AUTODETERMINACIÓN. Una exploración filosófica Comentarios a este artículo de José Mª Ripalda “El perjuicio, la queja, la reclamación imposible de satisfacer puebla el fondo de toda autodeterminación”. ¡Tremenda osadía la mía! al comprometerme a comentar este artículo en clave filosófica, sin tener idea de filosofía. Trataré de dirigir la discusión marcando los aspectos más sobresalientes, por lo definitorios o por lo polémicos de este trabajo. Autodeterminación significa, etimológicamente, marcarse uno mismo los límites, delimitarse. Es un concepto ideológico, que admite visiones desde el derecho (puede entenderse desde un punto de vista interno; de qué forma el pueblo quiere ser gobernado, o internacional; si ese pueblo quiere ser gobernado por un Estado o no), desde la política, desde la historia, desde la filosofía... Como concepto es un derecho individual, que nace en la Ilustración frente al Antiguo Régimen y reivindica el ejercicio de su capacidad política 1. No se puede entonces aplicar de forma automática a la realidad capitalista/neoimperialista/globalizadora de hoy, como si fuera una pegatina. Manzini, en 1851: “Toda nación tiene derecho a organizarse en un estado soberano e independiente”. Para Marx, la autodeterminación es una herramienta más para acabar con la opresión burguesa y en ese sentido apoya la autodeterminación y la lucha nacionalista de Irlanda, porque favorece a las clases obrera de Inglaterra – debilita su burguesía- y de Irlanda y la corriente solidaria fortalece a los dos proletariados. Marx no usa ese término, que aparece por 1ª vez en 1875 y es atribuible a Engels. Esa noción individualista va transformándose en otra más colectiva, se usa como una alternativa a la opresión de los pueblos, “sirve para aludir a proyectos políticos constituyentes no previstos en los actuales Estados”. Dice Ripalda que esto se debe a una aportación del Romanticismo que dotó de una especie de personalidad individual a las colectividades; “los pueblos como individualidades colectivas sujetos del derecho de autodeterminación”. El derecho de autodeterminación de los pueblos nace en consonancia con las reivindicaciones burguesas de creación de estados nacionales, y lo hace en un contexto de lucha anticolonial y de liquidación de los viejos imperios en el período de entreguerras. Lo malo es que esas nuevas delimitaciones de los nuevos Estados se hicieron en las mesas de negociación de los tratados de paz y sin tener en cuenta los conglomerados de diversas realidades 1 Aunque ya Bartolomé de las Casas lo defendía para los indios a mediados del XVI, en un contexto de quejas contra las encomiendas castellanas, en su libro De regia potestate o derecho de autodeterminación. Autodeterminación -1- autodeterminables a su vez. La misma Revolución de Octubre fue una revolución rusa, que pese a las buenas intenciones, no tuvo en cuenta en la práctica los derechos de autodeterminación de otros pueblos no rusos 2. La misma palabra pueblo, que aparece inevitablemente, tiene significados diferentes; hasta las Revoluciones burguesas del XVIII pueblo se definía en oposición a la aristocracia (nosotros, el pueblo...). La Revolución francesa asimila, hace sinónimos los dos términos “pueblo” y “nación” y en este sentido se siguen usando en la Europa de 1848. También el XIX y en el marco de los movimientos socialistas, “pueblo” pasa a tener un significado más clasista. “Actualmente el derecho internacional reconoce como ‘pueblo’ a cualquier entidad que se quiera autodenominar así con voluntad política”. La Carta de las NNUU proclama el derecho de autodeterminación de los pueblos como fundamento de las relaciones interestatales. Seguimos en un contexto de descolonización posterior a la II Guerra. Este derecho también es recogido en la Asamblea Gral. de la ONU 1951/52 (Resolución 545), la de 1954 (res. 837), la de 1960 (res. 1514), la Convención de DDHH de 1966, en el Pacto Internacional de Derechos Económicos Sociales y Culturales de 19-1266 (ratificado por el Estado Español el 13-4-67) 3, en la Resolución de la Asamblea General de la ONU de 24-10-70... Según estas declaraciones los Estados quedan obligados a respetar el derecho de los pueblos a decidir su estatus político, incluso su independencia y la unión con otro Estado y no les está permitido a los Estados utilizar la fuerza para impedírselo, también se reconoce el derecho a la resistencia y a solicitar ayuda internacional. Todo esto acompañado de realidades político-económicas que impedirán el desarrollo de ese derecho: Es de suponer que en una sociedad democrática el ejercicio de ese derecho no llevará a la secesión. Se excluye el uso de la violencia para defender este derecho. La intervención exterior tiene muchos límites, sobre todo por el riesgo de ruptura de un equilibrio en los mercados. Las normas internacionales garantizan la validez de las fronteras existentes, pero las declaran cambiables. Choca además con la mayoría de las Constituciones de todos los Estados que tienden a la homogeneización y no al respeto de sus minorías (Arts. 2 4 y 3 de la Constitución española). La autodeterminación es ahora una formulación teórica como lo es la de los DDHH. En una situación democrática no se da el reconocimiento de ese derecho de autodeterminación de forma plena, porque no se considera violación/delito el 2 Lenin define la autodeterminación como “la separación estatal de las colectividades de nacionalidad extraña” y admite “la formación de un Estado nacional independiente”. 3 “Todos los pueblos tienen el derecho de libre determinación. En virtud de este derecho establecen libremente su condición política y proveen a su desarrollo económico, social y cultural. 4 La propuesta de enmienda de EE a este artículo era: “La Constitución se fundamenta en la pluralidad del Estado Español, la solidaridad entre los pueblos, el derecho a la autonomía de las regiones y naciones que lo integran y el derecho a la autodeterminación de estas últimas”. Autodeterminación -2- hecho de tener la ciudadanía de un Estado. “La heterodeterminación representa ... un daño sin expresión jurídica”. Pero además esos daños pueden generar violaciones que sí perseguirá el Estado, que se convierte en juez y parte; legisla, detiene, juzga. Ya no basta con reclamar ese derecho de autodeterminación, hay que precisarlo; quién, qué (la independencia nacional no es la única expresión del derecho de autodeterminación), cuándo... Hoy la autodeterminación va unida a un proceso constituyente, que lo es de entendimiento y negociación y eso implica “un largo proceso constituyente y una constante renovación contra la mitología de la nación eterna”. Como bien dice en la pág. 11, hablar de autodeterminación no sólo es hablar de independencia –sino también, de nodependencia-, sino del dominio de lo político sobre la imposición de la fuerza. La autodeterminación es también otro nombre para la democracia; ésta designaría el modo de funcionamiento de lo político y aquella se referiría a su momento constituyente. En el marco de los Estados actuales, aparece el antagonismo autodeterminación/centralismo y frecuentemente referencias a la realidad EEUU: Por su modelo –uno más- de articulación federal de su Estado y por la imposición de un tipo concreto de mayoría –WASP, blanco, anglo-sajón, protestante (ahora habría que añadir, heterosexual, hombre, empleado...)-, que tuvo que dotarse de un imaginario patriótico yanqui sin olvidar ese otro imaginario original; irlandés-americano, italo -americano... La Constitución española se pacta en el 78, después de una dictadura no derrotada, con el dictador muerto de viejo en la cama, con unos pactos entre la izquierda y la derecha y los “poderes fácticos”, y se hace a puerta cerrada, sin consulta popular y se vota en Referéndum con unos resultados escasos 5, aunque en las Cortes fuese aprobada por amplia mayoría: SI NO ABSTENCIONES AUSENCIAS CONGRESO 325 6 14 5 SENADO 226 5 8 9 Esta Constitución tiene tres aspectos especialmente escabrosos: La forma del estado. Monarquía/República Confesionalidad/Laicidad Identidad nacional/Diversidad En la articulación del Estado de las Autonomías, el Duque (Dux) de Suárez jugó una genial baza, poniendo en pie de igualdad a las 17 Comunidades que se articularon –en algunos casos se inventaron-; un “café para todos” que poco tenía que ver con la realidad política e histórica. Las distintas comunidades fueron igualadas por abajo. 5 En el Referéndum votaron SI el 87’9% de una participación del 67’1% del censo, lo que da sólo un 59% del mismo. Autodeterminación -3- El Derecho de Autodeterminación fue presentado en aquellas Cortes por Euzkadiko Ezquerra (Bandrés y Letamendía) y fue rechazado por amplia mayoría 6. En esta 2ª Transición el Estado Español debe recuperar, de acuerdo con el autor, el nivel de sus perdedores, las entidades que fueron: la antiespaña, la mora, la judía, la protestante, la hereje, la india, la burguesa, la revolucionaria, la nacionalista-no-española... La situación actual cambia porque el escenario es distinto, ya no funciona el “binomio Estado-individualismo liberal”, aparece Europa que se podría articular a partir de unidades distintas a las actuales, aunque la definición definitiva de lo que se dio en mal-llamar “Constitución Europea”, arroja un jarro de agua fría a aquellas esperanzas de los documentos previos que hablaban de una Europa de los pueblos 7. El derecho de autodeterminación tiene que pensarse y articularse en un nuevo contexto. José Luis Losada Ruiz Abril 2005 Algunos libros consultados: Bartolomé de las Casas; De regia potestate o derecho de autodeterminación; Madrid, CSIC, 1969 Javier Ruipérez; Constitución y Autodeterminación; Ed. Tecnos, Madrid, 1995 Jordi Solé Tura; Autonomía y autodeterminación. Conferencia pronunciada el 12-3-90 en Deusto V.I. Lenin; Sobre el derecho de las naciones a la autodeterminación Julen Guimón; El derecho de autodeterminación: el territorio y sus habitantes; Univ. Deusto, Bilbao, 1995 6 “El derecho de autodeterminación de los pueblos es, como se sabe, el derecho de los pueblos a establecer libremente su condición política, pudiendo, en consecuencia, optar entre seguir formando parte del estado o separarse pacíficamente de éste y constituir un estado independiente”. 7 Los arts. I-1 (Título I) y I-58 (Tít. IX) nos hablan sólo de Europa de los Estados y que son éstos los que pueden formar parte de la Unión Europea, aunque se compromete a garantizar los estatutos de autonomía reconocidos por los Estados miembros. Autodeterminación -4-