24 de marzo: multitud y maniobra del Gobierno Correpi - La Haine :: 28/03/2006 Desde los despachos oficiales soñaban abrir el balcón de la Rosada para que Bonafini y Carlotto compartieran -junto a Kirchner por supuesto- el micrófono y la velada petrificada en el 76. En el pasado, y por supuesto nada en el presente. Es realmente triste el papel de comparsa legitimadora del Gobierno que han hecho los organismos como Madres Línea Fundadora, Abuelas, el Serpaj de Pérez Esquivel, Familiares de Detenidos Desaparecidos o la APDH. Fue una multitud. A pesar del feriado inventado por el gobierno y aprovechado por los operadores turísticos, más de 100.000 personas marcharon contra la dictadura militar, contra el golpe de estado, contra el terrorismo de estado, y contra las formas actuales de represión. Hace meses que el gobierno intenta aprovecharse del simbolismo de la fecha para montarse sobre el aniversario, siempre en su impostura de considerarse "el gobierno de los DD HH". Desde los despachos oficiales soñaban abrir el balcón de la Rosada para que Bonafini y Carlotto compartieran -junto a K por supuesto- el micrófono y la velada petrificada en el 76. En el pasado, y por supuesto nada en el presente. La dignidad de los que participamos en el Encuentro 30 Años - Memoria, Verdad y Justicia evitó que la jornada de lucha y denuncia popular se convirtiera, como quería Kirchner, en un acto oficialista. Todos los intentos (demasiados para reseñarlos aquí) fracasaron ante el acuerdo consensuado de más de 300 organizaciones de que repudiar la dictadura silenciando al mismo tiempo la represión actual y sus causas es de hipócritas y cómplices del gobierno. Por eso el gobierno tuvo que recurrir a sus históricas mañas del apriete, la amenaza y las patotas en la porpia Plaza de Mayo. Cuando vieron que era imposible hacer el que llamaban "acto unitario" con Carlotto y Bonafini como oradoras centrales, quisieron armar otro acto donde a las tres de la tarde, y para eso salieron a convocar sus huestes en el Obelisco. Tampoco tuvieron éxito, por lo que desplegaron un grupo de choque junto al palco en la Plaza y desde temprano ocuparon la plaza con columnas de la inexistente "Juventud Peronista", la misma que acompañó a Menem, Ruckauf y hasta Patti, y de otras organizaciones integradas al partido de gobierno. Las consignas centrales de la convocatoria, además de repudiar el golpe y exigir cárcel común a los genocidas, restitución de la identidad de los chicos secuestrados y anulación de los indultos, denunciaban la represión actual en todas sus formas, la continuidad de las políticas que generan hambre y exclusión y la cooperación del gobierno con el imperialismo, sin olvidar el reclamo por la amnistía y la libertad de los presos políticos. Esas consignas fueron consensuadas en las reuniones plenarias del Encuentro hace más de un mes, como lo publicamos en el Boletín del 12 de febrero, donde se anunciaban los seis puntos centrales luego redactados definitivamente. Del mismo modo, ya entonces se había acordado actualizar, con los hechos coyunturales de relevancia, el documento del año pasado, tan crítico al gobierno como éste. Era público y notorio lo que se discutía en las reuniones organizativas, al punto que la oficialista Hebe de Bonafini dijo anunció que no iba al acto porque "le iban a dar con un palo al gobierno". Las fracasadas presiones del gobierno por apropiarse de una jornada que siempre ha reunido el repudio a la represión del pasado, pero también la del presente, señaladas en Boletines anteriores, fueron creciendo al punto que el mismo 24 por la mañana, el operador oficial Humberto Tumini, de Patria Libre, llamó telefónicamente a la compañera Adriana Calvo, de la AEED, coordinadora del Encuentro, para anunciarle que "no iban a permitir un acto opositor". La maniobra de apriete -tema del que tanto sabe el partido de gobierno- no terminó con el amenazador llamado. Como decíamos, una patota del partido oficial se alistó frente al palco, hostigando a los locutores y compañeros de la organización del acto, para tratar de impedir que se leyera el documento que, contrariamente a lo que salieron a mentir algunos, conocían y demasiado bien, pues su discusión y redacción se hizo, lahaine.org :: 1 como corresponde a un espacio de coordinación de organizaciones, en reuniones públicas y abiertas a las que en todos los casos concurrieron los representantes de los organismos defensores del gobierno y de las propias organizaciones políticas que lo integran, como el PJ, Patria Libre o la Agrupación Martín Fierro. No toleraron -porque los autoritarios son ellos- el consenso abrumador que hubo para realizar un acto que dijera la verdad sobre la situación actual de nuestro país, y por eso recurrieron a su herramienta favorita, el apriete. Es realmente triste el papel de comparse legitimadora del gobierno que han hecho los organismos como Madres Línea Fundadora, Abuelas, el Serpaj de Pérez Esquivel, Familiares de Detenidos Desaparecidos o la APDH. Todos participaron de las reuniones en que se consensuaron las consignas. Todos conocían el contenido del documento, habían tenido la plena oportunidad de discutirlo en cada reunión de la comisión redactora, donde perdieron ampliamente el debate, y precisamente por eso habían ya acordado que no lo firmarían como no lo firmaron en varios otros 24 de marzo-, aunque sí avalaban las consignas y participarían de la marcha. Por eso es tan hipócrita que Estela Barnes de Carlotto diga de las organizaciones del Encuentro que "no transitamos el camino democrático". Lo auténticamente antidemocrático es su actitud de negarse a reconocer que perdieron la discusión, porque su posición progubernamental fue ínfima minoría en el espacio 30 Años. A quienes participamos del Encuentro Memoria, Verdad, Justicia desde su origen no nos sorprendieron las posturas de estos organismos, que en las once oportunidades anteriores, con matices y variantes, en esencia siempre tuvieron la línea de defender al gobierno de turno, fuera el que fuera, intentando evitar la denuncia de los hechos represivos posteriores a 1983 y la continuidad de la política proimperialista y de explotación. Hasta hubo años en que -sin trascender demasiado las causas a la prensa- se rompió el acuerdo, hubo dos documentos, o hasta dos actos. Lo novedoso este año es la maniobra explícita del gobierno, usando a los organismos conciliadores por un lado, y a sus propios grupos de choque por otro. Hacemos propias las palabras de la compañera Adriana Calvo a Página 12: "Es falso que las Abuelas de Plaza de Mayo no conocían el documento", "Esto es una maniobra del Gobierno, porque hace un mes y medio está intentando que este acto fracase y hacer uno propio". Lo que se vivió en el escenario, fue un boicot del gobierno, que puso en evidencia su naturaleza patotera y represora, para que no se escuchara el documento en cuya redacción CORREPI -como bien señala La Nación del sábado 25- se enorgullece de haber participado protagónicamente junto a las organizaciones hermanas. Patético fue que hasta Nora Cortiñas tuviera que aclarar que nadie le cortó el sonido a su compañera Martha Vázquez, así como autoritarios no somos los que durante tres meses escuchamos, debatimos, y ganamos por aplastante mayoría las discusiones. Autoritarios fueron los que tiraron botellazos a quienes leían el documento en el escenario, los que amenazaron, los que quisieron impedir nuestra libre expresión. Autoritario es el que está dispuesto a cualquier cosa para que no lo critiquen. Inmediatamente, y en lugar de destacar la ponderable participación del pueblo en la movilización, desde la prensa más canalla, tanto la reaccionaria como la autodenominada progre, se empezó a construir - para quedar bien con el gobierno- el panegírico de las "acalladas" Madres y Abuelas, erigiéndolas en víctimas de una maniobra, en realidad perpetrada por el gobierno que ellas defienden contra el conjunto de las organizaciones convocantes. Atrás salieron el gobierno y sus amanuenses. Desde Radio 10, cuya concesión fue prorrogada graciosamente por K, Aníbal Fernández nos calificó como "izquierda siniestra". Siniestro es él, que fue ministro de Ruckauf y puntero de Duhalde. El ex cavallista Alberto Fernández dijo que fue "criticable usar una fecha de tanto dolor para los argentinos para lanzar consignas de esa naturaleza", como si fuera posible repudiar las violaciones a los DDHH sin mencionar a los que son torturados hoy en las Heras, en cualquier cárcel y comisaría del país, a los fusilados por el gatillo fácil y a los presos políticos. Se equivocan los que creen que los desaparecidos son de las Madres, de las Abuelas o de los Hijos. Los desaparecidos son del pueblo. Tampoco el dolor es exclusivamente de aquellos a los que los compañeros estaban ligados por sangre. Y si alguien quiso usar políticamente el dolor y aprovechar la fecha para lanzar consignas, fueron los que sepultan en el pasado las violaciones a los DDHH, y propagandizan al gobierno, silenciando sus crímenes cotidianos y avalando su política de explotación. http://www.correpi.lahaine.org/ lahaine.org :: 2 _______________ http://www.lahaine.org/mundo.php/24_de_marzo_multitud_y_maniobra_del_gobi lahaine.org :: 3