PLANES DE ORDENAMIENTO TERRITORIAL Por el docente Luis Carlos Arenas Arias El Plan de Ordenamiento Territorial es un instrumento de planificación que ayuda a regular, controlar y prever el crecimiento ordenado urbano y rural de un municipio. A partir de la Ley 388 de 1997 se determina la elaboración participativa de planes, planes básicos y esquemas de ordenamiento territorial, según sea el tamaño de la población y se definen como el instrumento técnico y normativo que contiene el conjunto de objetivos, directrices, políticas, estrategias, metas, programas, actuaciones y normas, adoptadas para orientar el desarrollo físico del territorio y la utilización del suelo. La revisión del Plan de Ordenamiento Territorial es un procedimiento de carácter técnico y jurídico establecido por la Ley 388 de 1997, con el fin principal de actualizar, modificar o ajustar aquellos contenidos que deben desarrollar la construcción efectiva del modelo de ocupación de un municipio. Las administraciones municipales, a través de la oficina de planeación, deben emprender la tarea de revisar, ajustar o reconsiderar el Plan de Ordenamiento Territorial, concebido o aprobado por Acuerdo por los Concejos Municipales, con relación a sus componentes: componentes general, urbano y rural, y normas complementarias de mediano y largo plazo. El ejercicio de revisión es técnico político y jurídico, de autonomía municipal, prepara la planificación articulada del territorio con la región a la cual pertenece cada municipio y toma decisiones de los aprovechamientos, usos del suelo: urbano, de expansión urbana, y rural y responsabilidades urbanísticas. En los procesos de formulación, adopción e implementación de los POT, se ha detectado que las mayores dificultades se concentran en (i) procesos de conceptualización y formulación de los planes; (ii) procesos de evaluación para concertación de los temas ambientales ante las CAR; (iii) procesos de presentación ante los Concejos Municipales para aprobación y posterior adopción; y, (IV) puesta en marcha e implementación de los POT. Dificultades detectadas en los Municipios Los planes de ordenamiento territoriales presentan algunas dificultades, pero en muchas oportunidades de deben a la negligencia para reunir a los integrantes del Consejo Consultivo De Ordenamiento, escogidos del Consejo Territorial De Planeación o al poco estudio que han dedicado los elegidos, a los planes de ordenamiento territorial, o también al desconocimiento de la normatividad y la interpretación técnica que se debe aplicar. 1. Etapa de formulación: El tema se concibió como un requisito para la obtención de recursos de inversión y de licencias de construcción, y no como una herramienta de planeación del desarrollo territorial de largo plazo. La capacidad técnica de los profesionales asignados y/ contratados por los municipios en términos generales fue baja, y no se ajusta a los procesos de planeación requeridos. La información requerida para elaborar el diagnóstico fue desactualizada y en algunos casos insuficiente, lo cual impidió una adecuada valoración para la toma de decisiones. La infraestructura tecnológica es insuficiente para elaborar la información requerida por los procesos. En este mismo sentido, el acceso a información oficial, constituyó una dificultad generalizada. Desde el punto de vista financiero no se apropiaron los recursos necesarios por parte de los municipios en las vigencias requeridas. La falta de conocimiento y manejo del tema, se reflejó en contrataciones inadecuadas que entorpecieron los procesos técnicos originando problemas legales. 2. Etapa de concertación: En esta etapa, la principal debilidad presentada en los municipios, se originó en la falta de continuidad en los procesos de ajustes solicitados por las CAR omitiéndose en algunos casos sus recomendaciones. 3. Etapa de adopción: Se expidieron por parte de Concejos municipales y Alcaldes, actos legislativos y administrativos que no consultaron el interés general y en otros casos desconocieron las resoluciones de concertación de las CAR. 4. Etapa de implementación: No se han implementado los instrumentos previstos por las disposiciones legales vigentes en aspectos de gestión y financiación del suelo, y de seguimiento y control de los POT. Dificultades detectadas en las Gobernaciones 1. En la etapa de formulación, concertación y adopción. 2. Se evidencia falta de continuidad en lo que respecta al apoyo técnico, financiero y seguimiento a los procesos. Dificultades detectadas en los procesos de participación ciudadana 1. En la etapa de formulación: Baja participación por conflictos socio – políticos. Los mecanismos de divulgación fueron débiles consecuencia, desinformación en la comunidad. generándose en 2. En la etapa de adopción: Baja participación de los Consejos Territoriales de Planeación en los procesos de ajustes. Frente a la problemática encontrada, se propone el desarrollo de acciones conjuntas con el Congreso de la República en los siguientes aspectos: Apoyar y Fortalecer institucionalmente a las oficinas de planeación en Gobernaciones y Municipios, para que las mismas cuenten con el personal adecuado y suficiente, así como la infraestructura tecnológica adecuada para el manejo y desarrollo de los instrumentos de desarrollo territorial. Fortalecer en las entidades competentes, el ejercicio de funciones de seguimiento y control. Reglamentar el artículo 112 de la Ley 388 de 1997 con el propósito de establecer tiempos perentorios y responsables del manejo del expediente municipal fundamental para realizar el seguimiento y control de la implementación y consolidación de los POT. Además de las algunas dificultades mostradas, los municipios se ven enfrentados a la realización de los planes especiales: de espacio público y equipamiento, vial, de patrimonio, los planes de vivienda de interés y los planes territoriales de los centros poblados; lo que demuestra que las personas que deben dirigir las oficinas de planeación deben ser muy bien capacitadas técnica y jurídicamente para que los territorios se desarrollen armónicamente con los planes de desarrollo.