HONORABLE ASAMBLEA: Con la facultad que me otorga la Constitución Política del Estado de Baja California Sur en sus Artículos 57, Fracción II y el Artículo 101, Fracción II de la Ley Reglamentaria del Poder Legislativo, presento ante ustedes la presente iniciativa de reforma al Artículo 4º y la adición de un Artículo 13 de la Ley de Planeación para el Estado de Baja California Sur, bajo la siguiente: EXPOSICIÓN DE MOTIVOS La vida del país ha venido sufriendo transformaciones trascendentales para el futuro de su consolidación democrática. Particularmente creo que no hay una fecha realmente que pueda ser considerada como el comienzo de esta transformación; más bien considero que nuestro país siempre ha estado evolucionando, la historia no puede determinarse de una manera simplista buscando culpables y héroes, la circunstancia actual es el resultado de un desarrollo normal de nuestra nación, lo que es hoy, no pudo ser antes, simplemente porque las condiciones no estaban dadas para que así fuera. Creo firmemente que estamos en el lugar y en el tiempo correctos, no creo en concepciones monistas de héroes y villanos, de blanco y negro. La consideración anterior se debe a que la iniciativa que hoy presento ante esta Honorable Soberanía atiende precisamente a una reflexión que hicimos buscando ser lo más objetivos posible y, también, revisitando nuestra historia, la de nuestras instituciones y la forma y el fondo bajo el cual se ha construido nuestro régimen y sistema político. Pensando también, como resultado de todo lo demás, en el paradigma democrático que es, para quienes así tenemos la convicción, lo que debe de guiar, sin cortapisas, nuestra conducta como ciudadanos y nuestra responsabilidad como servidores públicos. Es reconocido por muchos, y no son pocos, que la inconformidad ciudadana y el justo reclamo de más y mejores servicios, de transparencia en el ejercicio de los recursos públicos y la indiscutible necesidad de poder confiar en nuestras instituciones encargadas de la impartición de justicia, sin olvidar la implementación de un modelo económico que le permite a los que más tienen tomar de los bolsillos de los más miserables sus últimas monedas, vino a dar como resultado la búsqueda de otras opciones, resultando de esto la alternancia política en los distintos niveles de gobierno. Como resultado de la alternancia, excesos que se dieron, no por las siglas ni por los colores, sino por el ejercicio de un poder ilimitado, bajo una condición propicia para estos desmanes cometidos contra el pueblo mexicano, hoy son más difíciles de llevar a cabo por la pluralidad que afortunadamente vivimos. Si consideramos pues, que los males que padeció nuestro país no son inherentes a siglas o colores, sino al ejercicio del poder, y específicamente al ejercicio del poder sin restricciones, sin contrapesos, estaremos también de acuerdo que la alternancia nos plantea una oportunidad de reducir de manera considerable el ejercicio discrecional del poder. Más allá de los equilibrios y frenos políticos que bajo este nuevo esquema nuestro sistema político nos plantea, el cambio institucional se hace necesario, indispensable bajo el esquema democrático, para consolidar los avances logrados. De tal forma se están dando avances significativos en la relación del gobierno federal con los estados, por ejemplo, pero es indispensable que esta nuevas relaciones y formas de concertación no solo queden sujetas a la buena voluntad de las partes, sino que se consoliden bajo esquemas institucionales que permitan su permanencia independientemente de los actores o la circunstancia política. En este sentido considero sinceramente que los gobiernos municipales, el ejecutivo del estado, y por supuesto esta X Legislatura, han mostrado una apertura y disponibilidad para atender los reclamos de las distintas voces que se manifiestan por una circunstancia u otra; sin embargo, no podemos apostar a que la consolidación democrática de nuestro estado y nuestro país quede a merced de la conveniencia política que el momento reclama o del libre albedrío de los gobernantes en turno. En este orden de cosas, considero que la actual administración estatal ha cumplido a cabalidad con las expectativas ciudadanas que buscaron en este proyecto una alternativa para la solución de los problemas que nuestra entidad vivía, muchos de los cuales han sido superados, muchos otros, siguen siendo un asunto pendiente, pero que de seguir en este mismo camino, pronto se verán resueltos. Aún así, se hace necesario consolidar ciertos esquemas que permitan que esta pluralidad que vivimos se vea también reflejada en los distintos órganos de decisión, pues como lo dijimos antes, volver a la circunstancia donde el monopolio del poder permitía toda clase de arbitrariedades, puede ser hoy todavía una tentación que no podemos permitirnos. Es indiscutible, y en esta Legislatura así lo hemos asumido, que el Poder Legislativo deberá jugar un papel sumamente importante en este camino democrático al que todos aspiramos; no solamente a nivel federal la separación de poderes y el equilibrio entre éstos es una condición básica para la democracia, también en los estados es necesario este equilibrio, sobre todo porque la pluralidad que se da al interior de este órgano colegiado, da mayor certeza a la ciudadanía de las decisiones que toma, o que son avaladas por el mismo. Hoy, los gobiernos estatales han tenido la oportunidad de influir en la asignación de recursos que se hacen por parte de la federación, esto era una situación necesaria y justa; por otro lado, la pluralidad del Congreso de la Unión, y la distinta filiación política de los estados y ayuntamientos del país permiten que nadie se sienta lo suficientemente cobijado para hacer uso ilegal de los dineros públicos, lo cual es otro factor importante para la consolidación de la democracia en el país, pues el modelo democrático es precisamente una serie de mecanismos basados en la desconfianza que permite limitar el poder y todo lo que esto conlleva, considerando incluso como otro de sus elementos característicos la posibilidad, cuando así se requiera, de llamar a rendir cuentas a los gobernantes ante las instancias judiciales correspondientes. En nuestro estado, existe tal pluralidad en la conformación del Poder Legislativo y los distintos niveles de gobierno, bajo esta nueva circunstancia no hemos tenido que enfrentar graves problemas de corrupción o abuso de poder como en toros tiempos, sin embargo, no solo podemos aspirar a un uso transparente de los recursos públicos, sino, a una asignación más transparente y democrática de estos recursos, buscando cerrar de una vez por todas el uso y asignación discrecional de los recursos mediante el esquema clientelar que va en contra de la función de gobierno y propicia contiendas electorales inequitativas. La Ley de Planeación del Estado de Baja California Sur, en su Artículo 1º, Fracción I dispone que ésta “regula las normas y principios conforme a los cuales se llevará a cabo la planeación del desarrollo en el Estado de Baja California Sur”, y en su Fracción IV, “las bases para promover y garantizar la participación democrática de los diversos grupos sociales, a través de sus organizaciones, en la elaboración de los planes y programas a que se refiere esta Ley.” La mencionada Ley, en su Artículo 4º establece que “corresponde al titular del Ejecutivo Estatal, conducir la Planeación Estatal de Desarrollo, con la participación democrática de los grupos sociales, y mediante la aplicación de mecanismos de coordinación, concertación e inducción, en su caso, de conformidad en lo dispuesto en la presente Ley”; dicha Ley contempla en su Artículo 5º que “el Gobernador del Estado remitirá al Congreso Local, para su examen y opinión, el Plan Estatal de Desarrollo. En el ejercicio de sus atribuciones constitucionales y legales y las que le asigne la presente Ley, el Poder Legislativo formulará, asimismo, las observaciones que estime pertinente durante la ejecución, revisión y adecuaciones del propio Plan.” Al Congreso del Estado, en este sentido, le corresponde examinar y hacer las adecuaciones que considere pertinente sobre dicho Plan. La Ley de Planeación del Estado de Baja California Sur considera un Sistema Estatal de Planeación Democrática, donde estén representados los sectores sociales y la iniciativa privada, bajo la coordinación del Ejecutivo Estatal para determinar y evaluar el Plan de Desarrollo que deberá guiar un desempeño eficaz del gobierno estatal, considerando de igual manera la coordinación con el Gobierno Federal y los Ayuntamientos del Estado. El Capítulo Tercero establece la participación social en la Planeación, para esto, el artículo 21 determina que “el Comité de Planeación para el Desarrollo del Estado de Baja California Sur y los Comités de Planeación Municipal son los instrumentos principales para la participación y consulta de los diversos grupos sociales, con el propósito de que la población exprese sus opiniones para la elaboración actualización, ejecución y seguimiento del Plan Estatal de Desarrollo y de los planes municipales de desarrollo a que se refiere esta Ley. De igual manera los grupos sociales podrán participar en la Planeación a través de foros estatales o municipales y cualquier otra forma que el Estado o los Municipios determinen.” Atendiendo al espíritu democrático de la Ley en mención, considerando que la presencia de un órgano colegiado como el Congreso del Estado es de vital importancia dentro de un régimen democrático para la toma de decisiones, dado que quienes pertenecen a éste representan a los distintos sectores sociales que requieren de tener una voz que los represente en los asuntos de interés general; además, sus integrantes son la representación popular por antonomasia ya que los ciudadanos les otorgaron su confianza al votar por su persona o su partido para que representasen sus intereses. Por la pluralidad e independencia del Poder Legislativo, por su representatividad social, y por su función dentro del esquema democrático de fiscalización y contrapeso de los otros dos poderes, y atendiendo a las actuales circunstancias políticas y sociales, las cuales no solo exigen de un transparente ejercicio de los recursos públicos, sino también de su transparente y justa asignación, propongo a esta Soberanía una modificación a la Ley antes mencionada en su Artículo 4º, el cual actualmente literalmente expresa que “corresponde al titular del Ejecutivo Estatal, conducir la Planeación Estatal de Desarrollo, con la participación democrática de los grupos sociales, y mediante la aplicación de mecanismos de coordinación, concertación e inducción, en su caso, de conformidad en lo dispuesto en la presente Ley”, para quedar como sigue: corresponde al titular del Ejecutivo Estatal, conducir la Planeación Estatal de Desarrollo, contando con una representación del Congreso del Estado y con la participación democrática de los grupos sociales, mediante la aplicación de mecanismos de coordinación, concertación e inducción, en su caso, de conformidad en lo dispuesto en la presente Ley.” Con esto, se lograría tener una representación social más fiel al interior del órgano encargado de planificar el desarrollo del estado, además estaríamos avanzando de manera significativa no solo en el ejercicio transparente de los recursos públicos, sino que estaríamos dando mayor certeza a la ciudadanía de que la asignación de éstos recursos se hace también de una manera transparente y democrática; finalmente, que esta soberanía cuente con una representación en el mencionado órgano de planeación, serviría para que el Congreso del Estado pueda llevar a cabo con mayores elementos otras de sus atribuciones constitucionales como las que plantea esta misma ley en su Artículo 5º el cual determina que: “El Gobernador del Estado remitirá al Congreso Local, para su examen y opinión, el Plan Estatal de Desarrollo. En el ejercicio de sus atribuciones constitucionales y legales y las que le asigne la presente Ley, el Poder Legislativo formulará, asimismo, las observaciones que estime pertinente durante la ejecución, revisión y adecuaciones del propio Plan.” La mencionada Ley, en su Artículo 6º contempla que “El Gobernador del Estado, al informar ante el Congreso del Estado sobre el estado general que guarda la administración pública de la Entidad, hará mención expresa de las decisiones adoptadas para la ejecución del Plan Estatal de Desarrollo y los programas sectoriales, así como las acciones y resultados de la ejecución. El contenido de las cuentas públicas anuales del Estado y de los Municipios deberán relacionarse, en lo conducente, con la información a que aluden los dos párrafos anteriores, a fin de permitir al Congreso del Estado el análisis de las cuentas, con relación a los objetivos y prioridades de la Planeación Estatal referentes a las materias de dichos documentos”, con lo que se le otorga al Congreso del Estado, además de lo dispuesto en la Constitución Política del Estado, una función sumamente importante en la asignación y la vigilancia de los recursos públicos, cosa sumamente importante por las razones antes expuestas, entre muchas otras más Con esta iniciativa que ponemos a su respetable consideración, buscamos fortalecer el cambio democrático de manera institucional dotando a este poder de los medios para dar seguimiento y contar con los elementos básicos para participar de la planeación del desarrollo para la entidad dada su representatividad social y de vigilar la asignación y ejercicio de los recursos públicos dada su función de contrapeso y equilibrio dentro del esquema democrático y sus atribuciones constitucionales como la que la misma Ley antes citada le reconoce en su Artículo 6º ya mencionado. Por lo tanto, pongo a su consideración el siguiente: PROYECTO DE DECRETO EL CONGRESO DEL ESTADO DE BAJA CALIFORNIA SUR DECRETA: SE REFORMA EL ARTÍCULO 4; Y SE ADICIONA UN ARTÍCULO ARTÍCULOS COMO 13, REENUMERÁNDOSE SUBSECUENTES, DE LA LEY LOS DE PLANEACIÓN DEL ESTADO DE BAJA CALIFORNIA SUR. ARTÍCULO ÚNICO.- Se reforma el artículo 4 ; y se adiciona un artículo como 13, reenumerándose los artículos subsecuentes, de la Ley de Planeación del Estado de Baja California Sur, para quedar como sigue: ARTICULO 4o.- Corresponde al titular del Ejecutivo Estatal, conducir la Planeación Estatal de Desarrollo, contando con una representación del Congreso del Estado y con la participación democrática de los grupos sociales, mediante la aplicación de mecanismos de coordinación, concertación e inducción, en su caso, de conformidad en lo dispuesto en la presente Ley. ARTICULO 13.- El Congreso del Estado, además de las mencionadas en la presente Ley, tendrá las siguientes atribuciones: I.- Participar en la elaboración del Plan Estatal de desarrollo aportando, en su caso, opiniones y propuestas a dicho Plan. II.- Para dar cumplimiento a la fracción anterior, así como a lo previsto por el Artículo 4 de la presente Ley, el Congreso del Estado contará con una representación integrada por un Diputado de cada Municipio de la Entidad. Sala de Sesiones del Poder Legislativo, La Paz a 4 de diciembre del 2003. Atentamente, DIPUTADO JORGE ANTONIO BARAJAS SALGADO X LEGISLATURA