KANT LOS JUICIOS SINTETICOS A PRIORI Kant establece la distinción entre juicios analíticos y sintéticos. Los juicios sintéticos son aquellos en lo que el predicado está comprendido en el sujeto y por tanto basta con analizar el sujeto para comprender que el predicado le viene necesariamente. E: el todo es mayor que cada una de sus partes. Estos tipos de juicios son universales y necesarios, los podemos emitir sin temor a equivocarnos y no necesitamos comprobar su veracidad en la experiencia. Estos juicios no nos proporcionan información sobre la realidad y por tanto no amplían nuestro conocimiento. Los juicios sintéticos son aquellos juicios en los que el predicado no está contenido en el sujeto. De la veracidad de estos juicios no podemos estar seguros hasta que lo comprobemos en la experiencia. Estos juicios si nos proporcionan información y si son verdaderos amplían nuestros conocimiento. No son universales ni necesarios. Podemos hacer otra clasificación de los juicios: • A priori: son aquellos cuya verdad puede ser conocida sin recurrir a la experiencia ya que su fundamento no se encuentra en ella. Estos juicios son universales y necesarios. Todos los juicios analíticos son a priori • A posteriori. Son aquellos juicios cuya veracidad es conocida a partir de la experiencia, no son ni universales ni necesarios. Los juicios sintéticos son a posteriori. Hasta aquí no hay ninguna novedad en el pensamiento kantiano, Hume hubiera aceptado esta clasificación considerándola similar a la suya propia (relaciones de ideas− cuestiones de hecho). La novedad de Kant consiste en afirmar la existencia de juicios sintéticos a priori que serian aquellos juicios que por ser sintéticos amplían nuestro conocimiento acerca de aquello a lo que se refieren, y por ser a priori son universales y necesarios y el conocimiento de su verdad no procede de la experiencia. Kant señala que todos los juicios de las ciencia deben ser de este tipo, concretamente son usados en las matemáticas y en la física. Kant defiende este tipo de juicios por considerar que la ciencia es progresiva y necesaria: por medio de la ciencia adquirimos conocimientos nuevos a partir de otros ya conocidos, si la ciencia se compusiera solo de juicios analíticos no seria mas que una continua repetición, un continuo dar vueltas sobre conceptos ya conocidos incapaz de llevarnos a algún progreso. Es necesario por tanto la existencia de este 3º tipo de juicio que poseen el carácter universal y necesario de los primeros y la información que nos proporcionan los juicios sintéticos. Una vez llegados a este punto Kant se plantea la siguiente pregunta: ¿Como son posibles los juicios sintéticos a priori? Todas estas cuestiones son planteadas en su obra critica a la razón pura que consta de 3 partes: • Estética trascendental: estudia los condicionamientos sensibles del conocimiento y cuales son las condiciones que hacen posible la existencia de los juicios sintéticos a priori en las matemáticas. • Analítica trascendental: estudia el entendimiento y las condiciones que hacen posible la existencia de los juicios sintéticos a priori en la física • Dialéctica trascendental: estudia la razón y se pregunta por la posibilidad o imposibilidad que la metafísica sea considerada una ciencia. 1 LOS LIMITES DEL CONOCIMIENTO La crítica a la razón pura se divide en 3 partes: • Estética trascendental: Es la 1ª parte, en ella Kant nos expone las 2 condiciones generales necesarias para que se produzca el conocimiento sensible: espacio y tiempo. Por ejemplo: si analizamos como fenómeno sensible la visión no podemos ver algo sin situarlo en un lugar del espacio y en un momento del tiempo, por esta razón Kant denomina al espacio y al tiempo formas a priori de la sensibilidad; son formas porque son el modo de como percibimos todas las impresiones particulares (colores, sonidos etc..) y son a priori porque no proceden de la experiencia. El espacio y el tiempo son condiciones necesarias para que un fenómeno determinado pueda darse en la experiencia. Kant también denomina el espacio y el tiempo como intuiciones puras, las define intuiciones porque quiere señalar que no son conceptos del entendimiento: los conceptos se caracterizan porque pueden aplicarse a una multiplicidad de individuos, en cambio el espacio y el tiempo son únicos, no hay mas que un espacio y un tiempo; Kant también las designa puras porque para este autor este termino significa vacío de contenido empírico, es decir, sin ninguna relación con la experiencia. En esta parte de la obra Kant se pregunta si los juicios sintéticos a priori pueden darse en las matemáticas. Esto es así porque piensa que estas formulan juicios acerca del espacio y del tiempo. Ej: la geometría se ocupa de las propiedades de los cuerpos en el espacio y la aritmética del tiempo ya que la serie numérica se basa en una sucesión temporal. Como el espacio y el tiempo son condiciones previas e independientes de toda experiencia particular, los juicios de las matemáticas son a priori y como todos los objetos de nuestra experiencia se dan en el espacio y en el tiempo, en todos ellos se cumplirán los juicios de las matemáticas (universales y necesarios). Concluye por tanto afirmando que los juicios sintéticos a priori si son posibles en las matemáticas. • Analítica trascendental: Es la 2ª parte, se preocupa por la función propia del entendimiento que es comprender lo que hemos percibido a través de los sentidos. La función comprensiva se realiza mediante conceptos ya que estos son la clave que nos permite comprender e interpretar las percepciones sensibles. Cuando no podemos referir las impresiones sensibles a un concepto nuestra comprensión resulta imposible. La actividad de referir fenómenos a conceptos se realiza a través del juicio. Ej: esto es una casa. Hay 2 tipos de conceptos: Empíricos: Son aquellos que proceden de la experiencia y son a posteriori, a partir de la observación de las semejanzas y rasgos comunes a ciertos individuos. Conceptos puros o categorías: No proceden de la experiencia, son independientes de ella y son a priori. Según Kant existen 12 categorías clasificadas según: ♦ la calidad: ◊ unidad ◊ pluralidad ◊ totalidad ♦ la cualidad: ◊ realidad ◊ negación ◊ limitación ♦ la relación: 2 ◊ inherencia ◊ causalidad ◊ comunidad ♦ la modalidad: ◊ posibilidad−imposibilidad ◊ existencia−no existencia ◊ necesidad− contingencia Esta clasificación significa que el entendimiento no puede pensar los fenómenos si no es aplicando estas categorías. La función que realizan las categorías en el entendimiento se denomina deducción trascendental de las categorías. Si eliminamos la función unificadora del entendimiento a través de estos conceptos puros o categorías no tendríamos si no un conjunto de impresiones sensibles, desarticuladas e inconexas. Los conceptos puros son conceptos vacíos de contenidos empírico, así como el espacio y el tiempo han de rellenarse con las impresiones sensibles las categorías han de rellenarse a su vez con los datos procedentes del conocimiento sensible. Esto implica que las categorías solamente son fuente de conocimiento aplicables a los fenómenos (impresiones sensibles que se dan en el espacio y el tiempo y no pueden aplicarse a realidades que estén mas allá de la experiencia). En la analítica trascendental Kant también se pregunta por la posibilidad de los juicios sintéticos a priori en la física y señala que todos los principios fundamentales de la física tienen como base el principio de causalidad (causa− efecto), este principio está basado en la categoría de causa que se n concepto puro, que no procede de la experiencia y que, por tanto, es a priori. Como el principio de causalidad puede aplicarse a todos los fenómenos que el entendimiento conoce es universal y necesario. Conclusión: si podemos afirmar que los juicios sintéticos a priori son posibles en la física. • Dialéctica trascendental: En esta parte Kant se pregunta por la razón y por la posibilidad que la metafísica sea considerada o no una ciencia. El conocimiento intelectual no se limita a formular juicios, si no que también conecta unos juicios con otros formando razonamientos. La razón es de tal naturaleza que tiende a encontrar juicios, leyes, hipótesis cada vez mas generales que expliquen un mayor numero de fenómenos, mientras esta búsqueda se mantenga dentro de los limites de la experiencia tal tendencia es eficaz y amplia nuestros conocimientos, pero esta tendencia de la razón lleva inevitablemente a traspasar las barreras de la experiencia en busca de una causa 1ª de todos los fenómenos (Dios. Sustancia infinita). Dios, alma y mundo son según Kant ideas de la razón que juegan un papel peculiar en el sistema de nuestro conocimiento, y aunque no nos proporcionen conocimiento objetivo alguno expresan ese ideal de la razón de encontrar leyes y principios cada vez mas generales. Según Kant la metafísica en sentido estricto no puede ser considerada una ciencia entendida como un conjunto de proposiciones acerca de realidades que están mas allá de la experiencia ya que las categorías solo pueden aplicarse a los fenómenos, a lo dado en la experiencia. La aplicación de las categorías mas allá de la experiencia da lugar a errores e ilusiones y por tanto no nos proporcionan un conocimiento adecuado. EL FORMALISMO MORAL La actividad racional humana no se limita al conocimiento de objetos, el hombre necesita también conocer como tiene que obrar y cual ha de ser su conducta, a todas estas cuestiones dedica su obra critica de la razón practica. Esta doble vertiente de la razón: el conocimiento de objetos y el conocimiento moral puede expresarse por medio de la distinción entre razón pura y razón practica; esto no quiere decir que haya dos tipos de razón, si no dos funciones de esta bien diferenciadas: la razón teórica (pura) que consiste en el conocimiento de la naturaleza y la razón practica que se ocupa de la conducta humana, es decir, no le interesa cuales son los motivos que determinan una acción (deseo, frustración etc..) si no cuales deben ser los principios que han de determinar las obras del hombre. 3 La ética kantiana presenta una novedad con relación a las éticas anteriores y se denomina ética formal respecto a las otras, llamadas éticas materiales, que son aquellas según las cuales la bondad o maldad de una acción depende de algo que consideran bien supremo para el hombre, en consecuencia los actos buenos nos acercarán a dicho bien y los actos malos no alejaran de el. Ej: epicureismo. Por tanto podemos distinguir dos elementos en las éticas materiales: • Determinar cual será entre todos los bienes el bien supremo • Establecer una serie de normas morales para alcanzar dicho bien Kant difiere de estas éticas y señala una serie de inconvenientes que poseen: • Son empíricas y por tanto a posteriori, dependen por tanto de la experiencia y no podrían subsistir sin ella. • Son hipotéticas o condicionales: no valen absolutamente, si no solo como condición para alcanzar el bien supremo Aquí Kant se plantea el siguiente problema: ¿Que ocurre si alguien no está de acuerdo con ese bien supremo?¿Quedaría sin ética? Las éticas materiales son heterónomas, reciben la ley fuera de la razón y por tanto la voluntad es determinada a obrar de un modo o de otro. Debido a que las éticas materiales poseen esas 3 características, una ética que pretenda ser racional no puede ser material, si no formal. Una ética formal es una ética vacía de contenido, es decir, no establece ningún bien o fin supremo que haya de ser perseguido y por consiguiente no nos dice que tenemos que hacer, si no como debemos actuar. Kant distingue 3 tipos de acciones: morales, contrarias al deber y conformes al deber. Únicamente estas ultimas poseen para Kant un valor moral y solo estas son propias de la éticas formales. El valor moral de una acción no radica en algún fin o propósito, sino que es un fin en si mismo, algo que debe hacer de por si: una acción hecha por deber tiene su valor moral, no por el propósito que por medio de ella se quiera alcanzar, si no por la máxima por la cual ha sido resuelta. El formalismo moral es expresa mediante el imperativo categórico, Kant lo define como: obra solo según una máxima tal que puedas querer al mismo tiempo que torne en ley universal. Esta formulación del imperativo categórico no establece ninguna norma concreta de nuestras acciones, en cualquier momento puede ser extendida a todos los hombres. Esta formulación del imperativo categórico muestra la exigencia de universalidad propia de una moral racional, lo único que es fin en si mismo es el hombre para Kant que es un ser racional. 4