La imperiosa necesidad de un cambio Si hay alguien que no se ha beneficiado hasta ahora del boom agroexportador es el trabajador agrario. El Congreso tiene ahora la oportunidad de acabar con esta injusta situación. Por Miguel Calisaya Arangoitia, sociólogo de la Asociación Aurora Vivar. Sin lugar a dudas, el sector agroindustrial es el más próspero del agro peruano. Sus trabajadores y trabajadoras, sin embargo, laboran en pésimas condiciones gracias al «régimen laboral agrario», una figura legal creada originalmente para favorecer a la agricultura deprimida. Ahora, el Congreso de la República se ha planteado una disyuntiva: modificar o eliminar este régimen laboral. Lo que el Poder Legislativo decida con respecto a esta ley afectará la vida de miles de trabajadoras y trabajadores que se ganan la vida en las empresas agroindustriales del país. La norma legal que sustenta este régimen laboral es la Ley 27360, «Ley que aprueba las normas de promoción del sector agrario». Publicada hace ocho años, el 30 de octubre de 2000, esta ley amplió la vigencia de las medidas de promoción del sector agrario hasta el año 20101, reiteró la vigencia de un régimen tributario para el sector agrario (consistente en menores obligaciones fiscales), el régimen de seguridad social con menos contribuciones al sistema de aseguramiento en salud y —en un acto a todas luces injustificado— incorporó al exitoso sector agroindustrial2 en el goce de todos los beneficios para la promoción de la inversión agraria. Más grave aún, quizá, fue que la ley creó un régimen laboral con menores obligaciones empresariales ante trabajadoras3 y trabajadores. Así fue como el sector más moderno, rentable y floreciente de la agricultura nacional empezó a beneficiarse de las ventajas promocionales originalmente otorgadas al sector menos dinámico y más informal del agro peruano. El trabajador subvenciona al empresario El régimen laboral agrario establecido por la Ley 27360 es un régimen laboral discriminatorio, pues disminuye los derechos de los trabajadores y las trabajadoras agrarias e instaura remuneraciones que, en la práctica, son inferiores a la remuneración mínima legal; (para una comparación de los derechos de los trabajadores agrarios con los trabajadores pertenecientes al régimen general de la actividad privada, ver el cuadro en la página siguiente). La Ley 27360 establece que la remuneración mínima agraria es de S/. 643.87 mensuales o S/.21.46 diarios. Agrega la ley que en estas remuneraciones están incluidas la CTS y las dos gratificaciones anuales. En la práctica, este sistema de remuneración licúa las gratificaciones y la CTS en la remuneración diaria, semanal o mensual, e instaura salarios inferiores a los que debería ganar legalmente un trabajador o trabajadora del sector agroexportador. Para ver esto con claridad, supongamos que una trabajadora de una empresa agroexportadora gane (en todo caso, debería ganar como mínimo) la remuneración mínima vital (RMV) señalada en el régimen general de la actividad privada, es decir S/. 550 mensuales. Si le agregamos lo que le correspondería mensualmente por CTS y las dos gratificaciones anuales, esta trabajadora debería recibir cuando menos S/. 687.5 mensuales o S/. 22.92 diarios. Pues resulta que, gracias a la Ley 27360, esta trabajadora recibiría menos que la RMV: S/ .43.63 menos al mes o S/.1.45 menos por Trabajador de empresa agroexportadora, cosechando pimiento piquillo. 20 LA REVISTA AGRARIA / 107 día. En otras palabras, la ley determina para los trabajadores del sector remuneraciones menores a las que deberían recibir. Si multiplicamos esos S/.43.63 mensuales por los aproximadamente 150,000 trabajadores y trabajadoras que laboran para el sector agroexportador en todo el Perú, las empresas dejan de pagar, en conjunto, S/.6’544,500 por mes: S/.218,150 por día. Anualmente, esa suma asciende a S/ .78’534,000. Es decir, gracias a la Ley 27360, los empresarios suman a las ganancias que obtienen por la alta rentabilidad de los productos de agroexportación peruanos, los salarios que dejan de pagar a sus trabajadores. Gracias a esta ley, cada trabajador agrario cede al empresario agroindustrial S/ .529.25 al año. En otras palabras, la Ley 27360 ha expropiado las remuneraciones de los trabajadores agrarios para beneficiar la rentabilidad empresarial. Con sus salarios, ellos están subvencionando las agroexportaciones. Este régimen no se aplica solamente a los trabajadores temporales —los que podrían ameritar un régimen laboral especial de este tipo—, sino también a los trabajadores que realizan labores permanentes y a los contratados por tiempo indefinido (trabajadores estables), sean obreros o empleados. Así, una obrera que labora ininterrumpidamente durante todo el año para un solo empleador, o el planillero de la empresa que realiza labores de oficina durante todo el año, no conocen las gratificaciones de ley ni en julio ni en diciembre, ni conocen lo que es recibir el depósito de su CTS. La disyuntiva del Congreso El 27 de junio de 2006, como parte de las medidas destinadas a establecer las compensaciones a los sectores afecta- Solo en muy pocas empresas agroexportadoras, los trabajadores han logrado sindicalizarse. dos por el TLC con Estados Unidos — ¿el sector agroindustrial, perjudicado por el TLC? De Ripley—, el Congreso aprobó la Ley 28810, «Ley que amplía la vigencia de la Ley 27360, Ley que aprueba las normas de promoción del sector agrario». ¿Hasta cuándo? Hasta el 31 de diciembre de 2021. Estimamos que no existen causas objetivas para que uno de los sectores con mayor crecimiento de las exportaciones no tradicionales, el sector agroindustrial, se siga beneficiando de las medidas que sí requieren los sectores menos dinámicos del agro, con menos tecnología, con menos tasas de capitalización y con mucho más dificultades que el exitoso sector de la agroindustria. Como mencionábamos al inicio de este artículo, el Congreso de la República ha planteado una disyuntiva: se modifica el régimen laboral agrario4 o se le elimina5. La primera alternativa plantea modificar el régimen laboral agrario en términos más fa- Cuadro comparativo de beneficios, de acuerdo al régimen laboral Beneficios del Régimen Laboral Agrario Beneficios del Régimen Laboral General de la Actividad Privada Remuneración Mínima del Sector Agrario: S/.21.46 al día, S/.643.8 al mes. Remuneración Mínima Vital (RMV): S/.18.33 por dia, S/.550 al mes. CTS: No reciben (está incluida en la remuneración diaria). CTS: Una remuneración al año. Gratificaciones legales: No reciben (incluida en la remuneración diaria). Gratificaciones legales: Dos remuneraciones al año. Indemnización por despido arbitrario: Media remuneración por cada año de servicios, con un tope de seis sueldos. Indemnización por despido arbitrario: Una remuneración y media por cada año de servicios, con un tope de doce sueldos. Quince días de descanso vacacional. Treinta días de descanso vacacional. MAYO de 2009 vorables para las obreras y obreros que mueven la locomotora de la agro exportación: calculando la remuneración agraria a partir de la remuneración mínima vital, equiparando la duración de las vacaciones y la indemnización por despido arbitrario a los que están bajo el régimen de la actividad privada, y reservando únicamente el régimen actual a las trabajadoras y los trabajadores temporales. El Congreso de la República puede permanecer en la inacción y permitir que miles de trabajadores se sigan perjudicando con el injusto régimen laboral agrario. O puede actuar y evitar que las siguientes generaciones de trabajadores y trabajadoras agrarios continúen laborando como ciudadanos de segunda categoría, con derechos recortados y una vida marcada por la violación de sus derechos humanos laborales. Notas 1 Entonces regía la Ley 26865, «Modifican el D.Leg. 885, Ley de Promoción del Sector Agrario», que establecía que el régimen de promoción agrario vencía el 31 de diciembre de 2006. Tanto esta ley como la Ley 27360 forman parte de una serie de dispositivos que, desde 1996, han renovado el régimen temporal de promoción al sector agrario. 2 La ley también hizo lo propio con la actividad avícola que utilice maíz amarillo duro nacional. 3 La fuerza laboral de la agroindustria está constituida principalmente por mujeres. 4 Proyecto de ley 2545/2007-CR, presentado por la congresista Gloria Ramos, de Compromiso Democrático, a iniciativa de la Asociación Aurora Vivar. 5 Proyecto de Ley Nº 2406/2007-CR, presentado por la congresista Marta Acosta Zárate, del Partido Nacionalista Peruano. 21