Informe especial: Debate sobre la Estrategia 2020 en la Cumbre Europea de primavera 2010 Maciej Kucharczyk Contexto El pasado 3 de marzo, la Comisión Europea publicó una comunicación titulada “Europa 2020, una estrategia europea inteligente, sostenible e inclusiva” que va a ser la sucesora de la Agenda de Lisboa. Junto con esta comunicación, la Comisión ha publicado un análisis completo de las respuestas recibidas por parte de los agentes implicados y por parte del público general con ocasión de la consulta abierta realizada a finales de 2009. Las propuestas recogidas en la estrategia europea 2020 siguen en cierta medida las recomendaciones de las ONGs sociales, entre las que se encuentra GE, para dar más peso a la dimensión social y que ésta tenga cabida en todos los objetivos de la estrategia. AGE acoge especialmente bien la introducción de medidas encaminadas a: 1) reducir a 20 millones el número de personas que se encuentran en situación de pobreza y 2) alcanzar una tasa de empleo del 75% antes de 2020. Al mismo tiempo, consideramos importante que estos objetivos se traduzcan en medidas concretas que acaben con la discriminación por motivos de edad y género y lamenta que esta estrategia no suponga una respuesta global al cambio demográfico. Acción de AGE Con ocasión de la publicación de la Comisión y con carácter previo al Consejo Europeo de primavera (la llamada Cumbre europea) celebrada los días 25 y 26 de marzo, AGE junto con otras ONGs sociales europeas dieron comienzo a una acción de presión a los gobiernos con el objetivo de reiterar sus respectivas recomendaciones en respuesta a la consulta inicial sobre “Europa 2020”. Enviamos una carta a Herman Van Rompuy, nuevo Presidente permanente del Consejo Europeo y a los Jefes de Estado y de gobierno en vísperas de la Cumbre europea de marzo. En esa carta, volvimos a hacer un llamamiento para que la propuesta de estrategia 2020 adopte la iniciativa europea sobre el envejecimiento activo y el plan de acción contra la pobreza y la desigualdad. Nuestros miembros consideran que estos dos elementos son básicos para afrontar el cambio demográfico mejorando el crecimiento económico europeo y para mejorar la cohesión social global en todos los Estados miembro reduciendo la pobreza en la próxima década. Por otra parte, creemos que la iniciativa sobre envejecimiento activo ayudaría a los gobiernos a coordinar los proyectos y las medidas políticas relativas al cambio demográfico y a promover la implicación del creciente número de personas con más de 50 años en la economía. Debates del Consejo de primavera Los debates del Consejo de primavera quedaron eclipsados por las dificultades económicas que está atravesando en estos momentos la Eurozona y por el puesto central que ha ocupado el caso de Grecia así como el tema del cambio climático en el contexto del fracaso político de la conferencia de Copenhague celebrada en diciembre de 2009. En cualquier caso, con vistas a la adopción de la estrategia 2020, los gobiernos han mantenido una serie de conversaciones con el Presidente de la Comisión Europea, Manuel Barroso a este respecto. El resultado es que el establecimiento de objetivos en materia de pobreza ha sido pospuesto a la próxima Cumbre europea en junio, mes en el que España finaliza su presidencia de turno de la Unión, aunque el principio contó con un gran apoyo del Presidente Van Rompuy. El reto será, si el objetivo se mantiene, acordar el nivel exacto de implantación y elegir el indicador más relevante para medir su progreso. Aparte del objetivo de reducir la pobreza, fueron aprobados otros cuatro de los presentados por la Comisión: 75 % de tasa de empleo para las personas de entre 20 y 64 años. inversión del 3% del PIB europeo en I+D. consecución de los objetivos 20/20/20 en materia de clima y energía (incluido el de reducir las emisiones un 30% si las condiciones lo permiten). dejar por debajo del 10% la tasa de abandono escolar y conseguir que el 40% de las generaciones de jóvenes tengan un título superior. En lo referente a las cuestiones relacionadas con el envejecimiento, el Consejo Europeo, desafortunadamente, no ha propuesto un único marco para coordinar la aplicación de las diversas iniciativas contempladas en las propuestas de la estrategia 2020 en materia de personas mayores y envejecimiento. Lamentamos la oportunidad perdida para proponer una estrategia precisa y homogénea para aprovechar el envejecimiento de la población que se producirá en la próxima década. La estrategia 2020, a día de hoy, hace referencia a los mayores de una forma no coordinada y presenta el envejecimiento de la población como problema en vez de como oportunidad y deja pasar la ocasión de movilizar a los mayores y de construir unas reformas adecuadas como por ejemplo: Reconocer de la tensión adicional a la que se ven sometidos los sistemas de bienestar a causa de la combinación de la reducción de la población activa y el crecimiento de la tasa de jubilados. Evaluar la adecuación y sostenibilidad de la protección social y de los sistemas de pensiones para identificar las formas de garantizar el acceso a los sistemas de asistencia sanitaria en el marco de la iniciativa “Plataforma europea contra la Pobreza”. Mejorar el acceso y las oportunidades del mercado laboral a lo largo de todo el ciclo vital para promover un crecimiento inclusivo basado en el empleo y la cohesión social y territorial. Prestar atención a las bajas y persistentes tasas de empleo de mujeres y personas mayores teniendo en cuenta que sólo está activa el 46% de las personas de entre 55 y 64 años. Promover nuevas formas de conciliar la vida laboral con las políticas de envejecimiento activo para mejorar la igualdad de género en el marco de la iniciativa “Una agenda para la creación de nuevas habilidades y empleos”. Mejor acceso a los recursos de cuidado de niños y de personas dependientes, ya que es un elemento importante para promover un mercado laboral más inclusivo y mejorar la participación en él de todos los ciudadanos. Promover el envejecimiento activo de la población para obtener una mejor cohesión social y una mayor productividad además de combatir la pobreza y la exclusión social y reducir las desigualdades en materia de salud. Completar el área de investigación europea desarrollando una agenda de investigación estratégica centrada en retos como los que plantea la seguridad energética, el transporte, el cambio climático y la eficiencia de los recursos así como la salud y el envejecimiento. Desarrollar las nuevas tecnologías para que los mayores puedan vivir de forma independiente y permanecer activos en la sociedad, que debe ser uno de los principales objetivos de la “Colaboración para la Innovación Europea” entre la UE y los Estados miembro. Incluir a los mayores en la “Agenda Digital Europea” a través de su implicación para promover el acceso a Internet a todos los ciudadanos europeos mediante acciones de apoyo a la alfabetización digital y a su accesibilidad. Próximos pasos En este momento es difícil evaluar el impacto que van a tener estos compromisos y si no son sólo buenas intenciones de cara a la galería. Consideramos que todos estos aspectos son indispensables para afrontar el cambio demográfico, pero esta lista está lejos de ser completa. “Europa 2020” no hace referencia, por ejemplo, a la promoción de la solidaridad intergeneracional como herramienta efectiva para el desarrollo sostenible ni como la respuesta al cambio demográfico. Los miembros de AGE esperan que los gobiernos adopten la estrategia 2020 en junio y que propongan entonces unas pautas precisas para políticas integradas que van a suponer la clave para la implantación efectiva de las acciones propuestas y para conseguir los objetivos planteados. Más información sobre la contribución de AGE al Consejo Europeo de primavera y sobre sus conclusiones en: Carta de AGE al Consejo Europeo de primavera, 25-26 de marzo: http://www.age-platform.eu/en/age-policy-work/social-inclusion/lastest-news/975-letter-to-springcouncil-on-europe-2020-strategy-25-26-march Conclusiones del Consejo Europeo de los días 25 y 26 de marzo: http://www.consilium.europa.eu/uedocs/cms_data/docs/pressdata/en/ec/113591.pdf. --------------------------------------------------- Entrevista con Csaba ŐRY, miembro del Parlamento Europeo por la delegación del EPP de Hungría 1. ¿Qué instrumentos políticos podría incluir la Estrategia Europea 2020 para aprovechar el potencial que el envejecimiento de la población puede suponer para el crecimiento europeo? 2. Según los objetivos marcados en material de empleo, el 75% de la población de entre 20 y 64 años debería estar trabajando en 2020. ¿Cómo cree que puede contribuir el Parlamento europeo a aumentar el empleo entre los mayores en Europa? “En respuesta a sus preguntas yo, en mi calidad de miembro del Parlamento Europeo, coordinador de EPP en el Comité para el Empleo y los Asuntos Sociales, voy a apoyar la creación de empleo para los mayores en Europa mediante el establecimiento de unas condiciones para la Estrategia 2020 ya que el 75% propuesto por la Comisión es algo demasiado general. El grupo EPP apoya el objetivo del 75% pero considera que se debería dividir en dos, para los jóvenes y para los mayores. La tasa de empleo entre los mayores debe aumentar ya que eso daría lugar a varios resultados positivos como por ejemplo que los jóvenes puedan aprender y beneficiarse de la experiencia y conocimiento de los mayores. Basada en el desarrollo de la población, la demanda de trabajadores no queda satisfecha con los que acceden hoy en día al mercado laboral. No obstante, no debemos olvidar que las personas mayores necesitan un horario de trabajo flexible por su situación de salud y que para facilitar su jubilación hay que prever una transición fluida. Otro factor decisivo será la formación continua, necesaria para que los mayores puedan adecuarse a las exigencias del mercado laboral. Es una lástima que el Programa de Trabajo 2010 de la Comisión Europea no incluya el tema del futuro de los trabajadores mayores y se centre únicamente en la protección de los sistemas de pensiones. La Comisión Europea pretende presentar un libro verde sobre los sistemas de pensiones en un futuro próximo. Se trata de barajar posibilidades para garantizar la sostenibilidad y adecuación de las pensiones teniendo en cuenta los patrones de envejecimiento y movilidad en Europa.”