Documento descargado de http://www.elsevier.es el 16/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Cartas al Editor / Med Clin (Barc). 2012;138(11):501–503 Respuesta Reply Sr. Editor: Tras leer atentamente los comentarios del Dr. Ò. Miró sobre nuestro artı́culo, únicamente querrı́amos hacer algunas breves aclaraciones sobre los puntos comentados en su carta. En primer lugar, el escaso número de episodios recogido a lo largo de los 14 meses del periodo de inclusión obedece a que estos se recogieron consecutivamente en el horario laboral habitual del Hospital de Dı́a de Enfermedades Respiratorias (HDER), es decir, los dı́as laborables durante la mañana (aproximadamente de 8 a 14) y en la misma franja horaria en el Servicio de Urgencias. En segundo lugar, es cierto que en el HDER se atiende habitualmente a un grupo de pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) grave seleccionado (aunque numeroso), tanto en fase estable como en las exacerbaciones, tal como se describe en un artı́culo previo1. Los episodios de exacerbación recogidos en el HDER corresponden en su mayorı́a a exacerbaciones del grupo de pacientes controlado en dicha unidad. De la misma manera, tal como se comenta en la discusión del artı́culo, el mejor conocimiento de los pacientes es uno de los factores que puede contribuir a las diferencias observadas. En tercer lugar, es discutible si la admisión en la Unidad de Hospitalización Domiciliaria, que en nuestro hospital está constiVéase contenido relacionado en DOI: 10.1016/j.medcli.2011.09.031 tuida por especialistas en Medicina Interna y con la que trabajamos de forma coordinada, debe considerarse como un ingreso hospitalario o como un alta a domicilio (por este motivo se ha diferenciado en los resultados), pero lo que sı́ es cierto es que supone una reducción en el número de ingresos en las salas de hospitalización convencional. A pesar de ser conscientes de las limitaciones del estudio realizado, pensamos que el HDER es una valiosa alternativa para la atención de las exacerbaciones de la EPOC. Bibliografı́a 1. Pomares Amigó X, Montón Soler C. Hospitales de dı́a de enfermedades respiratorias: qué hemos aprendido? Med Clin (Barc). 2011;136:454–5. ? 502 Luis Fernando Casas Méndeza,b,*, Concepción Montón Solera, Xavier Pomares Amigóa y Marisa Baré Mañasc a Servicio de Neumologı´a, Hospital de Sabadell, Corporació Sanitària i Universitària Parc Taulı´, Universitat Autònoma de Barcelona, Sabadell, Barcelona, España b Sección de Neumologı´a, Hospital Universitari Sant Joan de Reus, Universitat Rovira i Virgili, Reus, Tarragona, España c Epidemiologı´a Clı´nica-Cribado de Cáncer, UDIAT-Centre Diagnòstic, Corporació Sanitària i Universitària Parc Taulı´, Universitat Autònoma de Barcelona, Sabadell, Barcelona, España * Autor para correspondencia. Correo electrónico: lfcasas@gmail.com (L.F. Casas Méndez). doi: 10.1016/j.medcli.2011.10.001 ? Role of ecocardiogram in fever of unknown origin. Towards saturation of echocardiogram laboratories? Reply Sr. Editor: Hemos leı́do con interés el artı́culo de Bayón et al.1 acerca de la rentabilidad diagnóstica del ecocardiograma en pacientes con fiebre de origen desconocido (FOD). La ecocardiografı́a se ha convertido en una herramienta fundamental para el diagnóstico de endocarditis infecciosa, lo que por otro lado supone una demanda creciente en los laboratorios de ecocardiografı́a. Varios estudios confirman que, de hecho, las ecocardiografı́as transtorácicas (ETT)/ transesofágicas (ETE) están solicitadas en exceso con este fin2–5, y refuerzan el mensaje de Bayón et al. en cuanto a la necesidad de estimar la probabilidad clı́nica pretest para un uso apropiado de la ecocardiografı́a. De acuerdo con los autores, ası́ como con otros estudios, la rentabilidad es mayor en pacientes con probabilidad pretest intermedia o alta6. Sin embargo, Bayón et al. no especifican la definición de FOD utilizada. Clásicamente, exige la presencia de un estado febril prolongado ( 3 semanas), con mediciones de temperatura repetidas 38,3 8C, y en el que no se ha llegado a un diagnóstico tras una semana de estudio. De la muestra analizada1, un 73% presentó fiebre (un 23% de los pacientes incluidos no cumplirı́an la exigencia de temperatura), sin conocer su duración ni el tiempo de evaluación previo a la solicitud del ecocardiograma. Por otro lado, aunque el diagnóstico de FOD no aclara qué estudios han de ser practicados para satisfacer la definición, se ha propuesto un conjunto mı́nimo de pruebas a realizar7. Bayón et al. no describen si la solicitud de ETT/ETE fue previa o posterior a otros estudios, ni cuáles fueron estos. Ası́, los autores parecen aludir más a la demanda ecocardiográfica en la evaluación de estados febriles inespecı́ficos que de FOD. Las guı́as actuales ACC/AHA establecen claramente que ETT/ETE no es un test de cribado para evaluación de fiebre; de hecho, el estudio de una fiebre transitoria sin bacteriemia o un nuevo soplo se incluye entre las indicaciones inapropiadas de la aplicación de ETT/ETE8. Greaves et al.4 identificaron las variables que podrı́an seleccionar el grupo de pacientes de baja probabilidad, y que establecieron en ausencia de los 5 criterios clı́nicos siguientes: a) prótesis valvular; b) adictos a drogas por vı́a parenteral; c) hemocultivos positivos; d) acceso venoso central, y e) fenómenos embólicos. Este grupo de baja probabilidad constituyó casi la mitad de las 500 solicitudes consecutivas de ETT para excluir endocarditis, en los que la incidencia de vegetaciones fue 0%. Como conclusiones, podrı́amos destacar: a) la dificultad de estudio de los sı́ndromes febriles en general, y de la FOD en particular, y b) la necesidad de una evaluación clı́nica previa a la solicitud de pruebas complementarias; en el caso concreto del ecocardiograma, la ausencia de 5 variables clı́nicas puede identificar un grupo de muy baja probabilidad de endocarditis infecciosa, en el que la prueba no estarı́a justificada. Bibliografı́a 1. Bayón J, Martı́n M, Velasco E, Fernández-Cimadevilla OC. Ecocardiograma en la fiebre de origen desconocido con sospecha de endocarditis. Hacia una saturación de los laboratorios de ecocardiografı́a? Med Clin (Barc). 2011, doi: 10.1016/j. medcli.2011.04.014. ? Ecocardiograma en la fiebre de origen desconocido con sospecha de endocarditis. Hacia una saturación de los gabinetes de ecocardiografı́a? Respuesta