2a edición el 11 de marzo del 2004 En esta edición Biografía Modernismo y Alfonsina Poemas y Enlaces Su biografía : (1892-1938) Alfonsina, la tercera hija de padres italianos, nació el 29 de mayo en 1892 en Sala Capriascha, Suiza . Su madre estudió música y fue profesora y su padre fue un hombre de negocios. Cuando ella tenía 4 años, su familia se trasladó a Argentina por el problema de los negocios y alcoholismo de su padre. Este fue el principio de la tormenta que era su vida. A los diez años Alfonsina lavaba platos y atendía las mesas en Café Suiza, su padre segundo negocio que fracasó. Cuando su padre murió en 1906, su familia estaba en la miseria. Después de trabajar de costurera y de actriz con el circo, ella decidió en ser profesora en enseñanza primaria en Coronda. Empezó a enseñar en Rosario pero con poco tiempo decidió a moverse a Buenos Aires, dónde su hijo nació en 1912. (Se comenta la razón que ella se movió a Buenos Aires fue porque ella se encontró que estaba embarazada, ella huyó de Rosario para salvar la reputación del hombre). Años después, sus primeras obras fueron publicadas en Buenos Aires. Ella escribió continuamente hasta el año 1935. En este año supo que tenía cáncer del seno. Razón de tener varias operaciones sin éxito , ella pasó los últimos dias de su vida muy deprimida. En el 20 del octubre de 1938 , escribió Voy a Dormir, lo envió a la publicadora del periódico, La Nación, Con la ironia, l público leyendo su poema, ella se suicidaba en el mar. Alfonsina Storni, junto a la uruguaya Delmira Agustini y a la chilena Gabriela Mistral, es una de las tres poetas más importantes de la generación posmodernista. Alfonsina tomó una posició bien fuerte en el posmodernismo en cual a la posición de la mujer. Interesantemente , ella tomaba los imágenes de la mujer en la poesía de Darío y Lugones y los usaba para confrontar todos las creencias estereotipicas de las mujeres. Sus poemas Tu me quieres blanca y Tu Dulzura son ilustraciones de Tu me quieres blanca Tu me quieres alba, Me quieres de espumas Me quieres de nacar. Que sea azucena Sobre todas, casta. De perfume tenue, Corola cerrada Ni un rayo Filtrado me haya, Ni una margarita Se diga mi hermana. Tu me quieres nivea, Tu me quieres blanca, Tun me quieres alba. Tu que hubiste todas Las copas a mano, De frutos y mieles Los labios morados. Tu que en el banquete Cubierto de pampanos Dejaste las carnes Festejando a Baco. Tu que en los jardines Negros del Enga~o Vestido de rojo Corriste al Estrago. Tu que el esqueleto Conservas intacto No se todavia Por cuales milagros, Me pretendes blanca (Dios te lo perdone) Me pretendes casta (Dios te lo perdone) Me pretendes alba! Huye hacia los bosques; Vete a la montanha; Limpiate la boca; Vive en las caba~as Toca con las manos La tierra mojada; Alimenta al cuerpo Con raiz amarga; Bebe de las rocas; Duerme sobre escarcha; Renueva tejidos Con salitre y agua; Habla con los pajaros Y levate al alba. Y cuando las carnes Te sean tornadas, Y cuando hayas puesto En ellas el alma Que por las alcobas Se quedo enredada, Entonces, buen hombre, Pretendeme blanca, Pretendeme nivea, Pretendeme casta. Tu dulzura Camino lentamente por la senda de acacias, me perfuman las manos sus pétalos de nieve, mis cabellos se inquietan bajo céfiro leve y el alma es como espuma de las aristocracias. Genio bueno: este día conmigo te congracias, apenas un suspiro me torna eterna y breve... ¿Voy a volar acaso ya que el alma se mueve? En mis pies cobran alas y danzan las tres Gracias. Es que anoche tus manos, en mis manos de fuego, dieron tantas dulzuras a mi sangre, que luego, llenóseme la boca de mieles perfumadas. Tan frescas que en la limpia madrugada de Estío mucho temo volverme corriendo al caserío prendidas en mis labios mariposas doradas.