EL SUSTANTIVO Definición Siguiendo un criterio semántico, la gramática tradicional ha definido al sustantivo como la palabra que sirve para designar personas, animales o cosas que tienen existencia independiente, concreta (barco, choza, uva) o abstracta (amistad, lealtad, alegría). Recuerda que a los sustantivos también se les puede llamar simplemente nombres. espada, dulzura, añoranza, calor, Praga, igualdad... son sustantivos o nombres. Amelia, Para definir y reconocer un sustantivo es muy útil atender a sus posibilidades de combinación con otras palabras: Los sustantivos son la clase de palabras que puede aparecer con artículo: la espada, y con adjetivos determinativos: esta espada, mi espada, una espada... Otras clases de palabras, por el contrario, no se combinan de esta manera. Un verbo, bailo, por ejemplo, no admite semejantes vecindades: mi bailo*, este bailo*, una bailo*... no tienen sentido alguno en nuestro idioma. Ninguna clase de palabras puede ir acompañada por determinantes a no ser que esté sustantivada, es decir, que funcione como un sustantivo. Recuerda que artículos y adjetivos determinativos son clases de palabras, por lo tanto categorías o formas, mientras que los determinantes son funciones del sintagma nominal. Ten en cuenta que los nombres propios son sustantivos y, sin embargo, tampoco deben ir precedidos de artículo: La* Yoli, el* Paco o la* Rosario... estarían más cómodos sin el articulito delante. Sustantivación En la lengua es frecuente lo que se llama transposición de categorías (también llamada metábasis): palabras que pertenecen normalmente a una determinada categoría (clase de palabras) pasan a actuar como si pertenecieran a otra. Si cualquier otra clase de palabras pasa a funcionar como un sustantivo hablamos de sustantivación. Por ejemplo: escrito es una forma verbal, participio, que funciona como sustantivo en Encontraron los escritos del difunto. El infinitivo andar funciona como un sustantivo en Sus andares me causan sensación. Un adverbio, sí, se comporta como un sustantivo en: “Me dijiste un sí que me no me convenció”. La transposición es un procedimiento muy habitual en la lengua y no siempre es sustantivación: Me gusta el naranja. En esta oración naranja es un sustantivo que funciona como adjetivo (adjetivación). Otras veces es el adjetivo el que funciona como adverbio (adverbialización): Siempre habla alto. Alto es un adjetivo que modifica al verbo, función propia de los adverbios. En fin, que las palabras no se están quietas en sus categorías y se disfrazan de las otras cuando les conviene. Adjetivos sustantivados El adjetivo es la clase de palabras que más habitualmente funciona como un sustantivo. Dame el rojo . En este caso el adjetivo aparece acompañado de un determinante (artículo o adjetivo determinativo): El verde es su color. Estos son los buenos. En realidad, lo que hemos hecho ha sido suprimir el sustantivo: El (color) verde es su color. Estos son los (personajes)buenos. Casi todos los adjetivos pueden sustantivarse con el artículo lo: lo bello, lo siniestro, lo terrorífico, lo malvado, lo gigantesco... Otros adjetivos, los que solo son aplicables a cualidades de seres vivos no pueden sustantivarse con lo: *lo contento, *lo adulto, *lo satisfecho. Palabras como joven, viejo, vecino, intelectual, militar, estudiante, pueblerino...resultan difíciles de clasificar como sustantivos o adjetivos; se emplean indistintamente de una u otra manera: mi vecina joven (adjetivo) o pinté a esa joven (sustantivo). Los intelectuales manchegos (sustantivo) o Las mujeres intelectuales (adjetivo). Lo listos que son : En esta construcción lo no sustantiva al adjetivo sino que los intensifica (Qué fuertes son) Sustantivación de otras clases de palabras En oraciones como “La” es un artículo” , “Llorar” es un verbo”,” Por” es una preposición... tanto la, como llorar o de funcionan como sustantivos. Son casos en los que la lengua habla de sí misma empleando la función metalingüística . Transposición de los sustantivos a otras categorías En casos como empresa modelo, ciudad jardín, buque fantasma, hombremasa, piso piloto un sustantivo está modificando a otro, asumiendo el papel de adjetivos. Es un procedimiento más de creación de palabras. Forma del sustantivo Formalmente los sustantivos son una clase de palabras variables (frente a es decir, que pueden llevar morfemas gramaticales y derivativos que se unen al lexema. Por consiguiente, están compuestos en su mayor parte por lexema o lexemas (contiene el significado léxico gat-o) y morfemas. Los morfemas se clasifican en derivativos (prefijos: re-pasar, interfijos: pan-ec-illo o sufijos: cas-ón) y gramaticales (género: gat-o/a y número: gato-s). las invariables: adverbio, preposición, conjunción e interjección), Dentro de los morfemas derivados tienen una gran importancia los apreciativos: diminutivos, aumentativos y despectivos. Los diminutivos: ito, -illo, -uelo,-ico, -ino. -ete -ejo... añaden al lexema el matiz semántico de tamaño pequeño o cercanía afectiva: chavalito, chavalillo, muchachuela, niñico, golfete, diableja...; los aumentativos –ón, -azo, -ote , por el contrario, aumentan el tamaño al significado del nombre: cabec-ita, cabez-ón; los despectivos expresan desprecio: -ucho, -ejo, -uelo, -orro/orrio: cuartucho, papelajo, ladronzuelo, bodorrio, ventorro... Relación con las otras clases de palabras en cuanto al comportamiento ante los morfemas: Adverbios, preposiciones, conjunciones e interjecciones son invariables; por ejemplo, la conjunción y es siempre y, no admite morfemas. Adjetivos, verbos, artículos y pronombres son igualmente palabras variables (que cambian su forma añadiendo morfemas diferentes). Adjetivos calificativos y determinativos, artículos y pronombres tienen, por lo general, morfemas gramaticales de número (singular o plural) y género (masculino y femenino). Los adjetivos calificativos tienen el morfema de grado en exclusiva (con alguna excepción): buen-ísimo. Los verbos también tienen morfemas de número, pero no de género; y sí unos morfemas gramaticales exclusivos, las desinencias (de tiempo, aspecto y modo.) Además de los sustantivos otras clases de palabras también se descomponen en lexemas y morfemas derivativos: los adjetivos calificativos sin ir más lejos-baj-ito, blanqu-ita y muy pocos adverbios cerqu-ita. Cómo identificar el lexema y distinguirlo de los morfemas El lexema es el segmentode la palabra que no varía en una familia léxica. Si eliminas todos los morfemas, te quedará el lexema. Observa en la familia léxica la parte que tienen en común todas las palabras y encontrarás el lexema; por ejemplo, en pan, panecillo, panadero, panadería, empanada, el lexema es pan , de trigo o de centeno; pero pan al fin y al cabo. Ten en cuenta que algunos lexemas pueden cambiar alguna letra final para adaptarse a las reglas de ortografía: feliz, felicidad, felicísimo... Esos cambio no se tienen en cuenta a la hora de señala el lexema. El género de los sustantivos El sustantivo posee género gramatical; suele emplear formas diferentes para distinguir masculino y femenino. Para averiguar el género se puede recurrir a combinar el nombre con los adjetivos determinativos: si el nombre admite que lo combinen con este o estos es masculino (este poeta, este césped, este candil...); si, por el contrario, se combina con esta o estas es femenino (esta pared, esta agua, esta aula, esta águila..) Y recuerda que los sustantivos femeninos que comienzan por á- tónica (con o sin tilde) admiten el artículo el delante (pero no otros determinantes): el arma / esta arma; el águila / las águilas ; el hacha / las hachas / estas hachas No se debe confundir género y sexo. El género es un rasgo gramatical, no biológico; mesa es un nombre femenino y que yo sepa no tiene sexo de ningún tipo; ardilla es un nombre femenino y es de suponer que hay machos y hembras. Y ya que hablamos de ello, LA LLAMADA “PERSPECTIVA DE GÉNERO” ES UNA ABERRACIÓN GRAMATICAL Y ESTILÍSTICA: Insistir en dualidades como “los niños y las niñas”, “los alumnos y alumnas”, “los profesores y profesoras” , etc. es una ocurrencia moderna que nada tiene que ver con la gramática castellana. Si alguien se siente incómodo (o incómoda) por si le acusan de machista por semejante bobada, que trate de emplear sustantivos como “el alumnado”, el profesorado”, etc. En castellano se expresa el género de modos muy diversos: A.-Añadiendo morfemas: - Mediante las terminaciones, morfemas, -a para los femeninos y -o para los masculinos: abuela-abuelo, gata-gato, presidente-presidenta... - Cuando el masculino acaba en consonante forma el femenino añadiendo una –a: león-leona; doctor-doctora... - Algunos nombres utilizan los sufijos –esa, -isa, -ina, -triz para marcar el femenino: alcalde-alcaldesa, tigre-tigresa, sacerdote-sacerdotisa, poeta-poetisa, Papa-papisa, héroe-heroína, gallo-gallina, rey-reina, jabalí-jabalina, emperadoremperatriz, actor-actriz. B.- Mediante otros procedimientos: - Otros nombres usan palabras con lexemas distintos para diferenciar género (y sexo); son los heterónimos: padre-madre, yerno-nuera, varón-hembra, padrino-madrina, toro-vaca, caballo- yegua... - Hay nombres que designan ambos sexos con una misma palabra: el gentío, la víctima nombre femenino puede referirse al sexo masculino o femenino. - Ciertos sustantivos presentan la oposición de género para diferenciar contenidos relacionados con el tamaño, la forma o la distinción árbol-fruta: jarro-jarra, cesto-cesta, cubo-cuba, manzano-manzana, naranjo-naranja, olivooliva... - Algunos sustantivos, llamados homónimos, tienen un significado diferente según se combinen con determinantes de distinto género: el/la editorial, el/la orden, el/la frente, el/la cólera, el/la coma, el/la orden, el/la corte... - Otros nombres no tienen un género implícito y diferencian el género y el sexo mediante el artículo; son los sustantivos comunes en cuanto al género: el/la estudiante , el/la coleccionista, el/la pianista, el/la saxofonista (las saxofonistas, indudablemente, tocan mejor) el/la bachiller, el/la conserje, el/la testigo, el/la soprano, el/la contralto, el /la paciente, el/la amante...según se refiera a un hombre o a una mujer. Ten en cuenta que son correctos: ministro-a, notarioa, arquitecto-a, médico-a, perito-a, ingeniero-a. La RAE registra tanto la jueza como la juez. - Nombres como víbora, cuervo, elefante, rata, gorila...designan personas o animales sin diferenciar género. Se les llama sustantivos epicenos. - Algunas palabras se usan indistintamente en masculino o en femenino: el mar/la mar, el azúcar/la azúcar, el/ la pringue, el/la casete y pocos más. El número Por lo general, los sustantivos presentan variaciones de número: singular y plural. Esta clasificación tan sencilla oculta un uso bastante complicado de describir. Formación del plural: la norma general es que el plural se forma añadiendo el morfema de plural al nombre en singular. El morfema de plural tiene tres variantes (-s, -es o morfema cero) y se agrega una u otra dependiendo de los sonidos con que acabe la palabra en singular: Los sustantivos acabados en vocal átona (que no es tónica, o lo que es lo mismo, que no forma parte de la sílaba más intensa de la palabra) forman el plural añadiendo –s: mosca-moscas. Los sustantivos acabados en las vocales tónicas -á, -é, -ó forman el plural añadiendo –s: sofá-as, café-cafés. Los sustantivos acabados en la vocal tónica –í , por lo general, forman el plural añadiendo –es: jabalí-jabalíes, alhelí-alhelíes, israelí-israelíes, maniquímaniquíes. Sin embargo, se tiende cada vez más a formarlos con –s: esquíesquís, bisturí-bisturís. Los sustantivos acabados en vocal tónica –ú pueden formar el plural añadiendo –s o –es, aunque algunos solo pueden formarlo con –s: hindú-hindús o hindúes, tabú-tabús o tabúes, iglú-iglús o iglúes, zulú-zulús o zulúes, menúmenús, vermú-vermús, champú-champús. Los sustantivos que acaban en una consonante distinta de –s o –x forman el plural añadiendo –es: pastel-pasteles, altar-altares, árbol-árboles. Los sustantivos con acentuación aguda que acaban en las consonantes –s y -x forman el plural con –es: compás-compases, autobús-autobuses, carcaxcarcaxes. Los sustantivos con acentuación llana o esdrújula que acaban en consonante –s o –x no varían en plural: la tesis-las tesis, el tórax-los tórax. Los sustantivos que acaban en –i forman el plural con –es, pero convierten la –y en consonante (con excepción de las palabras jersey, paipay y rentoy): rey-reyes, ley-leyes, buey-bueyes, ay-ayes, convoy-convoyes; pero jersey-jerséis, paipay-paipáis, rentoy-rentóis. (Rentoy es un juego de naipes). Casos especiales: •Los nombres de las vocales, cuando funcionan como sustantivos, forman el plural en –es: aaes, e- es, i-íes, o-oes, u-úes. •Las palabras yo, no y sí, cuando son sustantivos, también hacen el plural en –es: yo-yoes, no-noes, sí-síes. •El plural de las notas musicales es el siguiente: dos, res, mis, fas, soles, las, sis •Hay tres sustantivos que cambian la sílaba tónica en la formación del plural: régimenregímenes, espécimen-especímenes, carácter-caracteres. •Algunos sustantivos sólo tienen singular: cenit, caos, sed, cariz, salud,tez. •Otros solo tienen plural: víveres, nupcias, exequias, (las) andas, trizas, añicos, •Hay nombres que significan lo mismo en singular que en plural: funeral-funerales, barbabarbas, paz-paces, tijera-tijeras, nariz-narices, tenaza-tenazas, pinza-pinzas, pantalónpantalones. •Gafas, prismáticos y anteojos no tienen singular. •Los sustantivos latinos que no se han adaptado a la forma castellana no varían en plural: el/los déficit, el/los superavit, el/los memorándum. • Cuando los sustantivos latinos se han adaptado a la forma castellana siguen las reglas generales: currículo-s, referendo-s •Otros plurales con dificultad: álbum-álbumes, guardia civil-guardias civiles, hipérbatonhipérbatos, malentendido-malentendidos, tic-tics, el chotis-los chotis, cacahué-cacahués. •Las palabras extranjeras que acaban en vocal siguen las normas generales: cliché-s, boutique-s •Las palabras extranjeras (extranjerismos) que acaban en consonante -l, -n, -d,-z,-r,-s,-x (las dos últimas solo en palabras agudas) suelen formar el plural en -es: esloganeslóganes, fax, faxes. De todos modos también tenemos el/los best –seller, el/los escáner que son invariables. •Los extranjerismos que acaban en otra consonante suelen ser invariables: el/los complot, el/los debut, el/los cómic. La RAE recomienda, sin embargo, clubes para el plural de club. •Para los sustantivos extranjeros no son aconsejables los plurales con –s después de consonante: chandals*, debuts*, best-sellers*. Como hemos visto, es mejor indicar el plural con el artículo, por ejemplo: los chandal, los debut, los best-seller. Clasificación semántica de los sustantivos (por su significado) Concretos y abstractos: Los sustantivos concretos se refieren a objetos o seres que se pueden percibir por los sentidos (se ven, se tocan, se saborean...): taza, baúl, montaña, lago, anillo, ángel, fantasma, vampiro... (No es necesario, como ves, que sean entes reales, basta con que se pueda hacer de ellos una imagen mental) De todas maneras la lengua se escapa de toda definición sencilla; vas a encontrar muchas excepciones: beso, caricia, aire, luz, viento... también se consideran sustantivos abstractos a pesar de su sensualidad, posiblemente porque el sentido de la vista ha dominado siempre a los otros en nuestra cultura. Los abstractos son los que no se perciben por los sentidos: fealdad, juventud, estupidez... amor, Individuales y colectivos: Los colectivos son los nombres que se definen en singular como un grupo de individuos: pinar, conjunto de pinos; rebaño, grupo de ovejas; piara, grupo de cerdos; ejército, conjunto de soldados... No se debe confundir un sustantivo colectivo con un sustantivo individual en plural. Observa que tanto pinar como rebaño, piara o ejército están en singular aunque se refieran a más de un individuo. El plural de rebaño es rebaños, y ambos son nombres colectivos. El plural de oveja es ovejas, y los dos son nombres individuales. Los sustantivos individuales son aquellos que definen, en singular, a un solo objeto contable (los que no son colectivos y por lo tanto su definición no empieza por: conjunto de...) La mayor parte de los nombres lo son: pluma, taza, cachorro, mujer, nube... Comunes y Propios: Propios son Adela, Edmundo, Mercedes, París, Berlín, Marruecos... Sirven para designar a individuos o referentes únicos para distinguirlos de los de su clase. Todos los muchachos que asisten a la escuela son alumnos; cada uno tiene un nombre propio (Elena, María, Carlos o Ricardo) para ser reconocido e identificado. Los nombre propios de personas son denominados antropónimos y los topónimos los nombres propios de lugares. Nombres propios son también los nombres de los animales (Idefix, Rocinante, Bucéfalo,), los apelativos y títulos (el Cid, el Sabio -Alfonso X-, el Duque de Osuna), los nombres de épocas (Navidad, Otoño, Barroco), de instituciones (Real Academia de la Lengua), o nombres de productos humanos únicos (Ley de Reforma Universitaria, Declaración Universal de Derechos Humanos) Los nombres propios deben ser escritos con la primera letra en mayúscula. (Ya sé que lo sabes; lo que quiero es que lo apliques) Los comunes son los que no son propios (no le des más vueltas), no distinguen sustancias únicas, más bien agrupa seres con características comunes: alumno, muchacha, cuidad, país, pueblo, arcón... y miles más. Animados e inanimados: Animados se les llama a los nombres de seres vivos: (cocodrilo, loro, Carlos…) Inanimados: Está claro, los que no pueden tener vida (pedrusco, bocadillo, botijo... y tantas otras). Contables e incontables No necesitas una explicación muy compleja si sabes lo que es contar. Los nombres a los que puedas colocarles un número son contables: dos piernas, cinco ojos, ochocientos brazos, una costilla. Otros nombres, en principio, no pueden contarse: cinco aires, tres nostalgias, veinte odios, doce sales... (aunque la lengua permite dos aguas por dos botellas de agua; dos amores por dos personas amadas; incluso dos aires podría interpretarse fácilmente, aunque soportarse con dificultad). Estos son los incontables, claro. Función sintáctica del sustantivo (oficios del sustantivo) Distinción entre forma y función (MUY IMPORTANTE) La función de una palabra se examina siempre dentro de un enunciado. Hasta ahora a los sustantivos, como formas que son, los hemos estado definiendo como piezas sueltas de una maquinaria. Las clases de palabras son formas, piezas aisladas, que cumplen después una función (sirven para algo) al utilizarlas en la frase. Las piezas de la lengua a las que hemos llamado sustantivos tienen un oficio (cumplen una función,) cuando las utilizamos en un enunciado. Para distinguir los conceptos de forma y función imagina una tienda de motos. Está llena de cajas de piezas sueltas (ruedas, manillares, faros, motores...) Estas piezas tienen una forma, un nombre, unas características y están pensadas para una función: los faros para alumbrar, las ruedas para deslizarse, el motor para impulsar... Ahora decides coger las piezas necesarias y construir una moto: dos ruedas, un manillar, un motor, un faro delantero.... Cuando la hayas montado correctamente comprobarás que cada pieza cumple su misión.. Sueltas, por supuesto, no funciona ninguna. Pues bien, las clases de palabras (sustantivos, pronombres, adjetivos determinativos, adjetivos calificativos, artículos, verbos, adverbios, conjunciones, preposiciones e inerjecciones) y los tipos de sintagmas (Nominal, verbal, sintagma adjetivo, adverbial y preposicional) son piezas sueltas de la lengua, es decir formas. Puedes imaginar que, en tu linda cabecilla, o considerable cabezón, tienes un armario lleno de cajones: uno repleto de sustantivos, otro de verbos, otro de adjetivos.... y que cuando necesitas hablar o escribir vas escogiendo palabras de diferentes cajones y combinándolas para formar un enunciado. Veamos un ejemplo: Yo quiero un vaso de leche caliente es una frasecita muy sencilla. Has tomado un pronombre, un verbo, un artículo indeterminado, un sustantivo, una preposición, un segundo sustantivo y un adjetivo; los has conectado correctamente y los has puesto a funcionar, o lo que es lo mismo, has formado sintagmas y, con los sintagmas, una oración. El pronombre (forma) yo te sirve de sujeto (función). Has construido un Sintagma Verbal (forma) quiero un vaso de leche caliente que utilizas como predicado (funciona como predicado) ; en él quiero va a servir para ser el núcleo de ese predicado (función); un vaso de leche caliente es un Sintagma Nominal, una forma compleja-de más de una palabra- que va a funcionar como Complemento Directo (función dentro del Sintagma Verbal) ; y en ese sintagma nominal (forma) el sustantivo (forma) vaso ejerce la labor de núcleo (función) y el Sintagma Preposicional (forma) de leche caliente funciona como adyacente (función); En ese sintagma preposicional tienes una preposición (forma) que funciona como Enlace (función) y un Sintagma Nominal (forma) que sirve, funciona, de Adyacente (función),; dentro de él , leche ,un sustantivo, (forma) funciona como Núcleo (función) y un adjetivo (forma) caliente como Adyacente (función); en fin, que ya tienes la moto. La función principal del sustantivo es la de ser núcleo del sintagma nominal. Un sintagma nominal está compuesto por un núcleo que puede ir modificado por determinantes y adyacentes. El núcleo es la palabra central, la de mayor importancia, a la que las otras, si las hay, complementan, modifican(dicen algo de ella): la hermosa vida , el gigantesco gato montés, aquel cuervo negro y terrible... Núcleos del Sintagma Nominal también pueden ser los Pronombres o cualquier otra palabra sustantivada. Los sustantivos también pueden ser complementos de otros sustantivos directamente o indirectamente. En Herodoto, padre de la historia, fue un gran observador, el S. Nominal padre de la historia complementa directamente al nombre propio Herodoto y funciona, por lo tanto, como Aposición. Un sustantivo puede complementar a otro indirectamente formando parte de un Sintagma Preposicional con función de Adyacente: Tres noches de luna. De luna es el S.Preposicional que funciona como adyacente del nombre noches. Lo mismo en Cuenca, ciudad encantada. El Volga, río divino. La física, ciencia de la materia. El profeta rey... Funciones del Sintagma Nominal Sujeto: Eva convenció a Adán. Complemento Directo: Adán comió la manzana (siempre aparece en un Predicado) Complemento indirecto: Eva dio la manzana a Adán (siempre en un Predicado) Complemento Circunstancial: Dios los expulsó del Paraíso (Pues no era para ponerse así) (Siempre en un predicado) Complemento Agente: Adán y Eva fueron expulsados por Dios (siempre en un predicado) Complemento Atributo: Eva era una mujer convincente (siempre en un predicado) Complemento Predicativo: A Adán lo nombraron jefe de la familia (No sería por sus méritos). (Siempre en unl predicado) Aposición: Eva, la primera mujer, engendró a Caín y a Abel. (Cría hijos para eso).(Puede aparecer tanto en el Sujeto como en el Predicado) Adyacente del núcleo de un Sintagma Nominal: Eva castigó a Caín y lo dejó sin postre de helado. (Aparece en el sujeto y en el predicado) Término de una Enlace en un Sintagma Preposicional: El marido de Eva era un adán. (En sujetos o predicados). Para estudiar cada una de estas funciones busca el tema de la oración simple.