www.fbbva.es DEPARTAMENTO DE COMUNICACIÓN NOTA DE PRENSA Un estudio analiza cómo afectan los cambios ambientales a las tortugas de todo el mundo que llegan a las costas españolas El 80% de los ejemplares de la llamada tortuga boba que recalan en la costa mediterránea proceden de Florida El reciente vertido de crudo en el Golfo de México podría sentirse en las costas españolas, bien porque las tortugas lleguen contaminadas o porque si se resiente la población de tortuga boba podría crecer la de medusas, que es su alimento preferido La tortuga boba es una especie amenazada: la supervivencia de los huevos ha descendido drásticamente y la subida de las temperaturas por el cambio climático provoca un desequilibrio en su población porque nacen más hembras que machos La Fundación BBVA colabora en este proyecto en el que durante seis años han trabajado un equipo de investigadores españoles, mexicanos y colombianos Madrid, 9 de septiembre.- A lo largo de seis años, un equipo internacional de investigadores ha recogido muestras de unos 4.000 ejemplares de Caretta caretta, la llamada tortuga boba, en el litoral mediterráneo español; en Baleares; Andalucía; Canarias y en diversas playas de desove del Mediterráneo y el Atlántico. El análisis de sus genes ha proporcionado el primer mapa detallado del origen de estas tortugas que recalan en España. Uno de los principales hallazgos es que la costa mediterránea es uno de los puntos de encuentro más importantes de todo el planeta para tortugas que llegan de todo el mundo. "Hemos encontrado una diversidad mayor de la esperada", dice Adolfo Marco (Estación Biológica de Doñana, CSIC), investigador de este proyecto en el que colabora la Fundación BBVA. “Las costas españolas, tanto mediterráneas como atlánticas, han resultado ser zonas de extraordinaria importancia para juveniles de tortuga boba procedentes de playas alejadas miles de kilómetros, tanto de América como del Sureste de Europa y el Oeste de África”. Además, los investigadores comprenden ahora mejor las rutas migratorias de las tortugas. También han estudiado el estado de conservación de importantes zonas de desove y de alimentación de tortugas marinas en el Atlántico y el Mediterráneo, y han sentado las bases científicas para mejorar los programas de protección. Del Golfo de México a Baleares, Andalucía y Canarias Los investigadores han descubierto que en Baleares, Canarias y Andalucía el 80% de las tortugas han nacido en las costas de Florida y zonas del Golfo de México. Al norte de la Comunidad Valenciana y en Cataluña se congregan las tortugas originarias del Mediterráneo Oriental. Otra zona de origen es el archipiélago de Cabo Verde. Estos resultados implican que con las tortugas marinas pueden llegar a las costas españolas contaminantes procedentes del gran vertido de crudo de estos meses en el Golfo de México. Otra posible consecuencia de esta catástrofe ecológica podría ser que si la población de tortugas se viera mermada podría aumentar la presencia de medusas, que son su alimento predilecto. Las tortugas marinas nacen en las playas de anidación y luego recorren miles de kilómetros, hasta llegar a costas donde se alimentarán y crecerán durante una veintena de años. Ya adultas, regresarán a las playas donde nacieron para poner sus huevos. A los científicos les impresiona su gran fidelidad a las playas de anidación, un comportamiento que aumenta su vulnerabilidad, ya que la destrucción o alteración de las playas de origen es un gran un riesgo para estas tortugas. Así, los resultados de esta investigación, publicados recientemente en varias revistas especializadas (Conservation Genetics;....), corroboran la importancia de conservar el litoral español para proteger a la tortuga boba. Nuevos marcadores genéticos para identificar la procedencia El trabajo, en el que participan también científicos mexicanos y colombianos, se ha basado en el análisis de marcadores genéticos que identifican a cada población de tortugas. Los investigadores han usado marcadores ya conocidos, en ocasiones mejorando su precisión, y también han hallado marcadores nuevos. Eso hace posible ahora saber de dónde viene casi cualquier tortuga boba hallada en aguas españolas, con un 95% de certeza. Respecto a las rutas migratorias, los investigadores han descubierto que el estrecho de Gibraltar juega un papel fundamental: "Actúa como una barrera asimétrica en el intercambio de tortugas marinas entre el Atlántico y el Mediterráneo", explica Marco. "La corriente superficial que fluye hacia el Este facilita la entrada en el Mediterráneo occidental de multitud de tortugas atlánticas; pero, al mismo tiempo, impide que regresen al Atlántico hasta que su caparazón haya superado los 40 centímetros de longitud". Del mismo modo, las tortugas nacidas en el Mediterráneo no pueden salir al Atlántico hasta que alcanzan ese tamaño corporal mínimo. Eso explica el escaso número de tortugas nacidas en el Mediterráneo oriental que llega hasta Andalucía. Alta mortalidad de los huevos Además de los estudios genéticos, este proyecto de la Fundación BBVA analiza la influencia de la contaminación marina y otros cambios ambientales globales sobre la fecundidad, el desarrollo embrionario y la supervivencia de varias especies de tortugas, tanto con hembras reproductoras y huevos en las playas de anidación, como con juveniles en zonas de alimentación del litoral español. En las últimas décadas la tasa de supervivencia de los huevos ha disminuido drásticamente en todo el mundo. A escala global las tortugas marinas se ven amenazadas por las capturas para consumo y accidentales -en artes de pesca donde no son ellas el objetivo-; por compuestos tóxicos que se acumulan en su cuerpo y huevos; por la destrucción de las playas de anidación; y por el aumento de las temperaturas asociado al cambio climático. En las poblaciones del Mediterráneo Oriental, en concreto, los biólogos han observado ya que nacen muchas más hembras que machos, y lo atribuyen a la subida de las temperaturas: en las tortugas, el sexo de los embriones depende de la temperatura a la que se incuba el huevo. El gran vertido de crudo en el Golfo de México agrava mucho el problema. "La especie ya había sufrido un acusado declive en esta misma región, cifrado en torno al 40% de sus efectivos en los últimos cinco años", señala Marco. "Aparte de las consecuencias que pueda tener el vertido en mar abierto, hay que considerar su impacto en las playas donde crían las tortugas bobas". Foto 1.- Hembra reproductora de tortuga boba (Caretta caretta) en una playa de anidación de la República de Cabo Verde. Autor: Paula Sanz Foto 2.- Hembra de tortuga boba (Caretta caretta) anidando en una playa de la República de Cabo Verde. Autor: Adolfo Marco Foto 3.- Ejemplar juvenil de tortuga boba (Caretta caretta) en Andalucía. Autor: Adolfo Marco Foto 4.- Ejemplar juvenil de tortuga boba (Caretta caretta). Autor: Adolfo Marco Foto 5.- Neonato de tortuga boba (Caretta caretta). Autor: ONG CV Natura 2000 Foto 6.- Toma de muestra de tejido en laboratorio para análisis genéticos. Autor: Adolfo Marco Foto 7.- Nido muerto debido a las inundaciones por marea en una playa de anidación de la República de Cabo Verde. Autor: Elena Abella. Si desea más información, puede ponerse en contacto con el Departamento de Comunicación de la Fundación BBVA (91 374 52 10 y 94 487 46 27 ó comunicacion@fbbva.es) o consultar en la web www.fbbva.es