La técnica se ha presentado en el VI Curso Internacional de Endoscopia Digestiva Terapéutica, al que han asistido cerca de 400 especialistas La resección por endoscopia de tumores superficiales del esófago puede evitar la extirpación completa de esta parte del tubo digestivo Más del 90% de los pacientes tratados en la Clínica Universitaria de Navarra no ha precisado la extirpación del esófago La resección mediante endoscopia de tumores que sólo afectan a las capas superficiales del esófago puede evitar la extirpación completa de esta parte del tubo digestivo. La técnica, que se realiza en la Clínica Universitaria de Navarra desde hace tres años, ha sido presentada en el VI Curso Internacional de Endoscopia Digestiva Terapéutica que concluye mañana, sábado, organizado por el servicio de Digestivo del centro hospitalario. En concreto, más del 90% de los pacientes tratados de esta dolencia en la Clínica Universitaria de Navarra no ha precisado la extirpación del esófago. Al curso han asistido cerca de 400 especialistas procedentes de diez países y se ha centrado en las posibilidades terapéuticas que ofrece la endoscopia digestiva. “Cada vez se pueden realizar mayor número de tratamientos mediante la endoscopia digestiva, sin tener que recurrir a la cirugía. Estas aplicaciones tienen menor agresividad que las intervenciones quirúrgicas y se realizan de forma ambulatoria en aproximadamente el 99% de los casos, lo que permite que habitualmente el paciente se vaya andando a su casa tras el tratamiento”, explica el doctor Miguel Ángel Muñoz Navas, director del servicio de Digestivo de la Clínica Universitaria de Navarra. Como se sabe, la endoscopia es una técnica que se realiza mediante un instrumento en forma de tubo que contiene una luz y una óptica en su extremo. Además, el tubo dispone de un canal para la introducción de diferente instrumental con el que se pueden practicar, entre otras técnicas, biopsias, extirpación de pólipos, inyección de contrastes, colocación de prótesis y de grapas, coagulación de sangrados, extracción de piedras de la zona biliar o pancreática, drenaje de abcesos, etc. Existe además el ecoendoscopio, que es un endoscopio que incorpora un ecógrafo en su extremo. “Mientras en la ecografía normal el transductor del ecógrafo se encuentra fuera del cuerpo, la ecoendoscopia ofrece imágenes de mayor calidad de una lesión que esté cerca del tubo digestivo. Podemos ver desde el tubo digestivo las lesiones que haya en sus proximidades y acceder a ellas”, señala el doctor Muñoz. Extirpación de tumores esofágicos Respecto a la técnica para la extirpación de tumores distales del esófago que lleva a cabo la Clínica Universitaria de Navarra, el doctor Muñoz detalla que resulta efectiva cuando el carcinoma se ubica en las capas superficiales. “El esófago está formado por tres capas: mucosa, submucosa y muscular. Cuando el tumor está localizado en la mucosa, en un alto porcentaje, podemos quitarlo completamente y evitar la extirpación del esófago. Hasta hace poco, a los pacientes con esta dolencia –aunque sólo afectara a las primeras capas- se les recomendaba la resección total del esófago, lo que implica una cirugía con alta morbilidad e incluso mortalidad”. De todos modos, el director del servicio de Digestivo de la Clínica Universitaria aclara que en ocasiones la intervención quirúrgica es inevitable. “Hay veces que hay que operar, pero en otras se puede intentar solucionar con la endoscopia. Eso sí, después es necesario realizar un seguimiento del paciente. Puede que extirpemos el tumor con endoscopia y el anatomopatólogo nos indique que el cáncer está más infiltrado de lo que parecía en las biopsias o en la ecoendoscopia. En ese caso se recurre a la intervención quirúrgica. Según nuestra experiencia, más del 90% de los pacientes a los que hemos tratado con esta técnica no ha necesitado una cirugía posterior”. La resección de tumores esofágicos mediante endoscopia es un tratamiento poco extendido en parte, apunta el doctor Muñoz, debido a su complejidad. “Sin embargo, es una posibilidad real y científicamente reconocida de evitar la extirpación del esófago. Además, puede aplicarse de manera ambulatoria”. Cirugía a través de orificios naturales Entre otros avances dentro del ámbito de la endoscopia digestiva terapéutica, en el curso organizado por el servicio de Digestivo de la Clínica Universitaria se han tratado las intervenciones quirúrgicas a través de orificios naturales, denominada NOTES (natural orifice transluminal endoscopic surgery, por sus siglas en inglés). “Se puede acceder a través de la boca, el ano, la vagina y la vejiga urinaria, si bien las más utilizadas son las vías oral y vaginal. Con la misma endoscopia que utilizamos habitualmente puede llegarse al estómago, perforarlo y entrar en la cavidad abdominal para, por ejemplo, extirpar una vesícula o tratar otras lesiones. En este tipo de cirugía, actualmente se están combinando la endoscopia y la laparoscopia”. También se ha abordado el tratamiento endoscópico de la obesidad. “En los pacientes con obesidad mórbida que no responden al tratamiento dietético es habitual recurrir a la cirugía bariátrica. Ésta resulta agresiva y con cierta periodicidad aparecen en los medios de comunicación noticias de pacientes que fallecen como consecuencia de la intervención, debido en parte a que son pacientes con mal estado general y tienen otras enfermedades asociadas a la obesidad. Ya se está empezando a trabajar en la posibilidad de disminuir el tamaño del estómago por vía endoscópica y en la posibilidad de hacer cortocircuitos con asas intestinales”, afirma el doctor Miguel Ángel Muñoz. Otra de las aplicaciones novedosas presentadas en el curso se refiere a la endoscopia terapéutica en las vías biliares y pancreáticas. “A pesar del reducido diámetro de estas vías, una nueva tecnología permite entrar en ellas tanto para examinarlas directamente, como para aplicar diversas técnicas terapéuticas”, detalla el doctor Muñoz. Así mismo, el servicio de Digestivo de la Clínica Universitaria ha presentado una técnica para el drenaje de vesícula directamente al estómago mediante ecoendoscopia, tal como detalla su director: “Cuando la vesícula está muy inflamada y no hay posibilidad de intervenir quirúrgicamente, resulta menos agresivo acceder a ella desde el estómago. Éste se perfora y nos introducimos en la vesícula, consiguiendo que el contenido de la vesícula drene hacia el estómago”. Por otra parte, en la sesión dedicada a la aplicación diagnóstica de la endoscopia, se han abordado sus posibilidades para realizar microscopía en vivo. “Aunque no sustituye a la biopsia, esta técnica la complementa para decidir de dónde tomar las muestras o para tener mayor certeza de si una lesión que se encuentra durante la exploración es un tumor maligno o no”. El jueves por la mañana antes del comienzo del curso se celebraron dos talleres de trabajo sobre ecoendoscopia y sobre colonoscopia con cápsula, técnica en la que el servicio de Digestivo de la CUN ha sido uno de los centros pioneros. Pie de foto: Los doctores María Teresa Herráiz, Miguel Muñoz y Cristina Carretero, del servicio de Digestivo de la Clínica Universitaria de Navarra. NOTA: La foto está disponible en alta resolución en www.cun.es/notasdeprensa Si necesita información adicional, por favor, contacte con Jesús Zorrilla o Mónica Ruiz de la Cuesta, del departamento de Comunicación, en el 948 296497