aprendiendo más INFORMATIVO MARITIMO PORTUARIO El río Guayas. Aguas arriba - aguas abajo. CARLOS RODRIGO HAZ GARCIA INGENIERO CIVIL. REG PROF 09-529 En muchos tratados de Ingeniería, se menciona; que una obra mal concebida por el hombre, puede causar más daño que los fenómenos naturales Aguas Arriba El Río Guayas, tiene como afluentes principales los ríos Babahoyo y Daule; con regímenes bien diferenciados, el primero recorre una zona de alta pluviometría al Este y Noreste de la cuenca. El segundo al Oeste y Noroeste recoge zonas de menor precipitación, y gran parte de su caudal es almacenado aguas arriba. En toda confluencia de dos ríos, en el de menor caudal se forman dunas variables según la relación de las descargas. Estas dunas pueden ser cíclicas y hasta desaparecer (J.F DUMONT. ACTA OCEANOGRAFICA DEL PACIFICO. VOL 14 N. 1.2007). Pero sucede que en los últimos veinte años, muchas Instituciones gastaron ingentes recursos en contratos para la limpieza de las cabeceras de los ríos, sin considerar que: La limpieza y deforestación de los cauces aguas arriba de los esteros y afluentes, siempre es perjudicial, pues acelera las avenidas y las torna más erosivas y cargadas de sedimentos, que se concentran aguas abajo. Aguas Abajo El Río Guayas desde la confluencia del Daule y Babahoyo hasta su desembocadura en el Canal de Jambelí, recorre una longitud de 52 km. Los sólidos en suspensión que cruzan bajo el puente en el reflujo, con una velocidad promedia de 6.5 Km/hora, no logran descargar en el Canal de Jambelí, pues en las seis horas de vaciante, solo los primeros sedimentos en suspensión recorrerán 43 km, y retornaran en el flujo, con una velocidad de 9 Km/hora ; pierden velocidad ante las voluminosas cimentaciones de los puentes y decantan su carga de sólidos, dando origen a nuevos y más grandes islotes como el Palmar, tal como se lo observa al Norte de los puentes sobre el Río Babahoyo y Daule. El Islote El Palmar, ha venido actuando, y puede considerárselo como una defensa para el Canal de Navegación del Río Guayas, pues constituye una trampa, que impide que los sedimentos se sitúen frente a Guayaquil. En efecto, observando el Río Daule en su curso desde el puente al Norte, puede apreciarse, su mayor descarga concentrada en la margen 9