INSONMIO. De las enfermedades del sueño, el insomnio es el más común de los padecimientos. Se define como un sueño que no produce la adecuada recuperación energética que necesita el organismo para continuar con las actividades cotidianas del día (no interesa la cantidad de horas que se duerme sino su calidad). De acuerdo a la forma de presentación, se divide así: • Insomnio de conciliación: las dificultades se presentan para iniciar el sueño. • Insomnio de mantenimiento: comenzar el sueño es fácil, pero mantenerlo estable durante la noche es muy difícil; durante la noche se presentan despertares frecuentes, dejando al día siguiente una sensación de cansancio. • Insomnio terminal: la persona no tiene dificultades para comenzar a dormir pero se levantará más adelante, en la noche, y no puede volver a dormir. Causa: de acuerdo a su origen se dice que el insomnio es: • De tipo primario cuando su origen es un evento transitorio generado por estrés agudo (problemas personales, familiares). • De tipo psiquiátrico cuando su causa es un desorden emocional como la depresión, la manía, etc. • Causado por una enfermedad orgánica que produce dificultad para dormir, como el dolor en la artritis, o en la úlcera gástrica o duodenal; por dificultad para respirar como en el enfisema, etc. • Por efecto secundario de sustancias que afectan el ánimo: alcohol, cafeína, té, bebidas colas, drogas psicoestimulantes, etc. • Causado por un trastorno en el ritmo de la respiración en la noche: el paciente deja de respirar transitoriamente (apnea) y entonces se despierta, causando un despertar cansado; es de anotar que el paciente no es consciente de este trastorno respiratorio y por ello niega los despertares nocturnos. • Por movimiento involuntario de las piernas (mioclonus), especialmente presente en las personas de edad avanzada. Consiste en movimientos incontrolados y repetitivos de las piernas, de los cuales el enfermo no es consciente y que perturban la profundidad y con ello la calidad del sueño. Otras personas que son conscientes de ellas dicen que es un deseo irresistible de mover las piernas. Tratamiento: lo primero que el médico le indica al paciente son medidas para restablecer la higiene del sueño: • Dormir únicamente lo necesario para un despertar descansado. • Establecer horarios para dormir y seguirlos de manera estricta. • Utilizar la cama únicamente para dormir; especialmente se recomienda esto en las personas ancianas que se acuestan frecuentemente para ver la TV, leer, oír la radio, etc. • No acostarse a dormir hasta se tengan verdaderos deseos de dormir. • Controlar que los sonidos externos a la habitación, la suficiente penumbra y la temperatura de la habitación sean las adecuadas para conciliar el sueño. • No acostarse después de haber comido ni bebido en exceso, como tampoco con hambre o sed. • Evitar consumir café, té, bebidas colas, alcohol y no fumar antes de acostarse. • Evitar hacer siestas mayores de 20 minutos. • Ciertos medicamentos como los antigripales y antitusivos pueden alterarla calidad del sueño, así que deben ser tenidos en cuento en el paciente con problemas de insomnio. El tratamiento con medicamentos se ofrece cuando se ha hecho evidente que el manejo de los hábitos es adecuado y el insomnio persiste. Se utilizan hipnóticos del tipo benzodiacepinas de acción corta como el 1 triazolam, brotizolam, midazolam, esteazolam o de vida media intermedia como el flunitrazepam. Hay medicamentos no benzodiacepínicos como el zopiclone y el zolpidem. También se utilizan los medicamentos conocidos como antidepresivos con efecto sedante como la amitriptilina, trimipramina y la trazodona. Igualmente existen medicamentos que se utilizan para los episodios de alergia pero que tienden, como efecto secundario, a producir somnolencia como la hidroxicina y la difenhidramina. ¿Cuál es la causa del insomnio? El insomnio es una manifestación del cuerpo de que algo no anda bien. El insomnio puede ser causado por varias razones−−estrés, demasiada cafeína, depresión, cambio de jornada de trabajo, y dolor por problemas médicos tales como el artritis. Muchas personas sufren de insomnio. Las personas que sufren de insomnio puede que no puedan quedarse dormidas. O quizás despierten durante la noche y no puedan volverse a dormir, o quizás despierten demasiado temprano en la mañana. ¿Y el insomnio es un problema grave? En realidad no, pero le puede hacer sentir cansado, deprimido e irritado, y puede hacer que le sea difícil concentrarse durante el día. ¿Cuántas horas necesita uno dormir? La mayoría de los adultos necesitan entre 7 y 8 horas de sueño cada noche. Uno sabe que está durmiendo lo suficiente si no se siente cansado durante el día. La cantidad de sueño que usted necesita permanece igual durante la etapa de adulto. Sin embargo, los patrones de sueño pueden cambiar con la edad. Por ejemplo, las personas mayores quizás duerman menos durante la noche y tomen siestas durante el día. ¿Qué puedo hacer para mejorar mis costumbres al dormir? Aquí les damos algunos consejos para ayudarlo a dormir mejor: • Vaya a la cama y levántese a la misma hora todos los días, incluso si no duerme lo suficiente. Esto le ayudará a su cuerpo a ser entrenado para dormir bien de noche. • Desarrolle una rutina a la hora de dormir. Haga las mismas actividades antes de ir a la cama para ayudar a su cuerpo a prepararse para dormir. Por ejemplo, tome un baño caliente y leer por 10 minutos todas las noches antes de ir a la cama. Pronto, su cuerpo conectará estas cosas con el dormir, y ayudarán a que su cuerpo sienta sueño cuando las hace. • Use su habitación para quedarse dormido. No coma, hable por teléfono o vea televisión mientras está en cama. • Asegúrese que su cuarto es un lugar oscuro y callado. Si la bulla es un problema, use un ventilador para cubrir la bulla y póngase tapones de oídos. Si tiene que dormir durante el día, use cortinas gruesas que oscurezcan bien al cuarto o una máscara para sus ojos. • Si sigue despierto después de intentar quedarse dormido por 30 minutos, levántese y vaya a otro cuarto. Siéntese calladamente por 20 minutos antes de regresar a la cama. Haga esto cuantas veces sea necesario, hasta que pueda quedarse dormido. COMO ADQUIRIMOS UN HÁBITO Ayudamos al niño a configurar un hábito porque realizamos una función asociada a unos elementos externos. Por ejemplo el comer lo asociamos a una serie de elementos como son el babero, la silla, un plato, una cuchara, un tenedor, y repetimos esta asociación de "elementos externos" hasta que el niño aprende a 2 realizarla correctamente. Con el sueño se produce un mecanismo parecido. El niño debe aprender a iniciar el sueño solo, asociando el acto de dormir con unos "elementos externos" como son su cama, el osito de peluche, su chupete y los demás elementos ornamentales de su habitación. La actitud de los padres es fundamental porque son los que comunican seguridad al niño. Los padres cuando un niño es sentado por primera vez en la mesa no espera que el niño sepa utilizar correctamente los utensilios, cuchara, tenedor, etc. y siempre piensa que el niño debe "aprender" a comer correctamente. No se angustian y al día siguiente vuelven a intentarlo de la misma forma. Esta actitud de seguridad va dando confianza al niño que después de repetir la misma acción múltiples veces acaba realizándola correctamente .Normalmente con el sueño suele ser de la misma manera. Los padres deben saber que los niños deben "aprender" a dormir solos y no deben comunicarles inseguridad Se distinguen dos tipos de insomnio: • Transitorio: es el que dura menos de 3 semanas; resulta como consecuencia de episodios de stress repentino, enfermedad pasajera, cambios de horario por viajes ò falta de sueño en forma temporal. Se manifiesta como dificultad para empezar a dormir, dificultad para mantenerse dormido, ò despertares prematuros en la madrugada, incluso puede haber dificultad para dormirse durante el día. La ansiedad es una de las causas más comunes; los patrones normales de sueño usualmente se recobran en dos a tres semanas. • Crónico: si el insomnio ha durado más de tres semanas, debe considerarse como insomnio crónico. Entre las causas más comunes pueden citarse: dolores, dificultad para respirar, úlceras, asma, parkinsonismo. Los problemas depresivos de tipo endógeno, se caracterizan por dificultad para mantener el sueño con despertar prematuro. Estos pacientes generalmente se encuentran fatigados, irritables, tensos y deprimidos. Hay un grupo de pacientes que presentan estas manifestaciones, con insomnio que ha durado desde la niñez y que además tienen una historia familiar del problema, sin ningún factor interno ò externo asociado; esta condición se considera como insomnio primario. El insomnio crónico puede ser el resultado de otros trastornos del sueño como apnea nocturna y narcolepsia. 3 Tratamiento para el Insomnio Crónico Medicamentos para dormir Existen diversos medicamentos que ayudan a conciliar el sueño. La principal preocupación de las personas acerca de tales productos es la posibilidad de adquirir dependencia o adicción a los mismos. Es decir, que si empieza a tomarlos su organismo se acostumbrará a ellos y nunca podrá suspenderlos. Sin embargo, esto no sucede si la persona sigue las recomendaciones de su médico. Por lo general, son prescritos por un breve período, que no debe superar cuatro a ocho semanas. Durante ese lapso son corregidas las causas que pueden precipitar el insomnio y son instauradas las medidas de higiene del sueño. Consejos prácticos • El insomnio siempre tiene una causa, trate de hallarla usted mismo o con la ayuda de su médico. • Nunca tome medicamentos contra el insomnio por iniciativa propia. Es mejor consultar con el médico quien le recomendará la mejor alternativa para su caso. • Siga una rutina regular de higiene del sueño. • La somnolencia excesiva durante el día es un signo de alarma que indica un trastorno importante del sueño. Glosario Benzodiazepinas: medicamentos que actúan sobre el sistema nervioso. Son utilizados para el tratamiento de la ansiedad, el insomnio y algunas formas de epilepsia. Hipnótico: medicamento empleado para inducir el sueño. 4 Insomnio: imposibilidad para conciliar o mantener el sueño. Sensación de descanso poco reparador. 5