OPINIÓN Nº 101-2009/DTN Entidad: Registro Nacional de Identificación y Estado Civil RENIEC Asunto: Presunción de veracidad Referencia: Oficio N° 001253-2009/GAJ/RENIEC 1. ANTECEDENTES Mediante el documento de la referencia, el Gerente de Asesoría Jurídica del Registro Nacional de Identificación y Estado Civil – RENIEC, solicita a este Organismo Supervisor absuelva la siguiente consulta: “En un proceso de fiscalización en el que se ha solicitado adicionalmente a los contratos y sus respectivas conformidades por las ventas ya exigidos en las Bases, facturas, guías de remisión y registro de ventas, ante una duda de la veracidad de uno de estos documentos por deficiencias en el registro de ventas, se podría considerar como no válidos los demás documentos o prevalece la presunción de veracidad”. 2. ANÁLISIS Antes de iniciar el desarrollo del presente análisis, cabe precisar que las consultas que absuelve este Organismo Supervisor son aquellas referidas al sentido y alcance de la normativa sobre contratación pública, planteadas sobre temas genéricos y vinculados entre sí, sin hacer alusión a asuntos concretos o específicos, de conformidad con lo dispuesto por el inciso i) del artículo 58° de la Ley de Contrataciones del Estado, en adelante la Ley, aprobada mediante Decreto Legislativo Nº 1017, y la Segunda Disposición Complementaria Final de su Reglamento, aprobado mediante Decreto Supremo Nº 184-2008-EF, en adelante el Reglamento. En ese sentido, las conclusiones de la presente opinión no se encuentran vinculadas necesariamente a situación particular alguna. 2.1 La Ley del Procedimiento Administrativo General, en adelante la LPAG, consagra el principio de presunción de veracidad de los documentos y declaraciones juradas presentadas por los particulares durante un procedimiento administrativo1. Ello implica que, en todo procedimiento administrativo, debe presumirse que los documentos presentados y las declaraciones formuladas por los administrados se encuentran conforme a lo 1 Según el numeral 1.7 del artículo IV del Título Preliminar y el artículo 42º de la Ley 27444. De otro lado, como contrapeso al principio de presunción de veracidad, el numeral 1.16 del artículo IV del Título Preliminar de la LPAG establece la vigencia del principio de controles posteriores, según el cual, las Entidades deben privilegiar las técnicas de control posterior, en lugar de las técnicas de control preventivo, en los procedimientos que se desarrollan bajo su competencia. En tal sentido, la Administración tiene el derecho de comprobar, más adelante, la veracidad de los documentos presentados por los administrados en los procedimientos. 2 prescrito por ley y responden a la verdad de los hechos que afirman. No obstante, la presunción de veracidad no tiene un carácter absoluto, toda vez que conforme a las normas citadas la sola existencia de una prueba en contra de lo afirmado en las declaraciones juradas o de lo indicado en los documentos presentados, obliga a la administración pública a apartarse de la referida presunción. 2.2 De lo anterior se desprende que, en virtud del régimen administrativo general, los documentos y declaraciones presentados en un proceso de selección gozan de la presunción de veracidad, por lo que se presume la certeza de su contenido, salvo que exista prueba en contrario. En esa medida, tratándose de un procedimiento de selección sujeto a la normativa de contrataciones del Estado, sólo si existe prueba de que la información contenida en los documentos y/o declaraciones presentadas no corresponde a la verdad de los hechos, se desvirtuaría la presunción de veracidad, dando lugar a las acciones previstas en la Ley y en el Reglamento. Así, la presentación de un documento falso o inexacto durante la tramitación del proceso de selección trae como consecuencia la descalificación de la propuesta técnica o la declaratoria de nulidad de la buena pro, en caso dicha documentación haya sido otorgada por el ganador de la buena pro. No obstante, si dicha falsedad o inexactitud no es advertida sino hasta después de la suscripción del contrato o en ejecución de éste, la Entidad podrá declarar de oficio la nulidad de dicho contrato, conforme al artículo 56º de la Ley. 2.3 Ahora bien, las normas reseñadas son claras al indicar que sólo una prueba en contrario —no otra presunción o indicio— desvirtúan la presunción del principio de presunción de veracidad, entendiéndose que será un elemento objetivo y verificable que causa convicción sobre la falta de veracidad o exactitud de lo que originalmente haya afirmado o los documentos aportados por los administrados. En ese sentido, de ser el caso que el Comité Especial, en virtud de lo dispuesto en el artículo 24° de la Ley2, identifique un documento sobre cuya veracidad o exactitud se duda razonablemente y solicite al órgano encargado de las contrataciones disponer su inmediata fiscalización y, a su vez, en dicha acción de fiscalización se acceda a un documento sobre cuya falsedad se presume, aquello no desvirtúa la presunción de veracidad de los documentos cuestionados en tanto no exista una prueba en contrario. Sin perjuicio de lo anterior, se debe considerar que el mismo artículo 24° de la Ley indica que las acciones de fiscalización no suspenden, en ningún caso, la continuidad del proceso de selección. 2 Nótese que dicha norma faculta al Comité a informar al órgano encargado de las contrataciones de la existencia de un documento sobre el que se duda razonablemente de su veracidad o exactitud, a fin de que este último efectúe una fiscalización inmediata. Vale decir, la duda razonable da lugar a la fiscalización y no a desvirtuar el principio de presunción de veracidad por si misma. 3 3. CONCLUSIÓN 3.1. De ser el caso que el Comité Especial, en virtud de lo dispuesto en el artículo 24° de la Ley, identifique un documento sobre cuya veracidad o exactitud se duda razonablemente y solicite al órgano encargado de las contrataciones disponer su inmediata fiscalización y, a su vez, en dicha acción de fiscalización se acceda a un documento sobre cuya falsedad se presume, aquello no desvirtúa la presunción de veracidad de los documentos cuestionados en tanto no exista una prueba en contrario. 3.2. Las acciones de fiscalización no suspenden, en ningún caso, la continuidad del proceso de selección. Jesús María, 30 de setiembre de 2009 JUAN ANTONIO SILVA SOLOGUREN Director Técnico Normativo AFRR/.