Homenaje a Juan Antonio Samaranch (PADE-I 62), presidente vitalicio del COI Juan Antonio Samaranch: saber ser, saber estar Samaranch ha sido un hombre de empresa en el mundo del deporte –gestionando el COI– y un deportista en el mundo de la empresa –superando los obstáculos de un movimiento en plena bancarrota. El saber ser en cada momento y saber estar en cada lugar ha tenido mucho que ver con su exitosa trayectoria El IESE siempre ha considerado a los Antiguos Alumnos como uno de sus mejores tesoros. A través de la Agrupación de Miembros se trabaja constantemente para mantener ese vínculo fuerte, vivo, dinámico y duradero. El acto de homenaje a Samaranch es una muestra de ello. Juan Antonio Samaranch, que participó en el Programa PADE en 1962, ha mantenido siempre el contacto con el IESE, primero como Antiguo Alumno y, posteriormente, también como miembro del IAB (International Advisory Board). Seguramente este vínculo es el responsable de que el presidente vitalicio del Comité Olímpico Internacional, (COI), aceptara la propuesta de Jordi Canals de organizar un acto en su homenaje, algo que diferentes instituciones le habían propuesto anteriormente y que nunca aceptó. El acto congregó en el IESE a representantes de todos los sectores de la sociedad catalana: políticos, economistas, deportistas... Entre otros, Jordi Pujol, que presidía el acto, Iñaki Urdangarín, Julia García-Valdecasas, Joan Clos, Santiago Fisas (PADE-I 92), Narcís Serra, Josep Lluís Núñez, Leopoldo Rodés, Josep Vilarasau, Marian Puig (PDG-I 64), Josep Oliu, Salvador Gabarró (PDG-I 74)... El director general del IESE, Jordi Canals, inauguró el acto con unas palabras de agradecimiento a Juan Antonio Samaranch y recordó su intensa relación con el IESE. Seguidamente, el profesor Santiago Álvarez de Mon habló del paralelismo empresa-deporte: «dos mundos proclives al liderazgo, donde es necesario tener una visión futura, ver más allá de hoy...». 80 Por su parte, Leopoldo Rodés, presidente de Media Planning Group, aprovechó la ocasión para reivindicar el papel de los empresarios catalanes en los Juegos Olímpicos de Barcelona, y afirmó: «su respuesta fue espectacular. Y sin ninguna duda, la primera piedra de la candidatura Barcelona ‘92 la pusieron y la financiaron los empresarios». Josep Vilarasau, actual presidente de “la Caixa” y director general de la institución durante muchos años, habló de Samaranch como una persona ilusionada, agradecida, pragmática, con gran sentido común: «Su forma de hacer las cosas se dejó sentir en “la Caixa”, y a pesar de sus obligaciones profesionales no dejó de asistir ni a un solo consejo. En los malos momentos de la entidad estuvo siempre a mi lado. Fue mi apoyo y mi maestro». Cuando Vilarasau dimitió de su cargo de director general, Samaranch le cedió el lugar como presidente, un gesto más de esa cualidad tan notable en Samaranch, ese saber estar siempre en el lugar correcto. El actual presidente del COI, Jacques Rogger, que también quiso participar en este homenaje, habló de Samaranch como «el hombre que cambió el movimiento olímpico. Su paso por el COI es sinónimo de adaptación a los tiempos, de desarrollo y de futuro. Su lenguaje: un movimiento olímpico fuerte, unido y, por encima de todo, independiente. La clave de su política: el saneamiento del COI, que encontró en plena bancarrota». Joan Clos, alcalde de Barcelona, afirmó: «Después de los Juegos, Barcelona se ha convertido en la primera ciudad europea en número de personas afiliadas a una entidad deportiva, y en diez años se ha doblado el número de instalaciones deportivas. Este es el particular homenaje de la ciudad de Barcelona a Samaranch». Por su parte, Samaranch dedicó su intervención a explicar su trayectoria durante 21 años al frente del COI. «El deporte puede llegar donde no llegan los políticos», afirmó Samaranch, refiriéndose a que las dos Coreas desfilaran en los Juegos de Sidney bajo una misma bandera, o que dentro del COI China y Taiwan existen como dos comités olímpicos diferentes. «Somos la única organización internacional que lo ha conseguido, y me siento muy orgulloso de ello. Gestos como éstos reflejan un deporte a favor de la paz, la humildad y la solidaridad de todos los pueblos del mundo», confesó Samaranch. Su mandato como presidente del COI también se ha caracterizado por un esfuerzo en la promoción de la mujer en los Juegos. Muestra de ello, en el primer COI que dirigió se eligieron a dos mujeres como nuevos miembros del mismo. Jordi Pujol, que clausuró el acto, recordó que «los Juegos de Barcelona fueron posible gracias al entendimiento político que hubo entre las diferentes Administraciones. Algo que París no consiguió y que fue fundamental para que Barcelona ‘92 fuera una realidad». Samaranch se ha convertido en un modelo de referencia como gerente económico y mediador político por su saber ser en cada momento y saber estar en cada lugar, fiel a unos valores humanos que lo han convertido en un ejemplo universal, más allá de las fronteras de la empresa y el deporte. A. Olivas IESE MARZO 2003 / Revista de Antiguos Alumnos 1 3 2 4 6 5 7 8 9 1 José Martínez-Rovira (PADE-I 84), Media Planning Group, Josep Vilarasau, “la Caixa”, Leopoldo Rodés, Media Planning Group, y el profesor Santiago Álvarez de Mon. 2 Julia García-Valdecasas, delegada del Gobierno en Cataluña, Salvador Gabarró (PDG-I 74), Marian Puig (PDG-I 64), Corporación Puig, y Josep Oliu, Banc Sabadell. 3 Juan Antonio Gómez Angulo, secretario de Estado para el Deporte; Jordi Vilajoana, conseller de Cultura de la Generalitat de Cataluña, Miquel Valls (PDG-II 75), presidente de la Cambra de Comerç, Indústria i Navegació de Barcelona, y Narcís Serra. del COI. 9 4 Juan Antonio Samaranch (PADE-I 62). 7 5 Josep Oliu, junto a Iñaki Undargarín, duque de Palma. Su hija, María Teresa, también estuvo presente durante el acto de homenaje. 8 6 Jacques Rogger, actual presidente Jordi Pujol, President de la Generalitat de Catalunya. Jordi Canals, José Marínez-Rovira, Jordi Vilajoana, Alex Gilady, Jacques Rogger, Jordi Pujol, Pere Miró, Juan Antonio Samaranch, Leopoldo Rodés, Joan Clos, Josep Vilarasau, Iñaki Urdangarín y Juan Antonio Gómez Angulo. IESE MARZO 2003 / Revista de Antiguos Alumnos 81