente, Mayor conocimiento para una atención más segura. Ginebra (Suiza), 2008. Disponible
en:
http://www.who.int/patientsafety/information_centre/documents/ps_research_brochure_es.p
df?ua=1
[42] OMS. Save Lives, Clean Your Hands. Guía de aplicación de la estrategia multimodal de la
OMS para la mejora de la higiene de manos [sede web]. Traducción del MSPSI, 2010.
Disponible en:
http://apps.who.int/iris/bitstream/10665/102536/1/WHO_IER_PSP_2009.02_spa.pdf?ua=1
[43] Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad (MSPSI). Save Lives, Clean Your Hands.
Manual técnico de referencia para la higiene de las manos [Sede Web]. 2010. Disponible en:
http://www.msssi.gob.es/organizacion/sns/planCalidadSNS/docs/manual_tecnico_referencia_
HM.pdf
http://apps.who.int/iris/bitstream/10665/102537/1/WHO_IER_PSP_2009.02_spa.pdf?ua=1
[44] Larson EL, Hughes CA, Pyrek JD, Sparks SM, Cagatay EU, Bartkus JM.
Changes in bacterial flora associated with skin damage on hands of health care
personnel. Am J Infect Control. 1998 Oct; 26(5):513-21.
[45] Ojajarvi J, Makela P, Rantasalo I. Failure of hand disinfection with frequent hand washing: a
need for prolonged field studies. J Hyg (Lond). 1977 Aug; 79(1):107-19.
[46] Larson E, Killien M. Factors influencing handwashing behavior of patient care personnel.
Am J Infect Control. 1982 Aug; 10(3):93-9.
[47] Boyce JM, Kelliher S, Vallande N. Skin irritation and dryness associated with two handhygiene regimens: soap-and-water hand washing versus hand antisepsis with an alcoholic hand
gel. Infect Control Hosp Epidemiol. 2000 Jul; 21(7):442-8.
[48] Ayliffe GA, Babb JR, Davies JG, Lilly HA. Hand disinfection: a comparison of various agents
in laboratory and ward studies. J Hosp Infect. 1988 Apr; 11(3):226-43
[49] Taylor LJ. An evaluation of handwashing techniques-1. Nurs Times. 1978
Jan; 74(2):54-5.
30
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
[50] Fox MK, Langner SB, Wells RW. How good are hand washing practices? Am J Nurs. 1974
Sep; 74(9):1676-8.
[51] Taylor LJ. An evaluation of handwashing techniques-2. Nurs Times. 1978 Jan 19; 74(3):10810.
[52] Gould D, Ream E. Assessing nurses' hand decontamination performance. Nurs Times. 1993
Jun 23-29; 89(25):47-50.
[53] Broughall JM, Marshman C, Jackson B, Bird P. An automatic monitoring system for
measuring handwashing frequency in hospital wards. J Hosp Infect. 1984 Dec; 5(4):447-53.
[54] Meengs MR, Giles BK, Chisholm CD, Cordell WH, Nelson DR. Hand washing frequency in an
emergency department. Ann Emerg Med. 1994 Jun; 23(6):1307-12.
[55] Larson E, Friedman C, Cohran J, Treston-Aurand J, Green S. Prevalence and correlates of
skin damage on the hands of nurses. Heart Lung. 1997 Sep- Oct; 26(5):404-12.
[56] Dierssen-Sotos T, Robles-García M, Rodríguez-Cundín P, Llorca J. Observancia del lavado de
manos entre los profesionales sanitarios. Med Clín [en línea]. 30 Ene 2010 [accesado 28 Abril
2014]; Disponible en: http://zl.elsevier.es/es/revista/medicina-clinica-2/observancia-lavadomanos-los-profesionales-sanitarios-13146621-cartas-cientificas-2010
[57] Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (SEMPSPH). Estudio de
prevalencia de las infecciones nosocomiales en España [sede web]. EPINE-EPPS 2013. May-Jun
2013. Disponible en: http://hws.vhebron.net/epine/Descargas/EPINEEPPS2013%20Informe%20Global%20de%20Espa%C3%B1a%20Resumen.pdf
[58] Servicio Cántabro de Salud. Despliegue de la Estrategia de Higiene de Manos en Cantabria
[sede web]. Cantabria, Febrero 2010. Disponible en:
http://www.saludcantabria.es/uploads/pdf/consejeria/Memoria%202010%20Estrategia%20Hig
iene%20de%20Manos%20Cantabria.pdf
31
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
8. Anexos
Anexo
I.
Evolución
de
la
localización
nosocomiales. Informe EPINE 2012 [4].
32
de
las
infecciones
FACULTAD DE ENFERMERÍA
Anexo
II.
Patógenos
más
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
prevalentes
nosocomiales. EPINE 2012 [4].
33
en
las
infecciones
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo III. Prevalencia total de pacientes con infección nosocomial.
EPINE 2012 [4]
34
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo IV. Prevalencia de pacientes con infección nosocomial
durante la hospitalización. EPINE 2012 [4]
35
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo V. Prevalencia de pacientes con infección nosocomial
adquirida durante la hospitalización, por CCAA. EPINE 2012 [4]
36
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo VI. Clasificación de los antisépticos [28]
GRUPO QUÍMICO
ALCOHOLES
CLASES
BIGUANIDAS
HALOGENADOS
Yodados
FENOLES
Bifenoles
TENSIOACTIVOS
Halofenoles
Aniónicos
Catiónicos
METALES
PESADOS
Sales de plata
Mercuriales
ANILIDAS
DIAMIDINAS
OXIDANTES
37
PRODUCTOS
Etílico
Isopropílico
Clorhexidina
Soluciones de yodo
Yodóforos
Hexaclorofeno
Triclosán
Cloroxilenol
Jabones
Derivados de amonio
cuaternario
Nitrato de plata
Sulfadiacina argéntica
Mercurocromo
Mertiolato
Triclocarbán
Propamidina
Dibromopropamidina
Peróxido de hidrógeno
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo VII. Directrices de la OMS sobre HM en atención sanitaria,
2009 [29]
La OMS recomienda la desinfección a base de alcohol en
razón de los factores siguientes:
1. Su actividad microbicida, rápida y de amplio espectro, reporta
ventajas intrínsecas y basadas en evidencias, con un riesgo
mínimo de generar resistencia a los agentes antimicrobianos.
2. Es apropiado en lugares apartados o con recursos limitados que
no dispongan de lavabos u otras instalaciones para la HM (agua
limpia, toallas, etc.)
3. Fomenta una mayor frecuencia en la HM, ya que es más rápido,
más conveniente, e inmediatamente accesible en el lugar de
atención al paciente.
4. Reporta beneficios económicos, ya que reduce el costo anual de la
HM, que representa aproximadamente un 1% del costo adicional
generado por las infecciones asociadas a la atención sanitaria.
5. Reduce al mínimo el riesgo de efectos adversos, ya que es más
seguro, más aceptable y mejor tolerado que otros productos.
38
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo VIII. Cinco momentos para la higiene de manos. Alianza
mundial para una atención más segura. OMS [25]
39
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo IX. OMS. Seguridad del Paciente: Alianza Mundial para una
Atención más Segura [25]
1
2
3
ANTES DE TOCAR
AL PACIENTE
¿CUÁNDO?
¿POR QUÉ?
ANTES DE
REALIZAR UNA
TAREA
LIMPIA/ASÉPTIC
A
¿CUÁNDO?
¿POR QUÉ?
DESPUÉS RIESGO
DE EXPOSICIÓN A
LÍQUIDOS
CORPORALES
¿CUÁNDO?
¿POR QUÉ?
DESPUÉS DE
TOCAR AL
PACIENTE
¿CUÁNDO?
¿POR QUÉ?
4
5
DESPUÉS DEL
CONTACTO CON
EL ENTORNO DEL
PACIENTE
¿CUÁNDO?
¿POR QUÉ?
40
Cuando se acerque a él.
Para protegerle de los gérmenes
dañinos que tiene en sus manos.
Inmediatamente antes de realizar la
tarea.
Para protegerle de los gérmenes
dañinos que podrían entrar en su
cuerpo, incluidos los del propio
paciente.
Inmediatamente después de un
riesgo de exposición a líq. corporales
(y tras quitarse los guantes).
Para protegerse y proteger el
entorno de atención de salud de los
gérmenes dañinos del paciente.
Después de tocar a un paciente y la
zona que le rodea, cuando deje la
cabecera del paciente.
Para protegerse y proteger el
entorno de atención de salud de los
gérmenes dañinos del paciente.
Después de tocar cualquier objeto o
mueble del entorno inmediato del
paciente, cuando lo deje (incluso
aunque no haya tocado al paciente)
Para protegerse y proteger el
entorno de atención de salud de los
gérmenes dañinos del paciente.
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo X. ¿Cómo desinfectarse las manos? OMS [25]
41
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexos XI. ¿Cómo lavarse las manos? – OMS [25]
42
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo XII. Resultados según sexo y edad - Estudio EPINE 2013 [57]
Edad
DS
media
Mujer
27.035 48,22
59,41 25,42
Hombre
29.021 51,76
60,42 23,48
Desconocido 11
0,02
Total
56.067 100,00
59,93 24,44
N= Numero de pacientes hospitalizados con datos validos
%= Distribución porcentual
DS= Desviación estándar de la edad
p25= Percentil 25%
p75= Percentil 75%
Sexo
N
%
Mediana
p25
p75
67,00
66,00
66,00
40,00
50,00
46,00
80,00
78,00
79,00
Anexo XIII. Localización de las Infecciones Asociadas a la Asistencia
Sanitaria - Estudio EPINE 2013 [57]
Localización
Resultados
globales
Urinarias
Quirúrgicas
Respiratorias
Bacteriemias
e IAC
Otras
Pacientes
Pacientes Pacientes con
infección. IAAS.
con
con
infección. infección. Prev.
N
N
%
global
y
parcial. %
IIAAS.
Prev.
IAAS. %
global
y
parcial. %
4.236
100,00
7,56
4.677
100,00
8,34
869
1.231
973
20,51
29,06
22,97
1,55
2,20
1,74
869
1.233
975
18,58
26,36
20,85
1,55
2,20
1,74
580
13,69
1,03
587
12,55
1,05
992
23,42
1,77
1.013 21,66
1,81
N= Número de pacientes con infección asociada a la asistencia sanitaria
%= Distribución porcentual
IAC= Infección Asociada a Catéter
IAAS= Infecciones Asociadas a la Asistencia Sanitaria
IAAS. N= Número de Infecciones Asociadas a la Asistencia Sanitaria
independientemente si un paciente tiene más de una
43
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo XIV. Infecciones nosocomiales asociadas a dispositivos Estudio EPINE 2013 [57]
INFECCIONES ASOCIADAS A
DISPOSITIVOS
Neumonía, Nº total
Intubación en 48h previas al
inicio de la infección
Sin intubación
Presencia
de
intubación
desconocida
Infección Urinaria, Nº total
Catéter urinario en 7 días
previos al inicio de la infección
Ausencia de catéter urinario
Se desconoce catéter urinario
Bacteriemia primaria, Nº total
Catéter vascular en 48h previas
al inicio de la infección
Ausencia de catéter vascular
Se desconoce la presencia de
catéter
Nº de
infecciones
%
Nº de
infecciones no
%
presentes al
ingreso
726
100,00
975
100,00
168
17,23
154
21,21
501
51,38
369
50,83
306
31,38
203
27,96
869
100,00
683
100,00
485
55,81
409
59,88
309
75
377
35,56
8,63
100,00
245
29
319
35,87
4,25
100,00
85
22,55
71
22,26
85
22,55
71
24,14
207
54,91
171
53,61
44
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo XIV. Localización de las infecciones nosocomiales - Estudio
EPINE 2013 [57]
Localización
Resultados
globales
Urinarias
Quirúrgicas
Respiratorias
Bacteriemias
e IAC
Otras
Pacientes
Pacientes Pacientes con
infección. IAAS.
con
con
infección. infección. Prev.
N
N
%
global
y
parcial. %
IAAS. Prev.
IAAS. % global
y
parcial. %
4.236
100,00
7,56
4.677
100,00
8,34
869
1.231
973
20,51
29,06
22,97
1,55
2,20
1,74
869
1.233
975
18,58
26,36
20,85
1,55
2,20
1,74
580
13,69
1,03
587
12,55
1,05
992
23,42
1,77
1.013 21,66
1,81
N= Número de pacientes con infección nosocomial
%= Distribución porcentual
IAC= Infección Asociada a Catéter
IAAS= Infecciones Asociadas a la Asistencia Sanitaria
IAAS. N= Número de Infecciones Asociadas a la Asistencia Sanitaria
independientemente si un paciente tiene más de una
45
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo XV. Distribución de los pacientes hospitalizados según
factores de riesgo de tipo intrínseco y prevalencia de pacientes con
infección nosocomial - Estudio EPINE 2013 [57]
Total
Coma
IRC
Diabetes
Neoplasia
EPOC
Inmunodeficiencia
Neutropenia
Cirrosis
Hipoalbuminemia
Úlcera por presión
Total
N
%
PPI
Prev.
PC
%
Prev.
TP
%
Prev.
%
1.083
7.588
13.302
11.409
7.630
2.911
1.091
1.330
5.221
2.572
56.067
1,96
13,83
24,14
20,87
13,97
5,33
2,00
2,43
11,62
4,71
100,00
170
589
863
980
493
313
147
103
673
377
2.922
15,70
7,76
6,49
8,59
6,46
10,75
13,47
7,74
12,89
14,66
5,21
16,99
9,37
8,01
10,34
7,93
12,68
14,76
8,80
15,17
16,52
6,60
19,30
11,08
9,16
11,34
9,06
13,84
16,50
9,85
17,47
20,26
7,56
pacientes
184
711
1.066
1.180
605
369
161
117
792
425
3.703
209
841
1.219
1.294
691
403
180
131
912
521
4.236
N = Número de pacientes hospitalizados con datos válidos
% = Porcentaje sobre el número de pacientes con datos válidos
PPI = Número de Pacientes con infección nosocomial adquirida en el presente ingreso
PC = Número de pacientes con infección nosocomial adquirida en el propio centro en el
presente ingreso o en uno previo
TP = Total de pacientes con infección nosocomial de cualquier tipo (propia del centro o
importada)
Prevalencia % = N pacientes con infección multiplicado por 100 dividido por el
respectivo N de pacientes hospitalizados [Intervalo confianza 95%]
46
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo XVI. Distribución de los pacientes hospitalizados según
factores de riesgo de tipo extrínseco y prevalencia de pacientes con
infección nosocomial (incluye la intervención quirúrgica) - Estudio
EPINE 2013 [57]
Total
Catéter
vascular
central
Catéter
vascular
periférico
Catéter
urinario
Intubación
Intervención
quirúrgica
Total
%
PPI
Prev.
%
PC
Prev.
%
TP
Prev.
%
5.887
10,52
1.097
18,63
1.262
21,44
1.363
23,15
38.512
68,69
1.971
5,12
2.583
6,71
2.982
7,74
10.669
19,03
1.222
11,45
1.394
13,07
1.598
14,98
1.362
2,43
367
26,95
395
29,00
425
31,20
15.975
28,49
1.486
9,30
1.786
11,18
1.881
11,77
56.067
100,00
2.922
5,21
3.703
6,60
4.236
7,56
N
pacientes
N = Número de pacientes hospitalizados con datos válidos
% = Porcentaje sobre el número de pacientes con datos válidos
PPI = Número de Pacientes con infección nosocomial adquirida en el presente ingreso
PC = Número de pacientes con infección nosocomial adquirida en el propio centro en el
presente ingreso o en uno previo
TP = Total de pacientes con infección nosocomial de cualquier tipo (propia del centro o
importada)
Prevalencia % = N pacientes con infección multiplicado por 100 dividido por el
respectivo N de pacientes hospitalizados [Intervalo confianza 95%]
47
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo XVII. Hospitales y pacientes estudiados, cifras totales y
prevalencia de infecciones según el tamaño de hospital (N) Estudio EPINE 2013 [57]
Hospitales
Tamaño
del
hospital
Total
Pacientes
Infecciones
N
%
N
%
IN
Adq.
Ing.
IN
Adq.
Ctr.
IN
IN
Impor.
IC
281
100,
00
56.067
100,
00
3.250
4.078
4.677
1.266
10.573
48,04
10.834
19,32
438
575
764
299
2.158
33,45
20.105
35,86
1.043
1.356
1.533
433
3.840
18,51
25.128
44,82
1.769
2.147
2.380
534
4.575
Hospital
200
o
135
menos
camas
Hospital
de 201 a
94
500
camas
Hospital
de más
52
de 500
camas
Pacientes
Tamaño del
hospital
Total
Hospital 200
o
menos
camas
Hospital
de
201 a 500
camas
Hospital de
más de 500
camas
Infectados
IN Adq. IN Adq.
IN
N
%
IINN
Ing.
Ctr.
Impor.
56.067 100,00 2.922
3.703
4.236 1.197
9.887
10.834
19,32
412
543
718
285
2.052
20.105
35,86
947
1.243
1.390
404
3.622
25.128
44,82
1.563
1.917
2.128
508
4.213
IN Adq. Ing.: Infecciones Nosocomiales Adquiridas en el Presente Ingreso
IN Adq. Ctr.: Infecciones Nosocomiales Adquiridas en el Propio Centro
IINN: Infecciones Nosocomiales
IN Impor.: Infecciones Nosocomiales existentes al ingreso o importadas
IC: Infecciones Comunitarias
48
IC
FACULTAD DE ENFERMERÍA
GRADO EN ENFERMERÍA
Trabajo Fin de Grado
Anexo XVIII- Tabla V. Puntos clave para desarrollar estudios de
prevalencia e incidencia [31]
Puntos clave en el proceso de vigilancia de las tasas de
incidencia y prevalencia de Infección Nosocomial
 Vigilancia activa (estudios de prevalencia e incidencia).
 Vigilancia focalizada (orientada hacia un sitio, una unidad, una
prioridad).
 Investigadores debidamente instruidos.
 Metodología normalizada.
 Tasas ajustadas según el riesgo para fines de comparación.
49
Descargar