CONCEPCIONES FILOSOFICAS DEL SER HUMANO (1) Uno de los problemas fundamentales de la filosofía ha sido y sigue siendo la pregunta por el hombre, es decir, responder a las cuestiones acerca de su naturaleza y sentido en el cosmos Ya en el siglo VI a. C. podemos encontrar destellos de esa preocupación antropológica tanto desde un punto de vista teórico como práctico. Desde el enfoque práctico se debe tener en cuenta los esfuerzos de Socrates por definir de modo objetivo lo que es humano y a partir de ahí dilucidar algunas de sus preocupaciones éticas , como aquello que es bueno o justo. Desarrollo histórico de la pregunta por el hombre Tras los inicios de la cuestión, la reflexión filosófica sobre “el problema del hombre” se ha construido a lo largo de la historia a partir de cinco tradiciones culturales distintas: la tradición oriental, la tradición griega, la tradición judeo- cristiana, la tradición humanista, y la tradición positivista. • Tradición oriental. A partir de la influencia del orfismo en Pitágoras y en Platón, se instala un concepción profundamente dualista (que influirá en el cristianismo). Según dicha concepción dualista, el hombre sería un ser trascendente que se caracteriza por contar con un elemento sobrenatural- el alma inmortal- que lo distingue esencialmente del resto de la naturaleza. • Tradición griega. Los griegos apuntaron la idea de un ser humano que se diferencia del resto de los animales por su condición racional, es decir, por su logos. Al mismo tiempo Tradición judeo cristiana. Para esta tradición, el ser humano es una criatura de Dios. Se insiste en el carácter dualista del ser humano, pero se destaca el aspecto individual de esa trascendencia. Así el ser humano está subordinado a la divinidad, de la cual es hecho a “imagen y semejanza”. A) El Dualismo Platónico La filosofía de Platón es el punto de arranque del dualismo que impreganrá durante siglos la cosmovisión intelectual y la creencia común sobre la naturaleza humana. El objetivo que persigue Platón es llegar a una definición objetiva y universal, desde el plano de la physis acerca de la naturaleza humana. Su teoría nace enfrentada a la teoría de los sofistas que se inclinaban por el nomos (la ley). Partiendo de aquí los sofistas defendían el carácter subjetivo y variable de la naturaleza humana; por lo que entendía que no existe nada absoluto, que no existe la estabilidad y que por tanto todo era relativo. Recogiendo elementos de la religión órfica a través de Pitágoras, Platón aplicó este dualismo para explicar la naturaleza human y lo ejemplificó fundamentalmente a través de dos mitos: el del carro alado y el de la caverna • Mito del carro alado. En el Fedro se relata cómo un auriga guía una pareja de caballos alados: uno blanco, hermoso y bueno; otro negro, feo y malo. Por ese motivo la conducción resulta difícil. Cuando el auriga es poderoso, el carro vuela por las alturas, pero si los caballos pierden las alas, el carro es arrastrado hacia abajo, hacia la tierra, queda encerrada en una “tumba”, es decir, en un cuerpo (soma). Sólo recuperando la fuerza de las alas se podrá elevar de nuevo hacia el lugar donde habitan los dioses, lugar donde todo es bello, sabio y bueno. El mito del carro alado tiene como función básica, entre otras, explicar como el alma humana participa, por una parte, de la excelencia de la naturaleza divina- la razón representada por el auriga, que debee guiar la conducta humana- y, por otra, de la naturaleza terrenal, pasionalrepresentada por los caballos. Intenta, además, dar explicación de la tensión entre razón y el deseo y como esta debe estar subordinada a aquella. El alma o psiqué es la fuente de conocimiento verdadero, gracias al recuerdo de los modelos o arquetipos de las cosas sensibles que había contemplado en el mundo de las Ideas antes de su caída en el mundo terrenal [el cuerpo]]. Esta teoría de la reminiscencia [recuerdo], exige no solo la inmortalidad del alma, sino también su preexisteencia. * El Hilemorfismo de Aristóteles Aristóteles rechazó el "dualismo antropológico" de Platón. Frente a dicha postura va a proponer el hilemorfismo que proviene de la teoría de las cuatro causas Aristóteles distingue cuatro causas: 1) la causa material [hylé] la materia de lo que está hecho algo 2) la causa formal [morfé] la forma que reviste la hylé. Aquello que conforma la materiales 3) la causa agente. Lo que mueve la cosa 4) la causa final [ el telos] representa el “llegar a ser”. Aquello a lo que tiende la cosa. Para Aristóteles el alma es la forma del cuerpo [hylé], es decir, su actualización. Así en principio el alma es un principio de vida. Además, Aristótles distingue distintos tipos de alma, según los distintos tipos de vida. Así, existe un alma vegetativa, sesnsitiva o animal y un alma racional o humana. A la luz de definir al ser humano, nuestro filósofo sostendrá que hay un tipo de alma específico para él, el alma racional. El razonamiento y el lenguaje son características propicias del alma racional Además, Aristóteles reconoce otro elemento esencial en la constitución humana: su sociabilidad. El ser humano es un zoon politikon, es decir un “animal social” y, como tal, su ser se establece en comunidad con los otros.