la política ambiental en cuba como sistema de relaciones tendentes

Anuncio
LA POLÍTICA AMBIENTAL EN CUBA COMO SISTEMA DE RELACIONES
TENDENTES AL MANTENIMIENTO DE LOS OBJETIVOS SOCIALES
DESDE EL PARADIGMA AMBIENTALISTA
Autores1: Dra. Ana M. Luna Moliner
Ms C. Pablo Bayón Martínez.
ANTECEDENTES
El aspecto filosófico de la relación de las sociedades con el medio geográfico condicionante de su
desarrollo incluye cuestiones sociológicas, axiológicas y políticas. La correlación entre política
ambiental y cambio social de la última década en Cuba, implica el desenvolvimiento de relaciones
sociales vinculadas con las transformaciones en la sociedad cubana.
Premisas generales
de la teoría social marxista; la concepción del desarrollo como proceso
dinámico operante en organismos sociales y sus estructuras; la visión de cambio y transformación
social como resultado de la práctica consciente y el enfoque sistémico complejo, permiten apreciar
la política ambiental como potenciador de la autorregulación, el autocontrol y la autodirección del
desarrollo sostenible.
El carácter constructivo de la política ambiental opera mediante el condicionamiento paulatino de
los modos de relación, establecidos en la satisfacción de necesidades sociales, a la capacidad de
carga de los sistemas naturales y se manifiesta en la solución de contradicciones entre subsistemas
naturales y sociales del socio-ecosistema.
En este acercamiento, intentamos explicar la organización y dirección de los actores, individuos,
grupos y organizaciones, en el proceso de aprehensión de las necesidades sociales aparecidas en la
última década en relación con el medio ambiente sin poder agotar las múltiples aristas del tema,
pues cuestiones disímiles como las producciones, el consumo, el transporte, las instituciones, la
1
1
Investigadores Auxiliares; Grupo GEMAS, del Instituto de Filosofía, Cuba.
educación, las percepciones humanas sobre su entorno y las relaciones políticas, se vinculan con
la problemática ambiental, ya como fuerzas motrices de cambio o sujetas ellas a él. Son los
aspectos principales de la dimensión social del cambio global (Luna, A. 2002)i.
Muchas de las medidas revolucionarias precedentes a la década que nos interesa, coadyuvan a la
protección del medio ambiente y los recursos naturales mediante la transformación esencial
operada en relaciones sociales, incluidas las relaciones con el medio geográfico condicionante.
La propuesta del Programa del Moncada apuntó al mejoramiento sistémico del entorno cubano
desde lo social. Grandes transformaciones sociales y la promulgación de medidas y leyes cambiaron
desde sus raíces el sistema de la propiedad hegemónica, las relaciones políticas, y el sujeto de las
decisiones sobre el entorno y sus recursos2. La Ley de Reforma Agraria (1959) fue la primera que
modificó la propiedad y con ello las características de propiedad privada sobre los recursos
edáficos.
La constitución de 1976 normó el medio, la jurisdicción sobre sus elementos y dejó establecida
legalmente la soberanía del Estado sobre el espacio terrestre, aéreo, sobre los Recursos Naturales
(RN) y sobre el Medio Ambiente (MA); su artículo 27 fue soporte legal de las medidas emergentes
hasta ese momento y apoyaría otras futuras. Desde la constitución se “fortaleció la idea de la
integración del medio ambiente con el desarrollo económico y social sostenibles” (Fernández, M.
1999)ii. La creación en ese año de la Comisión Nacional para la protección del Medio Ambiente y
los Recursos Naturales (COMARNA) dentro de la antigua Academia de Ciencias de Cuba, fue un
paso en la integración de una racionalidad ambiental mediante la concertación de las necesidades
2
Es la sociedad como organización de relaciones y transformaciones, la que opera sobre un determinado ambiente, modelándolo en
entorno y recreando las relaciones que finalmente definen su identidad como sociedad- entorno. (Lavanderos y Malpartida “El
carácter social en la unidad organismo entorno”. En Cognición y Territorio página 48 p 5.
2
generadas por los problemas con las posibilidades de la investigación científica en una sociedad que
declaraba la necesidad de un futuro de hombres de ciencia3.
Hasta enero de 1981 es pertinente hablar de una racionalidad ambiental normativa fundamentada
científicamente basados en los resultados de investigación científica de los institutos y centros de
investigación adscritos a la extinta Academia de Ciencias de Cuba4 mayormente y otros mas.
Liderado por la COMARNA, esta racionalidad se caracterizó por una dinámica en pro de la
regulación de actividades y procesos emergentes en la economía. En esa fecha, la Ley 33 “De la
Protección del Medio Ambiente y del Uso Racional de los Recursos Naturales”, marcó un hito en
(Cánepa, C y Núñez, L.2000)iii, incluyó la definición del medio ambiente como “sistema de
elementos abióticos, bióticos y socioeconómicos con el que interactúa el hombre, a la vez que se
adapta al mismo, lo transforma y lo utiliza para satisfacer sus necesidades”. Esa fue “la primera Ley
de este tipo en el ámbito latinoamericano basada en los principios de propiedad social sobre los
medios de producción y el desarrollo planificado de la economía... (Luna 1995)iv; “se proyectó
hacia la planificación al establecer la relación entre recursos financieros y recursos en el “Plan
Único de Desarrollo Económico y Social del Estado Cubano”, modelo seguido por la planificación
centralizada que contemplaba la dimensión sectorial e insertaba en el contexto global mediante la
participación de nuestro país en los convenios internacionales sobre la materia” (IDEM). Una
medida avanzada por surgir en el contexto del socialismo, adoleció de la verticalidad sectorialista
del mencionado modelo de planificación existente hasta inicios de los noventa.
La centralización en la planificación, sumada al agotamiento del modelo de crecimiento extensivo
de la economía, el deterioro de relaciones económicas debido al bloqueo, el aumento del precio del
petróleo, la disminución del precio del azúcar, el incremento de la deuda externa por incremento de
3
Castro, Fidel discurso pronunciado (15 de enero de 1960) en la celebración del XX aniversario de la Sociedad Espeleológica de
Cuba , fecha que después se tomó como Día de la Ciencia en Cuba.
4
Otros aspectos de racionalidad teórica, subjetiva, económica conforman la racionalidad ambiental.
3
importaciones, la variación negativa de las tasas de cambio y el deterioro progresivo de las
relaciones comerciales con los países del campo socialista, promovieron desde mediados de los
80´s modificaciones-respuestas en el sector económico fundamentalmente, con implicaciones en
el ámbito social, en pro de erradicar esas deformaciones5. El proceso de rectificación de errores de
finales de esa década de los 80´s, por la historia antecedente de asimilación acrítica de ciertas
magnitudes y estructuras desde los primeros años del triunfo revolucionario; trascendió en
innovación y creatividad de soluciones alternativas en la incorporación concurrente de soluciones
múltiples; en la reorientación del desarrollo, la sustitución de las industrias energéticamente
intensivas y en la superación de un modelo productivo agrícola basado en insumos del exterior,
cumpliendo, sin ser su objetivo principios ecológicos generales.
Pero a partir del 1989 el derrumbe del campo socialista dejó a Cuba sin el 85% de sus relaciones
de intercambio, nos despojó no sólo de los insumos en exceso, sino de otros necesarios en una
economía que se había hecho dependiente de los insumos de alimentos del CAME. El período
especial, proceso socialmente doloroso, principalmente en los entornos urbanos6, industriales y
tecnógenos, promovió variaciones subsecuentes, impactos que modificaron incluso el carácter de la
relación entre sistemas naturales y sociales en el entorno cubano (Luna y Esquijarrosa 1995)v y que
no han sido aún suficientemente evaluado, al menos en términos ambientales dada la complejidad y
la multiplicidad de sus aspectos. El efecto fundamental -del fin de las relaciones- con un sistema
socialista que dejó de existir, provocó la disponibilidad de insumos todo tipo, lo cual merece
atención en cuanto al significado ecológico de la disminución de las entropías, del incremento de la
5
Las medidas fundamentales del Proceso de Rectificación de Errores y Tendencias Negativas a finales de los 80 apuntaron a: Aplicar
un sistema de dirección de la economía que sistematizara los intereses económicos de todas las instituciones económicas, no sólo de las
empresas estatales, eliminar el gigantismo empresarial, aumentar la productividad del trabajo y reducir los inventarios ociosos,
disminuir el déficit de intercambio comercial mediante aumento de las exportaciones; aumentar los ingresos de algunos sectores de la
población, priorizar la construcción de viviendas, ejecutar programas productivos agropecuarios, eliminar el mercado libre
campesino y las desigualdades que este generaba, luchar contra el delito económico y la corrupción.
6
El 80% de la población cubana reside en áreas urbanas.
4
independencia sistémica y del aumento de la eficiencia, el redimensionamiento, la reorganización y
la aparición de propiedades autárquicas en el sistema social.
La conformación de un sistema unipolar a principios de los noventa fue el cambio global más
significativo en cuanto a sus impactos en las esferas económica, social y política del sistemamundo. Esa modificación del contexto internacional impactó desde diferentes ámbitos la realidad
cubana. Los cambios ocurridos han sido tema de reflexión y debate aún no concluidos.
La crisis del final de los 80’s e inicios de los 90’s sacó a colación la necesidad del pensamiento
estratégico como filosofía de actuación capaz de propender al mantenimiento de una organización
social frente al cambio. Emergen la dirección y la planificación estratégica como alternativa al plan
único central aherrojado a períodos fijos quinquenales. La dirección estratégica de la planificación
es un elemento a considerarse en dos sentidos: primero como método selectivo de pensamiento
enfrentado a la complejidad de la realidad y segundo como procedimiento de acción respecto
del universo de los agentes del desarrollo regional” (Lavanderos, L. y Malpartida, A. 2001)vi.
La necesidad de cambios adaptativos al contexto, potenció la actividad política vinculada al
mantenimiento y el uso del poder para los fines del proyecto revolucionario con vistas a la
sostenibilidad del sistema mediante la transformación social consciente. Dentro de las relaciones
políticas emergentes en esta situación, la aplicación del pensamiento y planificación estratégicas en
materia ambiental, ha creado las condiciones para una serie de transformaciones constructivas que
trascienden a numerosas esferas de actividad social en Cuba. Las condiciones adversas del período
especial reforzaron la necesidad de comprender la incertidumbre de un entorno cambiante
como fuerza motriz de la transformación consciente de la sociedad hacia modos superiores
de interrelación y de organización. Con ello no sólo la Ley 33 (del 10 enero/1981), sujeta al plan
único de desarrollo social y económico de los ochenta, sino otras legislaciones, instrumentaron las
135 modificaciones hechas a la Constitución en julio de 1992, en la cual se realizaron cambios a la
5
totalidad de los capítulos, se introdujeron tres artículos nuevos, modificando 65 artículos, la
mayoría correspondiente al primer artículo de la Constitución referido a los fundamentos políticos,
económicos y sociales del estado cubano y el Artículo 15 sobre la propiedad estatal socialista
sobre las tierras excepto la de los agricultores pequeños y de las cooperativas (Cruz, T. 2002 op cit).
El medio ambiente “quedó fijado como sujeto de derecho”vii, según las nuevas concepciones
surgidas poco antes durante el mismo año en la Conferencia Cumbre del Medio Ambiente de Río
de Janeiro en 1992. De esa manera Cuba se convirtió en el primer estado en reflejar el concepto
de desarrollo sostenible7.
EL PROGRAMA NACIONAL DE MEDIO AMBIENTE Y DESARROLLO,
SIGNIFICACIÓN PARA LA POLÍTICA AMBIENTAL CUBANA.
SU
Cuba fue el primer país en incorporar principios de la Agenda 21 a su Constitución, como parte de
las reformas hechas a ese cuerpo legal en 1992. El Programa Nacional de Medio Ambiente y
Desarrollo (PNMAD), instrumento de implementación en el país de los acuerdos internacionales de
la CNUMAD de Río 92 . Este fue aprobado en 1993 con “flexibilidad para poder incorporar de
forma continua los constantes cambios de la realidad objetiva, los nuevos conocimientos científicotécnicos y las nuevas necesidades e intereses...” (Fernández, M. 1999 op cit.), una muestra de la
capacidad de respuesta rápida8, basada en la potencialidad de los recursos humanos preparados
7
en las bases conceptuales del grupo de trabajo como “proceso de elevación sostenida y equitativa de la calidad de vida de las
personas, mediante el cual se procura el crecimiento económico y el mejoramiento social, en una combinación armónica con la
protección del medio ambiente; de modo que se satisfacen las necesidades de las actuales generaciones, sin poner en riesgo la
satisfacción de las necesidades de las generaciones futuras”. Con los resultados posteriores a las crisis de la década del 90 asumiremos
un desarrollo humano sobre bases socialistas, diferenciado por su carácter singular de estar destinado a satisfacer necesidades básicas,
endógeno por voluntad permanente de no imitar en lo posible modelos y valores externos y que es independiente de estructuras
foráneas, con bases estructurales democráticas para el manejo participativo de los recursos y para la repartición equitativa de los
resultados
8
El rapid feed back que mencionan los teóricos de la capacidad adaptativa de los sistemas socio ecológicos complejos (Ver Quinlan, A.
2003)8
6
desde el punto de vista cognoscitivo como parte de la racionalidad ambiental subjetiva y la
racionalidad ambiental teórica9.
Especial atención se dedica a cuestiones territoriales con condiciones especiales como el desarrollo
sostenible de grupos humanos en condiciones de montaña, la protección de los asentamientos
humanos vulnerables a riesgos por fenómenos naturales o de otro origen10. Estos lugares al margen
del desarrollo por su carácter geográfico periférico fueron los más favorecidos por las principales
leyes y medidas del gobierno revolucionario. La amplia base social de participación ciudadana y en
el plano operativo la capacidad movilizativa masiva desplegada como capacidad de respuesta ante
contingencias en las acciones de prevención y defensa civil desarrolladas durante los años de
Revolución en el poder resultan factores diferenciadores de sostenibilidad social y política.
Uno de los objetivos básicos de la gestión ambiental, ese sistema de acciones y mecanismos
mediante los cuales opera la política ambiental,
es “Fortalecer los mecanismos de coordinación
entre Unidades de Medio Ambiente y los Consejos Populares” en los territorios. Desde la cuestión
ambiental emerge la alternativa descentralizadora de lo sectorial hacia una dirección estratégica
que manifiesta el desarrollo desde lo espacial de los territorios. Esta es la forma de establecer
redundancia o repetición de los elementos de sostenibilidad política y ecológica desde
dos
ámbitos diferentes, el sectorial y el territorial. Ello da respuesta también a la heterogeneidad
espacial condicionada por factores de localización geográfica. Desde este punto de vista la gestión
territorial significa una nueva fase para la política ambiental del país a tenor de los cambios en el
contexto y en el interior del mismo. El período más dinámico de nuestra política ambiental y que
viene a dar nuevos puntos de proyección y realización de políticas a partir de los resultados
obtenidos, se aceleró en las sinergias logradas por la articulación sectorial territorial y social
9
Que han sido explicados en el Informe de Resultados “Algunos conceptos de las Ciencias Sociales relacionados e con el paradigma
ambiental del desarrollo sostenible” Luna, Nodarse y colectivo de autores 2001. Instituto de Filosofía.
10
La amplia participación y respuesta en virtud de la capacidad de movilización masiva se evidencia diferencia en el número de
víctimas que dejan en otros países de la región del Caribe los fenómenos meteorológicos por ejemplo.
7
previstas en el PNMAD en la gestión ambiental. El alcance del PNMAD cubano
como
instrumento sistémico vinculante se multiplica en lo sectorial, y en lo territorial, visto el último
como el espacio geográfico de la gestión, de la protección de los valores del patrimonio local, del
medio donde se trabajan y actúan los grupos sociales, la protección del ambiente en la esfera de
producciones industriales limpias, la gestión racional de los desechos sólidos, los denominados
peligrosos y de los productos químico tóxicos y radioactivos, de la educación , capacitación y toma
de conciencia; como objetivo de los grupos sociales y de organizaciones populares que en Cuba
actúan como soportes de la sociedad.
Sus cinco últimos capítulos están dedicados a sectores sociales como la mujer, campesino, la
infancia y la juventud, los trabajadores y a las organizaciones no gubernamentales.
Prevé la multiplicación de la participación femenina como agente social del desarrollo en sus
roles diversos funcionando como grupo que penetra diversos patrones de interacción social, la
erige promotora de la conciencia jurídica ambiental y de la educación ambiental, le vincula a lo
local del desarrollo industrial y la producción sostenible de alimentos.
Concibe jóvenes y niños en acciones de trabajo ambiental, de movilización y de reflexión sobre el
tema para la creación de hábitos mediante la educación ambiental, la divulgación y la información,
para crear capacidad de percepción ambiental y promoción de participación.
Respecto al sector campesino, se expresa en términos de continuar, incrementar y extender,
motivado por la vanguardia que este sector en la protección de un recurso fundamental, la tierra.
La Agroecología como alternativa a los problemas que se iniciaron en los 80’s, ante los modelos
importados sobredimensionados, exceso de insumos agroquímicos y en unidades de Horse Power
por hectárea de tierra; sentó pautas en los movimientos sociales ambientalistas en Cuba.
Un capítulo aparte se dedica a las ONGs, sobre la base legal que ofrece la Constitución cubana a las
organizaciones sociales y las de masas, menciona un listado que se reproduce en el ofrecido en el
8
resultado anterior11. Fortalece su función, coordina los esfuerzos y capacidades que poseen, y lograr
mayor comunicación entre ellas y los otros ejecutantes del PNMAD.
El PNMAD fue realizado con la participación de quince ministerios existentes a esa fecha12, ocho
instituciones dedicadas a la investigación o normación de actividades sociales y/o económicas y
seis comités estatales, demostrando su capacidad para incrementar la participación en la
formulación de políticas y en la adopción de decisiones. Ello da fe del tipo de acción participativa
que se desea estimular mediante las ONGs en el PNMAD, el instrumento de mayor alcance en
la política ambiental cubana de esta década.
El PNMAD estableció los vínculos entre los aspectos sociales y económicos del desarrollo
estratégico de la sociedad cubana con el fundamento ambientalista del desarrollo sostenible. Un
documento elaborado de manera participativa y cuya trascendencia en la integración de la sociedad
se efectúa en la dimensión sectorial, espacial-territorial y social grupal. Significa la articulación de
los programas de desarrollo económico y social de la sociedad cubana con el fundamento teórico
ambientalista del Desarrollo Sostenible, estableciendo nuevas bases de sostenibilidad políticas y
ecológicas para todos y cada uno de los programas de la Revolución existentes en ese momento.
LOS CAMBIOS EN LA ADMINISTRACIÓN CENTRAL DEL ESTADO
El hito marcado por la reorganización en julio de 1994 de los Organismos de la Administración
Central del Estado tuvo profundos impactos en la esfera de la política ambiental al establecer
nuevos elementos, instituciones y nuevas relaciones de diferente índole13 al “adecuar
sus
funciones a las condiciones de Período Especial en Tiempo de Paz y adaptarlas mejor a las
relaciones de intercambio y colaboración
11
que desarrolla nuestro país
en las presentes
Ver acápite ¿quiénes son los ambientalistas en Cuba? Del resultado antecedente del proyecto “Gestión ambiental e integración
social en Cuba”. En: Informe técnico Instituto de Filosofía, CITMA, Cuba
12
Recordar que el PNMAD es antecedente a los cambios en la OACEs que se analiza seguidamente.
13
Decreto Ley 147 : Gaceta Oficial de la Republica de Cuba, Edición Extraordinaria, La Habana, jueves 21 de abril de 1994, Año
XCII.
9
circunstancias internacionales”. Dos modificaciones potenciaron de forma sinérgica el alcance de
los cambios en otras instituciones e incluso tuvieron impacto en el funcionamiento de elementos
del sistema social y sus relaciones fueron:
1. El cambio de la Junta Central de Planificación por la denominación de Ministerio de Economía
y Planificación, con modificación significativa en sus funciones.
2. La instauración del Ministerio de Ciencia, Tecnología y
Medio Ambiente como nueva
denominación de la antecedente Academia de Ciencias de Cuba, que asume además de las
funciones
de la Academia las de la Comisión de Energía Atómica de Cuba y Secretaría de
Asuntos Nucleares.
Lo programado en la dimensión ambiental y el uso racional de los recursos por los sectores, se
ejecuta en el territorio, reproduciendo en el ámbito territorial, la estrategia para manejo y gerencia
de los recursos naturales. Nuevos actores y nuevas relaciones económicas de mercado emergentes
en el socialismo cubano remontaron la actividad ambiental, hasta entonces demarcada en las
esferas científicas y de gestión de recursos naturales, a la esfera política. La política ambiental se
institucionalizó como sistema centrado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente,
Organismo de la Administración Central del Estado14 con la participación del resto de las OACE’s,
las empresas, uniones de empresas y demás personas jurídicas, nacionales y extranjeras así como los
órganos de Gobierno del Poder Popular y las delegaciones territoriales del CITMA.
De esa manera la política ambiental comienza a actuar como sistema de la autorregulación, el
autocontrol y la autodirección del desarrollo sostenible, de su devenir en sentido progresivo y a
favor de la solución de contradicciones entre subsistemas naturales y sociales dados por los modos
“...rector de la política ambiental , encargado de desarrollar la estrategia y concertar las acciones
encaminadas a mantener los logros ambientales alcanzados en el proceso revolucionario y contribuir a
superar las deficiencias existentes, a la vez que loa aspectos ambientales sean tenidos en cuenta en las
políticas, programas y planes de desarrollo a todos los niveles” Estrategia Ambiental Nacional 1997 pág.
5.
14
10
de relación establecidos en los procesos de satisfacción de necesidades sociales, condicionándolos a
la capacidad de carga de los sistemas naturales.
En 1997 la Ley 81 (del Medio Ambiente) “Marco Legal para normar esferas en específico” refleja
en lo jurídico las concepciones estratégicas en las decisiones. Define atribuciones y obligaciones, y
las personas naturales y jurídicas que actúan en la protección y el uso racional del medio ambiente.
Se confirman los recursos y el medio ambiente como patrimonio nacional y se expresan los
principios básicos para su gestión a través de los instrumentos de la política ambiental: el PNMAD
en primera instancia,
la legislación ambiental, la investigación científica y tecnológica, la
educación y divulgación ambiental, los instrumentos de regulación económica, las evaluaciones de
impacto ambiental y las licencias ambientales de las nuevas inversiones económicas y el
ordenamiento ambiental, los indicadores ambientales y la inspección ambiental del estado,
estableciendo esferas de protección y acciones de gestión ambiental pertinentes casuísticamente. Se
revisan algunas normas referentes a la derogada Ley 33/1981 y con posterioridad se elaboran
decretos específicos15.
La Estrategia Ambiental Nacional concebida en 1997 de forma participativa establece los objetivos
y principios básicos “para continuar perfeccionando el trabajo ambiental además de solucionar los
errores y deficiencias...en las nuevas condiciones económicas que se vienen operando”, es el
documento que establece las vías para lograr los objetivos estratégicos de la política ambiental en
Cuba, fuertemente relacionados
con el
desarrollo
socialista. Da continuidad al proceso de
rectificación de errores de manera estratégica al concebir el entorno cambiante. Sus principios
orientan la institución ministerial al fijar los objetivos de su política tanto a lo interno, como a lo
externo de los sectores de actividad social y los territorios. La demanda de una concepción
Decretos sobre Seguridad Biológica 190/1999, sobre el Sistema Nacional de Áreas Protegidas 201/1999,
el Decreto Ley 200 /1999 Sobre Contravenciones en Materia de Medio Ambiente y 212/2000 Ley de gestión
de la Zona Costera; entre otras.
15
11
integral del desarrollo sostenible como proceso donde las políticas de desarrollo económico,
científico-tecnológica, fiscales, de comercio, energía, agricultura, industria, de preparación para la
defensa y otras, se enlaza con las exigencias
de la protección del medio ambiente y el uso
sostenible de los recursos naturales en un marco de justicia y equidad social.
12
Está abierto el debate, por lo que entre sus significaciones está la convocatoria de los disímiles
actores
de la sociedad cubana a la concientización y la participación16.
Se produce sinergia en concurrencia de objetivos territoriales-sectoriales17 y la limitación por
discordancia en objetivos o por limitaciones del territorio que requiere concertación y gobierno. Se
abren nuevas posibilidades para participación de la base, en los territorios a partir de las políticas
ambientales y las acciones de gestión de este carácter.
La política ambiental establecida institucionalmente en la Estrategia Ambiental Nacional, reflejo de
la implementación de la Ley 81/1997, es la proyección a la política de los principios defendidos
en materia de medio ambiente sobre soberanía y equidad social, basado en la armonía con el medio
geográficoviii.
EL SIGNIFICADO DE LA POLÍTICA AMBIENTAL PARA EL DESARROLLO DEL
SISTEMA SOCIAL CUBANO
El mantenimiento del sistema socialista de la revolución cubana supone un cambio en los niveles
entrópicos de un sistema de tremenda significación desde el punto de vista de su equilibrio, y
mantenimiento de su estructura, sus funciones y su dinámica esenciales18. La última década -entre
Ver en la base de datos Ciencias Sociales y entorno-Cuba, los artículos recogidos de forma no
convencional en el CD-Room Desarrollo sostenible: Algo más que un concepto. Memorias del Taller del
mismo nombre convocado por el Consejo de Iglesias de Cuba. Artículos de Arce, R, del Consejo de
Iglesias de Cuba, Orlando Rey Santos de la Dirección Ambiental del CITMA, Cary Cruz de la Fundación
de la Naturaleza y el Hombre del MINCULT, Luna, A. del Instituto de Filosofía.
17 Redundancia sistémica
18 Un fenómeno que llamó la atención fue el enverdecimento de la agricultura cubana con el movimiento
agroecológico. Nombres como Bourke, M Peter Rosset, Altieri y otros encontraron en Cuba la aplicación
práctica a la “Ecology action” en agricultura los resultados de la “vuelta a las raíces” y la utilidad de la
disminución de la entropía en los socioecosistemas agrícolas. Mas allá de la Agroecología, en el
pensamiento sobre el desarrollo y el mantenimiento de su sentido progresivo, nombres como Theodore
Benton; Frederick Gale; James Robertson, Hans-Peter Dürr , Cristopher Flavin, Clarke, Lane, P. y Parry,
R. Congregados en un evento sobre sociedad y ecología convocado en Cuba, fueron ejemplo del
pensamiento ambientalista que presta atención al tipo y carácter de las relaciones sociales.
16
13
1992 y el 2002- representó
el período “de
máximo en el progreso
de nuestras políticas
ambientales y en su inserción en las políticas económicas y de desarrollo” (Rey, O. 2002)ix, en
que la sociedad cubana asume el debate acerca del desarrollo, la sostenibilidad, la participación y
todos los términos que se expresan en la apertura del aparato conceptual referente a los temas
relacionados con la sociedad y el paradigma ambiental de su desarrollo sostenible19 (Luna. A. y
Nodarse, N. 2001)x, y la sostenibilidad del desarrollo humano como “bienestar persistente y
equitativo a largo plazo” (Neil, W. 2003)xi. Precisamente
en esa sostenibilidad aparece la
contradicción entre el cambio progresivo y la persistencia que implica sostenibilidad del proceso
de desarrollo que transcurre entre los ámbitos ecológicos, económicos, sociales y políticos del
desarrollo sostenible. La política ambiental y el sistema de relaciones
establecido entre sus
elementos han sido factores de autoorganización del organismo social cubano y de resistencia ante
la crisis de la década de los noventa, manteniendo estable su objetivo sistémico y emprender la
transformación consciente de muchos de los aspectos que desde lo interno influyeron en el
agotamiento del modelo
de organización productiva. La estabilidad expresa “habilidad para
persistir mediante la adaptación20”.
Las facultades potenciales para la transformación social presentes en un socio ecosistema, están
dadas por la cantidad de cambios, variaciones o modificaciones que puede
experimentar
manteniendo en esencia la misma estructura, función, identidad; su capacidad de autoorganizarse,
mediante el aprendizaje “ aprender”, tomar de su “memoria histórica y adaptarse a los cambios del
entorno de manera estratégica manteniendo su identidad (Quinlan, A. 2003)xii, la persistencia
misma del proyecto social revolucionario ante la crisis del contexto global de la década de los
19
Estos son las estructuras sociales, su dinámica y la dirección de esta dinámica hacia una racionalidad ambiental.
Building resilience to promote sustainability. An agenda for coping with globalization and promoting justice. En IHDP UPDATE,
News letter of the International Human Dimensions Programme on global environmental change.
# 02 / 2003 ISSN 1727-155x. International Council for Social Science.
20
14
noventa tiene su explicación en el despliegue de las transformaciones sociales conscientes, en los
profundos cambios entre los cuales está la elevación del rol de modos instrumentales jurídicos en la
política ambiental que aportó facultad de autoorganización e hizo posibles medidas necesarias
como la apertura a las inversiones extranjeras.
Entre los atributos sistémicos que tienden a reforzar la capacidad de adaptación de los sistemas
complejos
son: la redundancia o repetición de sus componentes en diferentes ámbitos, la
diversidad de sus elementos, la modularidad, la heterogeneidad espacial, la respuesta rápida
(rapid feed back) y la “memoria ecológica” como conservación de los resultados de interacción en
el ecosistema y la memoria social. La aplicación de estos conceptos para explicar el papel de la
política y la gestión ambiental en la integración y el mantenimiento de las funciones del sistema
social en Cuba es una proyección desde la práctica revolucionaria cubana. La política ambiental
cubana ha contribuido al desarrollo de estos atributos desde el cambio mismo de la planificación
centralizada hacia la dirección estratégica, ha sentado las bases para la inserción de elementos
nuevos que diversifican las estructuras sociales en la dinámica del desarrollo social sostenible, por
lo cual opera como habilitación de las transformaciones en la sociedad cubana, actuando como
catalizador del proceso dinámico del desarrollo sostenible y factor de ascenso a niveles superiores
en la organización de nuestro sistema socio ecológico mediante el cambio progresivo de sus
elementos y la modificación consciente de las relaciones entre estos. Es factor de la integración de
sus objetivos y entre estos y el entorno significativo por la forma en que se realiza la conducción
de la política ambiental en el sentido más amplio, las instituciones que participan en la solución de
esos problemas y las funciones que cumplen dentro del organismo social y las relaciones políticas
que establece estimulando la dinámica de interacciones entre grupos sociales e individuos que los
componen, que a lo interno protagonizan
o participan en la estabilidad y la transformación
progresiva del sistema político en pro del logro de sus objetivos.
15
16
REFERENCIAS
i
Luna , A. La dimensión social del cambio global en Cuba. Un nuevo reto. En Revista cubana de Ciencias
Sociales. No 32 Año 2001 ISSN –0138-6425. páginas 45-52.
ii
Fernández, Modesto 1999 Política ambiental cubana, reflexiones para un desarrollo sostenible. En Cuba
Verde; en busca de un modelo para la sustentabilidad en el siglo XXI. . Delgado, C. Editorial José
Martí La Habana ISBN 959-09-0177-8. Páginas 370-380.
iii
Cánepa, C. y Núñez, L. 2000: “Sociologizando el medio ambiente en Cuba”. Informe técnico en
Instituto de Filosofía CITMA
iv
Luna , A, Aspectos territoriales del estudio y la utilización de los recursos naturales en Cuba” tesis para
optar por el Grado científico de Dr. en Ciencias Geográficas. En Instituto de Geografía Tropical.
La Habana. Cuba.
v
Luna, A. y Esquijarrosa, E. 1995: Insertion in the World economic system; a challenge to the cuban
geographers. Artículo presentado en: Regional Conference of Latin American Countries. “LATIN
AMERICA IN THE WORLD: ENVIRONMENT, SOCIETY AND DEVELOPMENT”. July 31august 5. International Conference Center Havana, Cuba. Pgs 173.
vi
Lavanderos, L. Y Malpartida, A. 2001: Cognición y territorio. Senado de la República de Chile.
vii
Cruz, T. 2003: Tutela jurídica a los arrecifes coralinos. En revista Ciencia, Innovación y
Desarrollo. Volumen 7 # 2 2002 pgs. 16-19. ISSN 1023-1722. Editorial Academia, La
Habana
viii
Bayón, P. 2003: Educación Ambiental: promoción de participación y valores para la
transformación social sostenible. Informe técnico. En Instituto de Filosofía, CITMA, pág
11-20, diciembre 2003. 42 p.
ix
Rey, O. 2002: Reflexiones después de una Cumbre En revista Ciencia, Tecnología y
Desarrollo volumen 7 #2 de2002b Editorial Academia ISSN 1023-1722 páginas 1015.
x
Luna, A. Nodarse, N. Durán, O. “Algunos conceptos de las Ciencias sociales relacionados
con el paradigma ambiental”. Informe técnico en Instituto de Filosofía. CITMA
diciembre de 2001.
xi
Neil, W, : Building resilience to promote sustainability. An agenda for coping with
globalization and promoting justice. En IHDP UPDATE, News letter of the
International Human Dimensions Programme on global environmental change. # 02
/ 2003. ISSN 1727-155x. International Council for Social Science.
xii
Quinlan, A. 2003 Resilience and adaptive capacity. Key components of sustainable socialecological systems. En IHDP News Letter. 02/2003. páginas 4-5
17
Descargar