EXAMEN DE LA TEMPORADA DE HURACANES ANTERIOR Informes sobre los huracanes, las tormentas tropicales, las perturbaciones tropicales y las inundaciones asociadas con esos fenómenos durante 2011 (Presentados por Canadá) RESUMEN DE LA TEMPORADA DE CICLONES DE 2011 En 2011, ocho ciclones tropicales penetraron en la zona de respuesta del Centro de Huracanes de Canadá (CHC), aunque cuatro de ellos pasaron bordeando su límite. El Centro emitió boletines sobre ocho tormentas. Los cuatro episodios principales fueron el huracán Irene que, el 29 de agosto, irrumpió en Quebec desde el norte de New Hampshire convertido en tormenta post tropical; el huracán Katia, cuya trayectoria pasó el 10 de septiembre a una gran distancia mar adentro al sur de Terranova; el huracán María que llegó a Terranova el 16 de septiembre con las características de una intensa tormenta tropical; y el huracán Ophelia, que alcanzó la zona de respuesta con la fuerza de una tormenta de categoría 3 y ganó Terranova, el 3 de octubre, en forma de una fuerte tormenta post tropical. De esas cuatro tormentas que, en 2011, afectaron al área de pronósticos de Canadá, Irene fue la que tuvo mayores consecuencias. Los vientos racheados y las fuertes lluvias causaron problemas en Quebec, provocando crecidas de los ríos y dañando carreteras y puentes. Los vientos quebraron ramas de árboles, ocasionando cortes de electricidad. Katia fue esencialmente un fenómeno de fuerte oleaje que produjo un espectacular mar de fondo a lo largo de la costa del Atlántico de Nueva Escocia. María y Ophelia cayeron directamente sobre Terranova, aunque no causaron daños importantes y fueron mucho menos graves que el huracán Igor del año anterior. RESUMEN DE LOS BOLETINES Noticias emitidas sobre huracanes (WOCN3X/4X CWHX) Número de tempestades incluidas en los boletines 2011 2010 2009 2008 2007 2006 2005 2004 2003 99 79 37 90 48 93 87 104 113 8 4 2 6 4 5 7 8 8 A continuación se facilita un resumen de los cuatro principales episodios de fenómenos meteorológicos tropicales que afectaron al territorio canadiense en 2011 y que representan el 85% de las noticias sobre huracanes que el CHC emitió durante la estación correspondiente. El 15% restante se refiere a tormentas más débiles, como es el caso, entre otros, de los nueve informes publicados sobre la tormenta tropical Gert a mediados de septiembre. Esta tormenta se disipó antes de alcanzar el área de pronósticos marinos de Canadá. El huracán Irene La tormenta El huracán Irene alcanzó dos puntos del territorio estadounidense: el primero en Carolina del Norte y el segundo al oeste de Long Island, cerca de la ciudad de Nueva York. Fue una tormenta muy importante y dañina que afectó a numerosos habitantes del este de Estados Unidos. Tras tocar tierra, el huracán se fue debilitando rápidamente, transformándose primero en tormenta tropical y, el 29 agosto, en tormenta post tropical cuando llegó al norte de New Hampshire. El centro de la depresión se desplazó entonces a lo largo de la frontera entre Quebec y Maine, al norte de la región de Gaspe, en Quebec, y se adentró en el Labrador. En el momento en que Irene se estaba transformando en tormenta extra tropical, se formó un marcado frente cálido en el valle del Río San Lorenzo que indujo un aumento de los vientos y de las precipitaciones en la región. Condiciones Las precipitaciones más importantes causadas por Irene en Canadá se observaron al sur de Quebec (véase el cuadro a continuación), en la región montañosa de Charlevoix, al norte del río San Lorenzo, en donde alcanzaron 150 mm. En Montreal cayeron cerca de 65 mm de lluvia, en su mayor parte en un período de cinco horas del día 28 de agosto. Al este del recorrido de la tormenta, al norte de Nuevo Brunswick, se registraron más de 90 mm de agua y, de forma general, sobre Nueva Escocia, menos de 25 mm. Los vientos más fuertes soplaron del noreste, en dirección suroeste, a lo largo del Río San Lorenzo hacia Montreal en donde se registraron unas rachas de cerca de 80 km/h. Estos vientos se asociaron con el frente cálido septentrional de Irene y alcanzaron una velocidad superior a 100 km/h en algunos lugares expuestos de la isla (véase el cuadro a continuación). Al este de la trayectoria de la tempestad, en las Provincias Marítimas, se registraron ráfagas de viento de cerca de 90 km/h que generaron condiciones de mar picado en los puertos locales de la región. Estación Ile D’Orleans, QC Ile Aux Grues, QC Pointe De L’Islet, QC Summerside, PEI Moncton, NB Yarmouth, NS Montreal, QC Fredericton, NB QC= Quebec NB= Nuevo Brunswick Velocidad viento (km/h) 113 (92 sost.) 104 (78 sost.) 98 96 93 93 78 78 del Estación Charlevoix, QC Thetford Mines, QC Sherbrooke, QC Doaktown, NB Montreal, QC Precipitaciones (mm) 150 109 107 89 66 PEI= Isla del Principe Eduardo NS= Nueva Escocia Efectos En determinados lugares del sur de Quebec hubo inundaciones que provocaron corrimientos de tierra en algunas carreteras causando directamente una víctima mortal cuando el desbordamiento de una gran alcantarilla en la calzada arrastró a un vehículo dentro de un río al noreste de Montreal. Los vientos tumbaron varios árboles en Quebec y Nuevo Brunswick, dejando a miles de personas sin electricidad. En ciertas localidades, un mar turbulento y un fuerte oleaje ocasionaron problemas menores a lo largo de la costa. Al sur de Nuevo Brunswick, las olas esparcieron piedras y otros desechos en una carretera cercana a una playa muy conocida. (Imagen de la izquierda): Las inundaciones ocasionadas por Irene causaron daños en la carretera 138 Saint-Simeon, Quebec (Marika Wheeler/CBC) (Imagen de la derecha): Daños provocados por la caída de árboles en Charlottetown, Isla del Príncipe Eduardo (The Guardian) Alertas y noticias informativas El CHC emitió 26 boletines excepcionales de noticias (WOCN31 CWHX) sobre este fenómeno. En las Provincias Marítimas se publicaron avisos de tormenta tropical. En Quebec, cuando se transformó en tormenta post tropical, se difundieron con regularidad alertas sobre los vientos y lluvias que iban a afectar a la región. En el área del valle de San Lorenzo, la evolución se hizo más patente debido a la formación de un frente cálido que se combinó con los efectos topográficos del viento. En la mayor parte de las aguas canadienses del Atlántico y en la región del río San Lorenzo, se difundieron avisos de vientos violentos y huracanados. Labores de coordinación y comunicación El CHC organizó teleconferencias diarias a las 3.30 de la tarde ADT, para las oficinas meteorológicas operacionales del Canadá oriental, entre las cuales figuraban el Centro de Predicción de Tormentas de Quebec, el Centro de Meteorología Aeronáutica de Canadá y el Centro de Predicción de Tormentas del Atlántico, así como otros grupos como el de meteorólogos de preparación ante avisos de Quebec y del área canadiense del Atlántico. Cada día, a las 9.30 de la mañana ADT, se celebraron reuniones de planificación con los jefes departamentales de las regiones del Atlántico y de Quebec del Ministerio del Medio ambiente de Canadá para asegurar la coordinación de las diversas actividades. Los meteorólogos de preparación ante avisos impartieron diariamente sesiones informativas dirigidas a la Sécurité Civile du Quebec y a los directores de emergencias de las Provincias Marítimas, tanto a escala federal como provincial. El huracán Katia La tormenta El huracán Katia se formó el 30 de agosto sobre las islas de Cabo Verde, y se desplazó hacia el noroeste durante al menos 9 días, intensificándose su fuerza hasta llegar a alcanzar la categoría 4 durante un breve período del día 6 de septiembre. A lo largo de una trayectoria persistente hacia el noroeste, este huracán generó grandes olas que rompieron sobre la costa del Atlántico en Nueva Escocia y sobre el litoral meridional de Terranova. El 9 de septiembre, Katia giró bruscamente hacia el noreste y, el 10 de septiembre, su velocidad aumentó con rapidez al pasar al sur de Terranova y empezar su evolución extratropical. Condiciones Se calculó que la presión más baja observada sobre las aguas canadienses fue de 955 milibares durante la última etapa de la evolución extratropical. Aunque la cubierta de nubes asociada con Katia envolvió la mayor parte de las Provincias del Atlántico, las lluvias se mantuvieron lejos, en alta mar. En la isla de Sable (a unos 300 km al norte del centro de Katia) se registraron unas precipitaciones de sólo 20 mm, aunque la cifra hubiese probablemente oscilado entre 60 y 120 mm si la trayectoria del centro del huracán hubiese alcanzado tierra. Las aguas en alta mar, al sur de las provincias del Atlántico, fueron las más afectadas, con unas olas de más de 10 m de altura. El viernes 9 de septiembre, un fuerte oleaje azotó la costa atlántica de Nueva Escocia (véase la fotografía a continuación) y, el 10 de septiembre, esas condiciones se extendieron a la costa meridional de Terranova. Detalles de las boyas canadienses desplegadas en alta mar: Boya Laurentian Fan 44141 Tail-of-the-Bank 44140 SW Grand Banks 44138 East Scotia Slope 44137 Halifax Harbour 44258** Velocidad máxima de viento sostenido/de ráfaga* (en nudos) 46/59 63/M 36/47 36/46 19/23 Altura significativa de ola (m) 7.7 7.6 6.6 6.0 2.7 Altura máxima de ola (m) 12.3 11.6 13.6 9.9 4.8 * Un viento sostenido se mantiene durante una media de 10 minutos a una altura de 5 metros sobre la superficie del agua. Una ráfaga es un pico de 5-s a más de 10 minutos de intervalo cerca del valor más alto de la hora observada. **Debido principalmente al oleaje. Olas producidas por Katia en Lawrencetown, Nueva Escocia –9 de septiembre de 2011 (Chris Fogarty) Efectos Las fuertes olas que se desplazaban al norte del huracán arrastraron desechos hasta la orilla; ello fue la única consecuencia conocida en el territorio terrestre. Se informó de al menos un incidente en la costa meridional de Nueva Escocia, cuando una persona se vio atrapada por la corriente de resaca en una playa local. Alertas y noticias informativas El CHC emitió 22 boletines excepcionales de noticias sobre este fenómeno. No se transmitieron avisos para el territorio terrestre excepto un anuncio especial de niveles de agua anormales en la costa de la zona oriental de Terranova, a causa de un fenómeno oceanográfico conocido (un efecto de "marea rápida") que había ocasionado inundaciones en el pasado. Afortunadamente, aunque las oscilaciones previstas de los niveles de agua tuvieron lugar, no ocurrieron en marea alta. Se publicaron alertas de tormenta y vientos huracanados para las aguas de alta mar del territorio canadiense. Labores de coordinación y comunicación La Oficina meteorológica de Terranova y de Labrador situada en Gander y el Centro de Huracanes de Canadá en Darthmouth, mantuvieron una estrecha comunicación mientras Katia estuvo presente en aguas de alta mar. Se cuidaron particularmente las noticias sobre el nivel del agua en la costa, para asegurarse de que se utilizaba una terminología clara para transmitirlas al público. Los meteorólogos de preparación ante avisos trabajaron en coordinación con los funcionarios de la gestión de emergencias, tanto a escala federal como provincial. El huracán María La tormenta María se formó el 7 de septiembre en medio del Atlántico tropical y empezó avanzando hacia el oeste para luego desviarse hacia el noroeste, bordeando las islas del Caribe entre el 10 y el 12 de septiembre. Siendo todavía una tormenta tropical se dirigió hacia el norte, al oeste de las Bermudas y alcanzó el grado de huracán el 15 de septiembre en la latitud 35ºN. Aceleró entonces su progresión hacia el noroeste y, transformado en una intensa tormenta tropical, tocó tierra la tarde del 16 de septiembre en la zona del cabo St. Mary y Argentia de la península de Avalon, en Terranova. Al salir de Terranova evolucionó a tormenta post tropical, tras lo cual se fusionó con una importante depresión no tropical que se había ido intensificando al sureste del Labrador. El 17 de septiembre, a raíz de esta depresión combinada, una tormenta, realmente mucho más violenta, afectó al norte de Terranova y del Labrador. Imagen GOES VIS de María al acercarse a Terranova Condiciones Se calculó que la presión central de María al tocar tierra era de 985 milibares. Durante la tormenta, los vientos más fuertes se orientaron hacia la derecha de su trayectoria y al estar bastante lejos de su centro cuando tocó tierra no llegaron a afectar al territorio terrestre. La corriente en chorro máxima del viento se dio justo en alta mar, hacia la zona oriental de la Península de Avalon. Poco antes del anochecer, los restos del ojo de María cubrieron la mayor parte de la provincia de Placentia Bay, llegando hasta el área de Clarenville. Se observó que los vientos se debilitaron y el cielo se despejó parcialmente a medida que el "ojo" pasaba, y que, una vez el centro se hubo alejado, la velocidad del viento aumentó ligeramente y volvieron las nubes. La tormenta representaba claramente un riesgo potencial para la región insular. En alta mar, a unos 180 km al este de la trayectoria de la tormenta, los vientos soplaron con fuerza de huracán durante al menos dos horas. Las imágenes de satélites indicaban que el radio del viento máximo pasó a unos 50 km al este del cabo Spear, la zona más oriental de la isla. Debido al rápido desplazamiento de María y al tiempo limitado para que el agua se acumulase en las bahías, no se presentó amenaza de marea de tempestad. Los datos sobre vientos y precipitaciones figuran en el cuadro siguiente: Estación (NL= Terranova y Labrador) Cape Pine, NL* Cape Race, NL Grates Cove, NL Argentia, NL St. John’s, NL Ráfagas de viento (km/h) 103 100 (67 sost.) 87 85 80 Estación St. Lawrence, NL Burgeo, NL Argentia, NL Bonavista, NL St. John’s, NL Precipitaciones (mm) 63 61 30 25 13 * Observaciones privadas o voluntarias Boya SW Grand Banks 44138 Nickerson Bank 44251 Laurentian Fan 44141 Banqureau Bank 44139 East Scotian Slope 44137 Tail-of-the-Bank 44140 Velocidad máxima de viento sostenido/de ráfaga* (en nudos) 52/70 38/49 43/58 30/38 27/35 30/37 Altura significativa de ola (m) Altura máxima de ola (m) 6.4 5.9 5.9 5.4 5.3 3.4 10.5 12.2 9.8 8.8 8.6 6.6 * Un viento sostenido se mantiene durante una media de 10 minutos a una altura de 5 metros sobre la superficie del agua. Una ráfaga es un pico de 5-s a más de 10 minutos de intervalo cerca del valor más alto de la hora observada Efectos Debido a que los vientos más fuertes se quedaron en alta mar, las consecuencias de María fueron relativamente menores. Sólo hubo algunos informes sobre objetos ligeros que el viento arrancó de propiedades privadas. Sorprendentemente, tratándose de un sistema con fuerza huracanada que tocó tierra, el abastecimiento de energía eléctrica no sufrió interrupciones. Alertas y noticias informativas El CHC produjo 18 boletines excepcionales de noticias sobre este fenómeno. Se transmitió un aviso de huracán para la parte meridional de la Península de Avalon en Terranova y se difundió una alerta de tormenta tropical para el resto de la península así como para las penínsulas de Burin y de Bonavista. Los vientos fuertes no se materializaron en tierra, y los avisos se cancelaron rápidamente una vez que los predictores comprobaron que los vientos más violentos se mantendrían mar adentro. Se emitieron avisos de tormenta y de vientos huracanados para las regiones de pronósticos marinos situadas cerca de la trayectoria de María, al este de la misma. Las condiciones de huracán se materializaron al suroeste del distrito de los Grandes Bancos. Labores de coordinación y comunicación La Oficina meteorológica de Terranova y de Labrador situada en Gander y el Centro de Huracanes de Canadá en Darthmouth, mantuvieron una estrecha comunicación. Durante los días anteriores a la llegada de la tormenta, a través de WebEX, la Jefatura del CHC y los meteorólogos de preparación ante avisos impartieron sesiones informativas sobre medios técnicos. Los días previos a María, meteorólogos de preparación ante avisos participaron en las reuniones informativas ordinarias de los directores de emergencias para Terranova. En el transcurso de la tarde del 15 de septiembre, el Centro Nacional de Huracanes (NHC) modificó la predicción de una tormenta tropical leve y pronosticó un huracán que tocaría tierra directamente en Terranova. Tras un debate en profundidad entre el NHC y el CHC se decidió emitir un aviso de tormenta tropical y una alerta de huracán para la Península de Avalon, con un tiempo de antelación de aproximadamente 21 horas. Durante el resto del episodio, los centros de huracanes siguieron encargándose de la coordinación de alertas y avisos. El huracán Ophelia La tormenta Ophelia se formó el 21 de septiembre en medio del Atlántico tropical y, durante la semana siguiente, fue avanzando hacia el noroeste en forma de tormenta tropical. No alcanzó la fuerza de huracán hasta el día 30 de septiembre, cuando se intensificó y desvío su trayectoria hacia el norte. De hecho, Ophelia fue creciendo rápidamente y, en 24 horas, pasó de tener una fuerza de tormenta tropical a una intensidad de categoría 3. El 2 de octubre, la tormenta siguió reforzándose hasta transformarse en huracán de categoría 4, con una presión de 940 milibares, mientras se dirigía al noreste de Bermudas. El huracán compacto penetró en la zona de respuesta del CHC con una categoría 3 fuerte para luego debilitarse rápidamente a medida que atravesaba las temperaturas más frías de las aguas oceánicas. Su fuerza disminuyó con suficiente rapidez como para ser inferior a la de un huracán cuando alcanzó la Península de Avalon de Terranova, cerca de la comunidad de Placentia. El centro de la tormenta pareció volverse a formar a aproximadamente 50 km al norte del punto donde tocó tierra, y luego se dirigió hacia el norte de la ciudad de St. John’s. Condiciones Se calculó que la presión en el centro de Ophelia cuando tocó tierra era de 988 milibares. En ese momento, la velocidad máxima de los vientos era de aproximadamente 55 o 60 nudos (100-110 km/h), a unos 50 km mar adentro. Se observaron ráfagas de viento de 100 km/h a lo largo de las franjas costeras meridionales cercanas a las penínsulas de Avalon y Burin. Al interior, se informó de ráfagas de unos 80 km/h. No se trata de velocidades de viento inhabituales en Terranova. Cuando pasó el ojo de la tormenta los vientos disminuyeron considerablemente, incrementándose luego desde el oeste, con rachas de cerca de 90 km/h una vez el centro se hubo alejado. En el cuadro a continuación figuran los datos principales sobre vientos y precipitaciones. Se observó que cerca del centro de la tormenta y a su derecha las precipitaciones fueron ligeras, tal y como suele ocurrir con una evolución extratropical. No lejos de la izquierda de la trayectoria, llegaron rápidamente unas lluvias fuertes que acumularon cerca de 50 mm en tres horas. Mar adentro, el eje de vientos máximos se extendió desde el área de predicciones situada en la región de la desembocadura del San Lorenzo (Laurentian Fan) hasta el norte de los Grandes Bancos. Esos vientos generaron importantes olas que se propagaron hacia el norte hasta la costa de la región de Avalon en donde alcanzaron una altura de 5 a 10 m. Tal y como ocurrió dos semanas y media antes con María, la marea de tempestad no representó un factor significativo. La lectura más alta de un mareógrafo se obtuvo en Argentia durante la marea baja y fue de 50 cm. Estación (NL= Terranova y Labrador FR= France) Ráfagas de viento (km/h) Estación Precipitaciones (mm) Cabo Race, NL St. Pierre/Miquelon, FR St. John’s, NL Isla de Sagona, NL 98 (67 sost.) 98 (68 sost.) 78 (61 sost.) 96 (85 sost.) Bonavista, NL San Lorenzo, NL Parque de Terra Nova, NL St. John’s, NL Gander, NL 62* 58* 47 27 27 * Pico de una hora de precipitaciones algo superiores a 20 mm y cantidad total en un período de tres horas de aproximadamente 50 mm Boya Laurentian Fan 44141 Banqureau Bank 44139 Nickerson Bank 44251 East Scotian Slope 44137 SW Grand Banks 44138 Velocidad máxima de viento sostenido/de ráfaga* (en nudos) 52/70 43/57 36/46 23/29 34/42 Altura significativa de ola (m) 13.8 11.9 8.6 7.3 6.7 Altura maxima de ola (m) 21.8 22.2 15.1 12.1 15.0 * Un viento sostenido se mantiene durante una media de 10 minutos a una altura de 5 metros sobre la superficie del agua. Una ráfaga es un pico de 5-s a más de 10 minutos de intervalo cerca del valor más alto de la hora observada. Efectos Los efectos de Ophelia se hicieron sentir primero en forma de inundaciones a causa de las lluvias. La región que padeció los aguaceros más importantes fue la Península de Burin, la cual ya había sufrido duramente el año anterior con la embestida del huracán Igor. Un canal de drenaje se desbordó en la ciudad de Belleoram, arrastrando ríos de piedras, barro y agua al interior de algunos hogares y causando graves daños a un par de edificios. En esa comunidad, se declaró el estado de emergencia durante un breve período. En la imagen a continuación, se observa una gran tubería desenterrada por el importante flujo de agua aportado por Ophelia. Durante el huracán anterior, Igor, en ese mismo lugar se presenció una grave inundación. (Imagen de la izquierda): Gran tubería desenterrada en la Península de Burin – Cynthia Farell-Southern Gazette (Imagen de la derecha): Río de piedras arrastradas por una crecida repentina en Belleoram – Real Policía Montada del Canadá, División “B”, Terranova y Labrador Se aconsejó a los curiosos atraídos por la importante marea de tempestad en el océano a lo largo de la línea costera meridional, que se mantuvieran suficientemente alejados de las zonas en donde rompían las olas, ya que el oleaje y la resaca de marea resultantes eran peligrosos. Hubo algunos desechos en primera línea de playa y, al sur de la Península de Avalon, algunas inundaciones en las zonas propensas a éstas como a lo largo de una playa o en el muelle de la comunidad de Saint Vincent. Alertas y noticias informativas El CHC produjo 18 boletines excepcionales de noticias sobre este fenómeno. Mantuvo un pronóstico conservador al respecto y no emitió nada "más alarmante" que un aviso de tormenta tropical para la Península de Avalon en Terranova. Sin embargo, se difundieron alertas de huracán para el área de predicción en alta mar. Asimismo, se transmitieron avisos de precipitaciones en las zonas más gravemente afectadas como la Península de Burin. Labores de coordinación y comunicación Tal y como ocurrió con el huracán María, la Oficina meteorológica de Terranova y de Labrador y el Centro de Huracanes de Canadá mantuvieron una estrecha comunicación. El CHC insistió en que, en lo referente a este episodio, era importante no exagerar los avisos de vientos. No hay duda de que este enfoque conservador fue acertado, pues los vientos de Ophelia amainaron hasta llegar a ser inferiores a los criterios convencionales aplicados para las alertas de viento en la isla (ráfagas de 100 km/h o más). ______________