REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS ESCUELA DE DERECHO PENSAMIENTO POLÌTICO UNVERSAL MSc. Claudia M Alvarado H. Abg. Maracaibo, 2014. CRISTIANISMO COMO IDEOLOGÍA POLÍTICA El cristianismo, es fundamentalmente una religión, pero es también “un fenómeno de trascendental significación social y política, por haber generado una movilización humana da vas proporciones, orientadas por determinados valores éticos y morales, fundada en una particular concepción del individuo, la sociedad y el poder ASOCIACIÓN DEL CRISTIANISMO AL IMPERIO ROMANO En un principio el crististianismo fue perseguido por las autoridades romanas, incluso era considerado como peligroso e inconveniente para la sociedad romana, por tal motivo muchos cristianos fueron fugitivos, torturados incluso ejecutados. Pero los cristianos crecieron dentro del imperio romano, y llego a ser una “fe” importante entre los pobladores de roma, al punto de que paso a ser un culto prohibido a un culto autorizado gracias al Edicto de Milán en el año 313. Luego se convirtió en la Religión Oficial del Imperio Romano, mediante el Edicto de Tesalónica en el año 380, con lo que infligió la derrota del paganismo. El cristianismo fue impuesto a todo los súbditos romanos, al tiempo que el paganismo fue prohibido, causando o destruyendo sus templos. “Al amparo del Estado la comunidad de Cristianos crece, y se estructura como una asamblea denominada iglesia, con una jerarquía claramente definida, que gira en torno al Obispo de Roma, el cual empieza a tener casi la misma jerarquía y poder que el mismo emperador. ASOCIACIÓN DEL CRISTIANISMO AL IMPERIO ROMANO Desde ese entonces, la iglesia cristiana, inicio una campaña para perseguir las corrientes no cristianas y paganas dentro del imperio romano, buscando la unidad en la iglesia, situación que a llegado a nuestros días, ya que vemos en los ritos de la iglesia católica, muchos aspectos del imperio romano incorporados en su liturgia”. La inserción del cristianismo en el interior de las estructuras políticas y sociales del estado romano (formando una auténtica simbiosis) favorecía el peso político y social de lo sagrado sobre las estructuras paganas del Imperio. El cristianismo aceptaba plenamente la antigua consigna de su fundador de “dar al Cesar, lo que es del Cesar”, pero rechazaba todas aquellas formas litúrgicas que había conseguido desarrollar la cultura romana a lo largo del tiempo. De esta manera el cristianismo se extendió por todo el imperio romano y sus provincias. Incluso mucho después que el imperio romano se fracciono, la iglesia siguió creciendo y expandiéndose. TESIS CRISTIANA • Dependencia del hombre al poder infinito de un Dios Padre. • El individuo en un ser carente de autosuficiencia y autonómica, porque nada puede este sin la gracia divina. • Le adjudica al ser humano un fin, el cual es reencontrarse con su Dios creador, para lo cual es necesaria la iglesia para ayudar a este fin. • La Existencia de un ser superior, un ser de Amor, a diferencia de dioses de otras religiones donde el Dios esta asociado al Poder. • Se considera a todos los humanos como hijos de Dios, lo cual hace la Hermandad. • Se pone en segundo lugar los afanes materiales y terrenales, dando primacía a los aspectos espirituales. • La existencia de un Reino de Dios, alterno al humano. En cuanto a los aspectos políticos y sociales de la época, como: • La Liberación de Esclavos. • Intervención de la iglesia en asuntos de gobierno • Las Cruzadas • La Inquisición EDICTO DE MILÁN (313) • El cristianismo se convirtió en una Religión Licita • Se suspendió el culto a los dioses paganos. • Se Incluyeron las bases del cristianismo en la Política Romana, lo cual fue impuesta en todo el Imperio Romano. • Abolió el suplicio de la Cruz. • Prohibió los trabajos serviles los domingos. • Atacó el infanticidio. • Mejoró la condición de los esclavos. EDICTO DE TESALÓNICA, 28 DE FEBRERO DEL 380 Todos nuestros pueblos (...) deben adherirse a la fe trasmitida a los romanos por el apóstol Pedro, la que profesan el pontífice Dámaso y el obispo Pedro de Alejandría (...), o sea, reconocer, de acuerdo con la enseñanza apostólica y la doctrina evangélica, la Divinidad una y la Santa Trinidad del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Únicamente los que observan esta ley tienen derecho al título de cristianos católicos. En cuanto a los otros, estos insensatos extravagantes, son heréticos y fulminados por la infamia, sus lugares de reunión no tienen derecho a llevar el nombre de iglesias, serán sometidos a la venganza de Dios y después a la nuestra (...)