LA FAMILIA: FUNCIONES Y ESTILOS EDUCATIVOS. Juan Manuel Alarcón Fernández. www.psiquiros.es Elementos del sistema familiar. La estructura familiar, la componen los miembros de la familia organizados en subsistemas entre los que existen límites. La dinámica familiar, o vínculos relacionales entre los integrantes de la familia. Está articulada por emociones, comunicaciones, normas y roles. El ciclo vital de la familia, supone una serie de fases más o menos normativas que atraviesa la familia como sistema (noviazgo, matrimonio, llegada de los hijos,...). SUBSISTEMA CONYUGAL. Integrado por marido y mujer y correspondiente al vínculo afectivo que los ha unido para compartir intereses, metas, objetivos y aspiraciones. En este subsistema solo se tiene en cuenta lo que une a ambos como pareja, prescindiendo de otras particularidades que pueden darse en los mismos, como las de ser al mismo tiempo padre y madre, hijo e hija,... Compromisos de la pareja. Proyecto común. Afecto mutuo. Respeto al proceso del otro. Garantizar la intimidad y la vida en común. Favorecer los momentos de ocio y disfrute. Apoyarse en las decisiones. Ser mucho más que “padres”. SUBSISTEMA PARENTAL. El vínculo que estructura este subsistema se centra en la realidad relacional que supone para ambos el ser progenitores. Está integrado por el hombre-padre y la mujer-madre, realidades que originan unos vínculos afectivos con uno o más seres del sistema. La realidad de ser padre o ser madre es el elemento constitutivo que da origen a este tipo de subsistema. Compromisos de los padres. Cuidar y “alimentar a los hijos”. Favorecer el desarrollo madurativo. Dar y recibir afecto. Crear un ámbito que ofrezca seguridad. Crear una cultura familiar. Apoyar y respetar los procesos de los hijos. ¡PREPARAR PARA LA VIDA! SUBSISTEMA FILIAL. Está integrado por los hijos que constituyen un núcleo diferenciado de miembros del sistema. El subsistema filial puede adquirir modalidades distintas si dentro de la fratría se distinguen núcleos propios en atención a las características diferenciales en función del sexo, edad, número de hermanos, generaciones,... Compromisos de los hermanos. Respetar las diferencias. Colaborar unos con otros. Cooperar en la dinámica familiar. Ser corresponsables en las tareas. Respetar a los “mayores”. Experimentar la experiencia comunitaria. Enriquecer la cultura familiar. RELACIÓN CON LA ESCUELA: EL PAPEL DE LOS PADRES. ·Como profesores: ayudando a los niños en sus casas. ·De apoyo: contribuyendo en la escuela con sus habilidades. ·Como defensores: ayudando a los niños a recibir el trato justo. · Como tomadores de decisiones: participando con la escuela para resolver problemas juntos en todos los niveles. DEMANDAS DE LA FAMILIA A LA ESCUELA. Eficiencia en el servicio educativo: Las familias piden una buena experiencias. base de conocimientos y Formación en valores sólida y diversificada: Que la escuela prepare a sus hijos para enfrentar responsablemente las dificultades y riesgos de la vida social. Una escuela consejera y orientadora. Trato cálido y personalizado: Los padres esperan trato personalizado, que consideren a sus hijos como personas individuales. Desean manifestaciones de calidez, cariño, preocupación y protección. DEMANDAS DE LA ESCUELA A LA FAMILIA. Apoyo en exigencias cotidianas: Que la familia garantice el cumplimiento de aspectos formales. Apoyo en el trabajo escolar diario: Refuerzo en los contenidos trabajados en clase, proveer a los niños de múltiples materiales de consulta, cumplir con las tareas, fomento de hábitos de estudio,… Adultos acogedores con los niños: Los docentes piden a los padres afectividad en la relación con sus hijos. Quisieran que ellos fomentaran: paseos, conversaciones, juegos,... El compromiso con la vida. La familia ha de proyectarse hacia la vida: Abierta a los cambios y responsable de la transformación social. Ha de estar vinculada a la Escuela y a las otras instancias educativas. Los padres deben hacer una opción firme por su formación como tales. ¿Qué es Educar? a) “Es hacer que la persona crezca y madure en un proceso orientado por valores”. a) Es ayudar a nuestros hijos a la autonomía existencial y prepararlos para afrontar la vida que les espera. Dificultades actuales. • Se confunde educar con “guardar” • • • • y/o enseñar. Se delega en los otros pero sin confiar. Hacemos personas “frágiles”. Vamos por delante de nuestros hijos. Sentimiento de indefensión y de falta de autoridad moral. Desde qué estilos educamos… Modelo Autoritario. Modelo Permisivo. Un estilo sustentado por la Incompetencia y la Impotencia. Valores Básicos. a) Dieta sana. Hábitos saludables. b) Higiene diaria y cuidado en la salud. c) Descansar. Respetar ritmos de sueño. d) Buen humor y buen clima familiar. Valores de Seguridad. • Orden Externo. • Adecuado Nivel de Autoridad = Amable • • • • pero exigente. Ritualizar la vida. Fijar con claridad los límites. Controlar. Heteronomía. Consistencia y coherencia del ámbito educativo. Valores Afectivos. o Ser querido y querer a los que le rodean. o Amar en la justa medida. Ni esclaviza, ni ata. No es servidumbre. o No permitir los chantajes, ni manipular. o Gestionar adecuadamente las emociones: Permitir su expresión, pero nunca su descontrol. No rotundo a la agresividad. Valores de Reconocimiento Personal • Descubrirse y aceptarse a sí • • • • mismo. Autoestima. Respetar y hacerse respetar. Asertividad. Aceptar las diferencias. Respeto a los mayores. Ayudar a la autonomía. EDUCAR PARA LA AUTONOMÍA. Autonomía. • La autonomía es la capacidad de gobernarse a uno mismo, de actuar por propio convencimiento y no porque nos impongan una conducta o ciertas normas sociales de comportamiento. • Hay que potenciar esta autonomía en las rutinas diarias, en la resolución de problemas, en las dificultades en el juego y en la relación con otros niños y niñas. Para qué es importante… (I) • Conocer y expresar los sentimientos propios. • Tener en cuenta los sentimientos ajenos a la hora de actuar • Ser capaz de mostrarse menos impulsivo y mas reflexivo • Reconocer y responsabilizarse de los propios actos Para qué es importante… (II) Establecer normas consensuadas. Interiorizar los hábitos y las rutinas diarias. Asumir responsabilidades. Tomar pequeñas responsabilidades. Resolver los problemas que hayan generado los propios actos. “Ayudar” para la autonomía. Es ayudar a que el otro se ayude a sí mismo. Saber otorgar el protagonismo. Potenciar que afloren sus propias capacidades y destrezas. Permitir la experiencia. Los padres que creen que sus hijos son incompetentes. • No piden a sus hijos que hagan cosas que puedan • • • • ampliar sus capacidades. Cuando los niños intentan cosas nuevas y fallan, no se les concede tiempo para corregirlas o solucionarlas sin ayuda. Ofrecen su ayuda antes de que se la pidan sus hijos. No se toman la molestia de enseñarles nuevos y más complejos conocimientos. Se vuelven excesivamente protectores cuando advierten pruebas de incompetencia y desarrollan una visión apocalíptica del futuro de sus hijos, creyendo que nunca serán capaces de arreglárselas por sí mismos. Los padres que creen que sus hijos son competentes. No vigilan a sus hijos esperando que le salga algo mal. Cuando éstos cometen errores o fracasan en alguna empresa, se interesan más por lo que han podido aprender que por corregirles. Pueden ver esforzarse a sus hijos sin sentir la necesidad de intervenir. No temen al futuro, así que no comunican ansiedad. Piden a sus hijos que hagan cosas difíciles pero posibles en su fase concreta de desarrollo físico y personal. Educar en la responsabilidad. Enseñar a los niños a ser responsables requiere un ambiente especial en el que se les ofrezca información sobre las opciones entre las que deben escoger y las consecuencias de cada una de ellas, y que se les proporcione también los recursos necesarios para elegir. La Responsabilidad. Es la capacidad para decidir apropiadamente y con eficacia, es decir, dentro de los límites de las normas sociales y de las expectativas comúnmente aceptadas. Se considera efectiva cuando permite al niño conseguir sus objetivos que reforzarán sus sentimientos de autoestima. Claves para la responsabilidad. Conlleva ser autosuficiente y saber defenderse. Tener seguridad, confianza en uno mismo y saber elegir. Es necesario hacerles partícipes desde los primeros años, en su vida diaria. Que no sean meros observadores “pasivos”. Tienen que participar, colaborar y tomar decisiones. En ocasiones, las responsabilidades de los niños producirán cierta incomodidad a los adultos. Sean pacientes y tolerantes. Pautas para educarlos. AYUDE A LOS NIÑOS A TOMAR DECISIONES. UTILICE TAREAS Y OBLIGACIONES. Tareas y obligaciones son cosas concretas: se puede especificar cómo, cuándo y quién debe hacerlas. Esto ayuda a desarrollar la capacidad de organización y manejar los propios recursos. SEA COHERENTE. Los adultos coherentes ayudan a los niños a sentirse seguros. Cuando no existen normas claras y evidentes, no hay manera de ser coherente. NO SEA ARBITRARIO. Para evitar ser arbitrarios debemos aclarar lo que queremos, comunicar estas expectativas de forma sencilla y directa, y concretar cuáles son las consecuencias esperables si el niño actúa en consonancia o no con esas expectativas. OTORGUE RECOMPENSAS POR SER RESPONSABLE. Un niño es responsable si… Realiza sus tareas normales sin que haya que recordárselo en todo momento. Puede razonar lo que hace. No echa la culpa a los demás sistemáticamente. Es capaz de escoger entre diferentes alternativas. Puede jugar y trabajar a solas sin angustia. Puede tomar decisiones que difieran de las que otros toman en el grupo en que se mueve (amigos, pandilla, familia, etc.). Un niño es responsable si… Posee diferentes objetivos e intereses que pueden absorber su atención. Respeta y reconoce los límites impuestos por los padres sin discusiones inútiles o gratuitas. Puede concentrar su atención en tareas complicadas (dependiendo de su edad) durante cierto tiempo, sin llegar a situaciones de frustración. Lleva a cabo lo que dice que va a hacer. Reconoce sus errores. Para el diálogo… ¿Qué podemos incorporar a nuestra dinámica familiar que ayude a nuestros hijos a ser más autónomos y responsables? ¿Cómo podemos colaborar con la escuela en esta tarea? DISCIPLINA, AUTORIDAD Y COMUNICACIÓN ASERTIVA. Juan Manuel Alarcón Fernández. www.psiquiros.es Cuestiones sobre disciplina. ¿Cómo puedo cambiar la conducta de este niño?. ¿Debo regañar o castigar esta conducta?. ¿Debo discutir o razonar este comportamiento?. ¿Debo ignorar esta conducta?. ¿Estaremos provocando daño, trauma,...? Zonas de Intervención. Zona Verde: El niño realiza conductas apropiadas: Si son nuevos logros hay que reforzar. Zona amarilla: Realiza conductas no aprobadas pero “tolerables”: Técnica de “pequeños pasos”. Zona roja: Conductas no tolerables y peligrosas: Es necesario prohibirlas y/o sancionarlas. Técnicas de Intervención. Prohíba con claridad. Siempre que pueda, ofrezca un sustituto. Formule órdenes concretas. Sea oportuno, busque el mejor momento. Mande de forma positiva. Concede participación: Reglas razonadas. Crea condiciones ambientales adecuadas. El estilo de autoridad (I). Se desarrolla a través de la Comunicación y la Disciplina Asertiva. El éxito es lógicamente dependiente del que podamos establecer en forma clara y directa las reglas y que estas sean seguidas por la administración firme y consistente de las consecuencias. El estilo de autoridad (II). Poco amable y firme. Impresionará como una persona agresiva, aunque no sea su intención. Amable pero no firme. Se mostrará tímido e incapaz de hacer valer su criterio disciplinario, aunque trate apropiadamente a las personas. Sin amabilidad y sin firmeza. La persona parecerá agresiva e incapaz de llevar a cabo la disciplina. Amable pero firme. La persona tiene buen trato, tiene sentido y actitud humanitaria, pero hace valer su criterio disciplinario y actúa con consistencia. Una disciplina adecuada… Tiene reglas especificas, claras y concreta. Es consistente y hace específicas las consecuencias por violar las reglas en forma clara. Es inmediata. Es segura. Es justa. Tiene una intensidad apropiada. Es positiva. Es de "fácil" aplicación. Es eficaz. Es asertiva. Tiene reglas específicas, claras y concretas. Las reglas son decisiones que gobiernan o regulan las relaciones y la convivencia. Las reglas hacen al mundo más seguro y más cómodo; sobre todo para los niños. No es un ruego o un ejercicio de tiranía o agresividad, se trata de una decisión firme y consistente. Clases de reglas. A largo plazo: Gobiernan ciertas rutinas familiares o ejecución de tareas. A corto plazo: Estas son decisiones espontáneas de los padres en particular para situaciones específicas. Ellas sin embargo requieren el que se hagan valer consistentemente igual que las reglas de largo plazo. Es difícil planificarlas cuidadosamente. La consistencia de las reglas. La regla deberá ser clara para usted, el niño y/o el joven. Las reglas deberán especificar una conducta y una consecuencia. Asegúrese de que, de ser necesario, pueda enseñar la regla. Las reglas deben ser razonables y adecuadas a la edad del niño o el joven y a las condiciones de vida que les rodeen. Ignorar las protestas por las reglas. Detectar conductas a intervenir… De su relación con nosotros o sus hermanos. De su responsabilidad en la casa, con los estudios,... De su comportamiento en el colegio. De sus relaciones sociales. Otros aspectos…