Parados, los nuevos pobres

MIÉRCOLES
7 DE JULIO DEL 2010
48
El protagonista
JORGE LASHERAS
El presidente de Yamaha
cambia al consejero
Yamaha Motor España, presidida
por Jorge Lasheras (en la foto), anunció ayer el nombramiento de Hiroki
Tanaka como consejero delegado de
la filial española en sustitución de
Nakamasa Iwase.
Reportaje
La frase
«No queremos
ser solo una caja
grande, que ya lo
somos, sino también
una caja dinámica,
sólida y útil»
Adolf
Todó
DTOR. GENERAL DE
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Memoria anual del Consell de Treball Econòmic i Social
Parados, los nuevos pobres
La crisis dispara el 73% el número de perceptores de la renta mínima de 414,12 € que da el
Govern, que suman 54.942 personas. El CTESC prevé que la nueva pobreza siga creciendo
JOAN PUIG
ANTONI FUENTES
BARCELONA
Los tres meses consecutivos de descenso del paro han pasado de largo para los trabajadores que llevan
más tiempo en el desempleo. En
toda España, hay 1,3 millones de
personas que perdieron el empleo
hace más de un año, lo que supone más de una cuarta parte de todos los parados. En Catalunya, los
parados de larga duración suman
más de 180.000. La travesía del desierto de esta larga crisis ha obligado a 54.942 personas a solicitar, como último recurso para subsistir,
la renta mínima de inserción (RMI)
de la Generalitat, según destaca la
memoria anual del Consell de Treball Econòmic i Social de Catalunya (CTESC) presentada ayer.
Muchos de ellos malviven con
los 414,12 euros mensuales de la
cuantía mínima, que se incrementa en función de los hijos o familiares a su cargo. La cifra de perceptores del llamado salario social creció el 73,4% en el 2009 en relación
con el 2008. «Se ha producido un
aumento de las situaciones de vulnerabilidad, que ya no son privativas de determinados colectivos,
a causa de la crisis», indicó Josep
Maria Rañé, presidente del órgano
consultivo de patronales y sindicatos, al resumir las conclusiones del
informe anual.
Mantener el gasto social
Los beneficiarios de la renta mínima forman parte de la nueva pobreza en la que ya no hay solo marginados sociales, sino también los
desempleados que han agotado las
prestaciones contributivas o asistenciales que concede el servicio
público de empleo e incluso el subsidio extraordinario de 420 euros
que da el Gobierno central.
El CTESC prevé un nuevo aumento de solicitantes de la renta
mínima durante este año debido
a la persistencia de la recesión, por
n anteriores crisis económicas, no muy lejanas en el tiempo, acudíamos a las experiencias de compañías extranjeras
para intentar diseñar un futuro
mejor. Se trataba de imitar en lo
posible su ejemplo de cómo competir en un mundo cada vez más
global. Eran numerosas las sesiones organizadas por entidades
económicas o académicas en que
los ponentes eran empresarios de
países más avanzados.
La crisis nos lleva de nuevo a
plantearnos cómo diseñar el futuro de nuestra economía. Pero,
hoy, los empresarios de referencia son españoles. Las experiencias empresariales que nos pueden resultar de utilidad nos son
muy cercanas pues, a lo largo de
las dos últimas décadas, muchas
de nuestras empresas han evolucionado hasta consolidarse plenamente en un mercado global.
Esta transformación tan profunda constituye un hecho dife-
E
Estamos rodeados
de empresas
competitivas que
generarán empleo
Víctimas laborales
Los nuevos
perceptores del
subsidio social han
sido víctimas de la
mayor caída de la
actividad en 30 años.
«El 2009 fue un año
muy duro, con un
retroceso económico
del 4% y una pérdida
de empleo del 6,9%»,
según el presidente
del CTESC, Josep
Maria Rañé. La única
mejora se produjo en
las exportaciones y la
ocupación pública.
33 La ‘consellera’ Mar Serna y el presidente del CTESC, Josep Maria Rañé.
lo que pidió el mantenimiento del
gasto social de las administraciones para combatir el «peligro de erosión» de la calidad de la asistencia a
los colectivos más desfavorecidos.
En el 2009, la factura de las prestaciones del servicio público se incrementó el 57% y alcanzó los 5.675 millones en el 2009 en Catalunya. Lo
más preocupante es que los perceptores de subsidios asistenciales aumentaron el 84%.
La consellera de Treball, Mar Serna, reconoció el reto que supone la
recolocación de los parados, especialmente de los de más edad, para
el Servei d’Ocupació de Catalunya
(SOC). La solución pasa, según dijo,
por explotar el «margen de mejora»
que todavía queda para las políticas
activas de empleo y por afinar más
con la formación y el reciclaje.
La recuperación del empleo de
la temporada veraniega puede quedar solo en un pequeño respiro, según las previsiones del CTESC. La re-
cuperación económica y del empleo
será «inevitablemente lenta y muy
gradual», según las conclusiones de
la memoria. Rañé advirtió de que
es previsible que el 2010 acabe con
un crecimiento negativo y sin creación neta de empleo, por lo que habrá que esperar al 2011 para ver síntomas claros de recuperación.
Sin embargo, el CTESC alerta de
la incertidumbre de las previsiones
económicas por la retirada de estímulos como el Plan 2000E para la
compra de coches y porque el «ajuste internacional se puede haber producido de forma parcial». Para Rañé, la salida de la crisis también dependerá de la corrección del modelo
productivo con un mayor peso de las
actividades de más valor añadido en
detrimento de la construcción, así
como de la adopción de reformas estructurales que vayan más allá del
mercado laboral. Entre ellas citó la
reforma del sistema educativo y del
mercado energético. H
rencial respecto otras crisis anteriores y es el dato que más puede invitarnos al optimismo. Por
ello, cuando desde hace un par de
años nos preguntamos, de manera tan reiterada, qué sectores generarán puestos de trabajo para
hacer frente a la herencia de millones de desempleados que nos
deja la crisis, no deberíamos obsesionarnos en definir unos sectores prioritarios, como si se tratara de diseñar un plan quinquenal
en la antigua Unión Soviética.
El empleo surgirá de este complejo entramado de pequeñas,
medianas y grandes empresas.
Pero resulta indispensable que se
den algunas condiciones. La fundamental es garantizar el acceso al crédito a las pymes, y para
los nuevos proyectos empresariales. Estamos en una coyuntura excelente para el desarrollo de las
versiones más sensatas y rigurosas de capital riesgo, olvidándonos de algunas de sus prácticas en
los años de bonanza que no hicieron más que favorecer la especulación y el desastre.
Iniciar el camino de la recuperación no resultará tarea sencilla.
Pero, en cualquier caso, ya no tenemos que asistir a conferencias
de empresarios extranjeros para
conocer e intentar imitar sus buenas prácticas. Quizás gracias a lo
que nos enseñaron, hoy estamos
rodeados de empresas muy competitivas. Que, estoy convencido,
generarán puestos de trabajo.