B o l e t í n E s p e c i a l E l v e t e r i n a r i o p i n a r e Ñ o Editorial: El 25 de Octubre cumplió 125 años uno de los grandes veterinarios cubanos: Doctor Don Antonio Martínez Arredondo. Alicia Alonso, Prima Ballerina Assoluta e hija de Don Antonio, se trasladó hasta Pinar del Río junto a toda su familia para participar en el Homenaje que el Consejo Científico Veterinario de la provincia le brindó en esta ciudad a su padre. Alicia, que cumple en Noviembre 90 años, estuvo la semana anterior en Sevilla, Huelva y Jerez de la Frontera, de donde partió hacia Londres, en donde también recibió los homenajes que el mundo le tributa en su año jubilar. De regreso a Cuba, Alicia ha asistido diariamente, durante una semana, a los homenajes organizados para ella por instituciones oficiales y por la sociedad civil. Pero el cansancio no la detuvo, su proverbial tesón y el amor inmenso que siente por su padre, hicieron que fuera a Pinar del Río, a disfrutar del merecido homenaje que allí se le tributó al Doctor Arredondo y cuyas vivencias contiene este Boletín Especial. Dr. José A. Quintana de la Cruz Dr.Don Antonio Martínez Arredondo Consejo Editorial EDITOR Dr. Jesús Moreno Lazo EDITOR CONTRIBUYENTE Dr. José Antonio Quintana DISEÑO Ing. Ramón Veloz Castillo Contactos: Calle Martí # 37, Pinar del Río C.P. 20100 Teléfonos: (53)(48)776766; 753922 E-mail: prvd@infomed.sld.cu ccvpr@princesa.pri.sld.cu El Dr. Jesús Moreno Lazo, Presidente de la Asociación Consejo Científico Veterinario de Pinar del Río leyó las Palabras de Apertura del Homenaje al Dr. Antonio Martínez Arredondo: Compañeras y compañeros: El Consejo Científico Veterinario de Cuba, Filial Pinar del Río, les brinda la más sincera y cálida acogida. Bienvenidos, Alicia Alonso y Pedro Simón, sus familiares y acompañantes. Bienvenidos todos los presentes. Gracias por su amable compañía. El acto al que le hemos convocado es parte de una costumbre nuestra. Estamos habituados a rendir tributo a los profesionales y técnicos de nuestra rama que se lo merecen. No improvisamos homenajes ni reconocemos superficialidades. Exaltamos lo que tiene luz propia. Tenemos un proyecto de Memoria Histórica que ha reconocido una decena de ilustres cubanos y extranjeros, que se desempeñan en las Ciencias Veterinarias. Este de hoy es uno de esos tributos impostergables. Hay merecimiento y valía en la carrera de vida del homenajeado de este día, el Dr. Don Antonio Martínez Arredondo. Hace un tiempo leí que “la vida no se mide por el número de veces que tomamos aliento, sino por los extraordinarios momentos que nos lo quitan”. Creo que hoy es uno de esos momentos. Muchas gracias El Dr. José Antonio Quintana de la Cruz leyó el Elogio a Don Antonio Martínez Arredondo, en este Boletín presentamos un extracto del mismo: ORACIÓN A DON ANTONIO Señoras y señores: A la solemnidad de este acto históricamente necesario nos convoca la gratitud, que es muchas veces el tuétano generoso e inadvertido de la solidaridad humana. No serán el elogio o el tributo, que los habrá, lo que presida la oración de este modesto panegirista sino el agradecimiento; sí, porque el Consejo Científico Veterinario de Pinar del Río quiere agradecer a Don Antonio Martínez Arredondo haber nacido un día como hoy y vivir durante 63 años una vida limpia, laboriosa y útil, que prestigia y enorgullece a la profesión veterinaria y acrecienta el fondo moral de la nación cubana. Contribuir al conocimiento de la noble vida del Dr. Arredondo nos hará más fuertes y justos porque, actualizarla, traerla a convivir con las nuestras todavía sujetas a pecado y a error, nos regala el acompañamiento de una lección de ética profesional y humana. Hacemos esta contribución desde la humilde provincia que él favoreció un día con sus buenos deseos de mejoramiento, y con los modestos medios de una institución pequeña, convencidos de la veracidad de la sentencia martiana: Para rendir tributo ninguna voz es débil. De prosapia sobresaliente entre los colonizadores españoles de la Florida, su principal ascendiente fue Fernando de la Masa Arredondo, el que en el siglo XVIII fue holgado terrateniente, adelantado comerciante y ayudante de campo del gobernador. Desgajada de este núcleo inicial en América, una parte de la familia emigró a Cuba en el siglo XIX, y asentada con tesón y laboriosidad, logró un status de clase media alta. Fruto de la unión de Doña Blanca de la Masa Arredondo y Don Antonio Martínez, es el hombre al que rendimos tributo y que nació el 25 de octubre de 1885, hace 125 años. La formación profesional del Dr. Don Antonio Martínez Arredondo fue sistemática y profunda. Los conocimientos que adquirió no solo fueron variados sino de una gran calidad. Se graduó de Dr. en Medicina Veterinaria en 1909. Tenía entonces 23 años. Fue en Estados Unidos donde estudió, en los colegios “Millesville State Normal School Penn” y “Mc Killip Veterinary Collage”, en el último de los cuales obtuvo el título que revalidó inmediatamente en la Universidad de la Habana. Espero haberos persuadido de por qué es ésta una loa de obligada gratitud. Agradezco, en nombre de los colegiados en esta organización; en nombre de su Presidente, Dr. Moreno Lazo y en el mío propio, al Dr. Martínez Arredondo habernos permitido contar con la referencia de excelencia profesional y el paradigma ético que constituyen su útil existencia. Agradezco, además, al Dr. Arredondo, ser el padre amado de Alicia Alonso aquí presente, que admirada por el mundo, es parte de la conciencia y de la memoria de la nación cubana y orgullo de nuestra América. Gracias Dr. Arredondo, muchas gracias por permitirnos honrarnos en este cumpleaños suyo, porque como sentenciara lapidariamente nuestro héroe nacional: Honrar, honra. Gracias. Dr. José Antonio Quintana de la Cruz 25 de octubre de 2010 reconocimiento al dr. antonio martínez arredondo Como parte del Homenaje por el 125 Aniversario del natalicio del Dr. Antonio Martínez Arredondo se hizo entrega a Alicia Alonso, su hija menor, de un Diploma de Reconocimiento de los veterinarios pinareños a tan ilustre Médico Veterinario cubano por su labor en las Ciencias Veterinarias. MIEMBRO DE HONOR A ALICIA ALONSO En el Homenaje realizado al Dr. Antonio Martínez Arredondo, y cumpliendo un acuerdo de la Directiva de nuestra Asociación, se entregó la Distinción de Miembro de Honor del Consejo Científico Veterinario de Pinar del Río, a Alicia Alonso. El mismo expresa la voluntad de los veterinarios de la provincia de Pinar del Río, Cuba, contenida en las siguientes consideraciones: CONSIDERANDO Que Alicia Alonso, Prima Ballerina Assoluta, es hija del veterinario cubano ilustre, Don Antonio Martínez Arredondo, ejemplo de profesional culto y laborioso, investigador incansable y hombre de bien que fundó en vida sólidos principios éticos. CONSIDERANDO Que Alicia Alonso, por c o n o c i d o s, sus méritos del mundo vive desde hace mucho tiempo en el corazón del pueblo cubano, y es una gloria de la América nuestra. Al acto de Homenaje, e invitados por el Consejo C ientíf ico Ve ter inar io asistieron personalidades de la cultura pinareña como la escritora Nersys Felipe, el pintor Pedro Pablo Oliva, el también pintor Humberto Hernández , entre otros. Fueron leídos dos poemas: “Caballos andaluces”, de María Martínez Olivares y “Diálogo con Martí, de Juan Gualberto Pérez Mena. Asimismo, los artistas líricos Yariel Sierra y Marbelys González deleitaron a los invitados con las piezas Nosotros de Pedro Junco; Romance del Cafetal de Ernesto Lecuona y finalizaron a dúo con Damisela encantadora de Ernesto Lecuona, acompañados al piano por la artista Nixi Díaz Pozo. En la actividad le fueron entregadas a Alicia un conjunto de fotos de clases, exámenes y ensayos de la estancia de Alicia en Pinar del Río por parte de una ex-alumna, la Sra. Teresita García Portilla PALABRAS FINALES Al concluir la actividad, y visiblemente emocionada, la Prima Ballerina Assoluta, Alicia Alonso expresó: “Unas palabras, es muy difícil decirlas después de haber oído palabras tan bellas como las que se han dicho hoy, tan profundas y tan humanas. Así que me voy a tomar el gran honor de poder, siendo la hija más pequeña de mi padre, que éramos cuatro hermanos, yo soy la más pequeña, que estoy segura que él estaría muy contento de ver a la niña, la más pequeña, dando las gracias a todos en su nombre. Ha sido una tarde inolvidable, y les doy las gracias en nombre de mi padre, que nunca quiso ser reconocido, pero siempre nos habló desde chiquitos de la Cenicienta, Pinar del Río. Siempre decía: esa es la Cenicienta de Cuba y no puede ser. Mi padre estaría orgulloso de ver que ya no es Cenicienta, que ya es una Princesa. Muchas gracias”